La minificción ya no es lo que era | Violeta Rojo

Todo lo que tiene que ver con la minificción resulta contradictorio

Violeta Rojo

La aparición del libro Breve manual para reconocer minicuentos, en el año 1997, publicado por la Universidad Autónoma Metropolitana de México, bajo la autoría de la docente e investigadora venezolana Violeta Rojo (1959) marcaría para aquel entonces un aporte desde la crítica, a los asuntos concernientes a la minificción, no solo en Venezuela, sino también en Latinoamérica, característica que hace del texto, un documento importante para las investigaciones en torno al tema. Dos años después de aquel suceso, ciertamente esplendente, en una breve, pero desafiante reseña publicada en la Revista Chilena de Literatura, el crítico Juan Armando Epple, refiriéndose a este libro, comenta lo siguiente: “Después de muchos años de ser el pariente pobre y díscolo, la oveja negra de la familia literaria, el minicuento no solo tiene quién lo describa, sino que contamos con un manual para reconocerlo” (Epple 169).

Aunque este comentario pudiera parecer un tanto equívoco, no parece estar muy distante de lo que sigue siendo hoy en día el minicuento, a pesar de los encuentros, festivales e incluso mesas de trabajo, sigue teniendo y hasta padeciendo las mismas consideraciones. Sin mencionar, acaso, sobre el poco entendimiento, así como el esmirriado abordaje teórico en torno a este subgénero, considerado por muchos como raro, incluso, extraño. No obstante, este raro y hasta extraño subgénero cumple con las características que un texto debe tener. Sin embargo, el microrrelato sigue estando en los márgenes, navegando en procelosos mares a veces ignotos, a veces turbio de la teorización. Leia Mais