Martín Lutero: renegado y profeta | L. Roper

Pocos años antes de su muerte, en 1542, Martín Lutero logró conseguir, no sin dificultades, una copia del Corán, y leerlo con gran entusiasmo. Inmediatamente después abogó, frente a varios estupefactos compañeros de la causa evangélica, para que se publicase, lo que finalmente ocurrió al año siguiente con una advertencia escrita por él mismo. Argumentaba que su fe era tan fuerte que podía leer el libro del Turco sin dudar y con el objetivo de conocer a qué se enfrentaba. Esta es tan solo una de las desconcertantes (y por lo tanto fascinantes) poco conocidas historias del reformador que refiere Lyndal Roper (Melbourne, 1956) en la completísima biografía que la editorial Taurus ha puesto a disposición de los lectores de habla hispana. Leia Mais