El compromiso internacionalista. El Ejército de Liberación Nacional. Los elenos chilenos/1966-1971. Formación e identidade | Pedro Valdés Navarro

Esta investigación del profesor Valdés gira en torno a la historia de los fenómenos políticos y sociales ocurridos en la esfera pública del segundo lustro de la década de 1960 en Chile. En este caso, se estudian las organizaciones informales, como lo es la cultura militante en cuanto a simbología y vivencias de sus adherentes. Con este estudio se quiere comprender los problemas que implicó la formación militante en una organización política, desde lo identitario hasta la propia cultura de sus integrantes.

Un punto importante en esta investigación se encuentra en el análisis de los fenómenos políticos, en el sentido de las actuaciones de los militantes. Estas dejan de estar consideradas como situaciones aisladas y pasan a ser analizadas como provenientes de una estructura histórica, la que nos proporciona la posibilidad de un análisis más global y menos aislado temporalmente, por lo que sus acciones dejan de enmarcarse en una subjetividad política y se insertan en procesos estructurales. Leia Mais

Complicidad económica con la dictadura chilena. Un país desigual a la fuerza | Juan P. Bohoslavsky, Karinna Fernández e Sebastián Smart

La escasa literatura existente sobre la contribución y complicidad de empresas y grupos económicos en la violación sistemática de derechos humanos ocurrida en Chile durante el régimen de Pinochet, hace del libro Complicidad económica con la dictadura chilena. Un país desigual a la fuerza un aporte indispensable para mejorar nuestra comprensión sobre el origen de muchas de las desigualdades sociales y económicas que, actualmente, son objeto de las mayores protestas que hayan tenido lugar en Chile desde el fin de la dictadura cívico-militar.

En el libro, sus editores – Juan Pablo Bohoslavsky, Karinna Fernández y Sebastián Smart – reúnen una serie de investigaciones en las cuales se documenta desde diferentes disciplinas y dimensiones, la existencia de redes de financiamiento y apoyos a la dictadura, que habrían permitido al régimen de Pinochet solventar su política represiva para mantenerse en el poder, y al mismo tiempo, transformar radicalmente la estructura político-económica del país. De este modo, los veintiséis capítulos que componen el libro convergen en la tesis de que existiría una estrecha relación entre la asistencia económica extranjera, la política económica implementada por la dictadura y la violación sistemática de los derechos humanos.

El esfuerzo por documentar la colaboración y complicidad financiera con la dictadura chilena – tal como sostiene Elizabeth Lira en el prólogo del libro – constituye una pieza fundamental para garantizar a las víctimas la no repetición de las violaciones a los derechos humanos ni de las condiciones que las hicieron posible. En esta misma línea, Juan Pablo Bohoslavsky señala, en el capítulo introductorio, que este libro ofrece una nueva narrativa de la dictadura, al considerar la responsabilidad de sus cómplices económicos y vincularla con la actual agenda de justicia social. Argumenta que la ayuda financiera recibida por el régimen se orientó, por un lado, a comprar lealtades y apoyos de sectores claves de la sociedad chilena, y por otro, a montar un eficaz aparato represivo, cuyo principal propósito fue crear las condiciones necesarias para la implementación de un conjunto de políticas sectoriales que tuvieron como denominador común el beneficio económico de la élite chilena y de las grandes empresas nacionales y extranjeras, todo esto, en detrimento del bienestar de la clase trabajadora y el consiguiente aumento de la desigualdad económica y social en el país.

Los capítulos posteriores se organizan en siete secciones temáticas, cada una de estas aporta importante evidencia en ámbitos poco explorados del pasado reciente de Chile. La primera sección, titulada “Pasado y presente de la complicidad económica” se articula en torno al informe elaborado en 1978 por Antonio Cassese, quien fuera nombrado por la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas como relator especial para evaluar el apoyo financiero recibido por la dictadura. Como sugiere Naomi Roth-Arriaza en el capítulo que inaugura esta primera sección, los trabajos ahí presentados constituyen un importante esfuerzo por desarticular aquella narrativa que desliga el plan económico de la dictadura, de la violencia utilizada por el régimen de Pinochet para reprimir a la población y así, acallar sus críticas.[1] Los cinco capítulos que componen la sección funcionan como un bloque analítico que inicia dando cuenta de las razones de la escasa atención que recibieron las dimensiones económicas dentro de la agenda de la justicia transicional chilena y cómo, en los últimos años, esto se ha ido revirtiendo. Este cambio, producido por una forma más integral de comprender los derechos humanos, permitió ampliar la visión hacia los derechos económicos y sociales que fueron vulnerados durante la dictadura y que hoy continúan siendo parte de las luchas sociales en Chile. Si bien, como exponen Elvira Domínguez y Magdalena Sepúlveda en el quinto capítulo del libro, el estado de los derechos económicos, sociales y culturales en Chile ha sido en el último tiempo objeto de un mayor escrutinio internacional – lo que se refleja en un número relativamente alto de procedimientos especiales realizados en el país, al punto de equipararse con la atención prestada a la violación de los derechos civiles y políticos -, esto no ha sido suficiente para comprender efectivamente todos los abusos cometidos por el régimen de Pinochet, ni el efecto que éstos continúan teniendo para el pleno ejercicio de los derechos humanos en el Chile de post-dictadura.

Esta sección también aporta algunos antecedentes para comprender cómo la violación de los derechos civiles y políticos durante la dictadura – específicamente, la supresión de los derechos sindicales – fue un factor relevante para atraer la asistencia económica extranjera, y a la vez, fue condición necesaria para la imposición de una política económica basada en la acumulación de capital, la cual, a partir de la privatización de empresas del Estado y la venta de sus activos, transfirió la riqueza nacional a manos de la clase empresarial chilena. La sección cierra reconociendo que, aunque el impacto de las iniciativas en términos de verdad y justicia ha sido limitado, Latinoamérica ha ocupado un lugar protagónico en la identificación de las responsabilidades de las empresas en las graves violaciones a los derechos humanos. Destaca en este itinerario la forma en como las víctimas y sus familiares han complementado la movilización social con estrategias legales innovadoras a fin de responsabilizar a las empresas e incluirlas en el radar de la justicia transicional, esto, más allá de si las comisiones de verdad implementadas en sus respectivos países, tenían o no como mandato, esclarecer la participación de los agentes económicos en las violaciones a los derechos humanos. En este sentido, y siguiendo a Priscilla Hayner (2008, p. 247), el deseo de buscar la verdad es cuestión de tiempo, hay veces en que este deseo sólo se logra hacer patente cuando las tensiones que generan conflictos dentro de una sociedad han sido disminuidas, y hay otras, en las que es justamente este deseo el que impulsa cambios sobre los límites y las formas de abordar los crímenes del pasado.

La segunda sección de este libro, titulada “La economía del pinochetismo”, también consta de cinco capítulos, los cuales – con excepción del capítulo de Marcos González y Tomás Undurraga, quienes discuten sobre la complicidad intelectual en la dictadura – se articulan en torno a la relación existente entre la política extractivista impulsada por la dictadura, la concentración del poder y la riqueza y la construcción de una institucionalidad político-jurídica funcional a las necesidades del neoliberalismo. La sección inicia con el capítulo presentado por José Miguel Ahumada y Andrés Solimano, quienes sostienen en su trabajo que las desigualdades sociales y económicas que afectan a Chile en la actualidad tienen sus bases en el modelo económico implementado durante el régimen de Pinochet. Así, esta sección analiza el recorrido que siguió la economía chilena durante la dictadura, la que – en tanto proceso históricamente situado – experimentó una serie de cambios, que fueron más el resultado del activo rol del Estado y de la correlación de fuerzas al interior del gobierno dictatorial, que un producto de las fuerzas autónomas del mercado.

En este marco, las privatizaciones llevadas a cabo desde la segunda mitad de los años setenta, con el objetivo inicial de desmantelar el Estado productor y desarrollista, y luego con la intención de suplir las funciones sociales del Estado, habrían posibilitado que las elites económicas no sólo concentraran el grueso de la riqueza nacional, sino que, además, adquirieran una fuerte influencia en el funcionamiento de lo que sería la nueva democracia. Del mismo modo, en esta sección se advierte que, pese al impacto negativo que ha tenido el extractivismo económico en los derechos humanos y en el medioambiente, no ha existido la intención de cambiar el rumbo del modelo extractivista chileno, pues como sugiere Sebastián Smart, si bien éste se asienta en una legislación creada por la dictadura, la interrelación y mutua dependencia entre el poder político y económico existente en Chile, ha impedido cualquier tipo de modificación sustantiva al modelo.

Por otro lado, esta sección refuerza la idea de que las actuales desigualdades surgen en un contexto de represión y de múltiples restricciones a la deliberación democrática, y también, de que son consecuencia de una trasformación radical de la economía, en la cual tuvieron lugar procesos de acumulación por desposesión y de oligopolización de la estructura productiva, dando origen con esto, a una elite empresarial que, hasta el día de hoy, controla amplios aspectos de la vida económica, política y social del país.

La tercera y cuarta sección – tituladas “Juegos de apoyos, corrupción y beneficios materiales” y “Normas y prácticas represivas en favor de los grupos empresariales”, respectivamente – reúnen diez investigaciones, las que podrían, por la similitud de sus temáticas, constituir una única sección cuyo eje estuviera en el impacto que han tenido las diversas políticas y decretos leyes, dictados por la dictadura, en la actual agenda de justicia social. A pesar de esto, es posible reconocer una cierta estructura asociada a temáticas específicas dentro de cada una de las secciones. Así, mientras los dos primeros capítulos de la tercera sección analizan el rol de las cámaras empresariales y de los medios de comunicación en la comisión u omisión de violaciones a los derechos humanos; los dos últimos dan cuenta del impacto que tuvieron las privatizaciones, tanto en el sistema de pensiones como en el patrimonio público de Chile. Respecto de este último punto, Sebastián Smart señala que, en base a la violencia desplegada, la dictadura terminó con el histórico y progresivo proceso de creación de empresas estatales, dando paso a la enajenación de las mismas (muchas de las cuales fueron vendidas muy por debajo de su valor económico). En efecto, según Smart, se pasó de 596 empresas estatales en 1973 a sólo 49 en 1989, lo que implicó una mayor concentración de riquezas y la profundización de las brechas sociales y económicas ya existentes.

Del mismo modo, los dos primeros capítulos de la cuarta sección tratan sobre el desmantelamiento del sindicalismo chileno y explican cómo el “Plan laboral” de la dictadura – que básicamente operó como una regulación del poder colectivo de los sindicatos – tuvo como objetivo garantizar plenamente el derecho de propiedad y legitimar así, las bases del poder económico y social de la elite chilena. Pese a que el año 2003, fue publicado en el diario oficial un nuevo Código del Trabajo, para Salazar (2012, p. 308-309) este no es más que una forma de aparentar modernidad y sensibilidad social, pues mantiene las mismas relaciones laborales impuestas por la dictadura.

Los dos capítulos siguientes reflexionan sobre cómo la implementación del modelo neoliberal en Chile significó la disminución de las prestaciones sociales básicas y el aumento de la pobreza, dando paso a la criminalización y el encierro masivo de pobres, por un lado, y por otro, a su erradicación de las áreas céntricas, y posterior, relocalización en sectores periféricos. Finalmente, los últimos dos capítulos de esta sección analizan las consecuencias económicas, sociales, medioambientales y culturales que han experimentado los pueblos originarios en Chile, a propósito de la apropiación que hiciera la dictadura de recursos naturales y bienes comunes. Así, por ejemplo, y considerando la actual crisis hídrica, el capítulo de Cristián Olmos conecta el rol de empresas y actores económicos en la privatización del agua, con las constantes violaciones a los derechos de comunidades indígenas próximas a centros mineros en el Norte de Chile. Para Olmos, la base de estas vulneraciones se encuentra en la plataforma legislativa generada en dictadura, la cual comprende la Constitución, el Código de Aguas y el Código de la Minería. Una lectura similar lleva a cabo José Aylwin, quién en su estudio, da cuenta de cómo la dictadura, luego de apropiarse de tierras mapuches (reconocidas y restituidas por los proceso de reforma agraria impulsados por los gobiernos de Eduardo Frei Montalva y Salvador Allende), éstas fueron vendidas de forma irregular, para posteriormente, establecer sobre ellas una política de incentivos monetarios y tributarios que benefició, principalmente, a los conglomerados forestales que habían colaborado con el régimen de Pinochet, teniendo esto, como consecuencia directa, la exclusión del pueblo mapuche y el deterioro del medio ambiente y del hábitat natural y cultural de las comunidades.

Dos capítulos son los que componen la quinta sección titulada “Estudios de casos”. En ella, se analizan emblemáticos casos de corporaciones nacionales que financiaron, o directamente participaron en delitos de lesa humanidad. Karinna Fernández y Magdalena Garcés documentan cómo los recursos logísticos de la Pesquera Arauco y de Colonia Dignidad fueron puestos a disposición de la represión militar. Este trabajo advierte sobre la activa participación de estas corporaciones en el secuestro, tortura y desaparición de civiles durante la dictadura chilena. Las autoras también llaman la atención sobre la falta de voluntad política para perseverar con las investigaciones y las debilidades presentes en la acción judicial, las que muchas veces, no han permitido conocer la verdad de los hechos, ni cuantificar o determinar el destino de los dineros obtenidos por la comisión de estos delitos. En esta misma línea, Nancy Guzmán entrega evidencia para conocer cómo, desde la elección de Salvador Allende como presidente de Chile, el diario El Mercurio fue utilizado por su dueño, Agustín Edwards, para colaborar con la dictadura; primero, azuzando el golpe de Estado, y luego, encubriendo los crímenes del régimen, mediante múltiples campañas de desinformación y manipulación de la opinión pública.

La sexta sección temática, “Aspectos jurídicos de la complicidad económica”, también se compone de dos capítulos. En ellos se exponen, por un lado, los principios generales emanados del derecho internacional para abordar las causas de complicidad económica; y por otro, las (im)posibilidades de perseguir, juzgar o reparar – en el marco del derecho chileno – la comisión de estos delitos, por los cuales algunas empresas y sus altos miembros se beneficiaron económicamente. Juan Pablo Bohoslavsky reflexiona, a la luz del derecho internacional y comparado, respecto de cuándo procede establecer responsabilidades civiles en las violaciones de derechos humanos. En este marco, sostiene que para determinar dichas responsabilidades se requiere conocer si la asistencia corporativa a un régimen criminal, generó, facilitó, dio continuidad o hizo más efectiva la comisión de estos delitos. Argumenta que, comprender el contexto que originó y sostuvo la complicidad económica, resulta incluso, más relevante que constatar el grado de conocimiento que tenían las corporaciones sobre el daño producido. En un tenor similar, Pietro Sferrazza y Francisco Jara sostienen que la condición de civiles no excluiría a los actores económicos de la persecución criminal por delitos de lesa humanidad, al tiempo que advierte una oportunidad – de acuerdo a la jurisprudencia – para la imprescriptibilidad de los casos, toda vez que éstos devengan de acciones que hayan facilitado o contribuido a la violación de los derechos humanos.

La séptima sección, titulada “Conclusiones y prospectivas”, coincide con el último capítulo del libro. En este, el historiador Julio Pinto, describe tres momentos en los cuales se habría ido anudando una cierta simbiosis entre el mundo empresarial y la dictadura cívico militar. El primer momento, se encuentra en la amenaza que significó el programa de la Unidad Popular para la libertad de empresa y el derecho de propiedad. El segundo, tiene que ver con los beneficios que recibieron durante la dictadura aquellos empresarios que apoyaron y colaboraron con el régimen. Mientras que el tercer momento, se asocia con las garantías de inmodificabilidad de los mecanismos básicos de funcionamiento de la economía neoliberal, así como de los componentes centrales de la institucionalidad en la cual se estableció dicha garantía.

De este modo, el libro que ha sido reseñado tiene el valor de ofrecer un variado análisis sobre la complicidad de las empresas y empresarios durante la dictadura. Desde un abordaje interdisciplinario, logra articular efectivamente una narrativa que conecta las violaciones a los derechos humanos con las políticas económicas implementadas durante el régimen de Pinochet. No obstante, considerando la diversidad de perspectivas y dimensiones desde las cuales se observó el problema, se extraña un capitulo con una mayor sistematización de los fallos judiciales, conclusiones de comisiones investigadoras o solicitudes de información realizadas al Congreso Nacional. Esto, por un lado, a fin de comprender los aciertos y reveses que han tenido estas iniciativas, y por otro, para conocer el estado actual de las impugnaciones realizadas en el marco de los objetivos de verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición. Por lo pronto, y de acuerdo a la experiencia comparada, pareciera ser que las democracias y economías modernas pueden sobre­vivir a los juicios que buscan determinar las responsabilidades de los agentes económicos en la violación de los derechos humanos, lo que, sin duda, ofrece a las víctimas la esperanza de que las situaciones de abuso que experimentaron sean reconocidas y reparadas.

Finalmente, la evidencia histórica presentada en este libro no sólo constituye una crítica dirigida a los actores económicos involucrados en violaciones a los derechos humanos o a quienes se beneficiaron de las prácticas represivas y autoritarias de la dictadura, sino también, la crítica apunta a los gobiernos de la transición, los cuales no quisieron enfrentar realmente las causas estructurales de la desigualdad en Chile: concentración de la propiedad productiva, formación de conglomerados económicos con altas cuotas de mercado y debilitamiento del poder de negociación sindical, entre otras (SOLIMANO, 2013, p. 100). De este modo, el libro Complicidad económica con la dictadura chilena., podría nutrir el debate sobre la desigualdad en Chile – que, tras la revuelta social ha tomado con fuerza la agenda política – y direccionarlo, hacia la rendición de cuentas de los beneficios recibidos por las empresas, a cambio de su colaboración con la dictadura.

Nota

1. Durante la post-dictadura, la nueva clase dirigente permitió que en la figura de Pinochet se encontraran discursos a la vez contradictorios: los que apuntaban a su responsabilidad en una de las dictaduras más sangrientas de América Latina y los que reconocían que las transformaciones económicas impulsadas bajo su régimen, constituyeron una pieza fundamental para el desarrollo económico y la estabilidad política de Chile. Así, se podía condenar al dictador y, al mismo tiempo, reconocer su legado en materias económicas.

Referencias

HAYNER, Priscila. Verdades innombrables. El reto de las comisiones de la verdad. México, D.F.: Fondo de Cultura Económica, 2008.

SALAZAR, Gabriel. Movimientos sociales en Chile. Trayectoria histórica y proyección política. Santiago: Uqbar, 2012.

SOLIMANO, Andrés. Capitalismo a la chilena. Y la prosperidad de las élites. Santiago: Editorial Catalonia, 2013.

Sergıo Urzúa-Martínez – Universidad de Buenos Aires, Facultad de Ciencias Sociales. E-mail: [email protected]


BOHOSLAVSKY, Juan Pablo; FERNÁNDEZ, Karinna; SMART, Sebastián (Eds.). Complicidad económica con la dictadura chilena. Un país desigual a la fuerza. Santiago, Chile: LOM Ediciones, 2019. Resenha de: URZÚA-MARTÍNEZ, Sergıo. Violencia, complicidad e impunidad: Los actores económicos en la dictadura de Pinochet. Varia História. Belo Horizonte, v.37, n.74, p.625-634, maio/ago. 2021. Acessar publicação original [DR]

 

 

A descolonizar las metodologías: investigación y pueblos indígena | Linda Tuhiwai Smith

Professora de educação da Universidade de Waikato (Nova Zelândia), Linda Tuhiwai Smith dedica-se especialmente ao estudo das comunidades indígenas, em particular dos maoris, povos nativos da Nova Zelândia. Seu estudo sobre o papel da pesquisa ocidental voltada às comunidades indígenas no contexto da colonização e da neocolonização, aqui resenhado, foi traduzido para diversas línguas, tendo recebido o prêmio New Year Honours (2013), em seu país de origem. Publicado pela primeira vez, em inglês, em 1999, foi traduzido para o espanhol, nesta edição chilena, por Kathryn Lehman.

Sem se preocupar exatamente com o método, mas com o contexto em que os problemas de investigação são pensados e projetados, bem como com as implicações da pesquisa para o investigador e o investigado (em especial os indígenas), a autora propõe tratar das relações entre um conhecimento colonizador e povos colonizados. Daí entender, de início, a investigação como “um conjunto de ideias, práticas e privilégios que está embutido no expansionismo imperial e na colonização, e institucionalizado nas disciplinas acadêmicas, escolas, currículos, universidades e poder” (SMITH, 2016, p. 13). Desse modo, não se trata de ir contra a investigação ou o conhecimento, mas de propor novas maneiras de conhecer e descobrir, novas maneiras de pensar a investigação com povos indígenas. Leia Mais

Éramos iglesia… en medio del Pueblo: El legado de los Cristianos por el Socialismo en Chile 1971 – 1973 | Michael Ramminger

Próximo de completar 50 anos em setembro de 2020, o processo de transição do capitalismo ao socialismo no Chile, proposto pela Unidad Popular (UP) de Salvador Allende Gossens, recebe mais uma contribuição teórica. A obra de Michael Ramminger – publicada originalmente em alemão sob o título “…Wir waren Kirche … inmitten der Armen: Das Vermächtnis der Christen für den Sozialismus in Chile von 1971-1973” – oferece um aporte significativo para a compreensão do desenvolvimento do catolicismo de esquerda chileno nos anos 1960 e 1970.

O autor busca reconstituir a experiência histórica dos Cristianos por el Socialismo (CpS) por meio de diversos temas que permearam seu curto período de atuação, oficialmente entre setembro de 1971 a setembro de 1973. Seu propósito é o de “devolver a atualidade da história dos Cristãos pelo Socialismo” (2019, p. 13), pois em sua interpretação, ao retomarem o tema, os pesquisadores à direita do espectro político e a Igreja Católica escrevem uma história a partir de seu próprio interesse, em geral, de deslegitimação do movimento. O empreendimento do autor vai na contramão dessa perspectiva: além de examinar as cartas circulares e as declarações públicas, Ramminger, utiliza a metodologia da História Oral, para retomar a história dos CpS com a análise das narrativas da base, a partir da entrevista com ex-membros e simpatizantes do movimento. Leia Mais

Paganas patagônias | Oscar Barrientos Bradasic

La literatura de Oscar Barrientos Bradasic -escritor de origen croata y oriundo de Punta Arenas- se vincula estrechamente al territorio y paisaje magallánico, cuenta de ello da su producción narrativa asociada a las historias y aventuras de navegantes en los mares meridionales. En este sentido, Paganas patagonias (2018) no es la excepción, pues en la obra habitan lo fantástico, el humor y los imaginarios territoriales, añadiendo elementos que hablan de una modernidad austral, alejada cada vez más de la imagen romántica y parsimónica de antaño.

Oscar Barrientos posee un vasto recorrido en la literatura desde que publicó su primer poemario Espadas y tabernas en 1988 hasta la actualidad, es así que ha transitado la poesía, el teatro, la novela, la crónica, el cómic y el cuento, como sucede en el caso específico de Paganas patagonias. Asimismo, parte de su obra ha sido traducida al croata, en conjunto con la de otros escritores magallánicos como Ramón Díaz Eterovic (2010), Juan Mihovilovich (2007) y Eugenio Mimica Barassi (2006). Leia Mais

Historia rural de Chile central. Tomo I. La construcción del Valle Central de Chile | José Bengoa

Aunque el autor declara que ha llevado a cabo “la completa reescritura de este trabajo, llegando ser el presente un libro totalmente original” (p.18), en realidad este no es un libro nuevo ni original, sino una reedición de El poder y la subordinación (1988), uno de los dos textos que publicó con el subtítulo Historia social de la agricultura. En efecto, sólo el primer capítulo de esta reedición es un texto nuevo, aunque tampoco resulta original, pues, como todo el libro, está basado en una literatura muy desigual en términos de calidad y actualidad. Así, entonces, el propio autor precisa que “Los capítulos que siguen son versiones corregidas de anteriores publicaciones que, con fuertes cambios de perspectiva, mantienen cierta continuidad” (p. 16). Sin embargo, en esta reedición no hay “versiones corregidas” ni nucho menos “cambios de perspectiva”. Se trata del mismo texto de 1988, el cual el autor ha modificado incorporando un número importante de notas de pie de página al texto principal, cambiando las oraciones iniciales de algunos párrafos, agregando frases breves al comienzo de otros, absorbiendo citas a trabajos de otros autores como propias, cambiando algunos títulos de secciones y, sobre todo, alterando la secuencia de secciones y párrafos de distintos capítulos, de manera de componer capítulos que parecieran ser nuevos, pero no lo son. Leia Mais

Otras Geografías en Chile. Perspectivas sociales y enfoques críticos | Andrés Núñes, Enrique Aliste e Raúl Molina

En el año 2006, Joan Nogué1 y Joan Romero2 realizaron la edición y coordinación de una serie de trabajos que venían a mostrar la cara oculta de la globalización, a fin de conocer y comprender el complejo mundo que nos rodeaba. Lo que buscaban era poner sobre la mesa a aquellas expresiones geográficas caracterizadas por su apariencia invisible, intangible, efímera y fugaz para la Geografía académica: “invisibilidad, intangibilidad y efimeralidad (…) He ahí, tres categorías, tres dimensiones claramente marginales en geografía” (Nogué y Romero, 2006: 38). De esta manera, bajo la insignia de otras geografías, aparecían abordajes y temáticas que eran desconocidas, poco estudiadas o ignoradas por las corrientes hegemónicas del pensamiento geográfico. Así, las emergentes configuraciones urbanas y rurales, las nuevas formas de comprender la vulnerabilidad y el riesgo frente a catástrofes ambientales, la multiescalaridad de las relaciones de poder en la geopolítica de los recursos naturales estratégicos, la conformación de nuevas identidades colectivas, el comercio justo e injusto, la religión, la pobreza, el hambre, la subalimentación, el terrorismo, los desplazamientos forzados de población, los movimientos detractores de la globalización, las discapacidades, el cuerpo como sujeto y objeto geográfico, el género y también las sexualidades, entre otras más, eran algunas de las materias que componían este extenso entramado de otras geografías. Leia Mais

Carne de Perra | Fátima Sime

La dictadura militar que rigió Chile durante diecisiete años no ha terminado, al menos no de forma simbólica. Sin duda, lo avanzado durante los gobiernos de la Concertación1 en el establecimiento de la verdad ha sido muy parcial y lento, lo que ha significado la impunidad para los violadores de derechos humanos y también responsables de las muertes de ese oscuro período (Verdugo, 2004). Desafortunadamente, la literatura no siempre se ha ocupado de una forma adecuada de la representación del horror vivido durante la dictadura cívico-militar. Dentro del posible mapa que caracteriza el contexto político y literario chileno de los últimos años, resulta evidente, en efecto, una variedad de elaboraciones simbólicas y nuevos modos de representaciones que transformaron los presupuestos narrativos de la producción literaria (Bianchi, 1997). A partir del análisis de la novela Carne de Perra, publicada en 2009 por la escritora chilena Fátima Sime, resulta necesario plantear, preguntas que tratan de resolver las dudas acerca de sí es posible relatar, o, mejor dicho, de cómo se puede contar de una manera eficaz la experiencia de la violencia extrema vivida en Chile desde 1973 hasta 1990. Leia Mais

El compromiso internacionalista. El Ejército de Liberación Nacional. Los elenos chilenos, 1966-1971 | Pedro Valdés Navarro

Beatriz Allende Ejército de Liberación Nacional
Beatriz Allende. Foto: Jacobin /

VALDES NAVARRO P Compromiso Ejército de Liberación Nacional

Esta interesante obra escudriña en una temática quizás poco difundida hasta ahora, como es la de un grupo de militantes del Partido Socialista de Chile (PS) que, desde mediados de la década de 1960 y, a partir del influjo de las ideas revolucionarias vigentes en su época, se conformaron como una corriente interna de éste, desarrollando acciones de adhesión y de compromiso con procesos insurreccionales desarrollados en el Cono Sur. Lo anterior, de forma paralela a su activa participación en la vida interna de su orgánica política, siendo capaces de manifestar un importante nivel de versatilidad en su actuar a través de los específicos contextos que enfrentaron.

De este modo, el llamado “Ejército de Liberación Nacional (ELN)” fue también el resultado de la histórica heterogeneidad ideológica existente al interior del PS, la que, según al autor, alternaba una estrategia de reformismo democrático y una posición revolucionaria; dualidad que no impedía identificarlo con aquello que se ha denominado como “izquierda tradicional”. Sin embargo, los debates existentes al interior de sus congresos dan cuenta de una aguda confrontación entre ambas visiones, como asimismo reflejan el impacto que en ellos tuvieron acontecimientos de la coyuntura nacional y regional, determinando en gran medida las orientaciones políticas establecidas. Leia Mais

El miedo a los subordinados. Una teoría de la autoridade – ARAUJO (RHYG)

ARAUJO, Kathya. El miedo a los subordinados. Una teoría de la autoridade. Santiago de Chile: LOM ediciones, 2016. 237p. Resenha de: LORCA CÁRCAMO, Álvaro. Revista de Historia y Geografía, Santiago, n.34, p.189-193, 2016.

Como ciudadanos somos testigos de la creciente desconfianza colectiva que se alimenta, tanto a nivel consciente como inconsciente, con respecto a las figuras de poder o autoridad. Lo anterior viene acompañado de una serie de implicancias que abarcan el amplio espectro social dando lugar a fenómenos tales como frustración laboral, altas tasas de fracaso, pauperis­mo, deserción escolar y, de forma más visible, la marcada abstención en los procesos institucionales de participación ciudadana.

En este contexto, el rol del cientista social debe superar al del testigo pasivo, abocándose no solo a contemplar y caracterizar un fenómeno o situa­ción dada, sino también a reflexionar sobre los elementos constituyentes del mismo, llevarlo al plano de la teoría y de esta forma contribuir a un debate informado que permita subsanar la situación en cuestión. La obra que nos convoca cumple con esta altísima labor. Leia Mais

Yo mi hermano | Juan Mihovilovich

En la recurrida y siempre actual Historia de la locura (1964) de Foucault se cuenta cómo aquellos seres considerados orates fueron, en más de una oportunidad, disidentes, presos políticos, personajes que por un enrevesado camino llegaron a fragmentar estructuras de poder. Este −el poder− sería, en consecuencia, la plomada justiciera que decide quién está en lo cierto, quién es funcional a los engranajes de la vida. También se habla allí de la famosa Stultifera Navis donde los dementes eran embarcados para enfrentar sin piloto el destino incierto de las marejadas, un porvenir donde solo el azar podría entregar el veredicto último. Alusión a la obra de Sebastian Brant y por cierto, al célebre cuadro de El Bosco.

Quizás navegar por ese rumbo es el que nos ofrece Juan Mihovilovich en esta nueva entrega titulada Yo mi hermano, editada por LOM. Digo esto, porque sus páginas nos conducen por los laberintos mentales del hermano sumido en el sueño de la locura, que también por ventura, alberga las islas de la lucidez; todo esto en una prosa rayana en el monólogo dramático. De hecho, parece una novela muy adaptable a la estructura teatral, pero que conserva ese ritmo atrapante que ha deambulado por la mente de todos nosotros: el puente −por momentos sólido, a veces inestable o inexistente− que separa lo que somos de quien creemos ser. Leia Mais

Análisis del discurso. Principios y procedimentos | Eni Orlandi

RECENSIÓN Y PRESENTACIÓN*

En la lectura del libro Análisis de discurso. Principios y procedimientos, intentaremos hacer lo mismo que Eni Orlandi propone para el análisis de discurso como praxis y correremos el riesgo, por lo tanto, de interpretar de forma equivocada los fundamentos que aporta y los procedimientos que plantea. Esta lectura no se suspende en la teoría, sino que guarda relación con el horizonte de la experiencia y la comprensión; así, al iniciar el comentario de este libro, nos asalta un gesto de sorpresa que manifiesta la extrañeza que surge frente a algo que rompe drásticamente con lo que en Chile ha sido asumido como ‘análisis de discurso’: lingüística clausular, amarrada a la fonética, y que definió el análisis desde un estructuralismo técnico y anquilosado, quizá porque en este país no se permitió casi nunca asumir la existencia del estructuralismo y de sus reformulaciones. Asimismo, se rechazaba la substancia epistémica y procedimental y se veía en los plumajes del estructuralismo y del postestructuralismo una suerte de divertimento francés que poco tenía que hacer con la fonética traspasada al texto que en Chile se hacía, plagada de historiografía, como bien se ejemplifica a través de la polémica entre Enrique Lihn e Ignacio Valente. Leia Mais

Revolucionarios cibernéticos. Tecnología y política en el Chile de Salvador Allende | Eden Medina

El libro que vamos a reseñar a continuación corresponde a la traducción al castellano del primer trabajo de la historiadora Eden Medina, publicado originalmente en Estados Unidos el año 2011 con el título Cybernetic Revolutionaries: Technology and Politics in Allende’s Chile. En este estudio la autora, abocada al estudio de la historia de la ciencia y tecnología desde una perspectiva social, se propone como principal objetivo investigar la relación que se dio entre tecnología y política durante el gobierno de la Unidad Popular, período en donde los profundos cambios que se intentaron llevar a cabo en nuestro país, generaron un clima propicio para la aplicación de novedosas ideas del campo de la cibernética, ciencia interdisciplinaria enfocada en el control y la comunicación, y que permitirían a su vez efectuar tales transformaciones, principalmente en el ámbito de la dirección del sector estatal de la economía chilena, por medio de un sistema tecnológico llamado Cybersyn en inglés, o Synco (Sistema de Información y Control) en nuestro idioma. También en esta obra se busca entender la manera en que se integraron principios e ideas políticas en el diseño técnico, así como las dificultades y limitaciones que se presentaron en este ámbito, y la utilidad que conlleva el estudio de la tecnología para tener una mejor comprensión de una época determinada. Para lograr estos fines, Medina hace uso de una amplia gama de fuentes, desde cartas e informes oficiales hasta entrevistas con los principales actores involucrados, principalmente científicos y técnicos, considerados por la autora como “nuevas voces” que la historiografia no había incorporado hasta ahora, este aspecto a nuestro juicio constituye uno de los méritos de este trabajo; por otro lado el marco teórico que orienta la investigación se basa en la historia de la tecnología, abocada al estudio de las relaciones entre el desarrollo técnico y el marco social y político en el que se desenvuelve. Leia Mais

Los anarquistas y el movimiento obrero. La alborada de “la Idea” en Chile, 1893-1915

Sergio Grez es autor de un libro ya clásico sobre la historia del movimiento popular chileno en el siglo XIX y su rica experiencia organizativa e intelectual. Prolongando esa historia, en esta obra estudia el desplazamiento del foco popular, que con el cambio de siglo pasó de los artesanos ilustrados a los obreros militantes, y el correlativo surgimiento y apogeo de los grupos anarquistas.

Vale la pena leerlo en paralelo con el excelente libro de Juan Suriano Anarquistas. El anarquismo chileno, tan vigoroso como el argentino, tuvo rasgos específicos, visibles no tanto en sus textos como en sus prácticas sociales y políticas. Una de las principales diferencias radica en la ausencia en Chile de la inmigración masiva, que en la Argentina ayudó a implantar los primeros núcleos libertarios. En Chile los anarquistas surgieron de la decantación de tendencias existentes en el interior del movimiento popular. Los primeros anarquistas aparecieron en sociedades populares y periódicos de combate, que tomaban distancia del mutualismo dominante. Allí coexistían y discutían con otros militantes: los socialistas, que todavía no tenían partido, y los “democráticos” – del partido Demócrata– que desde 1887 impulsaban en Chile la luchas políticas y sociales. Leia Mais

Nacionales y gremialistas. El parto de la nueva derecha política chilena 1964-1973 | Verónica Valdivia Ortiz de Zárate

A lo largo de su carrera, la historiadora Verónica Valdivia Ortíz de Zárate ha prestado atención al impacto que tuvieron en el siglo XX chileno diversos movimientos nacionalistas y corrientes antiliberales, los que en general habían tendido a ser pasados por alto por nuestra historiografía. Quizás esta experiencia le ha dado la sensibilidad para contextualizar y entender los cambios vividos por la derecha chilena en la década de 1960 y dar cuenta de las transformaciones que sufrieron su ideario y sus pautas de acción.

Así, en su último libro, la autora pretende discutir una idea recurrente en textos historiográficos y politológicos chilenos, que ven en la derecha de la década de los 60 una tendencia eminentemente defensiva, sin proyectos, unida exclusivamente en torno al anticomunismo y a una actitud de reacción frente a las reformas estructurales planteadas tanto desde el centro como desde la izquierda política. Basándose en una exhaustiva revisión de fuentes, principalmente de carácter hemerográfico, Verónica Valdivia refuta esta tesis, sosteniendo que durante la segunda mitad de la década de 1960 y el período de la Unidad Popular, asistimos al nacimiento de una nueva derecha, la que habría abandonado sus ya tradicionales estrategias de negociación y cooptación de los nuevos sectores que accedían al poder político, para pasar a tomar una actitud confrontacional, orientada a recuperar su vocación de poder. En este período, la derecha habría comenzado a tomar un estilo programático y proyectual. Sin embargo, en su interior habrían coexistido diversos proyectos políticos paralelos, sin lograr que uno en particular alcanzara una posición hegemónica. Teniendo en cuenta estas consideraciones, la autora define al período como un “parto”, en el que tras serias complicaciones, dolores y conflictos habría surgido una nueva derecha. Si bien Valdivia tiene en cuenta una vasta cantidad de grupos clasificables bajo el rótulo de “derecha” en el periodo, se centra principalmente en los casos del Partido Nacional y el Movimiento Gremial. Leia Mais

Los anarquistas y el movimiento obrero. La alborada de la “Idea” en Chile, 1893-1915 | Sergio Grez

Sobre el anarquismo circulan, aún hoy, una serie de supuestos vulgares que se han convertido en sentido común. En ocasiones, estas visiones devienen en construcciones míticas, pues suelen tener un sesgo positivo y de marcada simpatía hacia los anarquistas, abonando una imagen de luchadores sociales idealistas, honestos, incorruptibles y tenaces. Más allá de la relativa veracidad de estos atributos, los militantes ácratas aparecen hoy, cuando los partidos políticos no gozan de una buena imagen de la opinión pública, como verdaderos ejemplos de una conducta política imbuida de rectitud ética y moral.

Pero, por otro lado se ha construido una imagen negativa del anarquismo, también simplista y sesgada ideológicamente, proveniente del marxismo que ha negado y subestimado el aporte libertario a la construcción de los movimientos obreros y las luchas sociales. Esta imagen comenzó a construirse con las críticas de Marx a Bakunin durante los debates de la Primera Internacional, se mantuvo a lo largo del tiempo y fue retomada por los historiadores marxistas1. En todo caso, cuando reconocen una activa participación ácrata, ésta es impugnada por las propias características de las concepciones doctrinarias e ideológicas sustentadas por los anarquistas. Leia Mais

Los que dijeron No. Historia del movimiento de los marinos antigolpistas de 1973 | Jorge Magasich Airola

El colega e historiador chileno radicado en Bélgica, Doctor en Historia por la Universidad Libre de Bruselas y académico del Institut des Hautes Études des Communications Sociales (Bruselas), Jorge Magasich Airola, me ha obsequiado su último trabajo intitulado Los que dijeron No. Historia del movimiento de los marinos antigolpistas de 1973. Motivado por la conversación con Jorge Magasich y por la lectura misma del libro, osaré reseñar el trabajo antes citado.

A manera de presentación, ¿qué podemos decir y comentar? Desde el punto de vista formal y estructura del trabajo (más allá de la introducción y conclusiones) en sus más de 800 páginas distribuidas en VII capítulos y en dos volúmenes hay un profuso e interesantísimo trabajo de fuentes y bibliografía, entre las cuales podemos mencionar la revisión de los procesos judiciales, prensa de la época, memorias, y entrevistas (historia oral) a los protagonistas directos (uniformados y civiles) de los hechos. Pero además de aquello, el trabajo de Magasich Airola nos introduce en la historia más reciente de nuestro país y específicamente en uno de los episodios olvidados y tergiversados de nuestra historia reciente, como es el caso del movimiento de los marinos antigolpistas de 1973. Leia Mais

Monte Verde. Un Asentamiento Humano del Pleistoceno Tardío en el Sur de Chile – DILLEHAY (C-RAC)

DILLEHAY, Tom. Monte Verde. Un Asentamiento Humano del Pleistoceno Tardío en el Sur de Chile. Santiago: Colección Serie Universitaria, LOM Ediciones, Universidad Austral de Chile, 2004. 173p. Resenha de: POLITIS, Gustavo G. Chungara – Revista de Antropología Chilena, Arica, v.37, n.2, p.275-276 dic. 2005.

Este libro es una síntesis de las investigaciones llevadas a cabo por Tom Dillehay y un numeroso grupo interdisciplinario de científicos en el sitio Monte Verde, en el sur de Chile. Es la versión reducida de los dos volúmenes publicados en inglés por la Smithsonian Institution Press en 1989 y 1997. Ambos volúmenes causaron un alto impacto en el debate sobre el poblamiento americano y sentaron las bases para una renovada discusión que giró sobre dos ejes: una antigüedad mayor a 12.000 años a.p. y una forma de vida distinta de la inferida para los cazadores Clovis. Si bien para el primer tema ya habían suficientes datos de otros sitios como para proponer una antigüedad pre-Clovis en América del Sur (como lo refleja una discusión ya clásica, ver por ejemplo Bryan 1973, 1975; Bryan et al. 1978; Cardich et al. 1973; Haynes 1974; Lynch 1974; Ochsenius y Gruhn 1979); el segundo aspecto tuvo un aporte significativo con los datos obtenidos en Monte Verde. En este sitio se evidencia que hace unos 13.000 años a.p. algunos de los grupos humanos que habitaban América del Sur tenían una economía generalizada basada tanto en la recolección de plantas como en la caza de grandes animales. Y que además ocupaban sus campamentos durante períodos mucho más largos que los inferidos para otros sitios contemporáneos.

Los dos volúmenes en inglés estuvieron acompañados de un duro debate en diferentes ámbitos (congresos, revistas científicas de primer nivel, ver por ejemplo entre muchos otros, Adovasio y Pedler 1997; Anderson 1999; Fiedel 1999; Meltzer 1999; West 1993) y hasta se organizó una visita de expertos al sitio que pretendió resolver la polémica in situ y llegar a una especie de acuerdo final (ver Gore 1997; Meltzer et al. 1997). Como ya he expuesto en otro artículo (Politis 1999) la sola opinión de un puñado de expertos no parece ser la manera más adecuada de validar hallazgos ni de confirmar hipótesis. El consenso sobre la aceptación de las hipótesis y modelos propuestos por Dillehay y colaboradores debe llegar de la lectura detallada, objetiva y desapasionada de las evidencias, las que, afortunadamente están pormenorizadas en los dos volúmenes en inglés y resumidas en el texto en castellano.

Sin embargo, una de las principales discusiones se produjo cuando Fiedel (1999), luego de una lectura crítica del segundo libro (el de 1997), notó una serie de inconsistencias que lo llevaron a plantear serias dudas sobre el sitio y a reactivar nuevamente el debate. Debido a esto, Dillehay, Collins y el resto de los investigadores del proyecto se dieron cuenta que las correcciones que los diferentes autores de los capítulos habían realizado a las pruebas de imprenta, en el examen final del libro, nunca habían sido incorporadas a la versión impresa. Afortunadamente, Smithsonian Institution Press publicó un tercer texto de “Erratas” en donde se subsanaron más de 950 errores grandes y se clarificaron las principales dudas de Fiedel.

En el libro en español, objeto de este comentario, se explica todo este proceso y, aunque el detalle de la información presentada es mucho menor, se aclaran los principales errores que tenía el segundo volumen. Ese es uno de los aportes originales de la obra ya que presenta un producto compacto, resumido y corregido de los dos libros originales en inglés. La otra contribución de esta síntesis en castellano es que pone a disposición de un público más amplio la información relevante del sitio y las hipótesis centrales generadas por el equipo multidisciplinario de investigación. Esto entonces tiene un doble valor: llegar más allá de los especialistas (lo que es cada vez más necesario en la arqueología contemporánea) y a la vez poner en español, a disposición de estudiantes e investigadores, los resultados obtenidos en uno de los sitios más importantes para discutir el poblamiento americano.

Este libro resume los aspectos más relevantes de Monte Verde: los patrones arquitectónicos, los rasgos culturales, los análisis líticos y faunísticos, el paleoambiente y la cronología. De esta manera, se puede acceder a descripciones relativamente completas y amenas sin tener que internarse en los capítulos originales de los volúmenes en inglés que, a veces, son demasiado detallados y asequibles sólo para superespecialistas.

Otro punto importante del libro es que está muy bien ilustrado. Las fotos son abundantes, a color y se notan muy bien los detalles. Esto es particularmente significativo en un sitio como Monte Verde, con un registro atípico, porque permite evaluar las características de los rasgos arquitectónicos, del material lítico y de los instrumentos de madera. Así, las ilustraciones son de gran ayuda para que el lector pueda evaluar por sí mismo las interpretaciones de Dillehay y colaboradores. Hay también mapas, perfiles y croquis que completan la información presentada. Por último, debe remarcarse que la traducción y edición en español de esta síntesis estuvo a cargo de la arqueóloga uruguaya Cecilia Mañosa, quien figura como colaboradora. El trabajo de Mañosa es muy bueno y el texto no tiene errores. La lectura es ágil y se han traducido adecuadamente los términos técnicos que frecuentemente se prestan a confusión.

Para terminar con esta reseña deseo expresar que quienes quieran conocer en detalles aspectos específicos de la investigación de Monte Verde deben ir a los dos volúmenes en inglés. Este libro en español no los reemplaza. Sin embargo, es una muy buena síntesis de uno de los sitios más importantes para entender el poblamiento americano. Y el hecho de que esté en español y en un lenguaje ameno y accesible permite su discusión en clases y lo proyecta hacia un público más amplio. De alguna manera, contribuye a disminuir esa brecha que existe entre América del Norte y América del Sur en la generación, difusión y validación de la información arqueológica.

Referencias

Adovasio, J. y D. R. Pedler 1997 Monte Verde and the antiquity of humankind in the Americas. Antiquity 71:573-80.

Anderson, D. 1999 Monte Verde and the way american archaeology does business. Discovering Archaeology 1 (6). Special report 19-20.

Bryan, A. 1973 Paleoenvironmental and cultural diversity in Late Pleistocene South America. Quaternary Research 3:237-256.

Bryan, A. 1975 Paleoenvironmental and cultural diversity in Late Pleistocene South America. A rejoinder to Vance Haynes and a reply to Thomas Lynch. Quaternary Research 5:151-159.

Bryan, A., R. Casamiquela, J. M. Cruxent, R. Gruhn y C. Ochsenius 1978 An El Jobo mastodon kill at Taima-taima, Venezuela. Science 200:1275-77.

Cardich, A., L. A. Cardich y A. Hajduk 1973 Secuencia arqueológica y cronología rediocarbónica de la Cueva 3 de Los Toldos (Santa Cruz, Argentina). Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología 7 (n.s.):85-123.

Dillehay, T. 1989 Monte Verde. Late Pleistocene Settlement in Chile. Volume 1. Paleonvironment and Site Context. Smithsonian Institution Press, Washington and London.

Dillehay, T. 1997 Monte Verde. A Late Pleistocene Settlement in Chile. Volume 2. The Archaeological Context and Interpretation. Smithsonian Institution Press, Washington and London.

Fiedel, S. 1999 Artifact provenience at Monte Verde: Confusion and contradictions. Discovering Archaeology 1(6). Special Report: Monte Verde Revisited: 1-12.

Gore, R. 1997 The most ancient americans. National Geographic 192:92-99.

Haynes, C. V. 1974 Paleoenvironment and cultural diversity in the Late Pleistocene South America: A reply to A. L. Bryan. Quaternary Research 4:378-382.

Lynch, T. 1974 Early man in South America. Quaternary Research 4:356-377.

Lynch, T. 1990 Glacial-age man in South America: A critical review. American Antiquity 55:12-36.

Meltzer, D. 1999 On Monte Verde. Discovering Archaeology 1(6). Special Report: Monte Verde Revisited: 16-17.

Meltzer, D., D. Grayson, G. Ardila, A. Barker, D. Dinkauze, C. V. Haynes, F. Mena, L. Núñez y D. Stanford 1997 On the Pleistocene antiquity of Monte Verde, Southern Chile. American Antiquity 62:659-63.

Ochsenius, C. y R. Gruhn, editores 1979 Taima-taima. A Late Pleistocene Paleo-Indian kill site in Northwestern South America -Final Reports of the 1976 Excavations-. South American Quaternary Docummentation Program. República Federal Alemana.

West, F. 1993 Review of palaeoenvironment and site content at Monte Verde. American Antiquity 58:166-167.

ANDROS IMPRESORES www.androsimpresores.cl

Gustavo G. Politis – CONICET- Universidad Nacional del Centro de la Pcia. de Buenos Aires y Universidad Nacional de La Plata, Argentina. E-mail: [email protected]

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El Dios Cautivo. Las Ligas Patrióticas en la chilenización compulsiva de Tarapacá (1910-1922) – MIRANDA (C-RAC)

MIRANDA, Sergio González. El Dios Cautivo. Las Ligas Patrióticas en la chilenización compulsiva de Tarapacá (1910-1922). Santiago: LOM Ediciones, 2004. Resenha de: ATENCIO, Lautaro Núñez; PRIETO, Carlos Maldonado. Chungara – Revista de Antropología Chilena, Arica, v.37, n.1, p. 98-101, jun. 2005.

Comentario de Lautaro Núñez Atencio*

Recién hemos terminado de leer esta otra obra del historiador Dr. Sergio González Miranda, quien con su proverbial rigurosidad, despliega una notable factografía, para aquello que nos ha acostumbrado en todos sus escritos, esto es, su rigor en el buen manejo de las fuentes, que dan cuenta de hechos tan sólidamente documentados, que pareciera que en sí mismos estos archivos lo conducen, en este caso, a la revelación del episodio más aterrador que se recuerde de violencia estatal y civil, ejercida sobre la sociedad peruana de la postguerra salitrera. Algo se sabía de las persecuciones de las así llamadas “Ligas Patrióticas”, ocurridas a comienzos del siglo XX, entre archivos medio ocultos y voces acalladas, primero en la clandestinidad y luego en la pena de sentirse exiliados en lo que recién había sido su propia tierra.

Desde el título queda claro que se trata de sucesos dramáticos ocurridos en la comarca tarapaqueña, como si aquel Dios Cautivo anterior a los Incas, el travieso Tarapacá, hubiera marcado para siempre el destino de la región, trasladándose hacia la Colonia cuando el Señor Cristiano es abatido y cautivo por los Moros del autosacramental de La Tirana y se libera al fin de los diablos figurines para transformarse luego en la sociedad tarapaqueña. Esta vez cautivo en las provincias que pasaron a ser chilenas y que para desperuanizarlas cayeron en manos de los demonios xenófobos organizados en un movimiento pronacista orientado a martirizarlos y expulsarlos por vencidos, cholos y complotadores. Por lo mismo, es un segmento gris de una historia regional no incluida en las Historias Generales y que sería irrepetible y casi incomprensible en las “otras” regiones enmarcadas en el modelo del “Reyno” de Chile.

Ahora se puede entender de dónde viene ese afán integracionista y bolivariano del autor, quien, como sujeto y objeto de su propia historia, recoge a sus hermanos de los países vecinos, porque él sabe que esta comarca fue construida por indios, negros, españoles, criollos y mestizos desde la colonia, y que la modernidad salitrera atrajo a emigrantes andinos y europeos como trabajadores o capitalistas, es decir, todos en la construcción de una región llamada multiétnica y plurinacional. Comparable a una “California” en donde al menos sus trabajadores tenían trabajo estable, alimentación suficiente y educación para sus niños, además de otra oficina cercana para rearmar su “payasa” sin descontar ese juego moderno que los ingleses de la pampa llamaban football…

El autor nos llevará a la identificación de una comarca con un destino minero-colonial y decimonónico, sostenida por la pujanza de familias criollas y peruanas de esa naciente nación que con sus gentes tarapaqueñas iniciaron la asombrosa conquista de la pampa salitrera, espacio nunca ocupado, ni siquiera por los pueblos indígenas. Así, nos enseñaron a crear riqueza, fundar pueblos en el medio de la nada y de paso inaugurar los primeros puertos que establecerían las conexiones capitalistas con los mercados más importantes del primer mundo de esa época.

Claramente, la sociedad tarapaqueña no tenía pares en el Perú Rural, preñado de suspiros limeños y estilos de vidas coloniales. Los tarapaqueños no sólo pusieron sus viñas y fincas al servicio de una explotación minera a escala industrial, sino que asimilaron rápidamente las influencias ejercidas localmente por el arribo de agentes de cambios capitalistas y tecnológicos, que implantaron en este escenario las virtudes de la revolución industrial inglesa.

Así era la sociedad tarapaqueña derrotada de la guerra, emprendedora y responsable del tremendo sacudón ejercido sobre las tradiciones culturales y tecnológicas, derivadas del régimen colonial y su ascenso a la más moderna explotación salitrera, como los más genuinos pioneros, constituyendo una identidad absolutamente particular, distante y distinta del resto del Perú, siempre asociada a un sentimiento de lealtad territorial sea cual fuere el destino de las campañas militares. ¿Cómo “desperuanizar” entonces a un sentimiento tarapaqueño que ya cumplía cerca de 400 años de memorias compartidas, entre oasis y desiertos aislados, en el confín más inalcanzable tanto colonial como republicano? ¿Cómo destruir la imagen de pertenencia de la más autónoma y progresista comarca surperuana?

De esta lectura se desprende que si bien es cierto la guerra entre guerreros de verdad término por el año 1883 con la campaña de la sierra, esta otra guerra interior, civil y solapada, destinada a expulsar a una población no intrusa ni conquistadora, sino la verdadera dueña de casa, recién se iniciaba por el año 1910. Era la gran fiesta del centenario de Chile y la exaltación del recurrente hipernacionalismo cayó al desierto de tal manera, que hasta, incluso, en los santuarios católicos se elevó el Himno de Yungay… y fue entonces que se procedió a aplicar la más grande limpieza étnica que se recuerde en la historia patria, sustentada por el poder de los vencedores tras una política deliberada de violencia institucionalizada.

Sergio, el más dilecto iquiqueño e historiador de nacimiento, se filtró entre los archivos y testimonios vivientes, porque él sabe recorrer todas las metodologías de las ciencias sociales no como divertimentos teóricos, sino como instrumentos objetivos para revelar reconstrucciones reales con “carne y hueso” en el decir de Sonia Montecinos… y después de recorrer todos los escenarios de estos tristes sucesos casa (o) a casa (o), lugar por lugar, gente a gente, nos abre esta ventana indiscreta que nos deja ver por primera vez aquello que se rumoreaba en voz baja entre nuestras familias. No es fácil comprender lo patético de esta notable investigación. Si tan sólo nos imagináramos hoy una ocupación, primero militar y luego civil con expulsiones perentorias, de tal modo que al volver de nuestro trabajo se nos ordenara sacar una maleta y subirnos a un camión con destino al aeropuerto y en 24 horas decidir qué haremos con nuestras vidas en Chiloé… Fue así que 40.000 refugiados peruano-tarapaqueños desembarcaron en El Callao al son de bandas musicales para luego ser trasladados a locales abandonados sin más ayuda, apiñados entre el hambre y la pena en lo que después sería la Urbanización Tarapacá. Sergio debió emocionarse al leer los nombres de sus calles, todas con recuerdos de la tierra cautiva y que, poco a poco, los llevó a crear un país imaginado bajo el ideario de un retorno victorioso ofrecido por el populismo del Presidente Leguía, aunque esos sueños legítimos desde la peruanidad se fueron alejando cada vez más a través de hijos, que, nacidos en El Callao o en Tarapacá en el nuevo escenario de postguerra, perdían para siempre la nitidez del memorial bien encubierto y, por cierto, de las terribles “Ligas Patrióticas”.

En esta obra, las hazañas del matonaje de la más granada selección de peloduros y malandrines a sueldo, es testimoniado con una documentación casi íntima que nos cuenta de la expulsión de sacerdotes, de la destrucción y del manejo criminal del periodismo de la época, de saqueos de casas y bienes privados, expropiación de recursos naturales y las listas “negras” del terror institucionalizado, que sacudían el alma de tantos pampinos, portuarios y vallesteros1. El autor analiza esta cuestión en el marco del discurso civilizatorio de la corriente balmacedista acerca de un terrorismo marcado como “cholo”, hasta el triunfo de la sensatez y talento social del León de Tarapacá, quien de un rugido electoral borró en buena medida aquello que en este libro se lee sin rodeos como la “desperuanización de la provincia”, “xenofobia patriotera” y “chilenización de almas”. No en vano desde este tiempo la China del Carmen, sale junto al unico baile “chileno” que inicialmente venía desde el norte chico, encabezada por los Chinos promesantes. Esta vez con la conducción de los primeros capellanes chilenos. En verdad, no hubo organización ni institución alguna ni la propia educación, que no se pusiera al servicio de la limpieza étnica, oportunidad en que la mentira comunicacional llegó hasta anunciar una nueva guerra para justificar tanta injusticia, frente a un Estado nacional victorioso que no sabía qué hacer con esta regiones anexadas…

Las conclusiones, más que búsquedas de responsabilidades y desborde de amargura por los doblemente vencidos, son únicamente preguntas inteligentes que darán lugar a otras investigaciones que se derivarán de esta historia. Entre éstas jerarquizamos aquella que queda como corolario siempre latente: ¿Qué debió ocurrir entre los que se quedaron, con sus descendientes, para construir un nuevo y legítimo país nortino, inseparable de la nueva nacionalidad chilena y, a su vez, no perdieran los afectos con la otra ausente? ¿Cómo los refugiados lejos de Tarapacá pudieron armar con pedazos de recuerdos un imaginario regional, radicándose en un país que no era su pequeña patria tarapaqueña?

La reunión clandestina del Comité Pro Patria comenzó temprano cerca del muelle de Caleta Buena a fines de abril del año 1918, y con voz firme y marcada el señor Dubois señalaba los nombres de los trabajadores peruanos que debían abandonar el puerto. Higinio Núñez, del Valle de Quisma, hace ya cinco horas que está arrinconado con su familia en una casucha en la Puntilla de Iquique, agotado después de una larga caminata con unos caletinos a la espera de lo peor. A la tercera amanecida, las puertas aparecen marcadas con una cruz de alquitrán negro. Les espera un vapor con cientos de refugiados con destino a El Callao. Cada persona solamente con una sábana a modo de atado, llena de las más queridas pertenencias y nada más… Tres días después las bandas de música y gloria a los héroes tarapaqueños; cuatro horas más, todos apiñados en recintos abandonados por insalubres… Al próximo día, todos a cargar donde sea para vivir en un país que los llamaba “chilenos”… Su esposa Vernal, de San Lorenzo de Tarapacá, se enloqueció de pena y yace en el cementerio del Callao; su hijo Santiago se resbaló cargando verduras en la recova y vivió limitado para siempre; su otro hijo José, chileno de nacimiento y sabedor que legalmente puede hacer su servicio militar en Chile, se escapa a Iquique. Higinio y Santiago dejan su “Perú”, porque nunca lo entendieron y porque así lo exige el vals criollo “todos vuelven a la tierra en que nacieron…”. Ahora el hijo de José, y nieto de Higinio, puede escribir este prólogo, pero ya es demasiado tarde para creer que la historia los absolverá… Nos basta con que Sergio González haya revelado tanta violencia innecesaria y que ambos no demostremos ni un pedacito de resentimiento, pero que nunca jamás gente alguna justifique esa imagen de aquellas dos señoritas Loayza, aterrorizadas detrás de la mampara de la casa de Mr. Locket, a la espera de la peor turba antiperuana, esperando al “Corvo” y su defunción escrita entre risa y juerga, en el rey de los pasquines: “El Lucas Gómez”.

Gracias, Sergio, por enseñarnos que el dolor del terror fortalece a nuestros pueblos, cualquiera sea su nacionalidad, y que aún es posible proponer los más insospechados reencuentros de verdadera integración subregional, con ethos compartidos, y gracias también por estos escritos que engrandecen a nuestras historias regionales casi olvidadas. El himno peruano estaba vivo en una victrola piqueña y lo cantábamos casi en silencio en el día del país del nunca jamás… y los más jóvenes descubríamos que, de tanto olvidar, habíamos aprendido a amar intensamente a la nueva patria prometida.

Comentario de Carlos Maldonado Prieto*

En este macizo y corajudo estudio histórico, sólidamente basado en abundante documentación de primera fuente y testimonios de muchos testigos, recogida con esmero y dedicación en Iquique, Lima y un sinnúmero de pueblos de la Pampa, el conocido sociólogo e historiador tarapaqueño Sergio González, sin un ánimo de reabrir viejas heridas, se adentra en un episodio sórdido y subterráneo, desconocido para la mayoría de los chilenos. El autor analiza, con oficio y rigor académico, el surgimiento, apogeo y declinación de las Ligas Patrióticas que practicaron lo que hoy día podríamos denominar una “limpieza étnica” en las provincias nortinas, años después que Chile las anexara gracias al triunfo militar en la Guerra del Pacífico.

Esta violencia xenófoba fue uno de los muchos infaustos sucesos acaecidos durante la larga posguerra que se extendió entre 1883 (Tratado de Ancón) y 1929 (devolución de Tacna). Fue un período de álgida confrontación, caracterizado por aprestos bélicos de ambos bandos, rompimiento de relaciones diplomáticas y consulares, reclamaciones ante la Liga de las Naciones, etc.

En términos más amplios, se podría afirmar que dicha posguerra permanece vigente de cierta manera hasta nuestros días. Es probable que recién llegue a su fin cuando Bolivia abandone su actual enclaustramiento geográfico y entre Chile y Perú haya una reconciliación sincera basada en el reconocimiento crítico del pasado común.

En esa línea se inserta el libro de Sergio González, convirtiéndose en una contribución neta al proceso que él mismo denomina “reivindicación de la palabra tolerancia, concepto fundamental en sociedades multiculturales y abiertas como América Latina en general y Chile en particular” (pp. 152).

Solamente develando el pasado, mostrando las motivaciones, los aciertos y los errores de nuestros antepasados podremos contribuir a establecer la verdad histórica y desterrar los odios de antaño, esos que todavía no terminan y que de vez en cuando son explotados por sectores interesados. Qué duda cabe que todavía existen muchas heridas no cicatrizadas del todo, producto del rencor generado por la anexión territorial, la larga ocupación militar de Lima y otras capitales provinciales, en el caso peruano, y la pérdida de la cualidad marítima, en el boliviano.

Rescato especialmente la frase ­convertida prácticamente en lema­ de Sergio González que dice que “los chilenos no podemos ser negadores o soberbios frente a una historia que reclama emerger de la oscuridad, con el propósito de asumir lo que nos corresponde en la difícil reconciliación para la paz y la integración de nuestros pueblos” (p. 151).

Por otro lado, el autor afirma algo muy importante, que, a diferencia de las disputadas provincias de Tacna y Arica, hasta el centenario no hubo una chilenización compulsiva de Tarapacá por parte de las autoridades estatales y que, por el contrario, siempre existió tolerancia hacia la comunidad peruana, sus medios de prensa, organizaciones sociales, celebración de efemérides nacionales, etc. La región se caracterizaba por la diversidad étnica, pues vivían allí representantes de más de treinta y seis nacionalidades. “La chilenización hasta 1910 en Tarapacá fue la de un Estado de derecho que se legitima. Hasta 1910, en Tarapacá existían periódicos, imprentas, colegios, bombas de incendio, clubes deportivos y sociales, filarmónicas, mutuales, empresas, curas, logias masónicas, etc., peruanos, lo que cambia en 1911, señalando un punto de inflexión en la política nacional hacia esta provincia” (p. 30).

Sin embargo, a partir de 1911 surgieron las Ligas Patrióticas que contrataban matones a sueldo para agredir a la población peruana residente, obligándola con ello a emprender la huida a lugares más seguros. Eso ocurrió con miles de tarapaqueños que, forzados por la violencia xenófoba de las Ligas y alentados en parte por las promesas de apoyo material del gobierno del Presidente peruano Augusto B. Leguía, encontraron refugio en Lima y otras ciudades peruanas. Sin embargo, los refugiados “fueron condenados a la pobreza y por ello algunos regresaron a las salitreras desafiando todos los riesgos. Recién en los años cuarenta recibieron un terreno baldío [en El Callao], el ex fundo La Chalaca, que se llamaría más tarde Urbanización Tarapacá y que fue comprado con parte del pago realizado por Chile al Perú, después del Tratado de Lima de 1929. Las casas ofrecidas por el gobierno peruano jamás fueron construidas” (p. 21).

Sergio González confirma, además, que las Ligas surgieron en forma espontánea, pero señala que las autoridades chilenas fueron tolerantes con ellas e incluso las utilizaron políticamente en muchas ocasiones. Pese a ello, a partir de 1918 las Ligas escaparon del control estatal.

El autor también analiza la relación de las Ligas y el movimiento obrero pampino, subrayando el papel internacionalista de líderes como el socialista Luis Emilio Recabarren, cuyo periódico El Despertar de los Trabajadores, denostado como pro peruano, debió sufrir el asalto de las hordas pagadas por las Ligas.

En resumen, este novedoso estudio sobre las Ligas Patrióticas nortinas es una contribución a la historiografía regional del norte chileno y al entendimiento sobre los complejos procesos políticos, diplomáticos, económicos, sociales y culturales que conformaron la larga posguerra que debieron sufrir los antiguos rivales de la Guerra del Pacífico. Además, entrega luces sobre los orígenes de la xenofobia, el nacionalismo y el fascismo chilenos, fenómenos muy poco estudiados en el país. De cierto modo, esta obra también es un llamado de atención ante el aparecimiento de incipientes muestras de intolerancia hacia los inmigrantes peruanos que se avecindan en nuestro suelo.

Notas

1 Refiérase a la gente que vivía en el Valle de Quisma.

Carlos Maldonado Prieto – Instituto de Investigaciones Arqueológicas y Museo, Universidad Católica del Norte, San Pedro de Atacama.

Lautaro Núñez Atencio – Investigador independiente, Santiago. E-mail: [email protected].

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Historia Contemporánea de Chile. Tomo V | Gabriel Salazar e Julio Pinto

El tomo cinco de la Historia Contemporánea de Chile es dedicado íntegramente a los niños y los jóvenes, sujetos que, como sustenta la publicación “no figuran normalmente en las páginas de la historia”. Pero sabemos que los sujetos no son lo que son por el hecho de ser considerados por historiografías, sino porque actúan históricamente, construyen apuestas existenciales y dejan huella de sus proyecciones.

Aunque es notorio que niños y jóvenes no han sido valorados como constructores de historia, esto no ha impedido que hayan sido enarbolados en términos de imagen para la construcción de ésta. Y es que a esta invisibilidad como sujetos se contrapone la enorme visibilidad que han tenido como imágenes, representaciones ideológicas ocupadas por tantas apuestas históricas que han apelado a ciertas proyecciones de niñez y juventud. Leia Mais