Imagen y Poder: representaciones, discursos y política en Iberoamérica/ Autoctonía. Revista de Ciencias Sociales e Historia/2023

  1. Introducción

“Y matar, además y especialmente el ojo, puntualmente cada ojo, pues uno solo es sarcástico, folclórico, agorero, matar, pues, sin asco los dos ojos y todo el ojo, porque el ojo es el hombre [y la mujer], es la parte del ser que contiene más cantidad del hombre [y de mujer]”. (Carlos Droguett, 2019: 58)

Con este dossier nos proponemos examinar las relaciones entre imagen y poder desde una perspectiva interdisciplinaria y, desde esa interdisciplinariedad, pensar cuestiones relativas a la cultura, la sociedad, la política, la historia, la comunicación y la estética. Como se sabe, la relación entre imagen y poder es de larga data y ha interesado a filósofos/as, historiadores/as, antropólogos/as, sociólogos/ as, semiólogos/as e historiadores/as del arte, entre otros/as. En este sentido, el antropólogo francés Georges Balandier (1994: 116), en su libro El poder en escena, plantea que “la demostración de poder acaba siempre recurriendo a la exhibición de poderío”, afirmación con la cual hace notar que uno de los componentes del poder consiste en la mirada, en el del ver y el ser visto; de ahí que el poder necesite recurrir a los distintos dispositivos visuales, pues las imágenes cumplen una función mediadora a través de la cual el poder puede ser representado, entendiendo que este, como observó Michel Foucault (1999: 239), “no es un cuerpo unitario en el que se ejerza un poder y solamente uno, sino que en realidad es una yuxtaposición, un enlace, una coordinación y también una jerarquía de diferentes poderes, que sin embargo persisten en su especificidad”. Por otro lado, el poder de las imágenes y las imágenes como poder sugieren, como ha observado Georges Didi-Huberman (2012: 26), intentar “distinguir ahí donde las imágenes arden, ahí donde su eventual belleza reserva un lugar a un ‘signo secreto’, a una crisis no apaciguada, a un síntoma”. En tal sentido, la importancia de las imágenes radica no solo en su capacidad para representar el mundo, sino también en la historicidad que las envuelve y que hace de ellas un índice histórico que, como nos recuerda Walter Benjamin (2016: 465), “no sólo dice a qué tiempo determinado pertenecen, dice sobre todo que solo en un tiempo determinado alcanzan legibilidad”. Por lo tanto, examinar la relación entre imagen y poder es pensar en un doble movimiento que nos conduce a reflexionar sobre la visibilidade del poder como imagen, así como pensar acerca de la legibilidad de las imágenes como poder.

Las imágenes, como ha observado Jean-Luc Nancy (2003), han estado sujetas, en Occidente, a un cierto desprestigio que ha sido tan intenso como su proliferación polimórfica. En una línea similar, Jacques Rancière (2014) sostiene que el exceso de imágenes que inunda a nuestras sociedades no tiene tanto que ver con la abundancia y la sobreexplotación de las imágenes, sino más bien con una reducción que opera y ordena una puesta en escena, un teatro de imágenes que nos ciegan, no porque disimulen la verdad, sino porque la banalizan. Es decir, se elimina “toda singularidad de las imágenes, todo lo que en ellas excede la simple redundancia del contenido significable” (Rancière, 2014: 74). Por otro lado, las imágenes no solo se han configurado como desconfianza, desprestigio o banalización de lo visible y lo enunciable (lo que la imagen dice, lo que la palabra da a ver), sino que también las imágenes se han ido constituyendo y posicionando como documentos de veracidad, como prueba irrefutable: “la evidencia del esto ha sido” (Barthes, 2006: 21), que se estabelece como un límite común que pone en relación, como diría Gilles Deleuze (1987: 94), las “dos caras asimétricas, palabra ciega y visión muda”. La oscilación constante que va de la imagen como mentira a la de la imagen como verdad, se constituye como un núcleo de poder que establece una problemática compleja que, como ha observado Didi-Huberman:

“Nunca antes, según parece, la imagen –y el archivo que ella conforma […]– se había impuesto con tanta fuerza en nuestro universo estético, técnico, cotidiano, político, histórico. Nunca antes mostró tantas verdades tan crudas y, sin embargo, nunca antes proliferó tanto y nunca había sufrido tantas censuras y destrucciones. Así, nunca antes (…) la imagen había experimentado tantos desgarramientos, tantas reivindicaciones contradictorias y tantos repudios cruzados, tantas manipulaciones inmorales y execraciones moralizantes” (2012: 10).

Siguiendo esta problemática compleja y candente, con este dosier buscamos abrir un espacio de reflexión en torno a los vínculos y relaciones que el binomio imagen/poder establece con los distintos objetos de estudio que son analizados en este volumen, los cuales son pensados desde distintos campos disciplinarios. Poner el foco de atención en el binomio imagen/poder exige de nosotros/ as, por un lado, hacer funcionar nuestra imaginación en relación con los imaginarios y los contextos culturales, sociales, políticos e históricos que nos envuelven para, desde ahí, intentar una interpretación sobre lo visible y lo enunciable, sobre el poder y las relaciones de fuerza que constituyen la conformación de saberes y subjetividades (Deleuze, 1987). Por otro lado, también exige de nosotros/as enfrentar la imagen y el poder como dispositivos situados que “supone[n] la implicación del ser-afectado” (Didi-Huberman 2014: 41) por aquello que miramos y que nos interpela acerca de la contingencia, la historicidad, el devenir y el habitar el mundo.

Antes de comenzar a reseñar los artículos que componen este dossier, quisiéramos poder consignar algunas cuestiones de orden teórica respecto del poder y la hegemonía de lo visible, así como de los estratos y regímenes de visibilidad que se articulan como dispositivos de enunciación visual, que permiten aprehender cuestiones relativas a la cultura, la sociedad y la política. Estas breves definiciones teóricas tienen el propósito de establecer un marco de referencia conceptual que nos permita situar el dossier y los textos que lo componen dentro de un campo teórico mayor que es, a la vez, discursivo, político y estético.

  1. Poder y hegemonía de los visible

Como sostiene Barry Barnes (1990), el poder se manifiesta –al igual que la gravedad o la electricidad– a través de sus consecuencias; por ello, siempre ha resultado más cómodo describir sus efectos que identificar sus fundamentos. Quizás esto se deba a que el poder posee una estructura variable, puesto que es dinámico, transitivo y fragmentario. El poder, como señala Michel Foucault (2017; 2013; 2010; 2005; 2000; 1999), no emana hacia el exterior a partir de un centro jerárquico, sino que se localiza en todos los lugares, no porque lo abarque todo, sino porque viene de todas partes, de todas las direcciones. Es decir, el poder no funciona socialmente de manera centralizada, ni siquiera de forma unilateral, sino que –como ha apuntado Jean Baudrillard (2006: 61)– el poder “es distribucional, vectorial, opera por relés y transmisiones. Campo de fuerza inmanente, ilimitado, no siempre se comprende con qué tropieza, con qué choca, puesto que es expansión, pura imantación”. El poder, visto como ubicuidad difuminada, se configura como algo que se intercambia, no en el sentido económico del término, “sino en el sentido de que el poder se consuma, según un ciclo reversible de seducción, de desafío y de astucia” (Baudrillard, 2001: 62). Entonces, podemos inscribir el poder como ese “algo” que circula y que funciona en cadena y que “nunca se apropia como una riqueza o un bien. El poder funciona. El poder se ejerce en red y, en ella, los individuos no sólo circulan, sino que están siempre en situación de sufrirlo o ejercerlo” (Foucault 2000: 38). Entendiendo que el poder se configura como un tejido que, no obstante ello, implica también una jerarquización de poderes operando dentro de un contexto histórico particular, de modo que no existe un solo poder, sino una pluralidad de aquellos. En ese sentido, poder en plural quiere decir diversidad de dispositivos de dominación, formas complejas de sujeción y subjetivación que operan, de acuerdo con Michel Foucault,

“[a través] de formas locales, regionales de poder, que poseen su propia modalidad de funcionamiento, procedimiento y técnica. Todas estas formas de poder son heterogéneas. No podemos entonces hablar de poder si queremos hacer un análisis del poder, sino que debemos hablar de los poderes o intentar localizarlos en sus especificidades históricas y geográficas” (2005:19).

Es decir, las relaciones de poder, los mecanismos y los dispositivos por virtud de los cuales el poder funciona, se constituyen como una problemática local, e incluso particular, que nos permiten comprender problemáticas de orden general. En ese sentido, los artículos reunidos en este dosier responden a objetos y momentos históricos particulares que nos ayudan en la comprensión de lo visible y lo enunciable como un poder que confecciona campos de visibilidad que conforman, producto de la preponderancia que ha ido alcanzado la imagen como discurso, una hegemonía de lo visible que establece un régimen de comunicación visual, que se instituye como un saber/poder que contribuye de manera significativa en la fabricación de subjetividades. En estas, los/as individuos/as no solo se encuentran inmersos/as y producidos/as por la hegemonía de lo visible, sino que también son ellos/as mismos/as quienes producen dicha hegemonía. De este modo, las imágenes y la mirada que ellas producen “supone[n] la implicación, el ente afectado que se reconoce, en esta misma implicación, como sujeto” (Didi-Huberman, 2012: 33). Las imágenes como poder se conforman a veces como documento y otras tantas como un objeto onírico, como obra y objeto de tránsito, de montaje, como imaginarios e imagen mental que, a fin de cuenta, va conformando un síntoma (una huella) que exige de nosotros una elucidación que abre la posibilidad para una legibilidad histórica y política de las imágenes como relaciones de poder.

Uno de los aspectos que interrogamos en este dosier, consiste en el modo en que el poder de las imágenes y las imágenes como poder van conformando una hegemonía de los visible que fabrica unos modos de ver modernos, según los cuales la imagen como poder no solo es una construcción cultural sino también es una estrategia, es decir, es un elemento que pone en juego cuestiones relativas a lo social, lo político, lo psicológico y lo estético, puesto que “sus efectos no son atribuibles a una apropiación, sino a dispositivos de funcionamiento” (Morey, 2001: 10). En tal sentido, la imagen como poder y el poder de las imágenes en tanto dispositivos de enunciación iconográficos, no son unívocos sino coyunturales y, por lo mismo, el poder nunca está fijo o consolidado, por el contrario, puede cambiar en un momento dado. Desde esta perspectiva, el binomio imagen/poder y su consecuente hegemonía de lo visible sitúa la subjetividad al menos dentro de dos tipos de relaciones: las de producción y las de significación, las cuales devienen en relaciones de poder (Foucault, 2017). Las relaciones de poder, tal como observa Michel Foucault (2013), no son exteriores a otros tipos de relaciones (procesos económicos y políticos, relaciones de conocimientos, saberes, sexuales, artísticas, entre otros), por lo tanto, el poder no es una superestructura ordenadora que cumpla un papel de prohibición o reconducción, sino que se trata de un componente activo que desempeña un papel productor (relaciones de fuerza que poseen una parcialidad objetiva) y de significación (relaciones simbólicas que se expresan discursivamente y que poseen un componente subjetivo) que da cuenta de “la multiplicidad de las relaciones de fuerza inmanentes que son propias del campo en el que se ejercen, y que son constitutivas de su organización” (Foucault, 2013: 89). De ahí que el poder, tanto en su capacidad simbólica o material, esté siempre bajo una condición descentralizada y productiva a la vez.

Esta reflexión se enmarca también en la concepción foucaulteana de que las relaciones de poder provienen de abajo, en el sentido de que no existe una matriz general que emane de un centro jerárquico que va de arriba hacia abajo, sino que el poder está en todas partes porque es multidimensional lo cual, en todo caso, no quiere decir que lo abarque todo, que lo englobe todo. Lo que el poder “tiene de permanente, de repetitivo, de inerte, de autorreproductor, no es más que el efecto de conjunto que se dibuja a partir de todas esas movilidades, el encadenamiento que se apoya en cada una de ellas y trata de fijarlas” (Foucault, 2013: 89). En ese sentido, el poder se configura mucho más como una estrategia que como una institución o una estructura; más bien, nos dice Foucault (2013: 90), se trata de “relaciones de fuerza múltiples que se forman y actúan en los aparatos de producción, las familias, los grupos restringidos y las instituciones, sirven de soporte a amplios efectos de escisión que recorren el conjunto del cuerpo social”. En esta concepción del poder lo relevante son las diversas relaciones que este adopta y que son posibles de identificar dentro de una sociedad dada y, por lo tanto, analizar sus especificidades y jerarquías permite captar los modos en que el poder circula y se expresa. En consecuencia, la hegemonía de lo visible que es posible determinar dentro de la episteme de la modernidad se constituye, a nuestro modo de ver, como un espacio privilegiado para captar la especificidad de las relaciones de poder.

Así, una de las aristas que buscamos problematizar con este dosier es la de la preponderancia de las imágenes en tanto dispositivos de enunciación dominante. De este modo, la hegemonía de lo visual, en tanto campo epistémico de la modernidad, implica entender aquellas relaciones de poder que se encuentran mediadas, representadas o inscritas en la producción de imágenes, las cuales van conformando un entramado o régimen de visibilidad en el que es posible advertir “que cada formación histórica ve y hace ver todo lo que puede, en función de sus condiciones de visibilidad, al igual que dice todo lo que puede, en función de sus condiciones de enunciado” (Deleuze; 1987: 87). Analizar y reflexionar acerca de estos estratos de visibilidad conlleva pensar la relación entre imagen y poder como un territorio dotado de una multiplicidad de tiempos sociales, culturales y políticos que establecen una historicidad a través de la cual es posible entender el estatuto visibilidad (o invisibilidad) del poder, en tanto discurso, representación y práctica.

  1. Estratos y regímenes de visibilidad

Hay una segunda cuestión teórica que nos parece necesario consignar y que tiene directa relación con el modo en que la visión y lo visible, la mirada y lo perceptible, se han estabelecido como elementos estéticos y políticos en el capitalismo. Fredric Jameson (2002) plantea que la historia de la modernidad encuentra en el campo de la teoría de la visión y lo visible un espacio propicio para pensar la episteme de la modernidad y que ella muestra, a lo menos, tres grandes etapas o momentos de visibilidad: un momento en el que predomina una mirada colonial, un momento en el que prevalece el ojo-burocrático y, finalmente, un momento en el que sobresale una visualidad de corte posmoderno (Silva-Escobar, 2019). Cada una de estas etapas puede ser comprendida como estratos de visibilidad que se constituyen –según Gilles Deleuze– como “capas sedimentarias hechas de cosas y de palabras, de ver y de hablar, de visible y de decible, de superficies de visibilidad y de campos de legibilidad, de contenidos y de expresiones” (1987: 75). En tal sentido, los estratos de visibilidad son formaciones históricas, positividades que se materializan en forma de discursos (hablados, visuales, escritos) y visibilidades (enunciadas, indexadas, significativas) que le son propias a un momento histórico, y se encuentran profundamente ligadas al carácter sociopolítico y cultural que permite su aparición. Al respecto, Deleuze señala:

“Una ‘época’ no preexiste a los enunciados que la expresan, ni a las visibilidades que la ocupan. Esos son los dos aspectos esenciales: por un lado, cada estrato, cada formación histórica implica una distribución de lo visible y de lo enunciable que se produce en ella; por otro, de un estrato a otro existe variación de la distribución, puesto que la visibilidad cambia de modo y los enunciados cambian de régimen” (1987: 76).

Veamos brevemente cómo se produce esta distribución de lo visible y lo enunciable en el estrato de visibilidad colonial. Las conceptualizaciones vertidas de la mirada colonial/ decolonial le debe mucho a la problematización filosófica desarrollada por Jean Paul Sartre (1993), quien en su libro El ser y la nada, publicado por primera vez en 1943, introduce la problemática de la mirada como un problema filosófico relativo a la objetivación del otro en objeto sensible, y postula así un quiebre “radical entre la vista y la conciencia, que planteaba un desafío directo a la ecuación del ‘Yo’ y del ‘ojo’ establecida por la tradición ocularcéntrica” (Jay, 2007: 216).1 La mirada sartreana nos proporciona un conjunto de reflexiones de orden fenomenológico que nos permite comprender el modo en que la problemática de la mirada se configura como dispositivo para cosificar al sujeto como objeto visible. Jameson argumenta que la conceptualización sartreana puso en el centro del debate filosófico europeo la idea de que “la mirada es lo que postula mi relación inmediata con los otros; pero lo hace mediante una inesperada inversión en la que pasa a ser primaria la experiencia de ser mirado, y mi propia mirada se convierte en una reacción secundaria” (2002: 142). La mirada, cuando actúa para objetivar, cosificar y colonizar al otro requiere ser inscrita dentro de ese proceso que dice relación con “ese fenómeno protopolítico llamado dominación” (Jameson, 2002: 142). Por otro lado, la problemática de la dominación conlleva procesos de resistencia y, por ende, el ojo colonial también abre paso a la emergencia de variadas corrientes políticas y estéticas que apuntan a “una nueva política de la descolonización (…), por ejemplo, en Franz Fanon; un nuevo feminismo en Simon de Beauvoir, y, en una especie de inversión reactiva, una nueva estética del cuerpo y su carne visible o pictórica en Merleau-Ponty” (Jameson, 2002: 142). De este modo, si el fenómeno de la mirada se constituye como un dispositivo para cosificar y dominar, al mismo tiempo ese proceso de colonización es resistido desde luchas descolonizadoras, pero siempre dentro de un contexto de asimetría entre el mirar dominante (o colonizador) y la mirada contrahegemónica (o descolonizadora).

A esta etapa colonialista le sigue lo que podríamos denominar estrato de visibilidad ojo-burocrático, en el cual “lo visible se convierte en la mirada burocrática, que busca por doquier la mensurabilidad del Otro y su mundo, de aquí en más reificados” (Jameson, 2002: 144). Michel Foucault (2010) ha sido uno de los filósofos que más certeramente ha logrado conceptualizar este proceso de burocratización de la mirada, y lo hizo a través de su reconocido libro Vigilar y castigar, en donde muestra cómo el ver y el poder establecen una relación simbiótica, que se estructura a partir de la institucionalidad del poder disciplinario.2 Desde esta perspectiva, la burocratización de la mirada tiene un sustento práctico en los distintos dispositivos de disciplinamiento –el más conocido sería el panóptico, cuyo modelo arquitectónico asegura que un vigilante pueda ver sin ser visto– que actúan no solo para reprimir y someter sino también para producir cuerpos útiles y dóciles o, mejor dicho, útiles en la medida de su docilidad (Foucault, 2010, Castro, 2018). La burocratización de la mirada se configura como un dispositivo de disciplinamiento que contribuye en el proceso mediante el cual se busca someter o dominar al individuo a través de la subjetivación; es decir, según el diagnóstico de Foucault, lo novedoso de los dispositivos disciplinarios es que se configuran como un poder centrado en controlar al individuo a través de un conjunto de técnicas, tendientes todas ellas, a intervenir, conducir, manipular el cuerpo del sujeto y, para ello, se conforma todo un entramado institucional que “trata de regir [sobre] la multiplicidad de los hombres [y de las mujeres] en la medida en que esa multiplicidad puede y debe resolverse en cuerpos individuales que hay que vigilar, adiestrar, utilizar y, eventualmente, castigar” (Foucault, 2000: 220). De algún modo, las técnicas disciplinarias buscan gobernar la singularidad de los sujetos y, con ello, se origina un conjunto de “efectos individualizadores, [que] manipula el cuerpo como foco de fuerzas que hay que hacer útiles y dóciles a la vez” (Foucault, 2000: 225). En consecuencia, el poder disciplinario le debe mucho a la posibilidad de institucionalizar la mirada como dispositivo de disciplinamiento, sujeción y subjetivación.3

La tercera etapa que describe Jameson es la posmoderna, la cual define como el momento en el cual “los verdaderos portadores de la función epistemológica son la tecnología y los medios, (…) [que posibilitan] una afirmación celebratoria de cierta visión macluhanista de la cultura mágicamente trasformada por las computadoras y el ciberespacio” (2002: 149). En este estrato de visibilidad se advierte una transformación en la producción cultural en donde la tecnología, principalmente aquella dedicada a la producción de imágenes hechas por tecnologías digitales, comienza a colonizar el espacio social hasta el punto de hacer de las imágenes no solo el lugar de la representación de una co-presencia, sino también el lugar en donde se articulan las relaciones sociales entre personas mediatizadas por imágenes. El estrato de visibilidad posmoderno encuentra en el pensamiento de Guy Debord (2007), principalmente en su libro La sociedad del espectáculo, un primer acercamiento teórico al predominio tecnológico de la producción de imágenes, en donde se anuncia que estas se constituyen como la forma final de la reificación de la mercancía. Un segundo acercamiento teórico al problema de la imagen, el ver y la mirada, lo encontramos en el libro el Ojo absoluto de Gerard Wajman (2011), quien despliega un análisis en el que sitúa el ver como un poder en el que la ideología de la transparencia se configura como un nuevo orden social. Desde las cámaras de videovigilancia hasta los diversos sistemas de captación de imágenes en medicina, pasando por los innumerables satélites que orbitan el planeta, así como incontables dispositivos de control, son ejemplos del modo en que el mundo se ha impuesto como el lugar de lo visible; un mundo dominado por las tecnologías de lo visible que hacen del escrutinio de la mirada una nueva forma de socialización. En esta fase se establece una política de la mirada que instituye formas de visibilidad, a partir de la circulación e implementación de una serie de dispositivos de tecnologías de visión (cámaras, celulares, dron, satélites, etc.), que se materializan en un conjunto de dispositivos socioculturales (selfies, exacerbación del yo, apatía social, indiferencia política, etc.), que van autorizando y legitimando una sociedad y una cultura de la mirada. Esto trae como resultado la naturalización de la transparencia como mecanismo de socialización y reconocimiento que se ejerce bajo la violencia simbólica, es decir, se despliega como un tipo de violencia respecto de la cual, observa Pierre Bourdieu:

“Una de las consecuencias de la violencia simbólica consiste en la transfiguración de las relaciones de dominación y de sumisión en relaciones afectivas, en la transformación del poder en carisma o en el encanto adecuado para suscitar una fascinación afectiva. […] La violencia simbólica es esa violencia que arranca sumisiones que ni siquiera se perciben como tales apoyándose en unas ‘expectativas colectivas’, en unas creencias socialmente inculcadas” (2002: 172-173).

En tal sentido, la transparencia puede ser vista como un tipo de imposición coercitiva que funciona de manera internalizada o naturalizada, puesto que “la coacción de la transparencia nivela al hombre [y a la mujer] […] hasta convertirlos en un elemento funcional de un sistema. Ahí está la violencia de la transparencia” (Han, 2013, p.14). Ahí está también una de las caras que adopta el poder en el capitalismo avanzado, pues al someter al individuo a un proceso de internalización de la exhibición del yo como mecanismo de reconocimiento social, trae como consecuencia “que nuestra libertad no se restringe únicamente al hecho de ser vigilados, sino que, siendo vigilados, nuestros hechos y gestos son puestos en escena por la mirada, controlados en su producción misma” (Wajman, 2011: 192). Esto último trae aparejado la instalación de un tipo de poder –sea este político, cultural, simbólico, económico, geográfico– que “agrega una nueva modalidad a las potencias de la mirada: la de la ciudad que se mira a sí misma, que se vigila. Lo cual perfila esta nueva configuración según la cual el peligro no está afuera, sino adentro” (Wajman, 2011: 165). Por consiguiente, en la fase pós-moderna la imagen como mercancía, la transparencia como dispositivo de socialización, la mirada como mecanismo de control, van hilvanando una sociedad fundada sobre una suerte de “alquimia simbólica […] [que] produce, en beneficio de quien lleva a cabo los actos de eufemización, de transfiguración, de conformación, un capital de reconocimiento que le permite consecuencias simbólicas” (Bourdieu, 2002: 172). Es decir, capital simbólico acumulado como propiedad.4

Si nos ha parecido necesario traer a colación y caracterizar estos tres estratos de visibilidad, es porque ellos permiten inscribir el dominio de la mirada y lo visible dentro de un régimen de historicidad, a partir del cual intentar una eventual interpretación acerca de las relaciones que las imágenes establecen con el poder y el poder con las imágenes. Es decir, estos tres estratos de visibilidad se establecen como un entramado que nos permiten pensar las condiciones de posibilidad histórica, antropológica y política de las imágenes como poder (lo visible y lo enunciable se distribuye por el campo social) y el poder de las imágenes (el poder mediado por las imágenes, las imágenes significando el poder como relaciones de fuerza). En tal sentido, podemos pensar la relación entre imagen y poder como un campo de formas (estéticas, visuales, retóricas) y de fuerzas (políticas, discursivas, sociales, culturales), que positivan visualidades que no solo muestran, crean o representan una determinada realidad, sino también producen o contribuyen a conformar social, política o culturalmente aquellas realidades representadas o creadas visualmente (Didi-Huberman, 2015). Dicho de otra manera, la relación entre imagen y poder se estable como un campo de formas y de fuerzas que se materializa a través de “la incesante dialéctica de una descomposición fecunda y de una producción que jamás encuentra reposo ni resultado fijo, justamente porque su fuerza reside en la apertura inquieta, en la capacidad de insurrección perpetua y de autodescomposición de la forma” (Didi-Huberman, 2015: 284-285). Así, la dialéctica que se establece entre forma y fuerza, entre composición y descomposición, entre producción y consumo, entre estética y política, entre imagen y poder “conservan su fuerza activa solo si se las considera como fragmentos que se disuelven al tiempo que actúan. (…) Las imágenes poseen un sentido solo si se las considera como focos de energía y de intersecciones de experiencias decisivas” (Carl Einstein citado en Didi-Huberman, 2015: 285).

  1. Acerca de los artículos de este dossier

Los artículos que componen este dossier muestran una diversidad de problemáticas y temáticas que son posibles de analizar respecto de la relación entre imagen y poder. También evidencian la complejidad y el desafío que implica pensar la relación entre imagen y poder en términos teóricos y metodológicos. El conjunto de los textos aquí reunidos da cuenta de análisis y reflexiones que muestran una mirada interdisciplinar, en la que es posible observar las intersecciones entre la historicidad de las imágenes y las problemáticas políticas, culturales, sociales y estéticas que se desprenden del poder, en tanto relación de fuerzas. Los artículos han sido organizados en cuatro ejes que permiten estructurar el dossier a partir de sus vínculos temáticos, temporales o disciplinares en los que es posible observar perspectivas de análisis que buscan establecer relaciones que aportan nuevas miradas acerca de la relación entre imagen y poder.

El primer eje aborda la problemática de la historicidad de las imágenes, la religiosidad y el poder a partir de tres tipos de representación visual: arquitectura, pintura y fotografía. El artículo que abre este eje es “Cuando las cruces hablan. Análisis de los rastros de ritualidad popular sobre la pared desde una óptica antropológica”, de Pedro Javier Cruz Sánchez. En este trabajo se analizan tres escenarios de arquitectura religiosa en la comunidad de Castilla y León en España, presentándonos un relevante estudio acerca de las cruces y la ritualidad popular. A través del concepto de escrituras expuestas, Cruz Sánchez interrelaciona varios campos de estudio, como son la historia social de la cultura escrita, la antropología de las imágenes y la etnografía como mecanismo para la recolección de datos. A partir de una mirada antropológica de las escrituras expuestas, este trabajo nos ofrece una interpretación acerca de la intencionalidad cultural y política de dichas manifestaciones. El segundo artículo de este primer eje es el de Catherine Burdick, “La colección artística del obispo de Santiago de Chile, Luis Francisco Romero, 1707”. En este texto, Burdick desarrolla un acabado estudio de historiografía del arte, a través del cual analiza documentos y obras pictóricas que pertenecieron a la colección del obispo Luis Francisco Romero, ofreciendo no solo la identificación de los contenidos inscritos en las obras, sino también una interpretación acerca del rol diferenciador de estatus social que jugó dicha colección. Este eje se cierra con el artículo “El sonido del silencio: fotografías de Doroteo Giannecchini y Vicenzo Mascio en Turín”, escrito por Josefina Matas, Valeria Paz Moscoso y Mónica Navia. En este texto, las autoras desarrollan un estudio acerca de algunas de las fotografías de Vincenzo Mascio que acompañaron el proyecto de divulgación en Turín de las misiones franciscanas en el Chaco boliviano. Desde una hermenéutica de la imagen se busca explorar las diversas significaciones que pueden adoptar las fotografías como dispositivos de poder cultural. A partir del uso de fuentes primarias, este artículo nos sumerge en los rasgos significativos de las acciones evangelizadoras que emprendieron los franciscanos, así como el rol que desempeñaron los nativos en ese proceso evangelizador y, por último, se problematiza acerca de la mirada externa (fotográfica) que se tejió durante dicho proceso.

El segundo eje aborda la problemática de la imagen, lo político y la representación de la diferencia. El artículo “Arturo Alessandri Palma y la teatralidad de lo político durante su segundo gobierno: La estatua de Manuel Bulnes y el Barrio Cívico (Santiago de Chile, 1937)” de Guillermo Elgueda Labra, analiza en términos históricos-políticos la inauguración de la estatua ecuestre de Manuel Bulnes, que se llevó a cabo durante el segundo gobierno de Arturo Alessandri Palma. A partir de un análisis discursivo y sociopolítico, se argumenta que la ceremonia de instalación de la estatua de Bulnes en el Barrio Cívico de Santiago, tuvo el propósito de legitimar e instalar en el espacio público un imaginario político de orden liberal. El otro artículo que completa este segundo eje es el trabajo de Rodrigo Ruz y Michel Meza, “Fotorreportajes de los semanarios ilustrados Sucesos y Zig-Zag. Representación de la diferencia peruana, boliviana y chilena en la postguerra del Pacífico”. En este texto, los autores reflexionan acerca de la representación de la alteridad peruana, boliviana y chilena en los semanarios Sucesos y Zig-Zag, a principios del siglo XX. El hito relevante que hay detrás de estas construcciones identitarias es la postguerra del Pacífico y sus consecuencias en la conformación de las identidades nacionales en esos tres países. A partir de conceptos como modernidad y progreso, que se inscriben en los fotorreportajes, los autores nos revelan las ideas asociadas a la alteridad en las mencionadas naciones, examinando cómo se establecen relatos y discursos virtuosos respecto a Chile y la chilenidad mientras que, para el caso peruano y boliviano, se hace circular una trama discursiva negativa respecto de la cultura, la sociedad y el pasado de ambas naciones.

El tercer eje aborda la problemática de los medios de comunicación y las redes sociales como dispositivos de poder estético-político, cultural y social. El artículo de Orietta Marquina y Valeri Hernani, “Jóvenes e Instagram: narrativas políticas más allá de la transgresión en el Perú” nos propone una lectura crítica acerca de la utilización de Instagram como herramienta de comunicación estético-política de los jóvenes en la actualidad. Desde un análisis cualitativo, el texto realiza una interpretación crítica de las imágenes y los textos del perfil de Instagram de Rupachay, uno de los tantos jóvenes que han participado en las movilizaciones sociales del último tiempo, en Perú. Estos análisis buscan explicitar aquellas narrativas políticas que subyacen a los conflictos sociales y, de esta manera, entender la forma que adopta la participación política de las y los jóvenes peruanos. El otro texto que compone este eje es el de Juan Pablo Silva-Escobar, “Imagen, poder simbólico y vida cotidiana: Los noticiarios de televisión y la construcción mediática de la realidad social”. Este ensayo propone un acercamiento conceptual acerca de la relevancia que tienen los noticiarios de televisión en la construcción de ideologías e imaginarios y las implicancias sociales en la construcción de la realidad social. A partir de la relación que se establece entre imágenes, poder simbólico y vida cotidiana, el autor problematiza la legitimidad social de los noticiarios de televisión para distribuir informaciones acerca de los acontecimientos del día a día y las implicancias ideológicas que ello conlleva.

El cuarto eje aborda la problemática de la imagen y el poder en la producción simbólica del cine, el teatro y la literatura. El artículo de Heber Leal “La insumisión en las narrativas de Pedro Juan Gutiérrez y Fernando Vallejos”, analiza el contenido político y transgresivo que es posible detectar en las narrativas de estos dos autores. Desde una perspectiva interdisciplinaria que hace uso de conceptos que provienen del campo de los estudios literarios y nociones teóricas que provienen de la filosofía, el texto va tejiendo un análisis crítico respecto de los mecanismos y trasfondos de poder y trasgresión que se inscriben en las ficciones analizadas, dando cuenta de una singularidad nómade que subyace a las narrativas escogidas. El segundo texto de este eje es el trabajo de José Aguirre Pombo, “Arrebato. La revancha de las imágenes”. En este ensayo, se analiza la película Arrebato, de Iván Zulueta del año 1979, la cual es interpretada en dos dimensiones: por una parte, se nos ofrece un análisis detallado acerca del contexto sociocultural en el cual se inscribe la película de Zulueta y se pone en relación los cambios estéticos y políticos que tuvieron lugar durante la transición española y, por outro lado, se nos ofrece una reflexión acerca del modo en que esos cambios estético-políticos se inscriben en la representación del cuerpo dentro del filme, en tanto alegorías de esos cambios. De este modo, para Aguirre Pombo, a la transición política española se le superpone una transición estética que daría cuenta de un giro icónico que la película Arrebato estaría evidenciando. El tercer trabajo que compone este cuarto eje, es el artículo “Una rearticulación de las imágenes que representan el poder de las distinciones de género dominantes a través del teatro feminista chileno”, de Alejandra Morales. En este texto, se analiza una serie de obras de teatro chilenas que en el último tiempo han buscado reconstruir y tensionar la noción de lo femenino a través de una propuesta visual que tiene como finalidad activar un punto de vista crítico respecto de ciertos signos utilizados por la cultura patriarcal para perpetuar la dominación masculina. Para Morales, las imágenes que giran en torno a las problemáticas de género se constituyen como un poderoso medio de control social que el teatro feminista ha logrado repensar, a través de puestas en escena que vienen a mostrar la forma en que el género ha sido definido y como esas definiciones configuran la subjetividad femenina y evidencian el carácter ideológico que subyacen a esas representaciones.

Por último, queremos agradecer a Germán Morong, director de Autoctonía. Revista de Ciencias Sociales e Historia, y a Nelson Castro, su editor general, por abrirnos las puertas de la revista para abordar esta problemática compleja y facilitar, en todo momento, el intrincado camino de las publicaciones académicas. También queremos agradecer a los/as evaluadores/as, quienes a través de sus comentarios y sugerencias contribuyeron a mejorar cada uno de los artículos aquí reunidos. Esperamos, con el dossier Imagen y Poder: representaciones, discursos y política en Iberoamérica, contribuir a la discusión y reflexión acerca de esta problemática y que los textos aquí reunidos resulten estimulantes para los/as lectores/as y motiven nuevas preguntas y reflexiones sobre este tema que nos ocupa.

Notas

1 Como ha observado Martín Jay, si “para Sartre, (…) las imágenes pueden basarse en una analogía con los objetos de percepción, ellas mismas son irreales. De hecho, la imaginación es precisamente la función activa de la conciencia que trasciende o anonada la realidad del mundo percibido. En cuanto tal, sirve como modelo de la negación y de la carencia que Sartre pronto identificará con el ‘para-sí’ en El ser y la nada. Lo que resulta esencial para entender su argumento general es que Sartre distinguía imágenes y percepción, visual o de otro tipo, y en su lugar las identificaba con la intencionalidad de la acción. Como resultado, Sartre estaba en condiciones de describir la conciencia menos en términos de transparencia visual que en los de acción puramente anonadante. Aunque las imágenes no perceptivas no nos dicen nada sobre el mundo externo, su propia ‘nada’ o invisibilidad sugiere un vínculo crucial con la libertad humana, tal como Sartre la interpretaba” (2007: 215-216).

2 Acerca de esta relación simbiótica y dialéctica entre el ver y el poder, Michel Foucault sostiene que: “Tradicionalmente el poder es lo que se ve, lo que se muestra, lo que se manifiesta, y, de manera paradójica, encuentra el principio de su fuerza en el movimiento por el cual la despliega. (…) En cuanto al poder disciplinario, se ejerce haciéndose invisible; en cambio, impone a aquellos a quienes somete un principio de visibilidad obligatorio. En la disciplina, son los sometidos los que tienen que ser vistos. Su iluminación garantiza el dominio del poder que se ejerce sobre ellos. El hecho de ser visto sin cesar, de poder ser visto constantemente, es lo que mantiene en su sometimiento al individuo disciplinario” (2010: 218).

3 De acuerdo con Christoph Menke (2011: 280), “la subjetivación como sometimiento, el sometimiento como subjetivación, significa (…) impregnar en los individuos un concepto de subjetividad que es definido por una facultad de eficiente autocontrol –una facultad de autocontrol que a su vez sirve de eficiente control externo. La dominación sobre los sujetos se realiza en dispositivo de poder disciplinario por medio de la libertad de los sujetos”.

4 Pierre Bourdieu plantea que: “El capital simbólico es una propiedad cualquiera, fuerza física, riqueza, valor guerrero, que, percibida por unos agentes sociales dotados de las categorías de percepción y de valoración que permiten percibirla, conocerla y reconocerla, se vuelve simbólicamente eficiente, como una verdadera fuerza mágica: una propiedad que, porque responde a unas ‘expectativas colectivas’, socialmente constituidas, a unas creencias, ejerce una especie de acción a distancia, sin contacto físico. Se imparte una orden y ésta es obedecida: se trata de un acto casi mágico. Pero sólo es una excepción aparente a la ley de la conservación de la energía social. Para que el acto simbólico ejerza, sin gasto de energía visible, esta especie de eficacia mágica, es necesario que una labor previa, a menudo invisible, y en cualquier caso olvidada, reprimida, haya producido, entre quienes están sometidos al acto de imposición, de conminación, las disposiciones necesarias para que sientan que tienen que obedecer sin siquiera plantearse la cuestión de la obediencia” (2002: 172-173).

Referencias

Balandier, G. (1994): El poder en escenas. De la representación del poder al poder de la representación, Barcelona, Paidós.

Barnes, B. (1990): La naturaleza del poder, Barcelona, Ediciones Pomares-Corredor.

Barthes, R. (2006): La cámara lúcida. Nota sobre la fotografía, Barcelona, Paidós.

Benjamin, W. (2005): El libro de los pasajes, Madrid, Akal.

Bourdieu, P. (2002): Razones prácticas. Sobre la teoría de la acción, Barcelona, Anagrama.

Castro, E. (2018): Diccionario Foucault. Temas, conceptos y autores. Buenos Aires, Siglo XXI Editores.

Debord, G. (2007): La sociedad del espectáculo, Valencia, Pre-Textos.

Deleuze, G. (1987): Foucault, Barcelona, Paidós.

Didi-Huberman, G. (2012): Arde la imagen, México DF, Ediciones Ve.

Didi-Huberman, G. (2014): “La emoción no dice ‘yo’. Diez fragmentos sobre la libertad estética”, en Alfredo Jaar. La política de las imágenes, Santiago, Metales Pesados, pp. 39-67.

Didi-Huberman, G. (2015): Ante el tiempo. Historia del arte y anacronismo de las imágenes, Buenos Aires, Adriana Hidalgo Editora.

Droguett, C. (2019): Los asesinados del Seguro Obrero, Santiago, Tajamar Editores.

Foucault, M. (1999): “Las mallas del poder”, en Estética, ética y hermenéutica, Paidós, Barcelona, pp. 235-254.

Foucault, M. (2000): Defender la sociedad, Buenos Aires, Fondo de Cultura Económica.

Foucault, M. (2010): Vigilar y castigar. Nacimiento de la prisión, Buenos Aires, Siglo XXI Editores.

Foucault, M. (2005): “Las redes del poder”, en Christian Ferrer, comp., El lenguaje libertario: antología del pensamiento anarquista contemporáneo, La Plata, Terramar Ediciones, pp. 15-31.

Foucault, M. (2013): Historia de la sexualidad Vol.1 La voluntad de saber, Buenos Aires, Siglo XXI Editores.

Foucault, M. (2017): “El sujeto y el poder”, en Hubert L. Dreyfus y Paul Rabinow Michel Foucault. Mas allá del estructuralismo y la hermenéutica, Buenos Aires, Monte Hermoso Editores, pp. 353-380.

Jameson, F. (2002): “transformaciones de la imagen en la posmodernidad”, en El giro cultural. Escritos seleccionados sobre el posmodernismo 1983-1998, Buenos Aires, Manantial, pp. 129-179.

Jay, M. (2007): Ojos abatidos. La denigración de la visión en el pensamiento francés del siglo XX, Madrid, Akal.

Morey, M. (2001): “Introducción”, en Michel Foucault, Un diálogo sobre el poder y otras conversaciones, Madrid, Alianza Editorial, pp. 7-21.

Menke, C. (2011): Estética y negatividad, Buenos Aires, Fondo de Cultura Económica.

Nancy, J-L. (2003): Au fond des images, París, Éditions Galilée.

Ranciére, J. (2014): “El teatro de las imágenes”, en Alfredo Jaar. La política de las imágenes, Santiago, Metales Pesados, pp. 69-89.

Sartre, J.P. (1993): El ser y la nada. Ensayo de ontología fenomenológica, Buenos Aires, Losada.

Silva-Escobar, J.P. (2019). La insubordinación cinematográfica. Ensayos sobre el nuevo cine latinoamericano de Argentina, Brasil y Chile (1959-1976), Rosario, Prohistoria Ediciones.

Wajcman, D. (2011): El ojo absoluto, Buenos Aires, Manantial.


Organizador

Juan Pablo Silva-Escobar – Centro de Investigación en Artes y Humanidades (CIAH). Escuela de Animación Digital. Facultad de Ciencias Sociales y Artes, Universidad Mayor, Chile. https://orcid.org/0000-0001-5088-4332


Referências desta apresentação

SILVA-ESCOBAR, Juan Pablo. [Imagen y Poder: representaciones, discursos y política en Iberoamérica]. Autoctonía. Revista de Ciencias Sociales e Historia, v.7, n.1, p. 1-23, ene./jun. 2023. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

ESMA. Represión y poder en el centro clandestino de detención más emblemático de la última dictadura argentina | Marina Franco, Claudia Feld

ESMA. Represión y poder en el centro clandestino de detención más emblemático de la última dictadura argentina parte de un interrogante central: ¿por qué la ESMA? Por todas las preguntas abiertas más allá de, y gracias a, testimonios de sus sobrevivientes, procesos judiciales y numerosos trabajos previos sobre este centro clandestino que funcionó en la ciudad de Buenos Aires, durante toda la última dictadura argentina (1976-1983). Leia Mais

As Extremas Direitas e o Poder: leituras a partir da História/Faces da História/2022

Os anos 1920 foram contexto do refluxo de governos parlamentares e liberais (em suas diversas acepções). O encerramento da Primeira Guerra Mundial e convulsões políticas, sociais e econômicas associadas direta ou indiretamente ao fim do conflito, foram combustível para a ascensão da onda autoritária que assolou a Europa e influenciou experiências extremistas em diversas partes do globo. Passado um século, em termos geopolíticos, sintoma semelhante de esgotamento das democracias liberais se instala, apesar de não ter ocorrido fenômeno impactante e traumático de proporções globais tal como foram as Grandes Guerras. Leia Mais

Impactos de hegemonía. Los mudables cimientos del poder imperial hispánico/MAGALLANIA. Revista de Historia Moderna/2022

Una entidad política tan compleja, extensa y duradera como fue la Monarquía Hispánica tuvo un efecto variado y multiforme en sus diversos territorios y en las gentes que los habitaron. Hace ya un buen tiempo que preguntarse cómo afectó a la vida de las personas su pertenencia a los dominios de los Habsburgo de Madrid colocó a la investigación en la senda de tener que explicar las nervaduras que enlazaban ese poder pluricontinental con la peripecia de las gentes locales. Sin embargo, las respuestas dadas han estado mediadas hasta hace unas décadas por una serie de persistentes bloqueos analíticos que veían a las sociedades de esa Monarquía, y más aún a las que estaban allende la Península Ibérica, como simples pacientes de las decisiones de la corona en sus dinámicas imperiales y en su consecuente proyección fiscal. La historia económica y la historia política clásica heredaron y reactualizaron en el siglo XX los debates que ya desde finales del siglo XVI achacaban la falta de dinamismo de las sociedades ibéricas a los efectos catastróficos que tuvo sobre ellas el estrés que trajo el esfuerzo de sostener una hegemonía que se denunciaba era ajena a los intereses de los súbditos naturales del rey. Leia Mais

La imagen femenina em el mundo antiguo: saber y poder/Mythos – Revista de História Antiga e Medieval/2022

El propósito del presente dossier consiste en pensar el espacio del pensamiento como un topos de construcción igualitaria y de configuración de un modelo antropológico que supone, precisamente, revisar la inequidad de género como núcleo problemático. Leia Mais

Corpo, poder e resistência no mundo antigo e medieval/Mythos – Revista de História Antiga e Medieval/2021

El proyecto de la presente reflexión consiste en relevar el concepto de epimeleia heautou en el marco general del pensamiento foucaultiano en su retorno al mundo antiguo, a fin de establecer un arco de lectura con la problemática del alma y del cuerpo como campos de batalla donde se libra el combate entre la hybris, desmesura, y la sophrosyne, mesura como par antagónico. Leia Mais

Poder e gênero nas relações políticas / Caminhos da História / 2020

A década de 2010 se encerra com o crescimento dos populismos de direita, e o forte caráter extremista é um aspecto saliente. A perseguição a valores progressistas, ou mesmo pautas que dialoguem com os Direitos Humanos, pressiona pela necessidade de uso do conceito de política de forma permanente, atuante, militante, engajada, mantendo a coerência e a seriedade. É entender que o fazer História (como quem escreve e como quem faz) é inevitavelmente permeado por ideologias, e a neutralidade é a utopia dos tolos, ou daqueles que camuflam as posições já tomadas – geralmente do lado hegemônico.

Assim, a política não deve ser vista como terreno restrito aos assuntos institucionais, ou elitistas, pois esse é masculina, eurocêntrica, falocêntrica, remetendo a um histórico de dominação colonial e imperialista e, por isso, obsoleta. Porém, embora decadentes, as estruturas dominantes não falecem em silêncio, mas reagem com violência que é típica dos grupos em hemorragia de poder. Assim, política e poder devem fugir das esferas restritamente partidárias e factuais. Uma vez tributária da sociologia, psicologia, direito público, psicanálise, linguística, matemática, informática, como afirma René Remond (1997, p. 29), a História Política tem a obrigação de se fazer plural, compreendendo os fenômenos ações coletivos como organizações extra-partidárias e movimentos sociais, sem esquecer das ações subjetivas e identitárias que marcam a pós-modernidade.

Por outro lado, não se deve ignorar que o aparato repressivo estatal existe, e continua vigorosamente utilizado como instrumento normatizador e regulador sendo, portanto, nas palavras de Mbembe, um mecanismo de instrumentalização da vida humana e destruição (literal e metafórica) de corpos humanos e populações que não se encaixam (MBEMBE, 2018, p. 10-11). O nacionalismo oficial se torna imperativo na contemporaneidade, torna o grupo hegemônico o modelo inalcançado do retrato esperado para o país. Revelador, portanto, do descompasso entre o país legal e o país real na fala do ex-ministro da Educação Weintraub, na fatídica reunião ministerial de 22 de abril de 2020: “Esse país não é… odeio o termo ‘povos indígenas’, odeio esse termo. Odeio. O ‘povo cigano’. Só tem um povo nesse país. Quer, quer. Não quer, sai de ré…”. Implicitamente se reforçou ali a imagem de um povo existente apenas de forma ideal, avessa à materialidade e a existência física e concreta de populações marginalizadas, excluídas, despidas de direitos básicos e fundamentais. Na ótica apresentada pelo ex-ministro, as minorias devem se incorporar, perdendo a identidade que lhes são definidoras ou, inevitavelmente, serão exterminadas. Dominação e / ou extermínio são as únicas escolhas permitidas àqueles externos às instâncias de decisão política em um Estado repressivo e tomado por grupos de elite despidos de representação popular.

Tal discurso afeta grupos distintos que tem como divisor comum tão somente o ícone da exclusão e da indiferença: mulheres, gays e trans; índios, retirantes, posseiros. Na lógica estreita e dicotômica dos integrantes de um Estado excludente, para somente assim construir a nação ideal, tal diversidade e pluralidade, típica das democracias saudáveis, estão desamparadas, exiladas dentro do próprio país, por não serem aceitas e incluídas ao que se espera ser “um povo nesse país”.

O dossiê “Poder e Gênero nas relações políticas” repercute as distorções e desproporcionalidades nos arranjos de poder, forçando grupos não-hegemônicos a elaborarem mecanismos e estratégias alternativos de atuação e manifestação não apenas de presença, mas de existência política e física. Tal preocupação é uma regularidade na revista Caminhos da História, conforme podemos visualizar em seus números anteriores, por exemplo, através das aproximações políticas entre América Latina e China no contexto da Guerra Fria (como no artigo de Maria Strabucchi, 2016) ou nos debates sobre intolerância e preconceito através da visão de intelectuais brasileiros da década de 1930 (Costa Filho, 2017).

Com o intuito de manifestar e repercutir esse objetivo, o atual dossiê sublinha temáticas sensíveis com relação às manifestações de poder. A decolonialidade como estratégia para romper com o modelo tradicional de historiografia, é uma das abordagens trabalhadas por Ana Paula Jardim Afonso. Em seu artigo se ressalta a importância de se combater a historiografia eurocêntrica que legitima o discurso e a narrativa do colonizador, e assim, se eleva em importância o papel das ações políticas decorrentes do “terrorismo de gênero”.

Carlos António Aguirre Rojas retoma o conceito de economia moral de E. P. Thompson, inicialmente lançado em A Formação da Classe Operária Inglesa. Nesta obra, o autor inglês buscava evidenciar a maneira de reagir às transformações impostas pela modernização e pelo capitalismo, através da associação entre tradição, identidade e as novidades que eram inseridas ao cotidiano do operariado em vias de formação. De maneira original Aguirre Rojas busca o emprego do conceito na América Latina, seja através do Movimento dos Sem Terra (MST) no Brasil, com os indígenas neozapatistas mexicanos na Marcha del Color de la Tierra em 2001, ou pelos bloqueios e a paralização em diversas cidades estratégicas da Bolívia.

De maneira correlata, está o artigo “Um debate sobre a atuação do Partido Comunista Brasileiro (PCB) no campo entre os anos de 1948 e 1964”, de Rafael Sandrin. Neste, há a análise das formas de atuação do partido de Luiz Carlos Prestes contra a violência do latifúndio durante o período democrático anterior ao Golpe Militar. Através do periódico “Terra Livre”, Sandrim percebe o esforço por mobilizar os trabalhadores agrários em torno de direitos já garantidos ao operariado, como, por exemplo, o acesso ao décimo terceiro salário. Deste modo, é abordado dentro do recorte de 1948 a 1964, temática sensível e contemporânea, ainda não resolvida no século XXI no Brasil.

A desigualdade de renda e das formas de subsistência tornam a violência meio de reação, e o crime como elemento marcante da institucionalização dos desníveis de acesso aos direitos, políticas públicas e acesso a renda. Em locais onde o Estado se manifesta de maneira negligente e atribui suas responsabilidades a iniciativa particular, há o espaço para a disputa do poder, conquistado por aquele que tem maiores recursos e potencial de manifestação da força e da violência em suas mais variadas configurações. Deste modo, Rejane Meirelles Amaral Rodrigues apresenta a trajetória do fazendeiro sertanejo marcado por essas disputas em “Literatura e banditismo social: Antônio Dó retratado por Saul Martins e Petrônio Braz”.

Por fim, Yôkissya Coelho e Monalisa Pavonne Oliveira fazem o rastreamento familiar e trajetória política de mulheres na política. Dentro da metodologia prosopográfica, o artigo “O perfil social de mulheres eleitas em Roraima (2014–2016)” se vincula a História do Tempo Presente. Portanto, tem como proposta detectar a possibilidade de ascensão social das mulheres na e pela política institucional em diferentes colorações políticas. No entanto, é ressaltada a participação das teias familiares no processo de criação do capital político para lançamento de campanhas eleitorais. Dentro dessa dinâmica familiar, o poder político se mantém limitado a determinados grupos.

Deste modo, encerramos o dossiê ancorado na atuação política em seus mais diferentes cenários e configurações. A proposta dos artigos, por mais diversas que possam parecer, tem como elemento unitário o anseio por manifestar o descontentamento através do registro, análise e investigação das desigualdades e suas marcas em seus diversos níveis sociais e econômicos, sendo manifestos desde a luta por terra, até no esforço por reconhecimento identitário subjetivo. Torcemos, que diante da conjuntura pessimista, possamos despertar o otimismo na ação e superação do conservadorismo, do reacionarismo e do proto-fascismo que germina em terreno fértil.

Referências

COSTA FILHO, Cícero João. ‘Raízes raciais’ do Projeto integralista (nacional) de Gustavo Barroso: o preconceito, a intolerância e o racismo para com a figura do judeu no Brasil da década 1930. Revista Caminhos de História, v.22, nº2, jul / dez, 2017, PPGH, Unimontes.

MBEMBE, Achile. Necropolítica: biopoder, soberania, estado de exceção, política da morte. São Paulo: n1 edições, 2018.

MONTT STRABUCCHI, Maria. Writing about China’ Latin American Travelogues during the Cold War: Bernardo Kordon’s ‘600 millones y uno’ (1958), and Luis Oyarzún’s ‘Diario de Oriente, Unión Soviética, China e India’ (1960). Revista Caminhos da História, vol. 21, no. 1, jan / jun., p. 93–124, 2016, PPGH, Unimontes.

REMOND, René. Uma história presente. In. REMOND, René (org.). Por uma história política. Rio de Janeiro: Editora UFRJ / Fundação Getulio Vargas, 1997.

Felipe Azevedo Cazetta – Doutor em História pela Universidade Federal Fluminense (UFF). Professor de História Moderna e Contemporânea da Universidade Estadual de Montes Claros, Minas Gerais, Brasil. E-mail: [email protected] ORCID: http: / / orcid.org / 0000-0002-2110-7531


CAZETTA, Felipe Azevedo. Apresentação. Caminhos da História, Montes Claros, v. 25, n.2, jul / dez, 2020. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Mídia e Poder em Perspectiva Histórica / Crítica Histórica / 2019

A motivação para a organização do dossiê Mídia e Poder em perspectiva histórica partiu da observação de que, nos últimos anos, se intensificou o debate, em diferentes setores da sociedade, tanto no Brasil como no mundo em geral, a respeito do papel das mídias, ou meios de comunicação, tradicionais e novos. Tem sido enfrentadas questões do tipo se tais meios têm atuado como um elemento que atua no sentido do fortalecimento ou do enfraquecimento da democracia, como mecanismos de legitimação da ordem ou de incitação de agitações político-sociais, como ferramentas para articulação de demandas e estabelecimento de novos vínculos coletivos, ou como u catalisador de desagregações sociais, atomização e pulverização de condutas e ações. Tendo em vista a complexidade do cenário contemporâneo, pois, a proposta do dossiê foi compor um quadro variado de pesquisas que abordassem questões relevantes relativas aos meios de comunicação especialmente sob o ponto de vista de historiadores e historiadoras.

O objetivo, agora alcançado, é permitir um olhar mais amplo no tempo e no espaço que enfoque as transformações conjunturais ou as de mais longo prazo a respeito dos meios de comunicação, sua história, sua importância e suas relações com variadas concepções de história e configurações de poder. O resultado final, aqui materializado e trazido à público, expressa os anseios iniciais dos organizadores e sublinha este campo frutífero de pesquisas que se têm desenvolvido no país.

A problemática política e as relações de poder que perpassam os sujeitos políticos, as organizações de classe e partidárias, o imaginário social, a cultura, a religião e o mercado de consumo na contemporaneidade se destacaram no conjunto dos textos. Os artigos selecionados são exemplares tanto para os pesquisadores da área, como para uma leitura menos profissionalmente comprometida, mas interessada nas relações entre a política, partidária ou não, e a chamada grande mídia durante todo o século XX. Se a imprensa é parte inerente do jogo democrático, como ferramenta ela serve a diferentes interesses, disputados, por vezes, violentamente, podendo se transformar tanto em um agente catalisador e incentivador do fortalecimento das leis, instituições e grupos sociais os mais diversos em formação ou transformação, bem como se constituir em um agente perturbador para o aprofundamento de modos de vida livres, solidários e plurais.

Como elemento explicativo para o foco temporal das pesquisas aqui presentes, é importante destacar a facilidade cada vez maior para o acesso aos acervos e hemerotecas dos grandes jornais brasileiros, muitos agora disponíveis on-line, facilitando uma consulta mais ágil a series maiores de antigas edições de jornais e revistas. Os historiadores têm se aproveitado muito bem dessa nova oportunidade e, apesar de contínuos desafios técnicos e estruturais dos acervos, encontram-se devidamente equipados com um já sólido instrumental teórico-metodológico próprio de nossa disciplina para dar conta dessa tarefa exploratória.

Vamos aos textos! Optamos por apresentar os artigos em ordem cronológica, a partir dos temas que abordam, sem intenções de engessar as temporalidades, mas indicando um processo amplo, que percorre os contextos políticos e econômicos do Brasil republicano, durante o último século.

Abre o Dossiê o artigo de Gabriel José Brandão de Souza, intitulado “Entre disputas e negociações: a construção histórica da região cacaueira a partir do jornal Gazeta de Ilhéos (1901- 1904)”. Nele, o autor analisa “o processo de construção da narrativa histórica da região cacaueira, a partir das disputas políticas e ideológicas entre os grupos de elites na cidade de Ilhéus-BA no início do século XX”. Para isso, utiliza a Gazeta de Ilhéos como fonte principal. Segundo Souza, importa “perceber como esses grupos passaram a utilizar-se da imprensa não apenas como uma difusora de ideias e ideais, mas como um importante partido político de oposição, compondo assim, uma outra estratégia do jogo político para além da violência, voltada para a veiculação das suas opiniões e da disputa de espaços de poder.”

Na trilha da reflexão sobre os usos políticos da imprensa, Douglas de Souza Angeli, em “Deixar de votar é votar no inimigo”: Igreja e imprensa católica na construção do eleitor no Rio Grande do Sul (1945-1950)”, aborda o tema “propondo compreender a mobilização visando à construção do eleitor no período inicial da experiência democrática, ou seja, a construção de um interesse pelo ato de votar no momento de retorno das eleições, de criação de partidos políticos nacionais e de ampliação significativa do eleitorado inscrito”. Para Angeli, para isso foi fundamental “a atuação de agentes específicos […]: a Igreja Católica, a Liga Eleitoral Católica e a imprensa católica”. Utilizando-se dos jornais Correio Rio-Grandense, Jornal do Dia e o Unitas – boletim da província eclesiástica do Rio Grande do Sul, o autor, afirma que “a construção do eleitor católico” foi, naquele momento ,“impelida com base em um discurso marcadamente anticomunista, articulado às estratégias de posicionamento da Igreja perante o Estado e às práticas de mobilização do clero e da Liga Eleitoral Católica visando ao alistamento e ao voto”.

O artigo seguinte, trabalha o mesmo espaço geográfico e temporal, alterando o foco para a análise de discursos voltados não à política, mas à construção de um imaginário social sobre a cidade de Porto Alegre e as “classes perigosas”. Em “Uma cidade nas sombras”: O mundo dos bas-fonds (Porto Alegre – meados de 1950)”, Marluce Dias Fagundes estuda como o centro de Porto Alegre teve sua paisagem transformada naquele período. Para a autora, é perceptível nas fontes “um contraste de luz e de sombras. Na medida em que a “modernidade” avança pelas ruas da capital sul-rio-grandense, a “decadência social e moral” invade esses mesmos logradouros. Uma região que até a contemporaneidade está presente no imaginário social da cidade é a Rua Voluntários da Pátria – parte dela reconhecida como uma “zona de meretrício”. Para compreender esse “mundo dos bas-fonds”, Fagundes recorre “à análise da imprensa local, sobretudo o Jornal Diário de Notícias, entre os anos de 1954 e 1960, destacando também “alguns casos de crimes sexuais de sedução que chegaram até à Polícia e à Justiça”.

Saindo do Rio Grande do Sul, vamos ao Rio de Janeiro, ainda nos anos 1950. Letícia Sabina Wermeier Krilow, no artigo, “Favela representada: disputas em torno de nomeações e significações nas páginas de jornais cariocas (1951-1954)” analisa como parte da “grande imprensa carioca” – Correio da Manhã, Jornal do Brasil e Última Hora -representou as áreas habitacionais chamadas favelas durante o Segundo Governo Vargas (1951-1954)”. Segundo Krilow, a relevância do trabalho dá-se “ao considerarmos que, no pós 1945, o Brasil passou por um acelerado processo de industrialização e urbanização, entretanto, tais processos não ocorreram espontaneamente, bem como geraram diversas consequências, nem todas positivas, o que causou sérios questionamentos”. Nesse sentido, a autora considera que “um dos fenômenos mais impactantes foi o grande aumento das áreas habitacionais chamadas de favelas”, e, por isso, “se torna relevante analisar a forma como este espaço urbano foi representado nos jornais”. Para ela, “levando-se em consideração o grande poder de legitimação / deslegitimação de ideias que os meios de comunicação possuem, notamos que a forma pela qual a favela é representada pode interferir ou legitimar tomadas de decisões políticas – políticas públicas –, o que possibilita vislumbrar que projetos de sociedade estão sendo difundidas, estando tais representações inscritas no que Bourdieu chama de luta simbólica, evidenciando também disputas entre os referidos jornais”.

Na sequência, Marcelo Marcon discute em “O Globo e as disputas em cena: Brizola e a criação e uma sigla emblemática, o Partido Democrático Trabalhista”, “a forma como o jornal Globo elaborou seu discurso no processo de disputa pelo domínio da sigla PTB (Partido Trabalhista Brasileiro) entre Leonel Brizola e Ivete Vargas, e a consequente criação do PDT (Partido Democrático Trabalhista)”. Segundo Marcon, “isso ocorreu no processo de abertura política do regime militar brasileiro e reorganização partidária” e, através da análise das fontes e da historiografia, entende “que O Globo apoiou Ivete Vargas e investiu na desqualificação política de Leonel Brizola, uma vez que o jornal e o político gaúcho possuíam diferentes visões acerca do rumo da política brasileira”.

Avançamos no período da ditadura militar com o artigo de Pricila Niches Müller, “Negócio da China: a relação entre mídia e poder na diplomacia do Governo Geisel (1974-1979)”. Nele, a autora estuda as “relações entre imprensa e política externa no Brasil, com foco na análise do posicionamento de órgãos da imprensa a respeito da política externa do governo Geisel (1974-1979), a qual buscou a diversificação de parcerias com o emprego de uma política dita “pragmática, responsável e ecumênica””. A ênfase de tal política, segundo Müller, deu-se “no estabelecimento inicial da parceria estratégica com a República Popular da China, inclusive em nível de Embaixadas entre ambos os países”. Objetivando “investigar de que maneira a formação de parceria entre Brasil e China está retratada na grande imprensa brasileira no contexto dos anos que compreendem o Governo Geisel”, o artigo aborda, especificamente, “a representação feita pela imprensa acerca da posse do General Ernesto Geisel e a política externa do governo, bem como uma análise da questão que envolve a imprensa e a “opinião pública”.

Já Luciana Rossato, em “Juventude e publicidade nas páginas das revistas semanais Veja e IstoÉ (década de 1980)”, estuda as relações entre mercado consumidor, juventude e imprensa. O instigante artigo elucida “como ideias sobre a juventude foram veiculadas pela mídia impressa através de peças publicitárias na década de 1980 no Brasil, período marcado pela abertura política e pela ampliação do mercado consumidor”. Rossato utiliza uma documentação “composta por 30 peças publicitárias publicadas nas revistas Veja e IstoÉ no decorrer dessa década”. A análise recorre “aos conceitos de juventude de Margulis e Urresti (1996) e Abramo (1997), aos conceitos de consumo de Feathersone (1995) e aos meios e mediações de Martin-Barbero (2008)”. Nas peças publicitárias a historiadora constata “que as revistas selecionadas eram voltadas a um grupo específico de jovens, pertencente a uma determinada classe social, e difundiam uma concepção de juventude e ser jovem ligada à liberdade e a uma vida marcada por múltiplas possibilidades de escolha”.

Fechando o Dossiê, Thaíse Ferreira da Luz, com o texto “O Bom, o Mau e o Feio: as representações do jornal O Estado de São Paulo sobre os três principais candidatos à Presidência da República nas eleições de 1989”, realiza uma análise “sobre a representação de figuras políticas na mídia impressa”. A intenção de Luz é “verificar como a construção da imagem dos três principais candidatos ao pleito presidencial de 1989, Fernando Collor de Mello, Leonel Brizola e Luiz Inácio Lula da Silva, foi feita pelo jornal O Estado de São Paulo e, de que maneira essas representações elaboram uma construção simbólica desses candidatos”. Para tal, a autora observou “o uso das imagens nas páginas de O Estado de São Paulo e a construção discursiva do periódico, em uma mesma edição”.

Um Dossiê como este não se propõe a esgotar um conjunto de temas ou proposições de pesquisa, mas compor uma amostra, por pequena que seja, que pode auxiliar em desdobramentos posteriores, especialmente, apontando soluções teórico-metodológicas e novos temas e problemas de pesquisa. Tal diversidade e os encontros e desencontros eventuais demonstram que a riqueza da produção historiográfica brasileira está consolidada e extremamente viva e ativa.

Por fim, encerrando essa apresentação, nos parece ser importante nos situarmos como historiadores comprometidos com os problemas de nosso tempo. Por isso, foi inspiradora a imagem de capa selecionada para esta edição: Che lendo o jornal La Nación.

Ernesto Guevara de La Serna, o Che, foi um revolucionário argentino, combatente da Revolução Cubana de 1959, executado com auxílio de agentes da CIA na Bolívia em 9 de outubro de 1967. Che teve sua imagem veiculada mundialmente na grande mídia, impressa e televisiva, em estampas de camisetas, pôsteres e diferentes acessórios de moda, transformada inclusive em uma mercadoria, vinculada ao sistema político e econômico que passou a vida inteira combatendo e tendo sido por conta disso morto. Assim, não buscamos aqui a inspiração na “imagem” de Che, mas no agente teórico e prático que foi. A coerência entre pensamento e ação foi característica de sua trajetória, bem como a sua capacidade de agir no mundo visando transformá-lo de acordo com sua visão de como deveria ele ser.

Como profissionais de história, educadores e pesquisadores, que estão imersos em uma época marcada pelo ressurgimento de formas mais ou menos escancaradas de fascismo, nossa resposta ativa, nossa práxis, deve ser à altura. Desde nosso lugar, de nossa trincheira que são as universidades públicas, agora sob severo ataque, acreditamos que é um dever marcar a solidariedade e a ação que vá ao encontro dos interesses e necessidades dos povos pretos e periféricos, dos indígenas, das mulheres, dos LGBTs, da classe trabalhadora, enfim, daqueles cujas existências mesmas estão em vários sentidos ameaçadas.

E a universidade deve ser um espaço seu de direito! Falava Che aos estudantes cubanos em 1959:

Y, ¿qué tengo que decirle a la Universidad como artículo primero, como función esencial de su vida en esta Cuba nueva? Le tengo que decir que se pinte de negro, que se pinte de mulato, no sólo entre los alumnos, sino también entre los profesores; que se pinte de obrero y de campesino, que se pinte de pueblo, porque la Universidad no es el patrimonio de nadie y pertenece al pueblo de Cuba, y […] la Universidad debe ser flexible, pintarse de negro, de mulato, de obrero, de campesino, o quedarse sin puertas, y el pueblo la romperá y él pintará la Universidad con los colores que le parezca[1].

Que a luta antifascista em toda América Latina e no mundo seja vencedora!

Nota

1. Discurso en el auditorium de la Universidad Central de las Villas (al recibir el doctorado honoris causa) 28 de diciembre de 1959 In Ernesto Guevara. Obras Escogidas. CEME – Centro de Estudios Miguel Enriquez, Archivo Chile, p. 148.

Irinéia Franco

Luiz Alberto Grijó

Dezembro / 2019


FRANCO, Irinéia; GRIJÓ, Luiz Alberto. Apresentação. Crítica Histórica, Maceió, v. 10, n. 20, dezembro, 2019. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Catolicismo, poder e sociedade / Faces de Clio / 2019

Com muita satisfação, a Revista Faces de Clio lança o dossiê Catolicismo, poder e sociedade (Julho – Dezembro de 2019). O presente arquivo reúne artigos de historiadores e cientistas da religião sobre as relações do catolicismo para com as instituições políticas e sociais em diferentes contextos históricos, considerando não apenas os espaços oficiais ou teológicos da Igreja Católica, mas também as suas manifestações não oficiais ou populares.

Visando facilitar a difusão dos nossos artigos, damos início a uma nova fase da Revista, que agora se integra ao novo Portal de Periódicos da Universidade Federal de Juiz de Fora. Com nosso novo site (OJS 3), teremos todo o fluxo editorial administrado na plataforma, facilitando a comunicação entre autores, editores, pareceristas e leitores.

Iniciamos este número com o artigo de João Antônio Fonseca Lacerda Lima, que analisa a importância das cerimônias católicas nos vários âmbitos dos bispados do Maranhão e do Pará, desde a sua instalação até o modo de seleção dos clérigos nas dioceses. Assim, mediante o estudo da “pompa e circunstância”, o autor demonstra o lugar da Igreja e dos eclesiásticos naquela sociedade.

Em seguida, temos o artigo de Júnior Cesar Pereira, “Lágrimas no púlpito A morte de D. Pedro III na parenética de Teodoro de Almeida”, que explora a relação entre a esfera do político e do religioso a partir da oratória sagrada, entendida com prática cultural. No texto, o autor procurou demonstrar como a morte de Dom Pedro III foi refletida no púlpito, a partir da análise de um sermão pregado pelo padre Teodoro de Almeida (1722-1804).

Nívea Mendonça, doutoranda em História Social pela Universidade Federal Fluminense, analisa o processo de entrada de pessoas na Ordem Terceira do Carmo em Vila Rica e em Mariana. De acordo com a autora, tal processo era extremamente criterioso e, somente ao final de todas as etapas, os noviços eram reconhecidos como Irmãos Terceiros da Ordem do Carmo.

No artigo intitulado “A Igreja Católica e o Movimento de recatolização no início do século XX”, Allan Fernandes discorre sobre a Igreja Católica no contexto político das décadas de 1920 e 1930. No texto, o autor relaciona o movimento de Recatolização no Brasil, a crise dos anos 1920, a ascensão de Vargas ao poder com os Levantes comunistas de 1935.

O texto de Pedro J. Silva Reis, Mestre em história contemporânea pela Faculdade de Ciências Humanas da Universidade Nova de Lisboa, retoma o debate em torno da problemática da observação do comportamento político dos católicos produzido no âmbito da historiografia francesa, confrontando e equacionando as vantagens e desvantagens do universo crente contemporâneo.

No artigo intitulado “O Social Catolicismo e a sua atuação no meio rural na segunda metade do século XX no Brasil”, Nilmar Carvalho analisa a atuação da Igreja Católica no meio rural brasileiro, na segunda metade do século XX, sobretudo em relação à reforma agrária. A pesquisa está circunscrita aos eventos que ocorreram entre os anos de 1950 e 1964 e analisa os documentos eclesiais e bibliografias sobre o assunto.

Leiliane Louise Lucena da Costa, por sua vez, investiga por meio de cartas e rabiscos deixados por suicidas nos processos policiais de 1920 e 1952, a busca pelo perdão do pecado cometido contra si mesmo. O suicídio, tema tabu e hodierno para sociedade, é trabalhado na perspectiva da Igreja Católica, que com o desenvolvimento da medicina e áreas afins, fez rever algumas de suas doutrinas e passou a permitir o cumprimento de todos os rituais necessários para encomendar o enterro destes sujeitos.

Ainda no século XX, o artigo “Orientando o voto católico sul-rio-grandense: a LEC (Liga Eleitoral Católica) e a propaganda político-partidária veiculada na imprensa escrita em 1950” tem como objetivo compreender a influência da Igreja Católica por meio dos ditames apregoados pela Liga Eleitoral Católicos (LEC) na propaganda político-partidária do Partido Social Democrático (PSD) e do Partido Trabalhista Brasileiro (PTB) veiculada nos jornais Correio do Povo e Diário de Notícias.

Finalizando a sessão do dossiê temático, trazemos o artigo de Rita Suriani Lamas, que apresenta uma revisão bibliográfica sobre a atuação da Igreja Católica durante o governo ditatorial militar brasileiro, entre as décadas de 1960 e 1980. Ao longo do texto, a autora analisa documentos oficiais emitidos por órgãos ligados à Igreja, examinando as transformações ocorridas no clero brasileiro relativas às posturas adotadas frente às ações dos militares no poder.

Quanto aos artigos livres, iniciaremos com as contribuições do historiador Aguiomar Rodrigues Bruno, que no artigo intitulado “Por tudo que é vivo morre: a morte negra numa freguesia do Recôncavo da Guanabara, Rio de Janeiro (Séc. XVIII)”, o autor analisou as representações e as práticas do bem morrer católico entre os indivíduos forros da freguesia de Nossa Senhora da Piedade do Iguaçu, no Recôncavo da Guanabara, ao longo do século XVIII.

Adentrando na segunda metade do século XIX e início do século XX, o Professor Doutor Antônio Gasparetto Junior explora as manifestações culturais da comunidade germânica em Juiz de Fora, município que recebeu elevado número de imigrantes alemães e em muito se destacou pelas manifestações culturais e profissionais que os mesmos empreenderam na cidade. Por meio de fontes provenientes de suas antigas associações, o autor avalia a relevância que elas tiveram para a proteção dos germanos na região.

Finalizando os artigos da revista, Geovano Chaves, professor de história do IFMS, apresenta o artigo intitulado “O cinema polonês nos trilhos da História: As 200 crianças do Doutor Korczac de Andrej Wajda”. Ao longo do texto, o autor analisa as afinidades entre política e religião através do cinema, refletindo sobre os aspectos do antissemitismo no território polonês. No artigo, o autor analisa o filme “As 200 crianças do Doutor Korczac” com o objetivo de exemplificar alguns “trilhos” da história da Polônia.

Agradecemos a todos(as) membros da equipe editorial, ao conselho consultivo, aos pareceristas, aos autores(as), que participaram ativamente da construção deste dossiê, e aos leitores que prestigiarão o nosso trabalho.

Ana Paula Dutra Bôscaro – Doutoranda em História pela Universidade Federal de Juiz de Fora. E-mail: [email protected]

Bárbara Ferreira Fernandes – Doutoranda em História pela Universidade Federal de Juiz de Fora. E-mail: [email protected]

Jorge William Falcão Junior – Doutorando em História pela Universidade Federal de Juiz de Fora. E-mail: [email protected]


BÔSCARO, Ana Paula Dutra; FERNANDES, Bárbara Ferreira; FALCÃO JUNIOR, Jorge William. Editorial. Faces de Clio, Juiz de Fora, v.5, n.10, jul / dez, 2019. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Minorias, poder, saberes e trocas culturais: do Império Romano ao medievo / Dimensões / 2019

Com imensa satisfação fazemos a apresentação desta coletânea internacional de artigos que constituem este dossiê em homenagem a uma musa dos medievalistas brasileiros e latino americanos – Adeline Rucquoi (França). A apresentação da pesquisadora ficou a cargo de dois colegas, e não seremos redundante. Seu brilho, sua obra e seu caráter justificariam uma terceira homenagem, mas a modéstia dela não nos permite este exagero.

Tudo começou no pós-doutorado do professor Sérgio Alberto Feldman no EHESS entre 2012 e 2013, em que foi tratado com carinho e imenso respeito e apresentado a pesquisadores diversos. Assim nos juntamos, Sérgio Alberto Feldman e Leni Ribeiro Leite, para homenageá-la nesta obra coletiva, e este é produto. Agradecemos a Dra. Patrícia Merlo, editora incansável da Revista Dimensões, ter aberto este nobre espaço de divulgação. Leia Mais

Poder e religião no Egito Antigo / Hélade / 2018

Poder e religião no Egito

É muito raro encontrar uma pesquisa acerca da sociedade egípcia que não envolva de alguma forma o fenômeno religioso e sua interligação com o poder. Isso se deve ao fato de que a concepção de mundo para os antigos egípcios mesclava todas as esferas que atualmente insistimos em analisar separadamente: religião, poder, cultura, sociedade, economia, etc. A estrutura do poder faraônico estava solidamente baseada em preceitos cosmogônicos e cosmológicos, de forma que todos os habitantes do Egito compunham a parte de um todo ordenado pela concepção de Maat, princípio que regia o equilíbrio cósmico do mundo (BAINES, 2002, p. 200).

O faraó era o responsável pela manutenção de Maat através das práticas diárias de culto aos deuses, preservação de templos, conservação do ciclo natural do Rio Nilo. O surgimento de situações de caos significava que Maat não tinha sido devidamente respeitada. No entanto, não só o faraó tinha um papel importante no afastamento do caos, mas sim todos os egípcios que, por meio de seus respectivos papeis na vida social, auxiliavam no funcionamento próspero do Egito, desde um camponês que realizava a colheita de alimentos até um sacerdote iniciado nos mistérios dos deuses que executava rituais templários.

Existe uma complexidade inerente ao esforço de lidar analiticamente com uma sociedade tão distante espaço-temporalmente da nossa. No entanto, ao fazê-lo, verificamos não apenas que as estruturas de poder e as formas de agência se modificaram ao longo de mais de cinco mil anos, mas também permitiram uma continuidade que por vezes nos faz olhar para o Egito Antigo não com total estranhamento, mas com certa identificação. Assmann, historiador e egiptólogo alemão, afirma: “O Egito é o lugar clássico da experiência do tempo” (ASSMANN, 2005, p. 21). Tal afirmação caracteriza uma tendência nacional e internacional das pesquisas sobre o Egito Antigo e é a partir dessa premissa que as diversas pesquisas presentes neste dossiê foram desenvolvidas.

O primeiro artigo que compõe o nosso dossiê é de autoria do Prof. Dr. José das Candeias Sales, da Universidade Autônoma de Lisboa, e tem como objetivo traçar paralelos entre as narrativas cosmogônicas egípcias, mais especificamente as de Hermópolis e Mênfis, e o relato bíblico do Gênesis. O autor inova ao procurar diálogos intertextuais entre as narrativas egípcias e a hebraica, uma vez que grande parte dos pesquisadores tende a analisar o Gênesis à luz dos textos mesopotâmicos.

A segunda contribuição, de autoria do Prof. Dr. Mariano Bonanno, da Universidade de Buenos Aires, analisa o Sarcófago de Amenirdis (XXVI Dinastia) sob a luz dos conceitos de agência e mirada. Bonanno operacionaliza as diversas facetas do sarcófago, desde sua materialidade até sua iconografia, para demonstrar como um agente da não-elite mobilizou um objeto que, de forma limitada, conferiu-o certo status na sociedade egípcia. Segundo o autor, o sarcófago era um objeto de poder, tendo em vista o seu significado religioso e sociocultural.

O Prof. Dr. Pablo Martín Rosell, da Universidade de La Plata, analisa as fórmulas abidianas presentes nas estelas votivas do Reino Médio com o intuito de compreender o seu significado para o mundo social e religioso, e, ainda, demonstrar sua relação com os festivais em honra ao deus Osíris – o Mistério de Osíris. Rosell afirma que a análise da construção de capelas e estelas votivas em Abidos por parte das elites egípcias que peregrinavam anualmente para participar do festival auxiliam no entendimento da hierarquia social egípcia e nas formas de diferenciações sociais que tais elites procuravam elucidar através destas materialidade.

O artigo de Profa. Ms. Keidy Matias, da Universidade Federal do Rio Grande do Norte, adota o conceito de Espaço Absoluto do filósofo francês Henri Lefebvre para entender a relação entre os humanos e a natureza como uma forma de produção social do espaço. A autora objetiva compreender de que forma a expressão herodoteana “O Egito é uma dádiva do Nilo” encontra eco na prática social do espaço e da natureza no Egito Antigo.

A sexta contribuição que compõe o nosso dossiê é de autoria do Prof. Ms. Thiago Ribeiro, da Universidade Federal Rural do Rio de Janeiro, e tem como objeto de estudo o conceito de magia no Egito Antigo e a sua relação com a religião egípcia. O autor delineia que é comum que os estudiosos da área entendam magia e religião como fenômenos distintos. No entanto, através da análise da documentação escolhida, Ribeiro demonstra que para os egípcios, religião e magia eram indissociáveis, constituindo em duas faces da mesma moeda.

Por fim, o artigo do Prof. Dr. Juan José Castillos, do Instituto Uruguaio de Egiptologia, versa sobre as primeiras formações institucionais da estrutura de poder faraônica através da análise da transição de uma situação de ausência de poder institucionalizado para o surgimento de chefes hereditário que posteriormente tornar-se-iam os faraós de um Egito unificado. Castillos afirma que a religião em construção no período pré-dinástico foi crucial para a justificação e validação desta nova ‘realidade social, política e econômica’.

Convidamos todos(as) a lerem o nosso dossiê Poder e Religião no Egito Antigo, composto por importantes pesquisas nacionais e internacionais que caracterizam o gradual crescimento dos estudos egiptólogos no Brasil, assim como a sua sintonia com o cenário internacional, especialmente na América Latina.

Boa leitura.

Referências

ASSMANN, Jan. Egipto: Historia de um sentido. Madrid: Abada Editores, 2005.

BAINES, John. Sociedade, Moralidade e Práticas Religiosas. In: SHAFER, Byron E. (org.). As Religiões no Egito Antigo. São Paulo: Editora Nova Alexandria Ltda, 2002.

Beatriz Moreira da Costa – Doutoranda em História pelo PPGH-UFF. Pesquisadora vinculada ao NEREIDA-UFF, LHIA-UFRJ e Coordenadora do Grupo de Estudos GEKmet. E-mail: beatrizmoreira190@ hotmail.com


COSTA, Beatriz Moreira da. Editorial. Hélade. Rio de Janeiro, v.,4, n.2, 2018. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Nas Teias do Império: Poder e Propriedades no Brasil Oitocentista / Cantareira / 2018

Depois de um longo período de descrédito, os estudos em História Política voltaram ao centro dos debates historiográficos. Graças a um importante movimento de renovação ocorrido nas últimas décadas – como a descoberta e utilização de novas fontes e objetos de estudo, assim como de novas abordagens teórico-metodológicas–, pesquisas políticas antes consideradas esgotadas ganharam um novo fôlego. Um exemplo disso são os diversos trabalhos que propõem um novo olhar sobre o processo de construção do Estado e da Nação brasileira ao longo de todo o século XIX, nos mostrando que, apesar de clássico, o tema em questão é ainda um terreno fértil.

Profundamente relacionado ao contexto econômico-social em suas múltiplas facetas, o tradicional estudo das ideias, do pensamento e das práticas políticas foi revolucionado. Tanto as doutrinas – o liberalismo e o conservadorismo –, quanto as disputas partidárias que as materializavam em projetos de governo ganharam novas dimensões ao serem vinculadas às manifestações culturais e religiosas; aos diversos movimentos sociais que demandavam direitos; aos interesses ligados ao escravismo, a posse de terras e a modernização econômica; a preocupação de forjar uma história nacional no qual o progresso e a civilidade fossem possíveis; e a uma ação diplomática que lutava pela manutenção da unidade e das fronteiras políticas brasileiras.

Nesta perspectiva, cremos que os elementos supracitados orbitam em duas grandes temáticas que particularizam o século XIX: a liberdade e a propriedade. Como sabemos, essa centúria foi marcada pela disputa entre duas linguagens políticas – uma ligada ao Antigo Regime e a outra ao Iluminismo. Este embate marcou a construção de uma nova concepção de mundo, a Modernidade, que estava completamente entrelaçada ao surgimento do liberalismo. Impulsionadas por essas novas ideias, várias regiões do mundo iniciaram um processo de transformação de suas estruturas políticas, econômicas e sociais, o que gerou impactos, interpretações e usos variados.

Não à toa, é justamente no decorrer desse mesmo século que a maior parte das ex-colônias americanas iniciaram seu processo de emancipação política e, consequentemente, a construção dos seus Estados e de suas Nações. Segundo Hespanha, alguns elementos aproximam estes diferentes processos, como o surgimento de grandes Estados bem como de suas gestões, que envolviam a administração de grandes territórios, a implantação de uma nova soberania e de uma nova organização da vida política baseada nas ideias de cidadania e de direitos3.

No caso brasileiro não foi diferente. A independência do Brasil e a posterior formação de suas instituições políticas e de seus cidadãos conciliaram as ideias liberais modernas com a persistência de antigas práticas do Antigo Regime. Nesse sentido, apesar do liberalismo ser central em todo este processo, ele foi apropriado e transformado para adaptar-se às características sociais brasileiras, cujas bases eram a escravidão, o patriarcalismo e o clientelismo.

Se tais questões de âmbito político e social demarcaram – e seguem a demarcar – diversos estudos acerca do oitocentos no Brasil, não diferente foram aqueles que alçaram a propriedade como fio-condutor. Terras, escravos e direitos são algumas das assertivas que norteiam as diversas leituras sobre as dimensões da propriedade no país.

Como produto histórico, a propriedade é marcada por diversas percepções e distintas análises, muito embora seja vista, ainda hoje, como algo natural e, consequentemente, a-histórico. Na contramão dessa interpretação estão autores nacionais e estrangeiros que defendem uma acepção mais plural para o conceito e para as experiências históricas a ela vinculadas, consagrando o que pode ser definido como uma História Social das Propriedades.

No exterior, destacam-se as clássicas obras de E. P. Thompson [4] que, atualmente, se somam às ilações de Rui Santos e Rosa Congost [5], como também as da economista Elionor Ostrom [6]. Em relação ao Brasil, verificamos uma gama de historiadores e cientistas sociais que se debruçaram – e debruçam – sobre o tema.

Em O Rural à la gauche, a historiadora Márcia Motta resgatou as principais interpretações da esquerda sobre o mundo rural brasileiro na segunda metade do século XX. De Nelson Werneck Sodré à Maria Yedda Linhares, Motta apresentou quais eram as concepções sobre o campesinato e os latifúndios para os autores e, de forma particular, demonstrou as razões que levaram à criação da linha de História Agrária no país, como também as novas marcas interpretativas que surgiram a partir dela [7].

Estruturado em três grandes blocos, a 28ª. edição da Revista Cantareira é resultado de um conjunto de investigações recebidas de diversas partes do Brasil e do exterior. No dossiê temático, composto por dez artigos, são propostas reflexões sobre o poder e as propriedades no oitocentos, com enfoque nas relações de dominação e de conflito que demarcam este momento da história nacional. Na seção de artigos livres encontramos uma série de trabalhos originais de graduandos e pós-graduandos de diversas instituições do país, complementadas com as transcrições e resenhas submetidas e aprovadas. A entrevista desta edição foi realizada com a Prof.ª. Dr.ª. Márcia Motta, considerada a maior especialista sobre propriedades no Brasil e que coordena, atualmente, o Instituto Nacional de Ciência e Tecnologia História Social das Propriedades e Direitos de Acesso.

O dossiê temático é iniciado pela discussão do artigo, Ânderson Schmitt. Em “Se não cuidarmos em conservar as estâncias, donde e como teremos o necessário para sustentar a guerra?”: as propriedades embargadas durante a Guerra dos Farrapos (1835-1845), o autor analisou o tratamento dado às propriedades rurais durante a Guerra dos Farrapos, entre os anos de 1835 e 1845 no Rio Grande do Sul. Desnudou, a partir da documentação contemporânea ao conflito, a ação dos grupos revoltosos em um contexto de ação restrita. Ainda em relação à atual região do Sul do país escreveu Vinícius de Assis. Baseado em inventários post-mortem e outras fontes, seu artigo intitulado Do porto às casas de sobrado: cultura material e riqueza nos inventários de negociantes (Paranaguá / PR, século XIX) descortinou a materialidade presente no cotidiano dos comerciantes de grosso trato e fazendeiros do Paranaguá.

A freguesia de Nossa Senhora da Conceição do Bananal foi a região investigada por Jessica Alves. Em Donas e Foreiras: Senhoras proprietárias de escravos e terras na Freguesia de Nossa Senhora da Conceição do Bananal de Itaguaí em meados do século XIX, a pesquisadora resgatou a atuação de mulheres proprietárias de terras e escravos nesta localidade, ao demarcar suas estratégias para manutenção ou ampliação de seus patrimônios.

As relações de poder são resgatadas no trabalho de Flávia Darossi. Em “Benefícios reais da Lei de Terras”: uma releitura política com base na experiência do termo de Lages em Santa Catarina, a investigadora esmiuçou a forma como o Estado Imperial adequou o seu projeto centralizador em correspondência com as elites regionais e locais a partir da Lei de Terras. Como forma de sustentar sua hipótese, tomou como objeto de estudo a municipalidade de Lages, Santa Catarina. Eder de Carvalho e Carlos Gileno também desnudam debates característicos do período de consolidação do Estado brasileiro em Poder Moderador e a responsabilidade jurídica e política: polêmica constitucional da segunda metade do século XIX, mas a partir de outra questão chave: a polêmica constitucional que envolvia o Poder Moderador.

Mirian de Cristo, autora de A Elite Imperial do Porto das Caixas: Saquaremas no poder, se preocupou em relatar a influência política e econômica da família Rodrigues Torres na Freguesia de Nossa Senhora Imaculada Conceição do Porto das Caixas, como também no que concerne ao Império brasileiro. Thomaz Leite, posteriormente, sintetizou suas ilações em “Resta só o Brasil; resta o Brasil só!”: A primeira proposta de emancipação do ventre escravo, sua recepção e discussão no Conselho de Estado Imperial (1866-1868). Em seu texto discutiu a liberdade de ventre a partir do projeto escrito pelo conselheiro de Estado Pimenta Bueno e resgatou as querelas que constituíram os debates abolicionistas.

À luz dos embates periodísticos escreveu Ana Elisa Arêdes o artigo Liberdade e acesso à terra: debates acerca da colônia de libertos de Cantagallo, Paraíba do Sul (1882- 1888). Fundamentada na percepção da imprensa como uma ferramenta de luta política, a pesquisadora recuperou o caso da colônia de libertos de Cantagallo, Paraíba do Sul, para destrinchar as diferentes percepções sobre a abolição, manutenção da escravidão e trabalho nas lavouras.

Para finalizar o dossiê contamos com as instigantes contribuições de Pedro Parga e Rachel Lima. Em A experimentação literária de Machado de Assis e o tema da propriedade da terra no XIX, Pedro Parga refletiu sobre a presença temática do conflito de terras e da crítica à visão senhorial sobre a propriedade territorial em duas obras machadianas. Rachel Lima em Senhores, possuidores e outras coisas mais: As múltiplas funções dos proprietários do rural carioca no oitocentos, se preocupou em discutir as diversas funções dos proprietários de terras do rural carioca, especificamente da freguesia de Inhaúma, para demarcar a posição privilegiada que lhes eram outorgadas em virtude dessa variedade de atribuições.

Em conclusão, esperamos que o leitor se beneficie dos diálogos propostos neste dossiê, ao adensar cada dia mais as reflexões que norteiam a questão do poder e das propriedades no oitocentos.

Boa Leitura!

Notas

  1. HESPANHA, Antônio Manuel. “Pequenas repúblicas, grandes estados. Problemas de organização política entre antigo regime e liberalismo” In.: JANCSÓN, István (org.). Brasil: formação do Estado e da Nação. São Paulo: UCITEC; Jundiaí: FAPESP, 2003.
  2. THOMPSON, E. P. Costumes em Comum. São Paulo: Companhia da Letras, 1998; THOMPSON, E. P. Senhores e caçadores: a origem da lei negra. Rio de Janeiro: Paz e Terra, 1987.
  3. CONGOST Rosa, Selman, Jorge & Santos, Rui.”Property Rights in Land: institutional innovations, social appropriations, And path dependence. Keynote” in: Presented at the XVIth World Economic History Congress, 9-13 July 2012, Stellenbosch University,South Africa.
  4. OSTROM, Elinor, HESS, Charlotte. “Private and common property rights” In: BOUCKAERT, Boudewijn (ed). Property Law and Economics. Cheltenham, UK / Northampton, MA, USA: NATIONAL BUREAU OF ECONOMIC RESEARCH, 2010; OSTROM, Elinor. Governing the Commons: The Evolution of Institutions for Collective Action. Cambridge University Press, 1990.
  5. MOTTA, Márcia. O Rural à la gauche: campesinato e latifúndio nas interpretações de esquerda (1955-1996). Niterói: EdUFF, 2014. Mais recentemente, no âmbito do INCT-Proprietas, reúnem-se pesquisadores de múltiplas áreas do conhecimento com o objetivo de analisar criticamente a propriedade enquanto instituição social.

Alan Dutra Cardoso – Mestrando do Programa de Pós-Graduação em História Social na Universidade Federal Fluminense e graduado (bacharelado e licenciado) pela mesma instituição. Desenvolve projeto de pesquisa sob orientação da Profª. Drª. Márcia Maria Menendes Motta, atuando principalmente nos seguintes temas: História Social das Propriedades, Fronteiras Políticas, Segundo Reinado do Brasil Império, República de Nova Granada / República de Colômbia (séc. XIX), Patrimônio material e Educação. Foi intercambista na Universidad del Rosario, Colômbia, sendo contemplado com o Edital Mobilidade para América Latina UFF / DRI 18 / 2013. Integra a Rede Proprietas, hoje INCT – Instituto Nacional de Ciência e Tecnologia, projeto internacional: História Social das Propriedades e Direitos de Acesso (Disponível em: www.proprietas.com.br). É membro da comissão editorial da Revista Cantareira (www.historia.uff.br / cantareira) e bolsista do CNPq. E-mail: [email protected]

Luaia da Silva Rodrigues – Doutoranda e bolsista Capes pelo programa de Pós-Graduação de História da UFF. Possui graduação e mestrado pela mesma universidade. Especialista em História do Brasil Império, com ênfase nos seguintes temas: regências, Regresso, conservadorismo, liberalismo, Bernardo Pereira de Vasconcelos, identidades e partidos políticos. Atualmente é pesquisadora vinculada aos seguintes laboratórios de pesquisa: CEO, NEMIC e Primeiro reinado em Revisão e professora do pré vestibular social do Estado do Rio de Janeiro (PVS). E-mail: [email protected]


CARDOSO, Alan Dutra; RODRIGUES, Luaia da Silva. Apresentação. Revista Cantareira, Niterói- RJ, n.28, jan / jun, 2018. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Gênero, Poder e Espaço / Revista Espacialidades / 2018

As reflexões sobre gênero possuem ligação histórica íntima com o movimento Feminista. De acordo com a historiadora Joana Maria Pedro, o processo de construção da categoria de gênero acompanha a luta por direitos civis e humanos, tendo assumido novas dimensões na conjuntura social da segunda onda do movimento feminista (1960-1980), quando tal conceito emergiu nos estudos na área das humanidades, a partir dos anos 1980.

A noção de gênero foi então sendo desnaturalizada, passando a ser compreendida como um conjunto de normas que orientam as ações dos sujeitos no tempo e nos espaços – processo para o qual contribuíram diversos autores, como Judith Butler, Linda Nicholson e Joan Scott. Os padrões que orientam os comportamentos, inclusive os relativos à noção de gênero, estão situados no tecido das relações sociais e de poder. O mesmo acontece na produção e apropriação dos espaços. Deste modo, nossa proposta com o dossiê Gênero, Poder e Espaço é debater como as categorias de gênero e poder se interseccionam na produção do espaço (quer o espaço material, onde se enquadram categorias como o urbano e rural, a fronteira, o território, o público e o privado, quer o espaço simbólico, onde se encontram o espaço imaginado ou sonhado, as representações artísticas, entre outros). Dentro dessa temática recebemos artigos com temporalidade diversa que articulam a categoria de gênero a outros conceitos, tecendo assim novas narrativas e lançando novos olhares para seus objetos dentro de suas respectivas pesquisas históricas.

Agradecemos imensamente aos membros do Conselho Consultivo que com muita generosidade, celeridade e, acima de tudo, competência, contribuíram com pareceres sérios e consistentes que garantiram a qualidade do presente dossiê “Gênero, poder e espaço”, o qual passamos agora a apresentar.

Abrimos o dossiê com o artigo Operárias da companhia fiação e tecidos pelotense e suas táticas de gênero (1944- 1954) de Eduarda Borges da Silva, doutoranda no Programa de Pós-Graduação em História da Universidade Federal do Rio Grande do Sul (UFRGS), onde através dos processos da Justiça do Trabalho de Pelotas, salvaguardados no Núcleo de Documentação Histórica da Universidade Federal de Pelotas (UFPel), observou-se pleitos de operárias da Companhia Fiação e Tecidos Pelotense, entre 1944-1954, utilizando dos conceitos de ideologia da domesticidade e táticas de gênero, a autora buscou descrever e compreender os dissídios em que o dilema da dupla jornada da trabalhadora (divisão entre a fábrica e o lar), ocorreu e porque estas mulheres operárias, mães, esposas, donas-de-casa apropriaram-se ou aceitaram a imagem de “mulheres sacrifícios”.

Em seguida, temos o artigo intitulado “Pensar pela pena que desliza, falar pela boca que se fecha”: Emília Dantas ribas como a primeira romancista dos campos gerais (paraná, 1949) de Caroline Aparecida Guebert, mestre pelo Programa de Pós-Graduação em História da Universidade Federal do Paraná (UFPR). Neste trabalho a autora propõe uma reflexão sobre a trajetória e parte da obra escrita de Emília Dantas Ribas (1907-1978), que atuou como professora, oradora de rádio e escritora entre as cidades de Ponta Grossa e de Curitiba, no Paraná articulando história, literatura e os estudos de gênero.

O terceiro artigo de nosso dossiê temático é de autoria de Giovanna Carrozzino Werneck, Mestra em Letras pelo IFES / Vitória, que com o trabalho Mulheres e charges políticas: a subversão pelo humor nos espaços públicos busca analisar e dar visibilidade a mulheres que produzem (ou produziram) charges políticas no Brasil, discutindo aspectos relativos aos papéis sociais atribuídos a homens e mulheres e aos estudos de gênero.

O próximo artigo intitulado Venha, venha o voto feminino: embates travados na imprensa periódica oitocentista no Rio de Janeiro de Cristiane Ribeiro Mestranda pelo Programa de Pós-Graduação em História da Universidade Federal de Juiz de Fora, é proposto uma análise da discussão sobre o voto feminino travado no Império do Brasil, circulando nos impressos diários da corte a partir da segunda metade do século XIX, atentando para uma perspectiva das relações de gênero e de poder imbricados nos jornais.

Em seguida com o artigo A cozinha das mulheres: de espaço de domesticação ao de empoderamento a partir de saberes e fazeres culinários as autoras Jamile Wayne Ferreira – graduada em Gastronomia pela Universidade do Vale do Rio dos Sinos e Lara Steigleder Wayne – graduanda em Psicologia pela Universidade Federal de Ciências da Saúde de Porto Alegre analisam a partir da relação com a cozinha de mulheres acolhidas em uma Ocupação em Porto Alegre / RS, o poder e o conhecimento cotidiano das guardiãs de uma cozinha minusculizada pela geração da gourmetização, já que o espaço de comando das cozinhas está normalmente relacionado à construção de gênero, onde as práticas relativas ao ato de cozinhar são ora invisíveis, no caso da cozinha doméstica, ora superestimada, no caso da “alta gastronomia”.

O próximo artigo intitulado Gênero e prisão: os impactos do sistema prisional sobre a desigualdade social e invisibilidade da mulher encarcerada no estado de Alagoas as autoras Bruna Araújo de Melo Ferreira e Ialy Virgínia de Melo Baia, graduandas em psicologia pelo Centro Universitário Tiradentes de Alagoas, analisam o sistema prisional de uma maneira histórica, compreendendo a mulher como vítima da violência e da desigualdade de gênero dentro desse espaço, visto que a prisão muitas vezes culminando no processo de invisibilidade do indivíduo, acaba potencializando essa invisibilidade na mulher, uma vez que esta já vivencia essa realidade socialmente, enfatizando os casos das mulheres que estão em regime fechado no Sistema Penitenciário Feminino Santa Luzia, localizado em Maceió.

Finalizando o dossiê temático, temos o artigo Vozes de mulheres: género e cidadania em Angola de autoria de Willi Cardoso Domingos, Licenciado em Sociologia pela Faculdade de Ciências Sociais da Universidade Agostinho Neto, que analisa as implicações sociais da discriminação de género no exercício da cidadania e participação das mulheres em Angola, onde um diálogo entre a sociedade civil e as instituições do Estado, é fundamental, para dinamizar e ampliar a capacidade de exercício da cidadania e participação das mulheres, bem como para a desconstrução da discriminação das mulheres.

Abrindo a sessão livre do nosso dossiê temos o artigo “Ressonâncias no processo de demolição do palácio Monroe”, de autoria do doutorando em Ciências Jurídicas Políticas Daniel Levy Alvarenga (UAL). No artigo o autor discute questões acerca do patrimônio material e sua dimensão imaterial dentro de uma sociedade. Tomando como objeto de analise a demolição do palácio Monroe, busca-se apresentar como ocorreu a demolição e sua respectiva repercussão dentro do âmbito social.

Em seguida temos o artigo intitulado “Do ideal ao real: a construção de uma representação na obra literária a lenda do cavaleiro sem cabeça (1820)” escrito por Samuel Nogueiza Mazza, mestrando em história pela Universidade Federal de Uberlândia (UFU). O autor discute no presente artigo a obra de Washington Irving, A lenda do cavaleiro sem cabeça, sob a perspectiva da teoria da representação de Roger Chartier, traçando assim um paralelo entre os personagens da obra e o contexto histórico vivido por Irvring.

Seguindo, temos o artigo de Rannyelle Rocha Teixeira, mestra em história pela Universidade do Porto. Seu artigo intitula-se “ O sentido da colonização portuguesa: a relação entre colonos nativos africanos no boletim geral das colônias (1933 – 1945)” e busca refletir acerca das aproximações e afastamentos nas relações entre colonizados e colonizadores nas colônias portuguesas na África.

As bandeiras no Estado Novo: o conceito de biodemocracia em A marcha para oeste de Cassiano Ricardo é o nome do próximo artigo da sessão livre. Escrito por Ana Paula Rodrigues, doutoranda em história pela universidade federal do Mato Grosso (UFMT), o texto tem por objetivo discutir o conceito de biodemocracia que é exposto por Cassiano Ricardo.

Fechando a sessão livre, trazemos o artigo de Thiago do Nascimento Torres de Paula, doutor pela Universidade Federal do Paraná (UFPR), que tem como título “Do enjeitado a ouvidor: a trajetória do tenente Joaquim Lino Rangel na freguesia da cidade do Natal, 1760 – 1839”. O objetivo do autor é o de apresentar a trajetória do Tenente Joaquim Lino Rangel.

Ainda compõe neste volume a resenha da obra da obra de Graeme Wood ” A Guerra do fim dos tempos: o Estado Islâmico e o mundo que ele quer” (Cia das Letras, 2017) feita por Katty Cristina Lima Sá, Mestranda em História Comparada pela Universidade Federal do Rio de Janeiro (PPGHC / UFRJ).

No volume 13 da Revista Espacialidades, temos também a entrevista com a professora doutora Márcia Santana Tavares professora e coordenadora do Programa de Pós-Graduação em Estudos Interdisciplinares Mulheres, Gênero e Feminismo – PPGNEIM / UFBA; pesquisadora do Núcleo de Estudos Interdisciplinares sobre a Mulher – NEIM; membro do Observatório pela Aplicação da Lei Maria da Penha – OBSERVE / NEIM / UFBA, que nos falou sobre violência de gênero, a da Lei Maria da Penha e sua relação com o número de denúncias dos casos de violência contra mulher, direitos da mulher e a relação as questões de gênero, relações de poder e espaço na nossa sociedade.

Para finalizar o primeiro dossiê de 2018 a Revista Espacialidades, conta com o corpo documental de fontes históricas em uma de suas sessões. Essas fontes foram catalogadas pelo Programa de Educação Tutorial em História da Universidade Federal do Ceará, tendo como objetivo mapear documentos ligados à compra e venda de escravos no Ceará ao longo do século XIX, entre os anos de 1843 a 1879. O Projeto, intitulado Fundo Documental e Guia de Fontes para a História da Escravidão no Ceará, foi realizado pelos bolsistas do Programa e teve início em 2007, com o mapeamento do corpo documental e catalogação dos mesmos, no qual resultou em fichas / resumo e sistematização desses documentos, concluída em 2012. O projeto catalogou cerca de 12 livros, que se encontram em sua versão original, no Arquivo Público do Estado do Ceará (APEC). É com imenso prazer, e desde já agradecemos ao Programa de Educação Tutorial pela confiança, em especial à Kênia Rios, atual tutora do PET História, à Viviane Nunes e Tayná Moreira, bolsista e egressa, respectivamente, que tiveram salutar importância para esta parceria, que a Revista Espacialidades apresenta aos seus leitores, parte destas fichas / resumos deste primoroso acervo, que possibilita o fomento da pesquisa histórica, dando saber à sociedade deste vil período que macula nossa história.

O editor-chefe e a Equipe editorial da Revista Espacialidades desejam a todos uma boa leitura!

Editor-chefe: Magno Francisco de Jesus Santos

Equipe editorial:

Arthur Fernandes da Costa Duarte – (mestrando do PPGH / UFRN)

Emanoel Jardel Alves Oliveira – (mestrando do PPGH / UFRN)

Jessica Martins Guedes de Souza – (mestranda do PPGH / UFRN)

Lucicleide da Silva Araújo – (mestranda do PPGH / UFRN)

Maria Luiza Rocha Barbalho – (mestranda do PPGH / UFRN)

Matheus Breno Pinto da Câmara – (mestrando do PPGH / UFRN)

Ristephany Kelly da Silva Leite – (mestranda do PPGH / UFRN)

Thaís da Silva Tenório – (mestranda do PPGH / UFRN)


SANTOS, Magno Francisco de Jesus et al. Apresentação. Revista Espacialidades. Natal, v.13, n. 01, 2018. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Gênero, Poder e Espaço / Revista Espacialidades / 2018

As reflexões sobre gênero possuem ligação histórica íntima com o movimento Feminista. De acordo com a historiadora Joana Maria Pedro, o processo de construção da categoria de gênero acompanha a luta por direitos civis e humanos, tendo assumido novas dimensões na conjuntura social da segunda onda do movimento feminista (1960-1980), quando tal conceito emergiu nos estudos na área das humanidades, a partir dos anos 1980.

A noção de gênero foi então sendo desnaturalizada, passando a ser compreendida como um conjunto de normas que orientam as ações dos sujeitos no tempo e nos espaços – processo para o qual contribuíram diversos autores, como Judith Butler, Linda Nicholson e Joan Scott. Os padrões que orientam os comportamentos, inclusive os relativos à noção de gênero, estão situados no tecido das relações sociais e de poder. O mesmo acontece na produção e apropriação dos espaços. Deste modo, nossa proposta com o dossiê Gênero, Poder e Espaço é debater como as categorias de gênero e poder se interseccionam na produção do espaço (quer o espaço material, onde se enquadram categorias como o urbano e rural, a fronteira, o território, o público e o privado, quer o espaço simbólico, onde se encontram o espaço imaginado ou sonhado, as representações artísticas, entre outros). Dentro dessa temática recebemos artigos com temporalidade diversa que articulam a categoria de gênero a outros conceitos, tecendo assim novas narrativas e lançando novos olhares para seus objetos dentro de suas respectivas pesquisas históricas.

Agradecemos imensamente aos membros do Conselho Consultivo que com muita generosidade, celeridade e, acima de tudo, competência, contribuíram com pareceres sérios e consistentes que garantiram a qualidade do presente dossiê “Gênero, poder e espaço”, o qual passamos agora a apresentar.

Abrimos o dossiê com o artigo Operárias da companhia fiação e tecidos pelotense e suas táticas de gênero (1944- 1954) de Eduarda Borges da Silva, doutoranda no Programa de Pós-Graduação em História da Universidade Federal do Rio Grande do Sul (UFRGS), onde através dos processos da Justiça do Trabalho de Pelotas, salvaguardados no Núcleo de Documentação Histórica da Universidade Federal de Pelotas (UFPel), observou-se pleitos de operárias da Companhia Fiação e Tecidos Pelotense, entre 1944-1954, utilizando dos conceitos de ideologia da domesticidade e táticas de gênero, a autora buscou descrever e compreender os dissídios em que o dilema da dupla jornada da trabalhadora (divisão entre a fábrica e o lar), ocorreu e porque estas mulheres operárias, mães, esposas, donas-de-casa apropriaram-se ou aceitaram a imagem de “mulheres sacrifícios”.

Em seguida, temos o artigo intitulado “Pensar pela pena que desliza, falar pela boca que se fecha”: Emília Dantas ribas como a primeira romancista dos campos gerais (paraná, 1949) de Caroline Aparecida Guebert, mestre pelo Programa de Pós-Graduação em História da Universidade Federal do Paraná (UFPR). Neste trabalho a autora propõe uma reflexão sobre a trajetória e parte da obra escrita de Emília Dantas Ribas (1907-1978), que atuou como professora, oradora de rádio e escritora entre as cidades de Ponta Grossa e de Curitiba, no Paraná articulando história, literatura e os estudos de gênero.

O terceiro artigo de nosso dossiê temático é de autoria de Giovanna Carrozzino Werneck, Mestra em Letras pelo IFES / Vitória, que com o trabalho Mulheres e charges políticas: a subversão pelo humor nos espaços públicos busca analisar e dar visibilidade a mulheres que produzem (ou produziram) charges políticas no Brasil, discutindo aspectos relativos aos papéis sociais atribuídos a homens e mulheres e aos estudos de gênero.

O próximo artigo intitulado Venha, venha o voto feminino: embates travados na imprensa periódica oitocentista no Rio de Janeiro de Cristiane Ribeiro Mestranda pelo Programa de Pós-Graduação em História da Universidade Federal de Juiz de Fora, é proposto uma análise da discussão sobre o voto feminino travado no Império do Brasil, circulando nos impressos diários da corte a partir da segunda metade do século XIX, atentando para uma perspectiva das relações de gênero e de poder imbricados nos jornais.

Em seguida com o artigo A cozinha das mulheres: de espaço de domesticação ao de empoderamento a partir de saberes e fazeres culinários as autoras Jamile Wayne Ferreira – graduada em Gastronomia pela Universidade do Vale do Rio dos Sinos e Lara Steigleder Wayne – graduanda em Psicologia pela Universidade Federal de Ciências da Saúde de Porto Alegre analisam a partir da relação com a cozinha de mulheres acolhidas em uma Ocupação em Porto Alegre / RS, o poder e o conhecimento cotidiano das guardiãs de uma cozinha minusculizada pela geração da gourmetização, já que o espaço de comando das cozinhas está normalmente relacionado à construção de gênero, onde as práticas relativas ao ato de cozinhar são ora invisíveis, no caso da cozinha doméstica, ora superestimada, no caso da “alta gastronomia”.

O próximo artigo intitulado Gênero e prisão: os impactos do sistema prisional sobre a desigualdade social e invisibilidade da mulher encarcerada no estado de Alagoas as autoras Bruna Araújo de Melo Ferreira e Ialy Virgínia de Melo Baia, graduandas em psicologia pelo Centro Universitário Tiradentes de Alagoas, analisam o sistema prisional de uma maneira histórica, compreendendo a mulher como vítima da violência e da desigualdade de gênero dentro desse espaço, visto que a prisão muitas vezes culminando no processo de invisibilidade do indivíduo, acaba potencializando essa invisibilidade na mulher, uma vez que esta já vivencia essa realidade socialmente, enfatizando os casos das mulheres que estão em regime fechado no Sistema Penitenciário Feminino Santa Luzia, localizado em Maceió.

Finalizando o dossiê temático, temos o artigo Vozes de mulheres: género e cidadania em Angola de autoria de Willi Cardoso Domingos, Licenciado em Sociologia pela Faculdade de Ciências Sociais da Universidade Agostinho Neto, que analisa as implicações sociais da discriminação de género no exercício da cidadania e participação das mulheres em Angola, onde um diálogo entre a sociedade civil e as instituições do Estado, é fundamental, para dinamizar e ampliar a capacidade de exercício da cidadania e participação das mulheres, bem como para a desconstrução da discriminação das mulheres.

Abrindo a sessão livre do nosso dossiê temos o artigo “Ressonâncias no processo de demolição do palácio Monroe”, de autoria do doutorando em Ciências Jurídicas Políticas Daniel Levy Alvarenga (UAL). No artigo o autor discute questões acerca do patrimônio material e sua dimensão imaterial dentro de uma sociedade. Tomando como objeto de analise a demolição do palácio Monroe, busca-se apresentar como ocorreu a demolição e sua respectiva repercussão dentro do âmbito social.

Em seguida temos o artigo intitulado “Do ideal ao real: a construção de uma representação na obra literária a lenda do cavaleiro sem cabeça (1820)” escrito por Samuel Nogueiza Mazza, mestrando em história pela Universidade Federal de Uberlândia (UFU). O autor discute no presente artigo a obra de Washington Irving, A lenda do cavaleiro sem cabeça, sob a perspectiva da teoria da representação de Roger Chartier, traçando assim um paralelo entre os personagens da obra e o contexto histórico vivido por Irvring.

Seguindo, temos o artigo de Rannyelle Rocha Teixeira, mestra em história pela Universidade do Porto. Seu artigo intitula-se “ O sentido da colonização portuguesa: a relação entre colonos nativos africanos no boletim geral das colônias (1933 – 1945)” e busca refletir acerca das aproximações e afastamentos nas relações entre colonizados e colonizadores nas colônias portuguesas na África.

As bandeiras no Estado Novo: o conceito de biodemocracia em A marcha para oeste de Cassiano Ricardo é o nome do próximo artigo da sessão livre. Escrito por Ana Paula Rodrigues, doutoranda em história pela universidade federal do Mato Grosso (UFMT), o texto tem por objetivo discutir o conceito de biodemocracia que é exposto por Cassiano Ricardo.

Fechando a sessão livre, trazemos o artigo de Thiago do Nascimento Torres de Paula, doutor pela Universidade Federal do Paraná (UFPR), que tem como título “Do enjeitado a ouvidor: a trajetória do tenente Joaquim Lino Rangel na freguesia da cidade do Natal, 1760 – 1839”. O objetivo do autor é o de apresentar a trajetória do Tenente Joaquim Lino Rangel.

Ainda compõe neste volume a resenha da obra da obra de Graeme Wood ” A Guerra do fim dos tempos: o Estado Islâmico e o mundo que ele quer” (Cia das Letras, 2017) feita por Katty Cristina Lima Sá, Mestranda em História Comparada pela Universidade Federal do Rio de Janeiro (PPGHC / UFRJ).

No volume 13 da Revista Espacialidades, temos também a entrevista com a professora doutora Márcia Santana Tavares professora e coordenadora do Programa de Pós-Graduação em Estudos Interdisciplinares Mulheres, Gênero e Feminismo – PPGNEIM / UFBA; pesquisadora do Núcleo de Estudos Interdisciplinares sobre a Mulher – NEIM; membro do Observatório pela Aplicação da Lei Maria da Penha – OBSERVE / NEIM / UFBA, que nos falou sobre violência de gênero, a da Lei Maria da Penha e sua relação com o número de denúncias dos casos de violência contra mulher, direitos da mulher e a relação as questões de gênero, relações de poder e espaço na nossa sociedade.

Para finalizar o primeiro dossiê de 2018 a Revista Espacialidades, conta com o corpo documental de fontes históricas em uma de suas sessões. Essas fontes foram catalogadas pelo Programa de Educação Tutorial em História da Universidade Federal do Ceará, tendo como objetivo mapear documentos ligados à compra e venda de escravos no Ceará ao longo do século XIX, entre os anos de 1843 a 1879. O Projeto, intitulado Fundo Documental e Guia de Fontes para a História da Escravidão no Ceará, foi realizado pelos bolsistas do Programa e teve início em 2007, com o mapeamento do corpo documental e catalogação dos mesmos, no qual resultou em fichas / resumo e sistematização desses documentos, concluída em 2012. O projeto catalogou cerca de 12 livros, que se encontram em sua versão original, no Arquivo Público do Estado do Ceará (APEC). É com imenso prazer, e desde já agradecemos ao Programa de Educação Tutorial pela confiança, em especial à Kênia Rios, atual tutora do PET História, à Viviane Nunes e Tayná Moreira, bolsista e egressa, respectivamente, que tiveram salutar importância para esta parceria, que a Revista Espacialidades apresenta aos seus leitores, parte destas fichas / resumos deste primoroso acervo, que possibilita o fomento da pesquisa histórica, dando saber à sociedade deste vil período que macula nossa história.

O editor-chefe e a Equipe editorial da Revista Espacialidades desejam a todos uma boa leitura!

Editor-chefe: Magno Francisco de Jesus Santos

Equipe editorial:

Arthur Fernandes da Costa Duarte – (mestrando do PPGH / UFRN)

Emanoel Jardel Alves Oliveira – (mestrando do PPGH / UFRN)

Jessica Martins Guedes de Souza – (mestranda do PPGH / UFRN)

Lucicleide da Silva Araújo – (mestranda do PPGH / UFRN)

Maria Luiza Rocha Barbalho – (mestranda do PPGH / UFRN)

Matheus Breno Pinto da Câmara – (mestrando do PPGH / UFRN)

Ristephany Kelly da Silva Leite – (mestranda do PPGH / UFRN)

Thaís da Silva Tenório – (mestranda do PPGH / UFRN)


SANTOS, Magno Francisco de Jesus et al. Apresentação. Revista Espacialidades. Natal, v.13, n. 01, 2018. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

 

Poder, trabajo y rebelión en el mundo rural del siglo XIX | Claves – Revista de Historia | 2018

En este tema central se propuso reunir colaboraciones que abordaran las relaciones entre las formas de ejercicio del poder y la autoridad en diferentes medios rurales durante el siglo XIX, considerando las transformaciones que se produjeron en las formas de trabajo y las manifestaciones de rebeldía, cuestionamiento e impugnación que se produjeron entre las poblaciones campesinas. Sabíamos que una convocatoria de este tenor implicaba afrontar varios desafíos, sobre todo porque suponía atender a muy distintas perspectivas desarrolladas desde la historia económica, la historia política, la historia de la justicia o la antropología histórica, entre otras. También, porque implicaba reconsiderar desde nuevas miradas y conocimientos algunos problemas clásicos de la historia social.

Sabido es que los estudios históricos de los mundos rurales iberoamericanos pasaron por diversas fases, cada una de las cuales no solo aportó un bagaje creciente de conocimientos, sino que también abrió nuevos interrogantes. Sin embargo, un repaso de la abundante bibliografía de las últimas décadas permite advertir que esos estudios cobraron mayor densidad e incidencia en otros campos del saber histórico cuando convirtieron al análisis local o regional en su primordial escala de observación. Las implicancias de ese cambio de perspectivas analíticas fueron vastas. Entre ellas no puede dejar de mencionarse que los enfoques generales, que uniformaban y simplificaban realidades y transformaciones extremadamente diversas, fueron siendo desplazados para iluminar un variopinto espectro de situaciones y procesos de cambio irreductibles dentro de un esquema interpretativo unidireccional. También, que el foco de atención fue dejando de estar centrado casi exclusivamente en el análisis de las grandes explotaciones agrarias, un capítulo central y decisivo en el desarrollo de la historia agraria durante las décadas de 1960 y 1970.1 Leia Mais

Intelectuais, Imprensa e Poder (II) / História.com / 2017

Apresentação [1]

A comunicação de massa tem um domínio sobre a pauta da opinião pública. Ela é um importante instrumento político para convencer a sociedade acerca da legitimidade da agenda de grupos organizados; tratando-se de um elemento que não pode ser negligenciado pelos historiadores dedicados ao estudo de diversos temas como: política, movimentos sociais, economia, dentre outros.

O Brasil, assim como outros países afetados pela crise econômica iniciada em 2008, tem sido palco de eventos como: manifestações, greves, ocupações, dentre outros. Tem havido uma profusão de fatos históricos e a imprensa tem sido um veículo de disputas de narrativas que contribui para sentirmos, cada vez mais, a necessidade de cruzarmos todos os discursos possíveis que apresentam diferentes leituras sobre os acontecimentos, sejam elas confirmando a agenda pautada pelos órgãos de imprensa tradicionais ou a questionando.

As redes sociais possibilitaram que não apenas os grandes grupos econômicos pudessem ter o monopólio sobre as notícias e a formação da opinião pública, mas que, também, intelectuais, trabalhadores, jovens, idosos, a direita, a esquerda, o centro, as feministas, os evangélicos e demais variedades de sujeitos sociais pudessem disputar a “voz do povo”.

E a imprensa e os intelectuais do passado? Como atuavam? Como pensavam? Como eram lidos? Como influenciavam? Como ecoavam? Como se posicionavam? Movidos por estas e demais questões que instigam os estudiosos investigadores das práticas e processos históricos, sociais e culturais, a Revista Discente História.com propôs o Dossiê Temático “Intelectuais, Imprensa e Poder”. (v. 4, n. 8, 2017). Como recebemos muitas propostas para a publicação e considerando os problemas que enfrentamos no início de 2017, resolvemos organizar com esses artigos e resenhas dois números. Tivemos a felicidade de recebermos trabalhos que analisaram de forma “problematizadora” a atuação dos veículos midiáticos e editoriais, bem como dos pensadores em diferentes contextos.

Luiz Mário Burity e Shirley Silva, com o texto “’As tuas horas de lazer, emprega-as no estudo’: a imprensa pedagógica enquanto suporte para a cultura educacional paraibana (1930-1945)”, analisaram experiências educativas que exploraram a imprensa paraibana como veículo de divulgação de uma proposta pedagógica para o estado da Paraíba entre 1930 e 1945.

Hugo Cavalcante, no artigo “Disputas entre a agricultura e a criação de gados no Cariri cearense da segunda metade do século XIX: o liberalismo de João Brígido e o jornal O Araripe”, problematizou os discursos do jornal cearense O Araripe quando este retratava processos criminais envolvendo as esferas econômico produtiva e do cotidiano.

Alex Guimarães, no texto “Sob a pena de Júlia: sociabilidades intelectuais, imprensa e poder no entresséculos (XIX-XX)”, analisou as ações e a produção intelectual de Júlia Lopes de Almeida, que atuou na imprensa e na literatura do Rio de Janeiro entre o final do século XIX e início do século XX.

Pedro Henrique Alves, no artigo “Archimínia Barreto: mulher, negra, protestante, intelectual”, apresenta a trajetória de uma intelectual negra, protestante e de origem pobre que rompia com os estereótipos da intelectualidade das últimas décadas do século XIX e das primeiras do XX.

Além dos trabalhos supracitados, não deixe de conferir as demais seções do atual número da revista: Artigos Livres, Resenhas e História na Sala de Aula. Eles também abrilhantam a contribuição deste periódico para com os debates da historiografia e áreas afins.

Boa Leitura!

Antonio Cleber da Conceição Lemos – Conselho Editorial. Mestre em História pela Universidade Federal de Sergipe. Correio eletrônico: [email protected]

Nota

1. A caricatura de Rachel de Queiroz foi retirada do website Templo Cultural Delfos. Disponível em: http: / / www.elfikurten.com.br / 2012 / 11 / rachel-de-queiroz-dama-sertaneja-das.html?m=1 . Acesso em: 27 abr. 2018.


LEMOS, Antônio Cleber da Conceição. Apresentação. História.com. Cachoeira, v.4, n.8, 2017. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Intelectuais, Imprensa e Poder (I) / História.com / 2017

É com muita satisfação que apresentamos ao leitor e leitora, o Dossiê Temático “Intelectuais, Imprensa e Poder” [1] (v. 4, n. 7, 2017) da Revista Eletrônica Discente História.com. No entanto, antes de qualquer coisa, queremos tornar público nosso pedido de desculpas pelos atrasos involuntários que ocorreram para finalizarmos a primeira edição de 2017.

É difícil fazer funcionar adequadamente uma revista no Brasil, mesmo online, pois existem vários imprevistos e problemas que podem acontecer, especialmente no caso dos integrantes do Conselho Editorial deste periódico. Quando criamos a revista em 2012, ainda éramos todos estudantes do curso de graduação em História do Centro de Artes, Humanidades e Letras (CAHL) da Universidade Federal do Recôncavo da Bahia (UFRB). Hoje, a maioria dos editores já cursou ou está cursando o mestrado e doutorado em Instituições de Ensino Superior (IES) do país. Infelizmente, não conseguimos voluntários para continuar a empreitada, por isso tivemos que continuar o trabalho, nós mesmos, sem acréscimos no corpo funcional estruturante ou suporte pessoal adicional, o que sobrecarrega demasiadamente o grupo fundador de idealizadores deste projeto. Mas, como dar conta das diversas demandas de uma revista acadêmica, sendo estudante de pós-graduação? Como cuidar da revista e ter que, ao mesmo tempo, cursar disciplinas, pesquisar e escrever a dissertação, desenvolver relatórios de pesquisa e qualificação? Estes foram alguns dos dilemas que tivemos que enfrentar entre 2014 e 2018.

O mais importante é que não deixamos o projeto esmorecer. Continuamos um projeto que foi idealizado por cinco estudantes da graduação (Adalton Barbosa, Antonio Cleber Lemos, Elias Santos, Geferson Santana e João Paulo do Carmo), chegamos a alcançar a nota B3 no Qualis Capes, mas obtivemos a nota máxima B4 (Interdisciplinar) na última avaliação (2013-2016) conforme demonstra a plataforma Sucupira. Queremos que a revista continue sendo um espaço de publicação dos artigos e resenhas de estudantes de graduação, graduados, mestres e doutores de todas as instituições do país. Num cenário cada vez mais hierarquizado entre as revistas, onde estudantes de pós-graduação (mestrando e doutorandos) não podem publicar nas seções principais (Artigo Livre e Dossiê Temático), mas apenas nas chamadas “Notas de Pesquisa”. Então, queremos que a Revista Eletrônica Discente História.com continue sendo um espaço de tratamento isonômico entre todos os pesquisadores e pesquisadoras que busquem um espaço democrático de divulgação de suas pesquisas.

Aproveitamos ainda para informar que estamos dando uma cara nova para a diagramação das capas, apresentações, artigos e resenhas. Queremos adequar nosso periódico o máximo possível aos critérios estabelecidos pela área de História do Qualis CAPES. No entanto, não vamos abrir mão de alguns elementos como a não exigência de “resumo” em uma segunda língua, entendemos que nem todas as universidades oferecem cursos de línguas estrangeiras, e que nem todos os estudantes, especialmente os de graduação, ingressam dentro das mesmas condições. Não queremos dizer que o estudante não possa aprender uma língua estrangeira de maneira autodidata, mas também entendemos que nem todos conseguem, devido à desigualdade que impera no sistema de ensino brasileiro, desencadeado pelo fosso socioeconômico imposto e vigente nesse país…

Mas, voltando à proposta de apresentação do Dossiê Temático intitulado “Intelectuais, Imprensa e Poder”, contamos com a colaboração do autor Lucas Bento Pugliesi denominada de “A categoria „índio‟ nos periódicos oitocentistas da Faculdade de Direito de São Paulo”, onde o autor faz uma análise dos discursos dos intelectuais da Faculdade de Direito de São Paulo entorno dos corpos e da categoria “índio”, conforme está expresso no título do artigo. É também interessante notar, as diversas fontes usadas por Pugliesi, demonstrando que aqueles discursos “espera-se refletir como pensamento desses atores sociais que no momento ulterior assumiriam as mais variadas posições na burocracia do Império veio a impactar e responder a questões políticas coevas no que tange a legislação sobre o aldeamento indígena”, diz Pugliesi.

O artigo de autoria de Paulo Alves Pereira Júnior, intitulado de “A cobertura do caso Castro Malta pelo jornal O Paiz e a difusão do ideário republicano no Segundo Império”, vem apresentar e refletir sobre o cenário de crescimento dos periódicos que faziam circular, no país, o ideário republicano. Neste artigo, o leitor encontrará uma excelente análise histórica sobre o desaparecimento de Castro Malta, que foi reportado nas páginas do periódico O Paiz, sem perder de vistas o objetivo de entender as estratégias usadas pelo II Império para fazer circular suas ideias.

Em “Defendendo os interesses pátrios contra os inimigos do Brasil: nacionalismo e educação através do jornal Correio de São Leopoldo (São Leopoldo / RS, 1938-1943)” de autoria do professor Rodrigo Luis dos Santos, tem-se o objetivo de “analisar a interação entre os campos político e intelectual através da imprensa, a partir de um estudo de caso que tem como local o município sul-rio-grandense de São Leopoldo, durante o período mais intenso do regime do Estado Novo, durante os anos de 1938 e 1943”. A proposta da investigação é analisar a atuação intelectual de Carlos de Souza Moraes, no jornal Correio de São Leopoldo, dando especial atenção às suas ideias nacionalistas e aos discursos sobre determinadas raças e grupos étnico-raciais.

Elegemos o artigo “„Opção pelos pobres ou neoconstantinismo às avessas?‟: A imprensa que desvela os desencontros político-eclesiais entre intelectuais da igreja católica no Nordeste brasileiro (1965-1979)” de Osnar Gomes dos Santos para fechar o dossiê. Conforme Santos, a pesquisa “tem por objetivo tratar das disposições político-eclesiais da Igreja Católica, no Nordeste brasileiro, que emergiram na discussão acerca da „opção preferencial pelos pobres‟, encetada em fins dos anos 1960”. O autor faz uso de diversas fontes para entender como os religiosos exerciam suas funções intelectuais no referido recorte temporal da pesquisa, e como seus discursos influenciaram a sociedade – e o próprio Estado – sobre determinadas questões.

Também queremos convidá-los a visitar as seções Artigo Livre, História na Sala de Aula e Resenha. Apesar de todos os problemas que enfrentamos ao longo de 2017 e início de 2018, fizemos um esforço, junto aos pareceristas que nos auxiliaram durante a edição, para selecionar bons artigos e resenhas de pesquisadores graduados, graduandos, mestres, mestrandos, doutores e doutorandos de diversas IES do país.

Vida longa à Revista Eletrônica Discente História.com!

Boa leitura!

Nota

1. A caricatura do escritor baiano Jorge Amado que consta na capa da presente edição é de autoria de Tiago. Disponível em: https: / / br.pinterest.com / pin / 333759022358129191 . Acesso em: 23 mar. 2018.

Geferson Santana – Editor Gerente. Mestre em História pela Universidade Federal de São Paulo (UNIFESP / FAPESP). Correio eletrônico: [email protected].


SANTANA, Geferson. Apresentação. História.com. Cachoeira, v.4, n.7, 2017. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Cultura e Poder | Em Perspectiva | 2017

As práticas culturais do social se constituem nas relações de poder, no sentido que a cultura é construída em um jogo de tensão a partir do modo de viver e de sentir dos sujeitos situados em suas múltiplas temporalidade e espacialidades.

Neste número, a revista Em Perspectiva reuniu trabalhos que têm como foco as experiências dos sujeitos como campo de conflito, marcadas pelas inúmeras táticas e estratégias de poder, enfatizando o desenvolvimento de reflexões acerca da escrita, da oralidade e da imagem. Leia Mais

Terra, Memória e Poder / Revista Trilhas da História / 2016

A Revista Trilhas da História chega ao seu sexto volume contribuindo com a socialização do conhecimento cientifico e como periódico democrático, capaz de proporcionar o diálogo da História com outras disciplinas humanas.

A organização do Dossiê Terra, Memória e Poder é fruto de trabalhos livres e confeccionados, também, para o IX Ciclo de Palestras “Terra, Memória e Poder”, realizado em 2016, no campus de Três Lagoas, Universidade Federal de Mato Grosso do Sul. O Ciclo de Palestras teve como intuito proporcionar trocas de saberes entre comunidade interna e externa à universidade, explicitando o diálogo no fazer de práticas de ensino, pesquisa e extensão que contribuam para a compreensão das Ciências Humanas como fruto da ação humana no tempo e instrumento de transformação do meio em que vivemos. O tema “Terra, Memória e Poder” aponta para aos desafios de uma discussão em que, na tessitura de outras histórias, seja possível contemplar reflexões que ultrapassem os muros da academia chegando ao chão da terra e às memórias como constructo da história, assim como às tramas do poder em suas várias facetas, apontando para outros caminhos.

Assim, Gilmar Arruda, conferencista de abertura do IX Ciclo de Palestras, em seu artigo “Memórias e paisagens soterradas na transformação da natureza em terra” retrata a transformação da natureza em terra, englobando a participação de sujeitos sociais neste processo em que denotam a formação de uma memória coletiva. O autor também aborda as paisagens e memórias presentes que necessitam do aval público para aparecerem.

Cássia Queiroz da Silva, também participante do IX Ciclo de Palestras, nos apresenta a resistência de mulheres e homens pobres e livres em Sant’Anna do Paranahyba no século XIX. As fontes utilizadas pela autora são narrativas literárias, correspondências oficiais, livros de Coletoria e inventários referentes ao sul da província de Mato Grosso, no século XIX.

“Os Processos Crimes Como Fonte Histórica: Possibilidades e Usos Na Construção da História do Sul da Província de Mato Grosso” é o artigo de Rejane Trindade Rodrigues, também palestrante no IX Ciclo de Palestras. A autora defende os processos crime como fonte histórica capaz de analisar o Sul de Mato Grosso oitocentista. Para tanto, ela discorre sobre um vasto campo historiográfico que lhe proporciona fundamentação para firmar suas perspectivas, sobretudo quando afirma que os processos crime são fundamentais para compreender o cotidiano e o poder que envolve escravizados, libertos e pobre livres em Sant’Anna do Paranahyba.

Em “Colonização pela ‘pata da vaca’: apontamentos sobre ocupação, migração e precarização da mão de obra rural na Zona da Mata Rondoniense”, Carlos Alexandre Barros Trubiliano e Kamonni de São Paulo examinam o processo de latifundiarização da terra e a precarização da mão de obra rural, sobretudo na Zona da Mata Rondoniense, no Estado de Rondônia. No texto, os autores analisam alguns programas do Estado, como a imigração estimulada por programas de assentamento; o Poloamazônia e o Plano de Desenvolvimento Nacional, que visavam o estimulo econômico para a diversificação da balança comercial regional.

Luiz Carlos Bento, palestrante do IX Ciclo de Palestras, em “História, memória e poder na história da historiografia brasileira” busca evidenciar como a questão nacional e os debates sobre a educação no país fundem-se no pensamento de Manoel Bomfim. O autor defende que os textos, substancialmente os ensaios históricos de Bomfim da década de 1920, dialogam criticamente com o projeto de escrita da história do Brasil produzido pelos institutos, colocando-se como uma antítese dessa cultura historiográfica.

Em “Energia elétrica, memória e poder: substratos para um debate necessário”, Andrey Minin Martin, palestrante no IX Ciclo, aborda o Complexo Hidroelétrico do Urubupungá e salienta que o setor hidroelétrico é rico em memórias, sobretudo quando se considerada o emaranhado de sujeitos, agentes e interventores, no público e privado, que formulam essas memórias, que também podem ser apropriadas e reelaboradas para a manutenção do poder.

Em “Perspectivas históricas: Adam Schaff e a pós-modernidade”, Luiz Cambraia Karat Gouvêa da Silva tem como intuito discutir dois conceitos basilares na construção do conhecimento histórico: verdade e subjetividade. Para tanto, o autor se utiliza das ideias defendidas por Adam Schaff para abarcar as discussões da cientificidade da história e o subjetivismo relativista dos presentistas, e o pósmodernismo como é compreendido por Perry Anderson.

A construção do Mal no medievo é abordada por Caio Alexandre Toledo de Faria na seção “ensaio de graduação”, no qual faz uma retomada das origens do Mal na Antiguidade Clássica e Oriental. Além disso, a forma como a Igreja impunha o medo para controlar as pessoas, sobretudo pelo imaginário coletivo, também é abordado no ensaio.

A resenha de Luan Gabriel Silveira Venturini convida o leitor a perceber a história de alguns movimentos de esquerda na luta armada contra a ditadura civil-militar brasileira. A entrevista com o historiador Paulo Roberto Cimó Queiroz, realizada pela equipe do PET-História, encerra este número.

Esperamos que este novo número da Revista agrade aos leitores e leitoras e que possam aproveitar os debates oferecidos pelos autores e autoras, evidenciando este periódico como espaço de discussões historiográficas.

Lembramos, por fim, que a revista está aberta ao recebimento de trabalhos em fluxo contínuo.

Boa leitura!

Eduardo Matheus de Souza Dianna

José Walter Cracco Junior

Vitor Wagner Neto de Oliveira

Três Lagoas-MS, outono de 2017


DIANNA, Eduardo Matheus de Souza; CRACCO JUNIOR, José Walter; OLIVEIRA, Vitor Wagner Neto de. Apresentação. Revista Trilhas da História. Três Lagoas, v.6, n.11, jul. / dez., 2016. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Oralidade, Escrita e Poder no Império Romano / Politeia: História e Sociedade / 2016

O que espero, não é um discurso em forma, quer dizer,

defensivo e fechado em si mesmo, um discurso que procure

antes de mais esconjurar a crítica, mas uma apresentação

simples e modesta do trabalho realizado, das dificuldades

encontradas, dos problemas etc.

Bourdieu

Bourdieu, em 1987, na contramão da ordem estabelecida para a produção científica, afirmou que a apresentação dos resultados de uma pesquisa não deveria ser um show, mas um encontro de estudiosos dispostos ao diálogo. O temor e a ansiedade, neste sentido, tomam parte desse encontro. O que não significa elevar muros para evitar a crítica, pelo contrário, é preciso sair do conforto do pensamento conformado para produzir o novo. O dossiê, “Oralidade, escrita e poder no Império Romano”, balizado por esta perspectiva, apresenta algumas reflexões a fim de contribuir com o debate sobre o tema.

Sob a influência da Nova História Cultural, há uma produção historiográfica que privilegia a cultura escrita como objeto de estudo, em especial, os processos de recepção, apropriação e ressignificação. Entre os marxistas, principalmente os gramscianos, predominam as análises sobre a escrita e os modos de comunicação como instrumentos de controle social ou de hegemonia das classes dominantes. Dessas correntes surgiram variadas formulações teóricas para pensar a relação entre linguagem e poder, tal como se expressa nas abordagens aqui apresentadas.

O dossiê começa com o artigo de Ana Teresa Marques Gonçalves e Thiago Eustáquio Araújo Mota, “De Enéias indiges a Augusto divinizado: as temporalidades narrativas do épico e as predições do Fatum na Eneida de Virgílio”. A autora e o autor elaboram uma análise acurada da fonte, a partir de bibliografia especializada, para discutir como a produção escrita, durante o Principado, cumpriu importante papel na construção da legitimidade divina e ancestral dos governantes oriundos da Domus Iulia.

O artigo coloca em evidência o repertório de textos escritos que repercutiram, no Principado, a imagem do “divino ancestral Eneias” e sua vinculação com a casa de Otávio Augusto. Além de destacar autores e poetas como Tito Lívio, Dionísio de Halicarnasso e Ovídio, oferece uma boa reflexão sobre o registro da lenda troiana no Fórum de Augusto, na Ara Pacis e no Edifício de Eumachia.

Para analisar a Eneida, a autora e o autor discutem o sentido da divinização / consecratio no sistema religioso e político romano, bem como as temporalidades da narrativa, o fatum e o enlace entre o mito troiano e a história de Roma. Fica demonstrado que a consecratio beneficiava o Imperador vivo e buscava legitimidade na memória do morto; que a apoteose era culturalmente aceita entre cristãos e pagãos; que a divinização de Eneias, como ancestral de Otávio Augusto, contribuiu para a legitimação de um novo tipo de poder em Roma, o poder exercido pelo Princeps, além de servir como parâmetro para o culto aos “imperadores póstumos”. Tanto o epíteto indiges quanto o sentido da palavra herói, utilizados para caracterizar Enéias na obra de Virgílio, também ocupam espaço no artigo. A tradição clássica é retomada para explicar por que o Poeta empregou tais termos e preferiu indiges ao pius.

Enfim, é interessante notar como os mitos, preservadas por meio da oralidade, deram origem a textos escritos, elaborados dentro do rigor estético dos variados gêneros. O destino de Eneias e sua vinculação com a gens Iulia foi “objeto de grande investimento durante o principado,” e, sem dúvida, revela o uso da escrita e da oralidade em prol de um discurso político legitimador da domus Iulia.

No segundo artigo, “Josefo revisitado: interpretações historiográficas da obra de Flávio Josefo”, Alex Degan se propõe a realizar uma tarefa hercúlea e o faz com rigor, discutindo as interpretações contemporâneas da obra do historiador e as diversas leituras que dessas resultaram. O artigo está organizado de forma articulada em duas partes: os debates em torno de Flávio Josefo, enquanto historiador e fonte, e seu lugar dentro da tradição literária greco-romana e judaica.

Na primeira parte, Degan trata de evidenciar como as controvérsias religiosas e políticas contemporâneas influenciaram os estudos sobre Josefo. Das interpretações é possível verificar três linhas de análise: uma que considera a fonte importante, mas problemática em função das implicações políticas e ideológicas do historiador com a elite de Jerusalém e com os Flávios; outra que o desqualifica como fonte e historiador; uma mais atual, desenvolvida na virada do século XX, refletida na publicação dos trabalhos de Henry St. John Thackeray. Esta busca superar os juízos morais sobre Flávio Josefo e analisar as circunstâncias dos seus escritos.

Degan também chama a atenção para a composição da obra de Josefo e do seu contexto na região da Palestina, além de destacar os compromissos políticos do autor. Já na segunda parte do artigo, algumas questões são problematizadas, como as contribuições das obras de Josefo para a produção literária da segunda metade do século I d. C., seu diálogo com a tradição literária grecoromana e judaica e o público que pretendeu alcançar.

O nome híbrido, Flavius Josephus, é lembrado como expressão da natureza da sua obra, que “equilibra, mistura e reconcilia tradições.” Há ainda o cuidado em pontuar as singularidades dos escritos, sem perder de vista sua inserção numa tradição que inclui Fílon de Alexandria, a versão dos LXX, Políbio e Tucídides. Neste sentido, Degan afirma que Josefo preservou elementos gregos e judaicos, mas produziu uma obra original, pois inovou com a ação da providência divina e a noção de povo eleito em suas histórias. Fica posto que os escritos de Josefo foram marcados pelas relações que ele estabeleceu com o poder, tanto quanto as interpretações de sua obra foram influenciadas pelos conflitos ideológicos contemporâneos.

O terceiro artigo, “As relações entre escrita e oralidade na obra de Apuleio de Madaura”, de Sônia Regina Rebel de Araújo, desloca o debate da Palestina para a Província da África, revelando um Império Romano dilatado e culturalmente diverso. A autora analisa duas obras de Apuleio – Apologia e O Asno de Ouro – para demonstrar a importância da erudição oriunda dos livros e a articulação entre o oral e o escrito na África pertencente ao Império, no século II d.C. Seus estudos estão estruturados a partir do arcabouço teórico da literatura comparada e História.

Apuleio é apresentado como um homem erudito, nascido na cidade de Madaura, província da África, que estudou retórica em Cartago, escreveu diversas obras e respondeu um processo criminal em 159 d.C. Ele foi acusado de praticar magia para seduzir uma viúva rica e de envenenar seu filho. Este fato é narrado em Apologia, obra que reproduz o discurso de autodefesa de Apuleio, pronunciado no tribunal de Sabratha diante o procônsul da África, Cláudio Máximo.

Ao analisar a Apologia, Araújo evidencia que Apuleio usou duas estratégias para se defender, articulando o oral e o escrito. Primeiro, buscou distanciar-se dos seus detratores, qualificando-os como bárbaro, apresentando-se como um filósofo culto e lendo cartas e livros em voz alta no tribunal. Segundo, recorreu ao seu repertório de erudição para demonstrar que era da mesma estirpe intelectual do magistrado romano que o julgava, Claudio Máximo.

Já no estudo sobre o Asno de Ouro, Araújo restringe sua análise ao livro XI do romance e discute “a função da narrativa sobre o culto de Ísis e a longa iniciação de Lúcio [personagem central] neste culto e a seguir no de Osíris.” Ao fazê-lo, privilegia temas como cidadania e escravidão, religio e superstitio, cultos estrangeiros e magia. A autora reflete sobre a importância da erudição em Apuleio e como o romance denota uma posição ideológica sobre a condição do escravo, a magia e os cultos oficiais no Império Romano.

O artigo que encerra o dossiê, “A escrita, a oralidade e a construção do poder eclesiástico no Orbis Romanorum”, coloca em discussão a habilidade do episcopado em apropriar-se, de forma sui generis, da tradição literária pagã e criar formas de comunicação oral para construir a hegemonia da Igreja cristã na Antiguidade tardia. O corpus da pesquisa é constituído por um conjunto de discursos produzidos por bispos influentes de distintas regiões do Império e é analisado a partir do referencial teórico de Pierre Bourdieu.

A análise da documentação rompe com cânones há muito estabelecidos, pois torna evidente que a unidade da Igreja cristã primitiva é um mito elaborado no âmbito da religião, que a definição de uma ortodoxia produziu campos de disputa e que um Império dividido entre cristãos e pagãos é mais uma projeção das contendas modernas do que uma realidade dos séculos IV e V d.C. Contudo, a elite intelectual da Igreja, formada por seus bispos mais eruditos, recorreu a estratégias variadas para formular e divulgar a doutrina, fixar uma identidade para o “fiel” e criar um sistema de interpretação do mundo legítimo e dominante.

O artigo, organizado em três partes, aborda a tradicional educação romana, a ação do episcopado e o uso que este grupo fez da erudição pagã em benefício da “nova fé”. Fica posto que as formas literárias tradicionais foram adaptadas para acomodar o conteúdo cristão e que os bispos criaram recursos para apresentar os interesses particulares da Igreja como universais e comuns aos diversos grupos sociais no Império Romano, convertendo complexas formulações doutrinárias escritas em expressões orais acessíveis, como os hinos e homilias.

O artigo ainda destaca o trabalho de alguns bispos na afirmação do poder eclesiástico e na formulação de uma imagem singular do cristão, por meio de sermões, epistolas oficiais e textos exegéticos. A crônica de Eusébio de Cesareia, o episódio envolvendo Ambrósio de Milão e Teodósio, além da publicação da lei escolar – promulgada por Juliano e censurada por Gregório Nazianzeno – são excelentes expressões do quanto o episcopado soube utilizar a cultura letrada em prol da Igreja universal.

Por fim, os artigos aqui apresentados são resultado de pesquisas desenvolvidas até o ano de 2013 e, sem dúvida, desde então muito se produziu. Contudo, optamos por manter o dossiê tal como escrito à época por considerar que os textos disponibilizados são parte dos primeiros estudos realizados no Brasil sobre escrita e oralidade no Império Romano.

Marcia Santos Lemos–  Professora da Universidade Estadual do Sudoeste da Bahia (Uesb) Doutora em História pela Universidade Federal Fluminense (UFF) E-mail: [email protected]


LEMOS, Marcia Santos. Apresentação. Politeia: História e Sociedade. Vitória da Conquista, v.16, n. 1, 2016. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Poder e Governança na Idade Média / Locus – Revista de História / 2016

A governança tem ocupado lugar de destaque nos debates sobre a Idade Média. Faz já algum tempo que historiadores de diferentes regiões do Brasil tem se debruçado sobre a intricada teia das relações de poder, seja abordando os poderes locais, laicos e eclesiásticos, seja investigando o poder dos monarcas medievais, ou ainda – talvez principalmente – os diálogos, negociações, intrigas e disputas que permeavam as relações entre os diferentes poderes que constituíam o organismo social.

Os diferentes artigos deste dossiê partem da premissa que a governança não é um atributo exclusivo do Estado e que, portanto, não está centrada numa pessoa ou instituição. Tal nos permite tornar público o resultado de pesquisas que ressaltam a dimensão plural do poder sem, contudo, cair na tentação de uma arraigada atomização, ou de um poder descerebrado. Volta-se, assim, para os mecanismos que tornam possível uma sociedade corporificada, na qual as relações e imbricamentos entre as diferentes partes possibilitam a existência do todo.

Nesse eixo de debate, há uma compreensão do poder e do Estado que não se alheia da dimensão social. As instituições sociais, sejam elas jurídicas ou administrativas, sejam elas práticas costumeiras, são vistas segundo uma lógica que, desde Michel Foucault, compreende o Estado e a sociedade como campo de disputas. Não se trata, desse modo, de separar em dualidades complementares ou oposições – tal como o faz Roger Chartier ao enfatizar uma história que se produz entre as práticas e as representações –, mas sim, lidar com a história e a vida social em suas dinâmicas, em seus jogos de encontros e disputas, sendo as formas elementos plenos de sentido e, portanto, partes da vida e da existência.

Muito embora haja esse encontro, os textos aqui apresentados alargam a compreensão da Idade Média, enfrentando as compreensões mais simplistas e as leituras fáceis. Daí uma conversa em comum que se articula em diferentes pontos de vista e que busca apresentar novas possibilidades para lidar com a ideia do poder no mundo medieval.

Wesley Corrêa, problematizando o conceito de feudalismo bastardo, analisa as formas com as quais os homens viviam os conflitos e representavam suas ações na Inglaterra da segunda metade do século XV. O papel da cultura política e sua relação com as práticas são, neste artigo, fundamentais para compreender a noção de governo presente na documentação do parlamento e na representação particular de Fortescue. Já André Pereira Rocha se volta para os conceitos latinos de auctoritas e potestas, pertencentes ao mundo político romano, no intuito de analisar o discurso legitimador do poder papal num período de aumento dos conflitos entre a monarquia francesa e o papado. Debruçando-se sobre documentação pontifícia de Bonifácio VIII (1235-1303) e Clemente V (1264-1314), o autor analisa as tentativas de reforçar a posição hierocrática difundida pela Igreja. Em ambos os casos, a dimensão conceitual é pensada a partir de relações de poder que nos permitem vislumbrar possibilidades de experiências concretas da dinâmica social. Abre-se aí uma possibilidade de pensar, em continuidade com as análises de Marc Bloch, Ernst Robert Curtius, Ernst Kantorowicz e Jacques Le Goff – para citar apenas alguns dos pensadores clássicos que renovaram a compreensão da temporalidade medieval – a amplitude da ressonância das instituições sociais dessa “longa Idade Média”.

Lukas Gabriel Grzybowski, ao dar especial atenção à fortitudo, analisa as virtudes e seu papel na fundamentação e significação da translatio imperii dos romanos aos povos germânicos tomando como base os textos do bispo Otto de Freising. Segundo sua análise, as reflexões sobre as redes de poder privilegiam o estudo dos diferentes agentes, perpassando o poder central figurado no monarca, a administração senhorial laica e a prática governativa vivenciada pelos variados representantes e governantes da Igreja. Nesta perspectiva, no artigo “Fundamentos do poder imperial em meados do século XII”, são destacados os povos germânicos e seu contato com a cultura romana no período de desintegração da hegemonia latina sobre a região do Mediterrâneo a fim de apreender a contribuição dos povos germânicos no desenvolvimento do imperium medieval na primeira metade do século XII.

No que se refere às relações estabelecidas entre os poderes régio e senhoriais, Fabiano Fernandes analisa a Inglaterra na segunda metade do século XV a partir do conceito de poliarquia, ou seja, de um governo partilhado do reino. Tal aspecto da governança implicava na tentativa, por parte da nobreza, de limitar a jurisdição do rei em terras nobiliárquicas, o que por sua vez fomentava aquilo que era tratado nas fontes régias como violação da paz real, implicando em crime de lesa-majestade. É nesta perspectiva que o autor analisa a importância do discurso da violação da jurisdição régia na construção do Estado de consenso, que delimitava quais seriam os deveres dos súditos para com a realeza e quais os limites do que seria considerado como um atentado à majestade real.

Maria Filomena Coelho ao abordar o fortalecimento da aristocracia cristã em Portugal enfatiza o entrelaçamento dos mosteiros cistercienses à monarquia e à nobreza, no período que se estende da segunda metade do século XII à primeira metade do XIII. A autora estuda o poder monárquico e nobiliárquico acrescentando outro agente, os mosteiros cistercienses, que na época tinha grande protagonismo. Problematizando os conceitos de jurisdição e de instituição, a partir do modelo político corporativo, pretende-se entender a construção das instituições em sociedade e em estreita relação com as redes políticas que constituem a aristocracia cristã.

Sem abandonar a ideia de uma secularidade do poder monárquico, incontestável do ponto de vista funcional, Stéphane Boissellier questiona as teses que “secularizam” exageradamente a monarquia portuguesa tardomedieval, confundindo laicidade e sagrado não religioso. Há, nas monarquias medievais cristãs, elementos de um sagrado não religioso – como as virtudes naturais dos monarcas, por exemplo – que não podem ser reduzidos a esquemas clericais. De acordo com o autor, nos discursos e nas imagens de justificação do poder, a monarquia faz uso de símbolos religiosos para utilizá-los em objetivos tendencialmente profanos. Assim, competências de utilidade social são eminentemente suscetíveis de sacralização, tal como pode ser observado na maior parte dos rituais políticos reais (investiduras vassálicas, prestações de juramento, recepções de embaixadas), na função régia do exercício da justiça, da polícia e da proteção do reino contra os inimigos.

Inúmeras vezes analisado como elemento de uma metáfora política de grande difusão e em analogia com o poder, o corpo é tratado no artigo de Marcella Lopes Guimarães como uma realidade material e corruptível, que merece cuidados específicos. Cuidados estes que não escaparam aos olhos de D. Duarte, que adverte os súditos da moderação, autodisciplina e temperança. Além do cultivo das virtudes, a preocupação do governante com a matéria corruptível de seus súditos pode ser vista na coleção de numerosas mezinhas e na afirmação de que o bem-estar deveria ser permeado por uma série de cuidados com o corpo, que incluíam o consumo de vinho e água, entre outros elementos que evidenciam a preocupação do monarca com a morada terrena e efêmera das almas.

No artigo sobre barregania em Portugal, Denise da Silva Menezes do Nascimento analisa as relações ilícitas entre mulheres e leigos casados. Segundo a autora, tal como Cristo perdoou o apóstolo Pedro e reiterou seu lugar na comunidade dos fiéis, também o monarca devia perdoar as mulheres que se desviaram do modelo de casamento estabelecido e que, arrependidas, desejavam se apartar definitivamente do crime de barregania. Assim, a misericórdia de D. João II possibilitava não apenas a salvação da vida do acusado mas também a remissão do erro cometido, posto que aos pecadores foi concedida a possibilidade de se adequar às regras do matrimônio estabelecidas pela Igreja a fim de que a moral e a salvação fossem preservadas.

Já o artigo de Leandro Rust analisa o uso da força afastando-se do senso comum que concebe a clerezia completamente alijada da guerra e a Idade Média submersa na violência e na desordem. Estudando casos de uso da espada por bispos entre os séculos IX e XI, o autor evidencia que no Medievo vivenciar a paz não significava renunciar a agressão, tal como a violência não era sinônimo de uso da força. Para pensar a violência, parte integrante do cotidiano e da ordem, é preciso analisar cuidadosamente os desvios à norma, a perturbação da res publica, a ação ilegítima. Guerra, portanto, não pode ser substituída aleatoriamente por violência, assim como a Paz não pode ser traduzida pela ausência de conflito.

Essa pluralidade de temas e de questões dão ao dossiê “Poder e governança na Idade Média” um aspecto amplo, o que justifica, por fim, a publicação da tradução de um texto de Odo Marquard. De um lado, o texto desse filósofo alemão, por si só, merece leitura, uma vez que se trata de um autor realmente importante no cenário intelectual do pós-Guerra. De outro, ele coloca em debate um conjunto de questões que visam ao enfrentamento da própria ideia de homem, conforme ela foi sendo engendrada pela sociedade e pensamentos ocidentais. Assim, não se pode ler seu texto senão a partir das dimensões mais amplas das questões que ele mobiliza: a ideia de homem e de Deus, a história como teodiceia, a sinceridade da confissão, a crise da culpa e a possibilidade do perdão e da desculpa diante de um tribunal que julga os homens. Mesmo que Marquard se volte mais diretamente para o século XVIII, trata-se de um século XVIII que arrasta em si a tradição e estende-se também a nosso mundo. Há de se considerar também as ironias de suas datações, em semelhança como fazia Marc Bloch ao dizer não ser um medievalista ou quando Jacques Le Goff e Georges Duby, imbuídos de análise requintada, encontravam em mapas e sobrevoos da França, no século XX, os pontos de percepção da sociedade medieval. Por fim, como afirma Marquard, sua palestra convertida em texto é operação de um dublê e, ao mesmo tempo, um texto-dublê.

Para não nos delongarmos mais, restaria apenas enfatizar que é a partir da capacidade de instigar novas questões que a história vem se renovando e, nesse começo do século XXI, esperamos que essa contribuição da Locus produza frutos por despertar possibilidades de debate. Assim, menos engajados em uma história repleta de certeza, novamente apostamos aqui na herança da dúvida e do encontro da pluralidade da dúvida que leva à investigação.

Denise da Silva Menezes do Nascimento – Organizadora do dossiê


NASCIMENTO, Denise da Silva Menezes do. Apresentação. Locus – Revista de História. Juiz de Fora, v.22, n.1, 2016. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Cultura, política e poder / Fato & Versões / 2015

O presente número da Fato &Versões acompanha o perfil proposto pelo Corpo Editorial e já delineado nas publicações anteriores, de privilegiar a pluralidade de pesquisas e produções do cenário historiográfico. Composto por seis artigos, é articulado em um Dossiê temático Cultura, política e poder, que reúne trabalhos com o objetivo de um diálogo entre os múltiplos olhares e fontes do político na atualidade.

A História Política tem apresentado um novo impulso a partir de um processo de inovação; ao incorporar novos objetos e novas abordagens, visou compreender a política e as relações de poder de forma mais ampliada, relacionando-as com questões culturais, econômicas e sociais e promovendo um diálogo com outras áreas do conhecimento.

As relações entre a história cultural e política propiciaram o surgimento de uma nova safra de pesquisas, que retomaram, por novos prismas, temas clássicos tais como a República Velha, o “nacionalismo”, o “populismo” e a ditadura militar, além de terem contribuído na construção de novos recortes e abordagens, os quais ampliaram as perspectivas de análise sobre as relações de poder e a política na sociedade brasileira.

Nesse sentido, este número reúne artigos escritos por pesquisadores vinculados a diferentes centros de pesquisas e universidades brasileiras, e propõe reflexões sobre o político a partir da reunião de diferentes abordagens teóricas e metodológicas.

O artigo de Renato Jales Silva Junior, Cultura, Política e Espaço Urbano: algumas considerações sobre as transformações nos lugares da cidade (Uberlândia 1960-2000), apresenta uma discussão sobre as mudanças vividas pela população de Uberlândia no processo de reestruturação urbana do período; o autor demonstra como as intervenções foram questionadas e reelaboradas por muitos trabalhadores que viviam naqueles lugares, no seu fazer-se diário como sujeitos, e com outras estratégias lutaram pelos seus interesses colocando outros valores em disputa.

O texto de Rodrigo Francisco Dias, O líder político e o povo no filme Céu Aberto (1985), de João Batista de Andrade, analisa as imagens do líder político e do povo no documentário Céu Aberto (1985), do cineasta brasileiro João Batista de Andrade, por meio de um diálogo com o “lugar” do documentarista. Demonstra a importância de se levar em conta a trajetória artística, política e intelectual do cineasta, para interpretar o modo como representou a realidade política do país no filme; o “lugar” de onde ele não simplesmente filma, mas escreve à sua maneira uma parte da recente história do Brasil.

Talitta Tatiane Martins Freitas, em seu texto A visibilidade do que não se quer ver: identidades homoafetivas sob as lentes das telenovelas do Brasil contemporâneo, discute o impacto da visibilidade homoafetiva, dialogando com a pesquisadora Joan W. Scott. Analisando personagens homossexuais apresentados em telenovelas, a autora busca problematizar a naturalização do dualismo homossexualidade / heterossexualidade na atualidade, demonstrando como tais conceitos são historicamente variáveis.

O texto de João Marcos Leitão, A serviço do Povo para a grandeza da pátria: o Partido Republicano Democrático – um partido protestante, apresenta uma discussão sobre a presença sócio-política do Protestantismo Brasileiro, em meados dos anos 40, e mais especificamente sobre os esforços de organização de um Partido Político de matriz protestante: o PRD. O autor procurou demonstrar a identidade protestante do partido, refletindo acerca do processo de inserção sócio-política daquele grupo na sociedade brasileira.

Em O processo de Restauração Católica no Brasil na Primeira República, José Pereira de Sousa Junior discute o movimento de redefinição do catolicismo brasileiro frente ao Estado republicano sob princípios laicistas; o autor demonstra como, instituída a nova ordem jurídica, o catolicismo brasileiro empreendeu estratégias que minimizassem o ônus do seu alijamento político.

O artigo de Márcio Ananias Ferreira Vilela, A Justiça do Trabalho durante o regime civil e militar: a Igreja Presbiteriana e a invenção do comunismo, analisa o processo de vigilância que permeou as instituições da sociedade durante o regime militar, em especial a Igreja Presbiteriana do Brasil; tendo como base ações trabalhistas, o autor demonstra como, ao longo daquele período, a instituição perseguiu e expulsou pastores e professores de seminários que divergiam de sua posição teológica oficial, acusando-os de comunistas.

Henry Marcelo Martins da Silva

Dolores Puga Alves de Sousa

Editores


SILVA, Henry Marcelo Martins da; SOUSA, Dolores Puga Alves de. Apresentação. Fatos e Versões. Campo Grande, v.7, n.14, 2015. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Igreja e Poder / Tempo Amazônico / 2015

É com satisfação que apresentamos o mais novo número da Revista Tempo Amazônico, revista eletrônica semestral da seção Amapá da Associação Nacional de em História (ANPUH / AP). Esforçando-se para dar conta da multiplicidade dos estudos de história social, exploramos através de um Dossiê o tema “Igreja e Poder”, incorporando diversas abordagens e problemáticas. Nesse sentido, no primeiro artigo do dossiê, Alexandre Guilherme da Cruz Alves Junior discute o fundamentalismo cristão nos Estados Unidos do início do século XX, analisando a ativa participação de líderes fundamentalistas na condenação do professor de escolas básicas que ensinava a teoria darwinista, John Scopes. No artigo seguinte, Claudirene Bandini observa criticamente a relação poder, gênero e religião. Através da trajetória de autonomia de uma representante da Igreja Universal do Reino de Deus, a autora analisa o neopetencostalismo e a afirmação do poder e desigualdade de gênero no campo da religião.

O artigo “Ver, julgar, agir, rever e celebrar”, do pesquisador Jesus Marmanillo Pereira, inicia uma sequência de trabalhos que persegue questões político-religiosas da Igreja Católica contemporânea no Brasil. Em destaque neste texto estão os aspectos históricos e sociais que fornecem a base explicativa para as ações dos setores progressistas da igreja Católica em São Luís-MA durante a década de 1980. Dentro desse mesmo contexto, Emanuelle Kopanyshyn estuda a ação política da Igreja Católica na diocese de Assis, interior de São Paulo durante a ditadura militar. Na contramão de alguns estudos a autora considera a heterogeneidade do clero católico e as peculiaridades como pressupostos fundamentais para compreender a relação religião, instituição e política nessa conjuntura nacional. O artigo que fecha esse bloco, de autoria das pesquisadoras Tatiana Pantoja Oliveira e Norma Iracema de Barros Ferreira, trata das relações de poder estabelecidas entre Igreja Católica, Estado e escolarização no ex-Território Federal do Amapá, por meio da investigação de fontes primárias do corpo documental do Jornal A Voz Católica e dos Livros do Tombo da Prelazia de Macapá.

Outro bloco de artigos, reúne pesquisas mais remotas, entretanto, ainda referentes a Igreja Católica. O pesquisador Lucas Gesta Palmares Munhoz de Paiva escreve sobre a cidade de Antioquia, um dos grandes centros missionários cristão na antiguidade, e seus vínculos com a formação do cristianismo. Marcelo Lachat, discute a presença da filosofia estoica em diversas obras dos séculos XVI e XVII, em especial de Justo Lípsio e Francisco de Quevedo, ressaltando a conciliação – recorrentemente crítica – entre o estoicismo e a religião cristã.

Rossana G. Britto ao estudar os visitadores das naus, um cargo da instituição inquisitorial portuguesa, analisa como o poder da Igreja Católica foi reforçado através das atribuições concedidas pelo Estado de fiscalização e circulação de mercadorias e livros nas alfândegas e portos do Império Português. Em seguida, Amanda Dias de Oliveira, a partir dos documentos do Arquivo Histórico Ultramarino, estuda o recolhimento da ajuda do Rio de Janeiro entre os anos de 1678 e 1750, demostrando a importância desse convento de freiras nas relações familiares, políticas e sociais no período colonial.

Finalmente, fechando esse número temático, o artigo de Karla D. Martins avalia projetos da Igreja no Grão-Pará por meio do Bispo D. Macedo Costa. Em consonância à argumentos de autoridades públicas locais, D. Macedo Costa defendia ações de colonização agrícola e imigração. Entretanto, em acréscimo, defendia a intervenção da Igreja na formação social e moral, através “civilizacionismo cristão” dos habitantes amazônidas.

O tema central deste dossiê, Igreja e Poder, pode ser desfiado através de uma pluralidade de objetos. Poder, ciência, gênero, educação, filosofia, família, estão entre as categorias de análises que relacionadas à temática central forneceram o desenho deste número. Esperamos que essa nova edição forneça uma agradável e instigante leitura. Por fim, agradecemos a todos que voluntariamente nos ajudaram neste projeto.

Fábio Py Murta Almeida

Marcos Vinícius Freitas Reis


ALMEIDA, Fábio Py Murta; REIS, Marcos Vinícius Freitas. Apresentação. Tempo Amazônico, Macapá, v.2, n.2, 2015. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

 

50 anos de golpe: arte, cultura e poder (Parte I) / Antíteses / 2015

No ano de 2014 o golpe de 1964 completou 50 anos. Se não houve motivo para comemorações também não houve (e não há) justificativa para menosprezá-lo como marco histórico. Fato é que no ano de 1964 deu-se início a uma ditadura que durou mais de duas décadas e cujas práticas são sentidas ainda nos dias de hoje. No entanto, 50 anos depois, o evento (e tudo que ele representa) vem se transformando numa oportunidade de examinar o fenômeno do autoritarismo e suas práticas, difundir as pesquisas sobre o regime militar, também expandi-las através de novas abordagens e fontes, tornando-as conhecidas de um maior número de interessados que, durante um longo período, esteve apartado dos espaços de discussão acerca dos rumos do país ou alijado do processo de construção democrática no Brasil.

Embora tenhamos inúmeras tipologias para abordá-la como, por exemplo, ditadura civil, militar e até empresarial, acenando para a participação de grupos de natureza diversa tanto na concretude do golpe quanto na consolidação do regime, muito pertinente se torna a definição do sociólogo Juan Linz que definiu os casos brasileiro e argentino e também o espanhol de Primo de Rivera e o português de Salazar como regimes autoritários de natureza burocrático-militares que, em linhas gerais, representa “uma coalização chefiada por oficiais e burocratas e por um baixo grau de participação política”, na qual se “falta uma ideologia e um partido de massa; existe frequentemente um partido único, que tende a restringir a participação; às vezes existe pluralismo político, mas sem disputa eleitoral livre” (BOBBIO; MATTEUCCI, PASQUINO, 2004, p.102).

Partido dessas definições gerais em torno do fenômeno do autoritarismo e a versão brasileira dele, podemos tomar a produção bibliográfica no contexto imediato ao golpe de 1964 e no período pós-regime militar como objeto de estudo, analisando os temas mais recorrentes em determinados momentos bem como o impacto dessa discussão no encaminhamento das pesquisas.

Nos primeiros anos do regime militar, de 1964 a 1968, não se sabia ao certo o que estava por vir e não haviam sido fechados os espaços de atuação política, ainda que neles não fosse mais tolerada a interação interclasses como outrora vinha sendo efetivada no plano da cultura por instituições como o Instituto Superior de Estudos Brasileiros (ISEB), a União Nacional de Estudantes (UNE), o Centro Popular de Cultura (CPC), o Movimento de Cultura Popular (MCP), entre outros.

Paulatinamente, o regime militar expandiu suas práticas repressivas, utilizando-se da censura e repressão para coibir manifestações contestatórias da intelectualidade engajada que outrora buscaram a interação com as classes populares e outros extratos da sociedade e, naquele momento, encontravam-se restritos ao contato com as classes médias. Artistas e intelectuais, por sua vez, não se mantiveram passivos às decisões impostas de “cima para baixo” e se uniram em torno do projeto de consolidação da chamada resistência cultural.

Apesar das divergências vivenciadas por artistas e intelectuais no que concerne à construção de uma unidade em torno das reivindicações comuns, houve uma articulação efetiva deles no contexto pós-golpe e pré-AI-5, isto é, entre 1964 e 1968. As discussões anteriormente restritas à produção individual ou de grupos ganharam dimensões mais amplas e coordenadas durante o regime militar, o que podiam transitar de questões pontuais como a liberação de obras e a libertação de artistas até problemas mais complexos como a extinção da censura e um programa de subvenções.

A construção de uma unidade a partir do enfrentamento de um “inimigo comum”, não extinguiu os impasses teórico-políticos entre diferentes grupos. Isto porque a luta de uma intelectualidade contra o regime militar nunca se definiu por uma convivência pacífica entre integrantes da oposição. Como assinalou o editorial do periódico Arte em revista, num volume especial sobre teatro engajado de outubro de 1981, é necessário “relativizar a possível coerência que muitos querem enxergar numa atividade regida pela economia de mercado, pelos modismos artísticos, pelo jogo das influências externas, como as relações com o Estado, a censura, etc.” De qualquer forma, a atuação dos mecanismos de controle e do aparelho repressivo estimularam a convergência de opiniões divergentes em torno de reinvindicações comuns.

Assim durante pelo menos 10 anos, mais sintomaticamente entre 1968 e 1974, o regime militar, através de uma série de restrições, não só ignorou as principais demandas de artistas e intelectuais, sendo a liberdade de expressão a mais importante delas, como também os impediu de se comunicar com a sociedade brasileira, impondo-lhes a censura de peças teatrais, filmes, revistas, livros, jornais, publicidade, programas de rádio e televisão e também sujeitando-os a mecanismos de repressão como a perseguição, prisão, tortura e até morte de artistas e intelectuais.

Como se vê, este foi um período conturbado para artistas e intelectuais que não mais nutriam expectativas de unidade como outrora, dividindo-se cada vez mais. Diante do processo repressivo deixaram de lutar por questões mais amplas para reivindicar questões pontuais, transferiram a luta contra a censura das manifestações públicas para a esfera jurídica e, mais tarde, para o campo econômico, interiorizavam práticas de autocensura no processo de criação e também promoviam alianças táticas para enfrentar este estado de coisas.

Para se entender este embate de forças durante o regime militar (1964-1985), especificamente a partir de 1968 e durante a década de 1970, devemos ir além das interpretações consolidadas que propuseram dicotomias como resistência x cooptação como ocorreu com grande parte da literatura dos anos 1980 que analisou a produção artística e intelectual produzida durante os anos de censura e repressão; mais que isto, esta se insere num processo complexo e contraditório de projeção da cultura na vida nacional com o fechamento dos espaços tradicionais de atuação política, progressivamente a partir de 1968, que tinha como elemento catalisador as políticas culturais em seus múltiplos matizes como as de caráter proativa realizadas pelo Serviço Nacional de Teatro (SNT), a Empresa Brasileira de Filmes Sociedade Anônima (Embrafilme), entre outros, e as de natureza repressiva executadas pela Divisão de Censura de Diversões Públicas (DCDP), pelos Serviços de Censura de Diversões Públicas (SCDPs) e pela “supercensura” (NAPOLITANO, 2010, p.145 e 150).

Somente no contexto de abertura, o governo Geisel tentou uma aproximação a esses grupos permitindo-lhes expressar anseios reprimidos por longo tempo e convidando-os a participar da elaboração de políticas no âmbito do governo. Claro que isto não foi recebido com unanimidade por artistas e intelectuais, alguns consideraram a iniciativa uma oportunidade de subverter as estruturas por dentro ou, pelo menos, ver atendidas as reivindicações mais pontuais, outros viram nisto mais uma forma de cooptação adotada pelo governo militar e se colocaram contra ele e contra todos que, após longos anos de repressão e censura, aceitaram participar de planos do governo na área da cultura. Desse impasse, advém a rivalidade entre os artistas e intelectuais comunistas mais abertos à interlocução com o governo da abertura e o movimento da contracultura contrário a qualquer tipo de negociação.

Na década de 1980, mais especificamente no pós-1985, artistas e intelectuais buscaram entender o que havia acontecido nos 21 anos de regime militar e isto refletiu diretamente na produção bibliográfica e também nos debates públicos que se concentraram em apontar culpados pela passividade da oposição diante do golpe de 1964; não poupando críticas ao Partido Comunista Brasileiro (PCB) e tudo que esteve direta ou indiretamente relacionado a ele, já mencionamos o ISEB, o CPC e o MCP, entre outros.

De meados dos anos 1980 até o fim do século, a ditadura enfim acabara, mas as feridas continuaram abertas… e os arquivos fechados. Durante 30 anos pelo menos, a construção historiográfica acerca do regime militar pautou-se pelas apropriações da memória e a propensão de se confundir com a história. De um lado, militares e aqueles que apoiaram o golpe e a ditadura (a alta cúpula da Igreja Católica, as associações representativas das classes dominantes, os meios de comunicação de grande porte, os partidos e políticos de caráter conservador) contavam a versão deles da história através de restrições plenas ao acesso a arquivos e mecanismos sofisticados de manipulação dos fatos, um dos mais significativos e até hoje confundido refere-se ao tratamento do movimento golpista como revolução ou  redentora (TOLEDO, 2014). De outro, grupos de oposição, nem sempre articulados entre si, colocavam-se como “alvos” do sistema cuja perseguição ostensiva dos agentes da ditadura justificou, em alguns casos, a adesão à luta armada (rural ou urbana). Em ambos os casos, porém de maneiras distintas, consideramos oportuna a observação de Jacques Le Goff acerca da memória coletiva, na qual se tornar “senhores da memória e do esquecimento é uma das grandes preocupações das classes, dos grupos, dos indivíduos que dominaram e dominam as sociedades históricas” (LE GOFF, 1996, p.426) e isto aconteceu também aqui, durante e depois do regime militar, considerando obviamente as diferenças entre eles e seu poder de inserção social.

A memória, no entanto, não é algo concreto e definido, cuja produção e acabamento se realizaram no passado e cumpre transportá-los para o presente bem como preservá-la dos riscos de desgaste através da restauração integral dela nem se resume a um “pacote de recordações” também já previsto e acabado. Ao contrário, “é um processo permanente de construção e reconstrução” (MENESES, 1992, p.10).

Portanto, que memória e história não são termos convergentes, ainda que possam ser considerados fenômenos complementares. Enquanto a memória, filha do presente e tendo como objeto a mudança, “é formação de imagem necessária para os processos de constituição e reforço da identidade individual, coletiva e nacional”; a história, operação cognitiva, tem como referencial o passado e “é a forma intelectual de conhecimento”. Noutras palavras, a História não é o “duplo científico da memória” a qual, por sua vez, precisa ser tratada como objeto da história (Id. Ibid., p.14, 22-23).

Nessas disputas pela consagração da memória coletiva, as restrições de acesso aos documentos de época favoreceram a construção de memórias a partir de questões do presente, sobretudo do primeiro grupo que exercia plenos poderes e controle dos arquivos públicos, inclusive dos critérios de descarte deles, orientados não por técnicas arquivísticas e sim por demandas políticas. Daí resulta a importância de pesquisadores de áreas como o jornalismo, a história, a sociologia, a antropologia e a ciência política que tomam hoje a memória coletiva como objeto de pesquisa e transformam a luta pela democratização da memória social numa das prioridades das pesquisas em Ciências Humanas e, assim, trabalham para que “a memória coletiva sirva para a libertação e não para a servidão dos homens” (LE GOFF, op. cit., p.477).

A produção intelectual e bibliográfica em torno daquele contexto histórico começou a sofrer alterações consideráveis na virada do século quando a sociedade brasileira já se encontrava mais preparada e sem as amarras do passado para discutir nosso passado recente, os arquivos públicos estavam sendo paulatinamente abertos e, através deles, os pesquisadores brasileiros (e não somente os brazilianistas) iniciaram um amplo processo de revisão historiográfica que não só desconstruiu teses cristalizadas no imaginário social  como também apresentou novas abordagens de temas tratados anteriormente pela historiografia oficial.

É exatamente nesse contexto que o dossiê se inscreve. Um momento em que a produção científica e acadêmica no campo das humanidades se volta para reconsiderar uma série de temas que hoje ganham um contorno mais claro e evidente, sobretudo quando se trata, por exemplo, da questão dos direitos humanos. Porque regimes autoritários não atingiram apenas seus opositores e detratores, mas desfiguraram radicalmente os conceitos de democracia e de sociedade civil. Aliás, muitos desses regimes – como foi o brasileiro – usaram da repressão e da violência para impor e proteger uma noção estéril de democracia e de sociedade. Por isso que os estudos, as investigações que ora emergem nesses 50 anos do golpe se apresentam como fundamentais para não somente capitular os eventos que fundaram diversos tipos de oposição ao regime, mas reconsiderar as narrativas e as representações que serviram de fundamento às resistências contra o autoritarismo.

Tanto é fato que cada vez mais pesquisas são elaboradas em torno do tema, que o número de artigos recebidos para esse dossiê ultrapassou todas as expectativas dos organizadores. O montante de material de excelente qualidade serviu para a elaboração de dois tomos da revista. O primeiro deles, intitulado “50 anos do golpe: arte, cultura e poder”, reúne artigos que abordam a produção cinematográfica, teatral, literária, musical, bem como a atuação de artistas e intelectuais na oposição ao regime militar. Publicou-se primeiro porque no conjunto de todos os artigos aprovados, esse tema foi aquele em que os trabalhos de revisão e edição foram concluídos mais cedo. O segundo tomo, intitulado “50 anos do golpe: memória, política e movimentos sociais”, aparece em seguida trazendo consigo um conjunto de artigos que abordam os aspectos comparativos entre as ditaduras do Cone Sul, a construção da memória política sobre a ditadura e o papel da sociedade civil na organização dos movimentos sociais pela abertura política.

Pela realização desse trabalho agradecemos aos autores que colaboraram com esse dossiê e tornaram a publicação possível. Da mesma forma, agradecemos aos pareceristas que emprestaram seu trabalho à Antíteses no processo de leitura e avaliação dos artigos recebidos. A Carolina Sobreira pelos trabalhos gráficos que ilustram as capas dos dois tomos da publicação.

A todos uma boa leitura!

Referências

BOBBIO, Norberto; MATTEUCCI, Nicola; PASQUINO, Gianfranco. Dicionário de política – de A a J. 5. Ed. São Paulo: Imprensa Oficial, 2004. p. 102.

LE GOFF, Jacques. História e memória. 4. ed. Campinas: UNICAMP, 1996. p. 426.

MENESES, Ulpiano T. Bezerra. A história, cativa da memória? Para um mapeamento da memória no campo das Ciências Sociais. Revista do Instituto de Estudos Brasileiros, São Paulo, n. 34, p. 9-23, 1992. p. 10.

NAPOLITANO, Marcos. “Vencer Satã só com orações”: políticas culturais e cultura de oposição no Brasil dos anos 1970. In: ROLLEMBERG, Denise; QUADRAT, Samantha Viz (orgs.) A construção social dos regimes autoritários: legitimidade, consenso e consentimento no século XX. Rio de Janeiro: Civilização Brasileira, 2010. p. 145 e 150.

TOLEDO, Caio. Quase 50 anos do golpe de 1964: nada a comemorar. Consultado na Internet em 6 jan. 2014: http: / / blogdaboitempo.com.br / 2013 / 03 / 30 / quase-50-anos-do-golpe-de-1964- nada-a-comemorar /

Miliandre Garcia

Rodrigo Czajka

Acessar publicação original desta apresentação

Acessar dossiê

[DR]

 

50 anos de golpe: arte, cultura e poder (Parte II) / Antíteses / 2015

Como parte complementar ao dossiê “50 anos do golpe: arte, cultura e poder”, publicado no primeiro semestre de 2015, chega a público este segundo tomo intitulado “50 anos do golpe: memória, política e movimentos sociais”. A publicação do dossiê em duas partes justifica-se por dois motivos essenciais: a) dividir as contribuições em dois grandes temas de pesquisa sobre a ditadura militar no Brasil; b) contemplar o maior número possível de artigos enviados à Antíteses para este dossiê, que recebeu uma quantidade substancial de colaborações.

Cumpre também constatar, com esse dossiê, que os estudos sobre ditadura militar no Brasil vêm ganhando gradativa repercussão nacional e internacional. Na última década os trabalhos de pesquisa sobre regimes autoritários têm se tornado atuais não apenas pela necessária, ainda que tardia, abertura de arquivos da repressão, mas também pelo modo como ecos do autoritarismo de outrora hoje, mais uma vez, recolonizam o imaginário social, provendo discursos pelo retorno do controle, da repressão, da militarização do sociedade que consagraria, por sua vez, a vitória por revanche de um certo tipo de nacionalismo caduco.

Vê-se hoje setores da sociedade brasileira, sobretudo aqueles comprometidos com a formação de uma opinião pública sobre os rumos da “vida nacional”, engajados às avessas com panelas estridentes em sacadas de edifícios, tornando esse espaço um camarote particular a partir do qual se constrói um falsa noção de democracia: é necessário, pois, participar daquilo que alguns meios de comunicação chamam de “festa democrática”, mesmo que essa festa barre a entrada daqueles que não estão a caráter ou que não foram simplesmente convidados.

Daí que iniciativas da Antíteses, tais como essa, promovem o debate e permitem uma contemporização dos estudos aqui publicados que, a rigor, não estão necessariamente situados há 50 anos. Pois, se a recorrência dos estudos dessa matiz ainda é verificada no ambiente acadêmico, é porque atual nunca deixou de ser o tema do autoritarismo. Mais que isso: é necessário entender como ele próprio se metamorfoseou em instituições, em movimentos, em indivíduos que hoje perfilam os antigos delírios autoritários de tempos sombrios.

Assim, o artigo que abre este segundo volume, “Recordar é vencer: as dinâmicas e vicissitudes da construção da memória sobre o regime militar brasileiro”, de Marcos Napolitano, propõe uma periodização inédita para analisar o processo de construção da memória do regime militar brasileiro. Partindo do princípio que a memória social e a experiência histórica de uma dada sociedade estão conectadas, o autor analisa a construção de uma “memória mutável” sobre o regime desde os anos 1970 até a primeira década do século XXI.

Florencia Lederman, com o artigo “La nación representada en los héroes. Las estrategias de legitimidad de las dictaduras de Brasil (1964-1985) y Argentina (1976-1983): visiones del tiempo y ejercicio del poder”, analisa como as ditaduras deste dois países se apropriaram dos heróis nacionais. Por serem estes protagonistas de “momentos fundantes” da nação, foram amplamente retomados pelos regimes em questão.

Em “O governo Geisel (1974-1979): o ápice da disputa pelo poder entre duros e moderados e sua expressão memorialista entre os militares”, Maria Gabriela da Silva Martins da Cunha Marinho e Sonale Diane Pastro de Oliveira analisam a disputa memorialista entre “duros” e “moderados” acerca da abertura política no Brasil (1974-1985).

Adrianna Setemy no artigo intitulado “Liberdade sob vigilância: um diálogo entre narrativas históricas sobre o exílio latino-americano no Cone Sul”, pretende, a partir da análise das singularidades, confluências e contradições que caracterizam os diferentes registros escritos sobre o exílio de brasileiros nos países do Cone Sul latinoamericano, promover um debate sobre a pluralidade de formas de narrar a saída indesejada do país de origem, a natureza desses diferentes registros históricos e a construção simbólica do exílio enquanto experiência traumática transcorrida fora das fronteiras nacionais.

Também discutindo a relação entre as ditaduras do Cone Sul, Hernán Ramírez, com artigo intitulado “Reflexiones acerca de las dictaduras del Cono Sur como proyectos refundacionales”, pretende evidenciar as ditaduras como eventos estruturais e não apenas simples conjunturas políticas, que repercutiram de forma profunda nas sociedade latino-americanas, não de modo homogêneo, e que ainda hoje se fazem sentir seus desdobramentos, ao ter remodelado aspectos sociais estruturais em diferentes nações da América Latina.

No texto seguinte, Agenor Sarraf Pacheco e Jaime Cuéller Velarde, analisam em “Silêncios da historiografia brasileira: o golpe civil-militar em experiências de pesquisa no Pará” as narrativas sobre a ditadura militar brasileira no Pará, levando em consideração que apesar das difíceis trajetórias que a nação e seus habitantes trilharam em distintas parte de seu território, a experiência dos longos tempos de regime de exceção na Amazônia ficou quase nas dobras das produções historiográficas nacionais.

Carla Brandalise e Marluza Marques Harres em “Brizola e os comunistas: os Comandos Nacionalistas na conjuntura do golpe civil-militar de 1964”, pretende circunscrever as divergências de concepção e ação entre Leonel de Moura Brizola e seus aliados na contraposição aos vinculados a Luiz Carlos Prestes no Partido Comunista Brasileiro (PCB).

Em seu artigo intitulado “Formas de militancia en el Partido Comunista argentino durante la última dictadura militar (1976-1983)”, Natalia Casola analisa como a linha definida pelo PC durante a última década da ditadura militar na Argentina, o apelo a construir a “convergência cívico-militar”, se materializou nas diferentes frentes de militância e nas chamadas organizações de massas.

Discutir alguns usos de termos derivados do campo semântico da loucura quando o assunto é a ditadura civil-militar de 1964, analisar o funcionamento dos mecanismo de suspeição e propor uma análise do aparato repressivo ditatorial, do ponto de vista da paranoia, são alguns dos objetivos traçados por Daniel Faria, no artigo “Sob o signo da suspeita: as loucuras do poder ditatorial”.

Partindo para um conjunto de estudos com objetos mais específicos e pormenorizados, o artigo “Carlos Santos e os usos da ideologia da democracia racial na ditadura civil-militar brasileira”, de Arilson dos Santos Gomes visa conferir visibilidade ao protagonismo político negro no parlamento do Estado do Rio Grande do Sul no período da ditadura civil-militar (1964-1974), analisando a atuação do deputado estadual Carlos da Silva Santos.

Rivail Carvalho Rolim procura dar enfoque a algumas formas de resistência à ditadura militar no Brasil exercidas a partir da organização e mobilização de movimento populares, em seu artigo “Repressão e violência de Estado contra os segmentos populares durante os governos militares”.

No artigo “Todo artista tem de ir aonde o povo está”: o movimento político das Diretas Já no Brasil (1983-1984)”, Vicente Saul Moreira dos Santos tece comentários sobre a relação entre História do Tempo Presente e História Política, com objetivo de inserir o movimento político das Diretas Já, transcorrido no Brasil entre 1983 e 1984. Partindo do pressuposto de ter sido um evento da conjuntura do final da ditadura militar, da luta por democracia e cidadania no país.

No mesmo sentido de compreender e detalhar a organização dos movimentos sociais no curso do regime militar, o artigo “O golpe de 1964 e a repressão ao movimento de ‘trabalhadores favelados’ de Belo Horizonte”, de autoria de Samuel Silva Rodrigues de Oliveira, discute o “Inquérito DVS-096” que atingiu a Federação dos Trabalhadores Favelados de Belo Horizonte (FTFBH). Segundo o autor, mais do que destruir a estrutura associativa que articulava o movimento social, a repressão desconstruiu a gramática pública que permitia aos “trabalhadores favelados” reivindicarem o “direito de morar”.

Tal como o artigo anterior, o seguinte aborda a organização de movimentos sociais na ditadura. Intitulado “Repressão política contra trabalhadores rurais: reflexões a partir de um estudo de caso em Magé (RJ)”, o artigo de Marco Antonio dos Santos Teixeira, discute a ação de um grupo de trabalhadores rurais em Magé, na Baixada Fluminense, que lutou pelo direito de permanecer na terra que ocupava e se transformou num exemplo de resistência em todo estado do Rio de Janeiro.

Em “A reforma agrária em projeto: o uso do espaço legal para garantir o acesso à terra no Pará (1960-1962)”, Edilza Joana Fontes, coloca em discussão a proposta de reforma agrária no Pará, ocorrido no pré-64, tendo como análise os decretos dos governos do Estado do que procuram definir uma faixa de terras em torno das estradas estaduais, para fins de assentamentos de pequenos produtores rurais. Um artigo que retoma um tema importante no seio das resistências do campesinato, mesmo antes do golpe de 1964.

Por fim, o artigo que fecha esse dossiê, de autoria de Reginaldo Benedito Dias, intitulado “Maringá no nascimento da ditadura civil-militar de 1964: análise do processo movido contra o vereador Bonifácio Martins e seus desdobramentos”, objetiva analisar o processo movido pelo Estado brasileiro, após a implantação da ditadura civil-militar de 1964, contra o Bonifácio Martins, que exercia mandato de vereador no município de Maringá (PR). Perseguido por causa de seu envolvimento com lutas sociais e sindicais e por presumido vínculo com o Partido Comunista Brasileiro, Bonifácio Martins, por motivos de segurança, evadiu-se de Maringá, ficando impossibilitado de concluir seu mandato. O texto de redimensiona os efeitos da ditadura militar sobre os aspectos biográfico e políticos de um figura importante da resistência e oferece uma interpretação mais densa do fenômeno da repressão.

Assim, com esse segundo tomo do dossiê “50 anos do golpe” foi elencado um conjunto representativo de colaborações que, assim como no primeiro, demonstram – como dissemos – a atualidade do tema de pesquisa e sua pertinência crítica nestes dias em que fantasmas do autoritarismo ganham força, mesmo que 50 anos depois.

A todos, uma boa leitura!

Miliandre Garcia

Rodrigo Czajka

Acessar publicação original desta apresentação

Acessar dossiê

[DR]

 

África: gênero, nação e poder / Outros Tempos / 2015

É com grande satisfação que publicamos o presente volume da Revista Outros Tempos, com o dossiê intitulado África: gênero, nação e poder. Nos últimos anos tem sido perceptível o interesse crescente pelo campo dos chamados Estudos Africanos. Nosso intuito foi agregar pesquisadores do Brasil e de países do continente, cujos trabalhos versam sobre relações de gênero, nação e poder, nas mais diversas perspectivas de análise crítica.

No artigo A formação social do estado-nação e a crítica pós-colonial: o surgimento da história crítica em Moçambique, Milton Correia busca perceber como a academia moçambicana tem respondido às relações dinâmicas entre sociedade, história e política. Em Predadores: quando a literatura narra as relações de poder em Angola, Silvio de Almeida Carvalho Filho, a partir do romance escrito por Pepetela, discute como a literatura estrutura uma crítica sócio-política extremamente perspicaz da sociedade e dos estados angolanos contemporâneos. Carla Santos de Carvalho, no artigo A questão de gênero na agenda pública e política de Cabo Verde, analisa o papel das ONGs comprometidas com a igualdade de gênero e com a luta pela defesa dos direitos das mulheres em um contexto de invisibilidade feminina. Tatiana Raquel Reis Silva, em Mercado de Sucupira: práticas comerciais e cotidiano das rabidantes cabo-verdianas, discorre sobre as práticas comerciais, o cotidiano e as estratégias de lucratividade das rabidantes. Patrícia Godinho Gomes desenvolve uma abordagem preliminar sobre a evolução dos estudos de gênero na Guiné-Bissau em O estado da arte dos estudos de gênero na Guiné-Bissau. Viviane de Oliveira Barbosa examina os princípios da política segregacionista na África do Sul durante o regime do Partido Nacional, no artigo Políticas sociais e legislação no apartheid sul-africano. Antonádia Borges apresenta como mobilidade e circulação de pessoas ultrapassa as barreiras impostas pelo colonialismo em Hospitalidade e antropologia na África do Sul contemporânea.

O presente volume também conta com uma seção de artigos livres: Com zelo, inteligência e limpeza de mãos: Eugênio Freyre de Andrade e as Casas da Moeda na primeira metade do século XVIII, de Irenilda Cavalcanti; Colônia-Quilombo: retirantes cearenses e abolicionismo na Colônia Benevides (Pará 1877-1884), de Edson Holanda Lima Barboza; Espaço de religiosidade e traços da modernidade: memórias de moradores do Pântano do Sul (Florianópolis / SC 1970 – 1980), de Mariane Martins; Uma higiene moral e do corpo: educação moral e cívica, as atividades físicas, esportivas e de lazer durante a ditadura militar, de Reginaldo Cerqueira Sousa e História e Memória: quadro antigo do cemitério ecumênico São Francisco de Paula, de Bruna Frio Costa e Carla Rodrigues Gastaud.

Além dos artigos, ofertamos ao(a) leitor(a) uma entrevista realizada por Michelle Cirne Ilges com a professora Teresa Cruz e Silva, sobre A Agência do Codesria na produção das Ciências Sociais no continente africano. Duas análises de documento – Testemunhos de violência num registro judicial durante a ocupação colonial no norte de Moçambique (Fernanda do Nascimento Thomaz); e Luanda 4 de fevereiro de 1961: o olhar dos Estados Unidos (Fábio Baqueiro Figueiredo) – e uma resenha intitulada Identidades em questão: escravidão, liberdade e pertencimento no mundo atlântico (Daniela Carvalho Cavalheiro) fecham o volume.

Boa Leitura!

Tatiana Raquel Reis Silva

Teresa Cruz e Silva


SILVA, Tatiana Raquel Reis; SILVA, Teresa Cruz e. Apresentação. Outros Tempos, Maranhão, v. 12, n. 19, 2015. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

 

Livros, Leitura, Poder e Cultura / Revista Maracanan / 2014

Lire um texte? Quoi de plus facile en apparence. Quoi de plus délicat, pour peu qu’on s’interroge non seulement sur les conditions d’élaboration, de destination, de diffusion des imprimés […] mais sur notre comportement personnel, daté, conditionné par une culture, heritée et acquise, de lecteur.

Denis Richet [1]

Há alguns anos, debruçar-se sobre a história do livro e da leitura representa mais do que um simples inventário do que se lia ou do que se produzia em dada sociedade em certo momento histórico. Os estudos produzidos pela historiografia francesa, como pela anglo-saxã e a ibérica abriram inúmeras vias de pesquisa, possibilitando que a análise dos impressos e da leitura signifique, sobretudo, um meio de buscar opções diversificadas da pesquisa histórica para abordar práticas culturais e políticas. Embora informações também se veiculem por meio da oralidade, o trabalho com textos permite identificar o sentido das mensagens transmitidas pela palavra escrita, ainda quando em ambiente de cultura letrada rarefeita, como aquele das sociedades do Antigo Regime.

Dessa maneira, os impressos transformaram-se em meio privilegiado “de diálogo com o passado, de criação e de inovação”.[2] Sob esse prisma, como afirmaram Darnton e Roche [3], o livro (ou qualquer texto impresso) não deve ser visto apenas como memória de um tempo, que narra as diferentes percepções de um mesmo fato; ou como simples ingrediente do fato; mas, sim, enquanto agente que intervém nos processos e episódios. Poderosos elementos de continuidade, os livros também podem ser importantes vetores de rupturas na tradição. Afinal, os livros, textos e suas representações investem-se de múltiplas missões: a de educar, de formar, de criar tanto um espírito de universalidade, quanto de edificar as nações particulares, especialmente ao longo do século XIX. [4] No Brasil, o oitocentos constituiu-se no período em que o discurso escrito anunciou a conquista de sua autonomia, numa sociedade ainda profundamente dominada pela oralidade, com o vislumbre do nascimento de uma opinião pública, no sentido moderno do termo [5].

Não se quer dizer, no entanto, que os textos impressos, por si só, sejam capazes de fazer revoluções.[6] Ainda que não se confira tal poder aos textos, pois estes podem ser apreendidos de modos distintos por indivíduos diferentes, é possível afirmar, contudo, que são os textos escritos, em seus conceitos e linguagens, que abrem espaço à criação de novas culturas políticas. Portanto, os impressos registram igualmente uma historicidade.

Por outro lado, ao debruçar-se sobre a história dos livros, dos textos e da cultura escrita, diversos momentos mostram-se fundamentais: o Antigo Regime, o longo século XIX e o tempo contemporâneo. Na primeira temporalidade, encontram-se as novidades em relação às práticas de leitura, à constituição do esboço de uma voz geral, mas também as resistências em relação a tais propostas por meio do papel repressivo da Inquisição e da censura. Além disso, naquela época, os que detinham o privilégio do saber e da escrita, embora ainda dependessem do Estado para a sobrevivência, encontravam nesse trunfo um instrumento de poder. Na segunda temporalidade, o impresso se integra ao tecido cultural e político da sociedade, com as palavras vendo-se revestidas, por esse modo, de conotações particulares e diversas. Ou seja, ao transcender seu contexto originário, uma idéia projeta-se no tempo sob a forma de um novo conceito, que transforma os discursos contemporâneos em práticas novas, capazes de revelar as diversas identidades políticas e sociais presentes naquela conjuntura histórica. Por fim, no tempo contemporâneo, além de transmitirem mensagens a um público mais amplo, em função do grau maior ou menor de alfabetização, os textos demonstram tanto a formação de um campo intelectual autônomo, na pespecriva de Bourdieu [7], quanto pressupõem que a palavra escrita se tenha convertido em objeto privilegiado de uma luta político-ideológica que se configurou no oitocentos. Tais temporalidades acham-se presentes nessa coletânea, cujo foco dirige-se não só para o Brasil, mas também para a França, Portugal e Espanha.

Nessa perspectiva, o conjunto de artigos reunidos neste dossiê pretende contribuir, sob a forma de debate intelectual, para essa análise da função assumida pelo livro, pelo impresso e pelo manuscrito na transmissão da cultura; na formação da opinião pública e das culturas políticas; em seu papel como instrumento do poder, em especial nas monarquias; no processo de constituição dos intelectuais; e, mesmo, em outras formas de que o escrito pode revestir-se, como o de caricaturas ou partituras musicais, evidências igualmente de acervo cultural comum a uma população.

Os sete artigos integrantes do dossiê foram redigidos tanto por nomes emblemáticos nessa linha de estudos, como por jovens pesquisadores, possibilitando um encontro de gerações. Sem seguirem um fio condutor único, os artigos apresentam grande variedade de abordagens e de questões, que transparecem dos próprios títulos. De um lado, a formação de bibliotecas, o ato de traduzir e publicar textos enquanto práticas e estratégias do poder monárquico, a censura e a Inquisição, que adquiriram outra dimensão após a invenção da imprensa, com seu papel multiplicador. De outro, a historicidade do literário na ótica específica de José de Alencar, o estudo da “arte menor” do caricaturista, transformada em elemento primordial de uma imprensa militante na Modernidade, o uso das partituras musicais consideradas como meio para valorizar a mestiçagem no Brasil enquanto patrimônio cultural, e as disputas intelectuais de meados do século XX no Brasil, refletindo o processo de reconfiguração de seu campo intelectual. Cabe ainda ressaltar que, embora não faça parte intrínseca do dossiê, soma-se uma resenha com temática a ele vinculada, sobre o mais recente livro de Robert Darnton traduzido para o português.[8]

São, portanto, narrativas distintas, mas que, ao ultrapassar uma abordagem unívoca, se conjugam para formar uma teia entrelaçada, capaz de lançar redes de significados sobre o passado, a fim de oferecer ao leitor, como sempre acontece, elementos com que (re)construir a sua própria interpretação do mundo.[9]

Notas

  1. Préface. In: JOUHAUD, Christian. Mazarinades: la Fronde des mots. Paris: Aubier, 1985, p. 12.
  2. BARATIN, Marc & JACOB, Christian. O poder das bibliotecas. A memória dos livros no Ocidente. [Trad.]. Rio de Janeiro: Ed. da UFRJ, 2000, p. 11.
  3. DARNTON, Robert & ROCHE, Daniel (orgs.). Revolução impressa. A Imprensa na França, 1775-1800. [Trad.]. São Paulo: EDUSP, 1996.
  4. RIBEIRO, Maria Manuela Tavares. “Livros e leituras no século XIX”. Revista de História das idéias. Coimbra, 20: 187- 228, 1999, p. 187
  5. BAKER, Keith. M. Au tribunal de l’opinion. Essais sur l’imaginaire politique au XVIIIe siècle. Paris: Payot, 1993; FARGE, Arlette. Dire et mal dire. L’opinion publique au XVIIIe siècle. Paris: Seuil, 1992.
  6. Ver CHARTIER, Roger. Les origines culturelles de la Révolution française. Paris: Seuil, 1990 e BARBIER, Fréderic. História do livro. [Trad.]. São Paulo: Paulistana, 2008.
  7. BOURDIEU, Pierre. A economia das trocas simbólicas. [Trad.]. São Paulo: Perspectiva, 1974, pp. 183-202.
  8. DARNTON, Robert. Poesia e polícia: redes de comunicação na Paris do século XVIII. [Trad.]. São Paulo, Companhia das Letras, 2014
  9. O Laboratório Redes de Poder e Relações Culturais foi criado a partir do grupo de pesquisa do CNPq (1997) intitulado “Ideias, Cultura e Política na Formação da Nacionalidade Brasileira”, e está integrado ao Programa de Pós-graduação em História da UERJ. Foi chancelado em dezembro de 2006 como núcleo de excelência no âmbito do programa Pronex FAPERJ / CNPq. Desde então, passou a reunir professores de outras instituições, próximos seja pela temática, seja pela abordagem e foi responsável pela organização desse dossiê, que contou com a ajuda de Tania Bessone e Lúcia Guimarães, suas integrantes, às quais cabe aqui um agradecimento especial.

Lucia Maria Bastos Pereira das Neves


NEVES, Lucia Maria Bastos Pereira das. Apresentação. Revista Maracanan, Rio de Janeiro, v.10, n.10, 2014. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Poder y organización institucional de espacios regionales en las construcciones estatales latinoamericanas / História Unisinos / 2013

Poder – Organización Institucional de Espacios regionales en las construcciones estatales latinoamericanas / História Unisinos / 2013

El objetivo de este dossier es debatir sobre el peso del espacio regional en la construcción de la nación en la historia contemporánea. La participación de los inmigrantes extranjeros y de la población indígena autóctona nos permite abordar la transformación de la “nacionalización” de los países latinoamericanos a partir del proceso independentista del siglo XIX.

Los ejes fundamentales de análisis son la organización asociativa para incluir nuevos grupos a la nacionalidad en construcción; los proyectos estatales que procuraron garantizar la civilización de regiones diversas; el uso de ámbitos educativos o publicitarios a la hora de divulgar los proyectos centralizadores; las redes sociales y de sociabilidad que avalaron la difusión de las ideas nacionalistas a través del arte y la cultura; y la presión ejercida desde el ámbito religioso en la búsqueda de defi niciones territoriales de carácter nacional, en particular en zonas de frontera, siendo el centro de esa discusión la articulación de las relaciones con las diversas autoridades e instituciones gestadas al calor de la construcción de las naciones latinoamericanas.

Sobre esta base, el artículo de Gabriela DallaCorte Caballero, titulado La Misión Franciscana de Laishí: el proyecto del ingeniero José Elías Niklison (1910-1920), aborda el debate sobre el rol de la misión franciscana en la zona fronteriza entre Paraguay y Argentina, una región de gran importancia para el estudio de la integración indígena del espacio chaqueño. Como señala la autora, la Misión de Laishí fue implantada a inicios del siglo XX en el Territorio Nacional de Formosa gracias a la actuación de los misioneros franciscanos de la Diócesis de Santa Fe. El objetivo era “nacionalizar” a los indígenas de la zona formoseña, en particular los aborígenes tobas, con la intención de asegurar su supervivencia. El responsable de la Misión de Laishí durante los años analizados fue el misionero fray Buenaventura Giuliani, convertido en Prefecto de Misiones. A su cargo quedó la cooperación de uno de los intelectuales más destacados de la década de 1910, el ingeniero José Elías Niklison, que en 1914 fue enviado por el gobierno argentino a inspeccionar a zona chaqueña y regular las condiciones laborales de los indígenas de la zona. Fray Giuliani recibió al inspector, que era miembro del Departamento Nacional del Trabajo, y en el año 1917 lo invitó al seno del Convento San Carlos Borromeo de San Lorenzo para publicitar sus conclusiones sobre las posibilidades de “nacionalizar” a los tobas, conservando su condición de indígenas.

La construcción de la Nación demandó movilizar el imaginario social, que tuvo en las conmemoraciones patrias sus puntos más álgidos, forjándose en ella un sentimiento común, la mayoría de las veces solapando otro tipo de identidades. Así, en Nacionalizando memorias periféricas: conmemoraciones y nacionalismo chileno en las regiones de Antofagasta y Tarapacá, 1879-1910, Gabriel Cid analiza ese proceso en esas dos regiones del país trasandino, incorporadas por la Guerra del Pacífi co, enfatizando el período que va de 1879, con el inicio de la Guerra, y 1910, centenario de la Independencia chilena. Por ello, debían pasar de forma urgente por un acelerado proceso de integración identitária, sumamente rico en simbologías y signifi cados, en particular, referentes al territorio, discusión que hoy se resignifi ca ya que el mismo se tuvo como base una intensa labor para hacer desaparecer lo que no se encuadraba con el objetivo pretendido.

A su turno, Ronen y Julieta Man, en su artículo Proyecciones sobre el habitante “deseable”. Colonos, inmigrantes y comunidades nativas en áreas de la “frontera interior” cuestionan el proceso de “suplantación interétnica” que se produjo en la Norpatagonia Argentina durante el último cuarto del siglo XIX, con la construcción de la imagen “vacío desértico”, geográfi co y humano, que produjo la invisibilización de los pueblos originarios, substituidos por las fi guras de los colonos y pioneros. En manos de la elite dirigente, éstos fueron elevados a agentes de la “modernidad” y símbolos de la “civilización”, gérmenes de una nueva sociedad y un nuevo Estado nacional, que los tuvo como sus valores, en detrimento de las culturas de diversas etnias, que durante más de una centena de años no solo han sido postergadas sino que también estigmatizadas por ese discurso dominante. Cielo Zaidenwerg, por su parte, titula su trabajo Un proyecto ‘argentinizador’. Educación y efemérides en la región patagónica y rionegrina (1908-1930). Según la autora, el proceso de consolidación del Estado nacional argentino tuvo lugar entre fi nales del siglo XIX y principios del siglo XX. En función de este principio seprocedió a la construcción de la nacionalidad, por lo que el Estado se abocó a la tarea de defi nir e implementar de tal tipo de identidad. El hecho de mantener vivo el espíritu patriota condicionó la conformación de los Territorios Nacionales argentinos con dependencia respecto del gobierno nacional. La autora califi ca de “estrategia argentinizadora” el impulso llevado adelante también por las localidades afectadas e incluidas en dichos territorios. En su caso, a diferencia del estudio dedicado a los indígenas tobas del Territorio Nacional de Formosa, Zaidenwerg aborda la población heterogénea, destacada por su aislamiento y lejanía. En relación a los inmigrantes europeos establecidos en estos nuevos espacios en proceso de nacionalización, fue indispensable arraigar en estas regiones el amor al suelo y la adscripción a la nación”. La autora resalta las prácticas simbólicas implementadas en el ámbito de la educación formal y de las efemérides patrias en la región patagónica, en concreto en la gobernación rionegrina, durante las primeras décadas del siglo XX.

Sandra Fernández titula su trabajo Sociabilidad, arte y cultura. Una experiencia en la Argentina de entreguerras, en el cual procura analizar el papel de los sectores dominantes de la ciudad de Rosario a partir de 1910. En particular analiza el proyecto de dicha élite para consolidar sus esferas de interés al desarrollar diversas estrategias tendientes para fortalecer el perfil cultural, intelectual y educativo ciudadano. La articulación del espacio público con el privado es la base de la propuesta a partir de la distinción entre cultura y civilidad en las décadas de 1920 a 1940. Precisamente, el periodo de entreguerras sirvió para establecer diferentes formas de acción, todas ellas instancias que vincularon expresiones asociativas con instituciones estatales y su impacto sobre la sociedad argentina.

Los artículos de este dossier se centran en los ámbitos regionales de América Latina a partir de la refl exión sobre la organización institucional y la expansión del poder en el marco de la construcción de los Estados Nacionales. Los trabajos brindan mayor información sobre espacios concretos que, en ocasiones, difieren de las conclusiones historiográfi cas sobre un ámbito generalizado y por tanto resultan un aporte importante para la discusión de una revista como História Unisinos, que se ha destacado por dar espacio a discusiones que tienen nuestra América Latina como temática central. Esperamos haber contribuido en este sentido, agradecemos la dedicación de autores y editores, a la vez que deseamos una buena lectura a todos.

Gabriela Dalla-Corte Caballero – Universitat de Barcelona

Hernán Ramírez – Universidade do Vale do Rio dos Sinos


CABALLERO, Gabriela Dalla-Corte; RAMÍREZ, Hernán. Apresentação. História Unisinos, São Leopoldo, v.17, n.3., setembro / dezembro, 2013. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

O Atlântico equatorial: sociabilidade e poder nas fronteiras da América portuguesa / Revista de História / 2013

Atlântico Equatorial: Sociabilidade – Poder nas fronteiras da América portuguesa / Revista de História / 2013, Atlântico Equatorial (d), Sociabilidade (d), Poder (d), América Portuguesa (d), Fronteiras (d)

A Amazônia portuguesa compreende uma área singular no conjunto das possessões ultramarinas lusitanas. Área de colonização tardia, cuja ocupação teve início cerca de um século após a conquista do litoral americano, ela conheceu relações sociais e políticas que demandam modelos explicativos próprios.

A sociedade colonial emergente nesta área da América portuguesa foi profundamente demarcada pelas relações mantidas com os povos indígenas ali estabelecidos. Povos diversos, que fique bem entendido, com demandas e agendas distintas, não raro discordantes. Da mesma forma, as relações econômicas emergidas naquela região guardam uma relativa singularidade, se comparadas às outras áreas do império. As atividades extrativistas cedo assumiram a condição de atividade estruturante em larga parcela do território. Elas não reinaram, no entanto, exclusivas. A criação de gado, a monocultura da cana, a agricultura de alimentos (especialmente da mandioca) e as atividades de beneficiamento (da mandioca, da pesca, do extrativismo) conviveram com a produção de canoas e de um sem número de artefatos necessários ao dia-a-dia da colônia.

Outra dimensão relevante deveu-se ao fato de que o governo que se estabeleceu na Amazônia portuguesa não apenas foi distinto, do ponto de vista administrativo, do governo do Estado do Brasil como dele permaneceu separado por cerca de duzentos anos, conformando assim dinâmicas de gestão diferenciadas que, de modo usual, não se subordinavam àquelas aplicadas ao Estado do Brasil.

Entender as particularidades da Amazônia portuguesa significa problematizar a plasticidade da política imperial e, mais importante, o quanto ela foi pautada pelo movimento inverso ao da conquista. A experiência amazônica permite a avaliação do quanto as questões apresentadas pelas colônias foram determinantes para o dimensionamento da política imperial. Só a análise circunstanciada dos diversos processos vividos na região pode fazer emergir a singularidade daquela parte do mundo colonial e a potencialidade que ela guarda para a formulação de novas perspectivas de análise sobre a política imperial e sobre os limites de modelos explicativos que a assumem como determinada pelas necessidades da metrópole e não como resultado de uma negociação política.

Desde 1621, a Amazônia portuguesa constituiu um imenso território, reunindo conformações que acabaram por se mostrar distintas e diversas. As capitanias do Maranhão e do Grão-Pará compreendiam áreas tão vastas que ultrapassavam os limites do que hoje conforma a região norte. Densamente povoadas por povos indígenas, tais capitanias foram objeto de uma política indigenista singular e longeva que defendeu a incorporação daqueles povos à sociedade colonial. Da mesma forma, sua condição de área periférica do império viu emergir relações singulares, tão mais à revelia do controle administrativo do império quanto mais distante dos polos de irradiação do poder na colônia: Belém e São Luís.

O dossiê O Atlântico equatorial: sociabilidade e poder nas fronteiras da América portuguesa problematiza as especificidades da colônia portuguesa naquela parte do império. A política indigenista implementada, a complexidade das políticas indígenas, a diversidade das trajetórias históricas de seus diferentes atores sociais, as relações havidas com os povos indígenas, as estruturas econômicas emergidas nos diferentes pontos da região, os conflitos políticos, entre outras instâncias da vida colonial, constituem as temáticas a serem debatidas. Por meio delas, o passado colonial amazônico pode ser percebido em sua singularidade e pode dimensionar a plasticidade da política imperial portuguesa, especialmente diante da diversidade e dos problemas apresentados por uma região cuja conformação geográfica e social demandava políticas próprias. E, ainda hoje, sua inteira compreensão se constitui em um dos grandes desafios deste país.

Antes de apresentar os artigos, consideramos ser necessário situá-los diante da produção historiográfica relativa a esta parte do Império português. Apesar de constantemente relacionada à natureza, o que constitui a Amazônia como espaço são (e foram) as pessoas que lhe atribuíram (e atribuem) significado. Apesar de óbvia, a assertiva é necessária a fim de dirimir eventuais surpresas diante do volume de referências acionadas pelos diversos autores. Desde o século XVII, intelectuais de origem e orientação variada se ocupam da compreensão da experiência colonial. A seguir, ensaiamos uma periodização.

Não se trata, evidentemente, de mera compulsão do ofício. O ensaio de periodização sugerido tem por objetivo situar os textos do dossiê, indicando o momento de sua produção, tendo a historiografia acerca da Amazônia portuguesa em perspectiva. Encaminhamos, então, um exercício de compreensão da historiografia voltada para a análise do Atlântico equatorial, suas singularidades e os nexos que os vinculam ao império. Acompanhe-nos.

A produção historiográfica relativa à Amazônia portuguesa pode ser situada em cinco momentos. O primeiro deles define o roteiro inicial das narrativas subsequentes. Nele, consubstanciou-se uma narrativa épica da conquista. Seus autores foram homens vinculados à estrutura administrativa do império, profundamente comprometidos com o processo de consolidação do domínio luso nessa parte do território americano conquistado da Espanha durante a União Ibérica. Bernardo Pereira de Berredo e Alexandre Rodrigues Ferreira foram os seus arquitetos.

O primeiro, governador do Estado do Maranhão, elaborou uma das primeiras narrativas sobre a conquista e a colonização da região. Seus Anais históricos do Estado do Maranhão abarcam tanto a chegada dos primeiros conquistadores quanto o estabelecimento das colônias e os conflitos envolvendo reinóis, americanos e indígenas.3 O segundo, naturalista, protagonista da mais importante expedição científica durante a colonização portuguesa, construiu narrativas complementares às formuladas por Berredo. Alexandre Rodrigues Ferreira preocupou-se em expor a origem das vilas e lugares, em descrever os fortes, em ressaltar as relações mantidas com os povos indígenas.4 Ambos produziram uma história factual e narrativa, voltada para o engrandecimento e o destaque da ação portuguesa, envolvidos que estavam com a luta pela garantia do domínio português sobre o território conquistado à Espanha.5

O segundo momento pode ser relacionado às obras de três autores: Antonio Raiol, Manoel Barata e Teodoro Braga. Elas conformam o que, para muitos, constitui a historiografia clássica paraense. Enquanto os autores dos séculos anteriores pensaram a colonização como uma experiência de conquista, cujas disputas remetiam à Europa, estes homens do século dezenove se voltavam para o passado colonial buscando as origens da sociedade paraense e amazônica.

Essa pretensão não significou uma ruptura com o passado português. Não houve, nesse sentido, qualquer tentativa de consagração de heróis locais em oposição aos eleitos pela historiografia anterior. Os portugueses permaneceram como os protagonistas dos episódios escolhidos como demarcadores da trajetória histórica da região. Francisco Caldeira Castelo Branco, Pedro Teixeira, Antonio Vieira, Francisco Xavier de Mendonça Furtado, João Pereira Caldas, entre outros representantes da administração colonial, perduraram como os agentes históricos por excelência da história contada. Não obstante, uma inflexão pode ser percebida.

Menos do que o elogio à ação portuguesa foi a busca pelas raízes da sociedade paraense o que moveu esses intelectuais. Guardadas as especificidades e consideradas as pretensões de cada um, todos estavam envolvidos com o desvendamento das singularidades paraenses e das suas potencialidades. Os títulos de suas obras são muito sugestivos nesse sentido: História colonial do Pará, Ephemérides paraenses e História do Pará. 6 Essa, desde onde percebemos neste ponto de nossas reflexões, é a inflexão promovida por esse momento: a eleição da região como protagonista importante da narrativa construída.

O terceiro momento é protagonizado por Arthur Cezar Ferreira Reis. Seguidor de Gilberto Freyre, este intelectual amazonense arvorou-se da gigantesca tarefa de integrar a região nos quadros da historiografia nacional. Sua produção é demarcada por duas matrizes: em primeiro lugar, o estabelecimento de nexos entre a história nacional e a trajetória histórica amazônica; em segundo lugar, a valorização do Estado como o principal promotor das inflexões políticas, sociais e econômicas havidas na região.

A noção de plasticidade é uma constante na obra de Arthur Reis. Enquanto Gilberto Freyre a atribuía aos portugueses, o historiador da Amazônia a estendia aos demais agentes que participaram da formação da sociedade amazônica. A região que emerge da obra de Arthur Reis é diversa como o Brasil e compartilha das mesmas matrizes africanas, europeias e indígenas. Não é, porém, neste único sentido que sua obra se integra à historiografia tida como nacional. Ela buscou articular-se aos estudos que buscaram perceber o sentido da colonização.7

Arthur Cezar Ferreira Reis produziu por cerca de cinquenta anos, de modo que o quarto momento da historiografia colonial acerca da América portuguesa não lhe é subsequente, mas concomitante. É nele, todavia, que se percebe a maior inflexão na produção historiográfica de que tratamos. Até aqui, a experiência colonial portuguesa na região é percebida como uma narrativa sequencial, em relação à qual se atribui um único sentido, demarcado pelos primeiros cronistas, ao tempo da colônia. Significativo, nesse sentido, é o fato de os estudos referidos até aqui basearem-se, fundamentalmente, em um conjunto restrito de fontes de natureza oficial – marcadamente, cronistas e representantes da Coroa.

A produção subsequente introduz uma nova dimensão nas análises sobre a experiência colonial: o recurso a séries documentais, de natureza diversa, analisadas por meio de modelos conceituais que ensejavam a crítica às teses precedentes. Autores como Manuel Nunes Dias, Antonio Carreira, Ciro Flamarion Cardoso, Vicente Sales, Dauril Alden, Robin Leslie Andersen, David Sweet e John Hemming estabeleceram novas periodizações e inauguraram novos campos de pesquisa.8

Finalmente, o quinto momento. Estudos construídos desde a década de 1980 que, influenciados por essa última onda de trabalhos, aprofundaram a pesquisa documental e buscaram compreender outras nuances da vida colonial amazônica. Autores como Ângela Domingues, Antonio Porro, Auxiliomar Ugarte, Barbara Sommer, Décio Guzmán, Francisco Jorge dos Santos, José Alves de Souza Júnior, Maria Regina Celestino de Almeida e Nádia Farage9 ampliaram enormemente o escopo documental das análises. Documentos provenientes dos arquivos da região, assim como aqueles disponibilizados pela digitalização de arquivos portugueses permitiram o vislumbre de dimensões insuspeitas da vida amazônica.

Os artigos que compõem o dossiê participam desse último momento. A experiência colonial não é percebida mais como um bloco único e homogêneo. Isto decorre, em larga medida, da diversidade da documentação pesquisada e dos procedimentos de investigação adotados – correspondências, devassas e atestações, por exemplo, não são percebidos mais como expressões de um real a ser alcançado, mas como apropriações das experiências vividas.

Rafael Chambouleyron e Vanice Melo analisam a expansão agropecuária nas capitanias do Maranhão e do Piauí. A análise proposta relaciona a conquista de novas áreas coloniais a uma conjuntura complexa, na qual se articulam as relações intraelites e delas com a Coroa, as relações havidas com os povos indígenas e eventuais surtos epidêmicos. Márcia Mello analisa a formação da pequena nobreza na Amazônia portuguesa, apontando as redes nas quais os agentes sociais se inserem e adquirem sentido. Simei Torres perquire o degredo como uma estratégia política do Estado português, com vistas à manutenção dos domínios ultramarinos. Na Amazônia portuguesa, os degredados foram incorporados às iniciativas de ocupação, controle e exploração do território colonial. Almir Diniz de Carvalho Júnior considera a inserção dos povos indígenas na sociedade colonial por meio da categoria “índios cristãos”. Karl Arenz participa do dossiê apresentando a transcrição e tradução de um documento de autoria do padre luxemburguês João Felipe Bettendorff, superior da Missão do Maranhão. A carta situa as dificuldades da missão na Amazônia portuguesa e expõe as tensões que a Companhia de Jesus vivia em sua atuação no Império português. Seu artigo investiga as formas pelas quais os povos indígenas incorporados às unidades coloniais integraram-se às dinâmicas daquele novo universo sem deixar, no entanto, de impor limites às pretensões dos conquistadores. Mauro Cezar Coelho e Rafael Rogério Nascimento analisam o veredicto dos representantes da Coroa acerca da ação dos diretores das povoações do Diretório dos Índios. Conforme argumentam os autores, o que aqueles representantes percebem como desvios morais expressa, de outro modo, a emergência de poderes alheios aos interesses metropolitanos. Heather Roller perscruta a inserção de indígenas nas expedições de coleta das drogas do sertão. Seu artigo argumenta que o protagonismo indígena se manifestava na escolha por atividades garantidoras de certa autonomia, evidenciando a sua condição de agente histórico pleno, mesmo no interior da sociedade colonial. Juciene Ricarte Apolinário demonstra que as relações havidas entre a Coroa portuguesa e os povos indígenas não obedeceram aos princípios e projeções formulados. O interesse metropolitano em transformá-los em agentes defensores das fronteiras portuguesas não se concretizou sem negociações.

Ao analisarem as relações de poder e as sociabilidades recorrentes na fronteira equatorial da América portuguesa, os artigos aqui reunidos acusam algumas das singularidades da experiência colonial naquela porção equatorial do império. O primeiro aspecto a ser ressaltado é a distinção que aquela parte do território conquistado guarda em relação ao Estado do Brasil. A preponderância das atividades extrativas, a importância incontestável dos povos indígenas (tanto no que se refere à reprodução da matriz econômica, quanto no que tange à defesa do território) e a profunda maleabilidade da estrutura de poder (a qual, de um lado, demarcava vínculos com a Coroa e, de outro, balizava as relações internas, próprias da vida amazônica) vislumbram dinâmicas sociais singulares, próprias não apenas das regiões de fronteira, mas específicas da experiência equatorial amazônica.

Notas

  1. BERREDO, Bernardo Pereira de. Anais históricos do Estado do Maranhão. 2ª edição. Florença: Typographia Barbera, 1905.
  2. FERREIRA, Alexandre Rodrigues. Viagem filosófica ao Rio Negro. 2ª edição. Organizada, atualizada, anotada e ampliada por Francisco Jorge dos Santos, Auxiliomar Silva Ugarte e Mateus Coimbra de Oliveira. Manaus: Edua / Editora do Inpa / Fapeam, 2007.
  3. Um terceiro autor compõe esse primeiro momento da produção historiográfica. Trata-se de Antonio Ladislau Monteiro Baena. Ainda que tenha vivido e escrito em meados do século XIX, no contexto das lutas pela Independência (as quais se arrastam, na Amazônia portuguesa, até o final da primeira metade do século XIX), a narrativa histórica de António Baena é profundamente devedora das duas obras citadas. Em relação à experiência portuguesa, Baena segue os autores que lhe antecederam, consolidando, portanto, a perspectiva inaugurada por Bernardo Pereira de Berredo e Alexandre Rodrigues Ferreira. BAENA, Antonio Ladislau Monteiro. Compêndio das eras da província do Pará. Belém: Universidade Federal do Pará, 1969.
  4. BARATA, Manoel. Formação histórica do Pará. Belém: Universidade Federal do Pará, 1973; BRAGA, Theodoro. Apostillas de historia do Pará. Belém: Imprensa Oficial do Estado, 1915; RAIOL, Domingos Antônio. Um capítulo de história colonial do Pará. Revista de Estudos Paraenses. Belém: Tip. do Diário Oficial. 1894.
  5. REIS, Arthur Cezar Ferreira. A formação espiritual da Amazônia. São Paulo: SPVEA, 1964; Idem. A Amazônia que os portugueses revelaram. Belém: Secretaria de Estado da Cultura, 1994; Idem. A Amazônia e a cobiça internacional. Rio de Janeiro: Civilização Brasileira, 1982.
  6. DIAS, Manuel Nunes. Fomento e mercantilismo: a Companhia Geral do Grão-Pará e Maranhão, 2 v. Belém: Universidade Federal do Pará, 1970; CARREIRA, António. A Companhia Geral do Grão-Pará e Maranhão: o comércio monopolista Portugal-África-Brasil na segunda metade do século XVIII. São Paulo: Editora Nacional, 1988; CARDOSO, Ciro Flamarion S. Economia e sociedade em áreas coloniais periféricas: Guiana Francesa e Pará, 1750-1817. Rio de Janeiro: Graal, 1984; SALES, Vicente. O negro no Pará sob o regime da escravidão. Belém: IAP, 2005 (Programa Raízes); ALDEN, Dauril. O significado da produção de cacau na região amazônica, no fim do período colonial: um ensaio de história econômica comparada. Belém: UFPA / Naea, 1974; ANDERSON, Leslie Robinson. Following Curupira: colonization and migration in Pará, 1758 to 1930 as a study in settlement of the humid Tropics. Doctorate dissertation of Philosophy in History, University of California, Davis, 1976; SWEET, David G. A rich realm of nature destroyed: the middle Amazon valley, 1640-1750. PhD thesis, Madison, University of Wisconsin, 1974; HEMMING, John. Amazon frontier: the defeat of the Brazilian Indians. Londres: MacMillan, 1987.
  7. DOMINGUES, Ângela. Quando os índios eram vassalos: colonização e relações de poder no norte do Brasil na segunda metade do século XVIII. Lisboa: Comissão Nacional para as Comemorações dos Descobrimentos Portugueses, 2000; PORRO, Antonio. O povo das águas: ensaios de etno-história amazônica. Rio de Janeiro: Vozes, 1995; UGARTE, Auxiliomar Silva. Sertões de bárbaros: o mundo natural e as sociedades indígenas da Amazônia na visão dos cronistas ibéricos (séculos XVI-XVII). Manaus: Editora Valer, 2009; SOMMER, Barbara A. Negotiated settlements: native Amazonians and Portuguese policy in Pará, Brazil, 1758-1798. Doctorate dissertation of Philosophy, History, University of New Mexico, Albuquerque, 2000; GUZMÁN, Décio. História de brancos: memória e historiografia dos índios Manao do Rio Negro (sécs. XVIII-XX). Dissertação de mestrado, Universidade Estadual de Campinas, Campinas, 1998; SANTOS, Francisco Jorge dos. Além da conquista: guerras e rebeliões indígenas na Amazônia pombalina. Manaus: Editora da Universidade do Amazonas, 1999; SOUZA JÚNIOR, José Alves de. Tramas do cotidiano: religião, política, guerra e negócios no Grão-Pará dos Setecentos – um estudo sobre a Companhia de Jesus e a política pombalina. Tese de doutorado, Pontifícia Universidade Católica, São Paulo, 2009; ALMEIDA, Maria Regina Celestino de. Os vassalos d’el rey nos confins da Amazônia: a colonização da Amazônia ocidental, 1750-1798. Dissertação de mestrado, Universidade Federal Fluminense, Niterói, 1990; FARAGE, Nádia. As muralhas dos sertões: os povos indígenas no Rio Branco e a colonização. Rio de Janeiro: Paz e Terra; Anpocs, 1991.

Patrícia Melo Sampaio – Possui mestrado (1994) e doutorado em História (2001) pela Universidade Federal Fluminense e pós-doutorado pela Unicamp (2013). Desde 1986 é professora do Departamento de História da Universidade Federal do Amazonas. Atua nas áreas de história indígena e do indigenismo, história colonial / imperial (Brasil e Amazônia) e história da escravidão africana na Amazônia. É líder do grupo de pesquisa História Indígena e da Escravidão Africana na Amazônia (Hindia) e pesquisadora do Núcleo de Pesquisa em Política, Instituições e Práticas Sociais – Polis. Participa do mestrado de História (PPGH / Ufam) e do mestrado / doutorado em Sociedade e Cultura na Amazônia (PPGSCA / Ufam) (Fonte: Plataforma Lattes / CNPq).

Mauro Cezar Coelho – Possui graduação e bacharelado em História pela Universidade Federal Fluminense (1994), graduação e licenciatura em História pela Universidade Federal Fluminense (1994), mestrado em História Social da Cultura pela Pontifícia Universidade Católica do Rio de Janeiro (1996) e doutorado em História Social pela Universidade de São Paulo (2006). Atualmente é coordenador de curso de licenciatura em História / PARFOR da Universidade Federal do Pará e professor adjunto na mesma universidade. Tem experiência na área de História, com ênfase em História colonial e ensino de História, atuando principalmente nos seguintes temas: Amazônia colonial, história indígena e do indigenismo, história da ciência, história da educação e ensino de história (Fonte: Plataforma Lattes / CNPq).


COELHO, Mauro Cezar; SAMPAIO, Patrícia Melo. Apresentação. Revista de História, São Paulo, n. 168, 2013. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Estado e Poder: Sociedade Civil / História & Perspectivas / 2013

A Revista História & Perspectivas traz nesta edição o dossiê temático intitulado “Estado e Poder: Sociedade Civil”. O tema remete ao recorte apresentado pelo VII Simpósio Nacional Estado e Poder: Sociedade Civil, realizado em Uberlândia de 20 a 22 de agosto de 2012. O evento, originário do Núcleo de Estudos Estado e Poder no Brasil – Nupep / U.F. Fluminense, nessa 7ª edição, partilhou a organização com o Núcleo de Pesquisa e Estudos em História, Cidade e Trabalho – Nupehcit / UFU, ao qual se vincula a revista. O objetivo do evento foi promover uma avaliação do estado atual dos estudos sobre a problemática da sociedade civil na sua relação com o Estado, em distintos espaços e temporalidades, aprofundando o intercâmbio de pesquisas e reflexões sobre a temática, buscando também identificar os embates atuais em torno de práticas intra e interestados no movimento mais amplo de mundialização do capital, destacando-se os seguintes questionamentos: qual o papel desempenhado pelos agentes sociais e pelos “intelectuais” nesse processo? Como podemos pensar as atuais configurações políticas, sociais, econômicas e culturais do Estado desenvolvimentista, em suas relações internas e internacionais? Como se colocam as questões humanas e ambientais dentro dessa configuração? Como esses embates e combates têm sido travados na sociedade civil? Constatamos que a atual conjuntura impõe novos desafios ao pensamento crítico e nos colocamos diante da necessidade de repensarmos as práticas do passado e do presente, descortinando memórias e procurando abrir sendas e veredas em direção a novas utopias, no esforço incessante de incrementar o diálogo acadêmico com e a partir de práticas sociais, em toda a sua complexidade.

Vale lembrar que a História & Perspectivas, nos idos de 1991, na época Revista do curso de História da UFU, dedicou um número especial aos 100 anos de Antônio Gramsci, com uma observação dos editores que nos parece ainda fundamental: “a elaboração aqui apresentada recusa-se a ‘usar’ Gramsci. Ou seja, recusa reduzir o texto gramsciano à condição de verdade. Mais do que verdade, o pensamento gramsciano é estímulo à produção. Este é o nosso propósito” (Conselho Editorial. História & Perspectivas, n. 5, 1991, p. 3). O “fascínio” dos textos gramscianos se mantém, desafiando ortodoxias, buscando um diálogo aberto a novas indagações, estimulando o pensamento crítico e totalizante e, no fundo, buscando alternativas à realidade existente e apontando para outros possíveis mundos (onde caibam muitos mundos, no dizer zapatista), característica de produções no campo do marxismo.

Recebemos muitas contribuições, com artigos variados, demonstrando a pertinência e atualidade da ampla temática proposta. Todavia, o presente número apresenta apenas alguns dos artigos, ficando os demais para outras edições. Os textos que compõem este dossiê da História & Perspectivas são, em parte, de autores presentes no VII Simpósio, que apresentam artigos onde discutem a relação entre Estado e sociedade civil na perspectiva proposta por Antônio Gramsci. Dessa forma, Elder Andrade de Paula mostra como a recente complexificação da sociedade civil trouxe também novos refinamentos nas práticas hegemônicas, mormente no que se refere ao campo do conservacionismo ambiental, terreno de atuação das grandes ONGs. Sonia Regina de Mendonça trata das políticas agrícolas na primeira metade do século XX, correlacionando sua dinâmica aos interesses patronais agroindustriais organizados junto a dois aparelhos de hegemonia da sociedade civil do período: a Sociedade Nacional de Agricultura e a Sociedade Rural Brasileira. Maurício G. Margalho investiga a sociogênese do projeto industrial dos anos 1930-1940 por meio da trajetória do grupo empresarial Klabin. O artigo de Dilma Andrade de Paula, por meio do conceito de “intelectual”, propõe uma discussão sobre o papel do conhecimento no campo das Ciências Humanas e Sociais, em particular na História, em sua trajetória recente.

O primeiro e o último artigo do dossiê são de autores externos ao evento. Mabel Thwaites Rey e José Castillo, instigados pelo recente retorno de temas como desenvolvimento, dependência e o papel desempenhado pelos Estados Nacionais na América Latina, realizam uma grande revisão bibliográfica dentro do marxismo e do neomarxismo em torno desses temas. É o artigo que abre o dossiê, que auxilia a refletir de maneira global os destinos históricos da América Latina, desde as primeiras décadas do século XX até os dias de hoje, os desafios de ontem e os atuais. Para finalizar o dossiê e instigar a discussão, contamos com artigo de João Alberto, em outra vertente do marxismo, apresentando outra perspectiva de análise do Estado e da sociedade civil, propondo uma reflexão sobre o conjunto da obra teórica de João Bernardo, historiador marxista português, apresentando os “gestores” como classe dominante e o seu poder institucional de controle do processo produtivo capitalista. Acreditamos, com a apresentação de artigos com perspectivas distintas, que a busca de saídas para o “pensamento único” e o “fim da História” não deva ser a formação de novas ortodoxias e novos encarceramentos do pensamento. A complexidade do real nos instiga a buscar a pluralidade e desafiar nossos próprios pressupostos.

Conselho Editorial


Estado e Poder: Sociedade Civil. História & Perspectivas, Uberlândia, v.26, n.48, 2012. Acessar publicação original [DR].

Acessar dossiê

 

Poder e Política na América Portuguesa / Politeia: História e Sociedade / 2012

A publicação deste dossiê – dedicado aos estudos coloniais – evidencia um momento significativo da permanente renovação pela qual tem passado esse importante campo historiográfico, trilhado pela história nacional desde seu nascimento, no século XIX – ou mesmo antes, se considerarmos as crônicas, notícias e “histórias” existentes desde o século XVI. No momento de afirmação do Estado Nacional, recém-emancipado da metrópole lusitana, coube ao Instituto Histórico e Geográfico Brasileiro, ao lado de intelectuais de enorme envergadura, como Francisco Adolfo de Varnhagen, a ereção do passado colonial como gênese da nação e nascedouro da identidade nacional em formação.

Esse, aliás, é o tema do artigo de Elton Salgado e Avanete Pereira, presente nesse dossiê, que discute o nascimento da historiografia colonial a partir da obra História Geral do Brazil, de Varnhagen, tomando-a como expressão de um projeto de afirmação de uma dada identidade nacional pautada na continuidade entre o passado colonial e o estado monárquico. Os autores baseiam sua análise em uma visão comparada entre esse paradigma historiográfico, estabelecido no século XIX, e a historiografia da década de 1930, marcada pela revisão crítica do período colonial, como se vê nas obras de Caio Prado Jr. e Sérgio Buarque de Holanda. Indo além, os autores inserem no debate a obra O Brasil na história, de autoria do intelectual sergipano Manoel Bonfim, raramente lembrado pelos estudiosos da historiografia colonial.

De forma exploratória, o artigo “Conflitos e problemas no cotidiano dos governadores da Bahia, 1750-1760”, reúne e analisa diversas fontes referentes às durezas enfrentadas pelas autoridades coloniais, dando-nos uma pequena amostra de uma pesquisa de maior fôlego sobre os governadores da Bahia na segunda metade do século XVIII. Lançando mão do acervo disponível por meio do Projeto Resgate de Documentação Histórica, o autor explora a correspondência trocada entre as autoridades locais – enviadas do reino para o exercício da governança na América – e a metrópole, na qual aparecem os conflitos enfrentados no cotidiano colonial, incluindo desvios de dinheiro, desobediência às determinações régias e desconforto causado pelo clima e pelas doenças que acometiam também os poderosos.

Questões políticas e administrativas também estão presentes no artigo de Rodrigo Monteiro e Letícia Ferreira, que tem como tema o pagamento do dote do casamento de Catarina de Bragança com o rei Carlos II, selando a aliança de Portugal com a Inglaterra, no contexto da restauração lusitana frente ao domínio espanhol. Além de contribuir para o pagamento do dote, as possessões ultramarinas deveriam também ajudar a Coroa a saldar a dívida referente à indenização a ser paga aos holandeses pela perda de Pernambuco e capitanias vizinhas. O artigo explora as atas da câmara de Salvador referentes à cobrança e pagamento dessas contribuições, evidenciando que, para além do vultoso dispêndio, estava em jogo o vínculo entre os vassalos e a Coroa, ou seja, entre a metrópole a colônia, reafirmando laços de dependência e de soberania do monarca.

A restauração lusitana aparece também no artigo de Pablo Sabater, que discute a influência cultural da Espanha na iconografia régia a partir da pintura portuguesa daquele período. Indicando um caminho importante de renovação da historiografia colonial nos dias de hoje, o autor aproxima o universo da cultura e das artes ao universo da política, evidenciando que a afirmação da nova monarquia instaurada em Portugal após a separação da Espanha passava tanto pela construção da imagem do rei, inspirada no modelo espanhol, quanto pelos rituais de aclamação do novo monarca, tais como os que tiveram lugar no Rio de Janeiro, em 1641, durante o governo de Salvador Correa de Sá e Benevides, escrutinado pelo autor a partir de um relato contemporâneo.

A temática da festa e de sua importância política para a sociedade colonial aparece também no artigo de Humberto Fonsêca, o qual se concentra na procissão de Corpus Christi, vista, pelo autor, como ritual profano e sagrado, expressão da devoção popular, celebração festiva e, ao mesmo tempo, ritual de afirmação do poder e das hierarquias vigentes. A presença da procissão de Corpus Christi em diferentes partes do império lusitano revela uma continuidade fundamental do barroco português, embora também se possa perceber a emergência de especificidades locais, tais como a figura de um anão presente na procissão organizada pela Câmara de Salvador em 1673 e em diferentes momentos até o início do século XVIII, de acordo com a documentação consultada pelo autor.

Os artigos presentes no dossiê trazem à tona diferentes caminhos de pesquisa e de renovação da historiografia colonial, em particular no campo da história política e administrativa – favorecida pela enorme quantidade de fontes disponíveis, uma vez que os arquivos coloniais guardavam preferencialmente esse tipo de documentação – e da história cultural – ajudada pela presença significativa de rituais e festas no cotidiano colonial – passando, forçosamente, pelas interseções entre ambas, uma vez que a política e a cultura eram dimensões profundamente imbricadas naquela sociedade – não sendo, aliás, completamente dissociadas, na atualidade.

Cumpre, portanto, saudar o presente dossiê, que surge também como afirmação da Politeia enquanto espaço de produção e divulgação da historiografia baiana, nacional e internacional.

Fabricio Lyrio Santos – Professor da Universidade Federal do Recôncavo da Bahia (UFRB) Doutor em História Social pela Universidade Federal da Bahia (Ufba) E-mail: [email protected]


SANTOS, Fabricio Lyrio. Apresentação. Politeia: História e Sociedade. Vitória da Conquista, v.12, n. 1, 2012. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Cultura e Poder / Revista Trilhas da História / 2011

A organização do Dossiê Cultura e Poder, apresentado como o primeiro número da Revista Trilhas da História, resulta da seleção de textos produzidos para o VI Ciclo de Palestras “A História em Movimento: Cultura e Poder na Antiguidade e no Tempo Presente”, ocorrido em 2010, no campus de Três Lagoas, Universidade Federal de Mato Grosso do Sul. Resulta também de trabalhos desenvolvidos no Curso, em 2011. Já no contexto do Ciclo tínhamos por objetivo discutir a história antiga e no tempo presente, buscando culturas, poderes e saberes em objetos, sujeitos e tempos distintos.

Se o objetivo, neste momento, é a abertura de trilhas na história, nada melhor que iniciarmos com o texto “Homossexualidade na Bíblia Hebraica ou uma Historiografia Bicha?”, de Fernando Cândido da Silva, ao problematizar, de forma provocativa, esta temática da cultura e poder, mostrando a sua relevância na construção de outras histórias, não apologéticas, nem muito menos neutras, mas reveladoras da potencialidade que o tema enuncia.

O texto “As transformações das imagens de Dioniso (séculos VI e V a.c): o caso da Tirania”, de Leandro Mendonça Barbosa, contribui semelhante ao anterior, para refletirmos sobre a importância dos estudos da antiguidade. Ao trabalhar, com maestria, as transformações da imagem de Dioniso, por meio da análise dos vasos fabricados nos séculos relacionados e de pesquisadores que tratam da temática, o autor discorre sobre a utilização deste deus pelos governos liderados pela tirania, observando como as divindades campestres tornaram-se presentes no meio urbano.

O texto “O Batalhão Sagrado de Tebas: militarismo e homoafetividade na Grécia Antiga”, de Fortunato Pastore, dando continuidade aos estudos da antiguidade, objetiva, conforme o autor, contribuir para a compreensão da “capacidade militar do Batalhão Sagrado de Tebas, unindo fatores e interpretações que, geralmente, se apresentam separadas ou com frágil vinculação”. O cerne está na discussão da relação entre a capacidade militar e a homoafetividade na Grécia Antiga, partindo da análise de Epaminondas, apresentado como o principal representante do Batalhão Sagrado de Tebas, e um dos responsáveis pelas inúmeras vitórias desse corpo militar.

Adentrando as reflexões do presente – ou de um presente mais próximo – a discussão de Isabel Camilo de Camargo, em “A ocupação de Paranaíba no século XIX e a gênese do latifúndio na região”, traz o debate do século XIX para este tempo, ao enunciar o processo de ocupação da terra no sul de Mato Grosso, e enfatizar a gênese da grande propriedade em Paranaíba, com o olhar para os sujeitos envolvidos. Sua discussão inova por propor um debate para além da história dos pioneiros, ao enfocar as pessoas comuns como agentes da história e problematizar a questão da escravidão, tão importante por adentrar na “periferia” da escrita da história e se dispor a discutir abordagens consagradas na historiografia regional.

O artigo “Dinâmica econômica e organização territorial da Mesorregião Leste de Mato Grosso do Sul”, de Patrícia Helena Minali e Edima Aranha Silva, ambas geógrafas, contribui para a história e a compreensão das relações de poder, ao enfocarem a “ferocidade das ações” e as mudanças na dinâmica territorial da Mesorregião Leste de Mato Grosso do Sul, particularmente com o aumento ostensivo do plantio de eucaliptos, visando atender aos interesses do capital. As figuras apresentadas pelas autoras (mapas, tabelas), em especial as que se referem ao modelo celulose-papel, possibilitam entender o peso do poder da empresa Votorantim na ocupação de espaços em redes geográficas pelo globo terrestre, internacionalizando o trabalho e, consequentemente, a exploração do meio-ambiente, do trabalhador e da sociedade como um todo.

Os artigos “Sob a Insígnia do Trabalho: Notas Sobre a Potencialidade Transitivo-Fundacional da Sociedade”, de Júlio Cezar Ribeiro, e “Um exercício historiográfico sobre o tema trabalho: um breve ensaio”, de Juliano Alves da Silva, discutem a importância do trabalho como categoria analítica e expressão da ação humana, a partir de abordagens que propõem tanto o debate teórico, particularmente o primeiro, quanto a reflexão das experiências do cotidiano dos sujeitos no presente, a exemplo da classe trabalhadora nas indústrias de Aparecida do Taboado-MS, realizada por Silva. A questão do poder norteia as abordagens, pois é impossível discutir o trabalho sem relacioná-lo ao poder.

O texto “Edificando a diferença: mecanismos de Biopoder durante a construção da Usina Hidrelétrica de Ilha Solteira”, de Tiago de Jesus Vieira, aponta para os mecanismos de poder utilizados pela empresa responsável na construção da hidrelétrica de Ilha Solteira e, mais que a usina, pela edificação da cidade e a estratificação dos sujeitos. Utilizando o jornal “O Barrageiro”, e fontes da CESP, entre outras, inspirado em Michel Foucault, discorre sobre os meandros de poder e os interesses implícitos nas práticas da empresa.

O ensaio de Graduação “A ditadura econômica e a política autoritária: subversão dos militantes católicos do IAJES na região do Alto Paraná”, de Marcelo Fernandes Brentan, principiando pela análise das formas repressivas de Getúlio Vargas aos anos da ditadura militar, tal como sobre os projetos econômicos desses contextos, busca analisar as pastorais sociais e parte da igreja católica na região do Alto Paraná, com o olhar para a relação entre a igreja e a política. A sua preocupação está em problematizar o papel do IAJES (Instituto Administrativo Jesus Bom Pastor), nos anos de 1960 e 1990, entendendo-o como propulsor de novos movimentos sociais.

Outro ensaio de Graduação, que traz uma temática profundamente relevante sobre a cultura e poder, é o de Larissa Fernanda Garcia Botacci, em “A construção social do sexo: alguns aspectos a considerar sobre a terceira idade”. Partindo do estudo sobre os sentidos da sexualidade dos idosos, a autora busca “descortinar alguns significados e implicações do comportamento sexual no processo de envelhecimento”. A sua abordagem é instigante para repensarmos o lugar ocupado pelo idoso em nossa sociedade. Ao desvendar preconceitos possibilita que possamos avançar no debate.

O terceiro ensaio de Graduação, “A luta pela terra em Andradina-SP: os posseiros da Fazenda Primavera”, de Hélio Carlos Alexandre, apresenta uma discussão fundamental para pensarmos a cultura e o poder na história do Brasil. Ao trabalhar a questão agrária na fazenda Primavera e a luta dos posseiros até o assentamento Primavera, o autor nos faz enxergar os homens e mulheres que há décadas construíram suas histórias, alicerçando ações em memórias de luta. Ao analisar esses sujeitos, o autor, por ser parte dessa história, em meio a ela vai se enredando, mostrando a trama que envolve milhares de famílias brasileiras, historicamente relegadas ao peso do latifúndio, do poder econômico e político que impera em nossa sociedade.

Somando-se aos Artigos e Ensaios temos ainda duas Resenhas. A primeira de Charles Assi, graduando em História, na UFMS de Três Lagoas, e da autora desta apresentação. A obra resenhada, “Nervos da terra – Histórias de Assombração e Política entre os Sem-Terra de Itapetininga-SP”, do antropólogo Danilo Paiva Ramos, conta histórias e memórias da luta pela terra, a partir do estudo das narrativas das “histórias de assombração”, contadas pelos assentados, entrelaçando luta e política. Uma abordagem instigadora do diálogo entre a História e a Antropologia.

A segunda Resenha, escrita pelo graduando em História, do CPTL / UFMS, Dante Duran Previatti de Souza, apresenta o livro: O mundo se despedaça, de Chinua Achebe. Uma obra que retrata a cultura e a ancestralidade Ibó, da qual Achebe é descendente. Conforme Souza, a abordagem deste autor imprime à obra “um caráter histórico, além do literário”. A seleção desta Resenha, produzida por um acadêmico do segundo semestre do Curso, expressa a esperança de que os graduandos continuem a produzir textos de qualidade, passíveis de serem publicados e horizontes para as novas pesquisas.

Temos ainda uma parte muito especial: as Fontes. Esta seção traz o texto “A utilização de processos-crime em busca de novos sujeitos: perspectivas e desafios”, de Joycimeire Carlos Lélis e Rejane Trindrade Rodrigues, ambas graduandas de História, da UFMS. Na apresentação da fonte, as autoras escolheram um fragmento de um processo criminal, instaurado em Sant’Ana do Paranaíba, em 1881, que versa sobre uma história de amor e de violência. Fazendo um exercício teórico-metodológico, observam os caminhos e descaminhos na interpretação de fontes desta natureza.

As trilhas da história fazem com que sujeitos e tramas se entrelacem, em lugares e tempos diversos: na antiguidade e no presente; na graduação e pós-graduação. Produções advindas de outras áreas, como a Geografia e a Antropologia, contribuem para a confecção de saberes que vão além das especificidades das disciplinas, por possibilitarem um diálogo rico e constante, num exercício interdisciplinar. Que nossas trilhas permaneçam assim, entrelaçando áreas e conhecimentos (de doutores, doutorandos, mestres, mestrandos, graduados e graduandos…) em caminhos que somente se efetivam no desafio da escrita e no sabor da pesquisa.

Maria Celma Borges

Primavera de 2011.


BORGES, Maria Celma. Apresentação. Revista Trilhas da História. Três Lagoas, v.1, n.1, jun. / nov., 2011. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

 

Inquisição, Poder e Sociedade / Politeia: História e Sociedade / 2011

Por 285 anos, entre 1536 e 1821, o Tribunal do Santo Ofício da Inquisição de Portugal foi responsável pela perseguição a mais de 40 mil pessoas em todo o império luso, que compreendia terras da metrópole, ilhas do Atlântico (Açores, Madeira, Cabo Verde, São Tomé), várias regiões da África (a costa ocidental, do Marrocos ao Cabo da Boa Esperança, além de Angola e Moçambique), o Brasil, localidades na Índia (Goa, Cochim) e no extremo Oriente (Macau, Malaca, Nagasaki). Homens e mulheres foram investigados e condenados por crimes contra a fé (judaísmo, maometismo, protestantismo, molinismo, deísmo, libertinismo, críticas aos dogmas etc.) ou contra os costumes e a moral cristã (bigamia, sodomia, feitiçaria, solicitação). As sentenças, em sua maioria lidas publicamente em autos-de-fé, variavam de acordo com o grau de gravidade imputado pelos juízes inquisidores aos delitos cometidos. Cerca de dois mil indivíduos foram condenados à morte na fogueira e a um número muito maior foram impostas penas como a obrigação de ouvir missas, o açoite, o degredo, o confisco dos bens, o uso de hábito penitencial, a prisão perpétua, dentre outras. A documentação resultante desses procedimentos adotados pelo Tribunal do Santo Ofício de Lisboa – processos inquisitoriais e de habilitações, correspondências enviadas e recebidas, denúncias e confissões, cadernos do promotor, de nefandos e de solicitantes etc. – se constitui em registros valiosos para pesquisadores de diversas áreas das ciências humanas pois, a partir dela, é possível, como nos lembra Maria do Carmo Jasmins Dias Farinha, estudar temas relacionados a conflitos sociais, dificuldades econômicas, movimento marítimos, produção literária, censura, arquitetura urbana, toponímia, dentre outros aspectos da vida social dos territórios submetidos ao domínio lusitano.

Apresentamos ao público da Revista Politeia o dossiê Inquisição, poder e sociedade, composto por seis artigos de pesquisadores brasileiros que, a partir da investigação do acervo documental dos cartórios inquisitoriais, se ocupam da história do Santo Ofício português e, especificamente, das ações desta instituição no Brasil entre os séculos XVI e XVIII. O conjunto de textos apresentado é uma importante contribuição para a compreensão da Inquisição portuguesa, de sua dinâmica, funcionamento e historiografia. Reunimos aqui episódios que contam um pouco da história da América portuguesa: alguns trabalhos exploram aspectos relacionados ao cotidiano, às práticas e ideias de coletividades, como os judeus e cristãos-novos que se deslocaram para terras brasileiras; outros se dedicam a acompanhar a trajetória de indivíduos singulares que foram, de algum modo, atingidos pela Inquisição – homens célebres, como Antônio Vieira, ou obscuros, como um certo João de Moraes Montesinhos ou, outro, Alexandre Henriques, moradores da Bahia e das Minas Gerais – que, denunciados, atravessaram o Atlântico, se apresentaram ao Tribunal do Santo Ofício e conheceram os cárceres de Lisboa. Alguns artigos se concentram nas relações de poder que se afirmavam por meio das ações relacionadas à Inquisição – o papel de visitadores e familiares, os denunciantes que agiam motivados pelo desejo de atingir adversários políticos –; outros focam as tentativas do Santo Ofício em controlar a conduta moral e as práticas culturais de homens e mulheres submetidos à Coroa portuguesa.

O primeiro artigo, escrito por Angelo Adriano Faria de Assis, professor de História do Brasil Colonial da Universidade Federal de Viçosa, intitulado “Menorá de mil braços: variações do criptojudaísmo no mundo português” discute a sobrevivência da fé judaica após o decreto real que, em 1497, determinou a expulsão dos judeus de Portugal e, a seguir, a conversão compulsória ao cristianismo daqueles que permaneceram nas terras do reino. Angelo Assis destaca alguns processos inquisitoriais que tiveram por motivação denúncias contra pessoas acusadas de práticas identificadas com a crença judaica, como o respeito ao shabat, as restrições alimentares, o jejum em datas significativas do calendário judeu, as bênçãos e orações etc. O texto adota como ponto de partida a importância da menorá – um candelabro de vários braços, que ostentavam velas que deveriam ficar permanentemente acesas – no mobiliário dos templos judaicos para ressaltar as estratégias adotadas por várias famílias de cristãos novos com o intuito de assegurar a continuidade das práticas religiosas e culturais que lhes conferiam identidade. Assim como as chamas da menorá deveriam se mostrar sempre acesas, também estes cristãos novos se imbuíram da missão de manter permanentemente acesa a chama da fé, mesmo nos momentos em que esta crença foi transformada em ato herético e passível de perseguição e condenação pelos inquisidores do Santo Ofício.

“Terceira Visitação do Santo Ofício às partes do Brasil: Capitanias do Sul, 1627-1628” é o segundo artigo desse dossiê, de autoria de Ana Margarida Santos Pereira, doutoranda da Universidade de Amsterdã. O texto aborda um dos mecanismos pelos quais a Inquisição se fazia presente nos diferentes territórios, mesmo os mais distantes, do império português: a visitação. O Brasil foi alvo de uma primeira visitação em fins do século XVI, ocasião em que o visitador percorreu cidades da Bahia e de Pernambuco. Uma segunda visitação do Santo Ofício se faria presente em terras da Bahia em 1618. A terceira visitação, que se efetiva nos anos de 1627 e 1628, foi a primeira que alcançou as “partes” do Sul, atingindo localidades como o Rio de Janeiro, São Paulo, São Vicente, Santos e Vitória. Essa visitação, embora tenha se constituído em objeto de estudos por José Gonçalves Salvador e Lina Gorenstein, ainda é pouco conhecida e divulgada pelos pesquisadores da Inquisição. A abordagem de Ana Margarida Pereira, tomando como exemplo paradigmático a figura de Luís Pires da Veiga, o personagem principal da terceira Visitação, trata de diferentes aspectos relacionados à atuação dos visitadores: as pompas e solenidades que, em cada localidade, deveriam ser oferecidas ao visitador, os procedimentos adotados para o recebimento de denúncias e confissões, as penalidades impostas aos acusados, dentre outros. A autora enfatiza certa ambiguidade inerente à figura do visitador: pelas pompas que o acompanham e pela autoridade para ditar sentenças, ele é, indiscutivelmente, uma figura de poder; porém, é uma figura que pode ter este poder questionado pelas elites locais – moradores transformados em alvos da ação do visitador poderiam encaminhar à Inquisição denúncias contra o que fosse julgado como “abusos” do agente inquisitorial; em sentido contrário, o visitador também poderia ser alvo de denúncias por “complacência” (permitir que seus acompanhantes viajassem em companhia de “mancebas”, manter contatos demasiado amistosos com cristãos-novos, travar conversações com mulheres mundanas etc.). A autora destaca ainda que a visitação também oferecia, a seus agentes, a oportunidade de realização de negócios privados: visitadores aproveitavam as viagens a diferentes partes do reino luso para adquirir escravos, ouro e outras mercadorias de valor, o que implicava o aprofundamento dos contatos com mercadores que, não raro, eram cristãos-novos.

“Bernardo Vieira Ravasco e a Inquisição de Lisboa”, de autoria de Marco Antônio Nunes da Silva, professor de História Moderna da Universidade Federal do Recôncavo da Bahia, é um artigo construído a partir dos “cadernos do Promotor” da Inquisição portuguesa do século XVII. Na hierarquia burocrática inquisitorial, o promotor era o responsável pela apresentação das acusações contra os denunciados por práticas contra a fé e contra a Igreja. Em seus cadernos eram reunidas denúncias oriundas tanto das visitações como de denúncias formais apresentadas por diferentes agentes do poder até delações apresentadas por correspondências simples, encaminhadas por pessoas de condição obscura. A maioria destas denúncias jamais se transformou em processo inquisitorial; algumas foram objeto de investigações que não acarretaram a constituição de processo, outras sequer foram investigadas, delas restando apenas os registros no “caderno do Promotor”. Dentre as várias denúncias que figuram nestes cadernos, Marco Antônio da Silva se detém na análise daquelas que mencionam um personagem relevante na cena política da Bahia – e do Brasil – colonial: Bernardo Vieira Ravasco, que, durante 57 anos, ao longo do século XVII, ocupou o cargo de secretário do Estado do Brasil, imediatamente abaixo do Governador Geral. O autor, a partir destas anotações dos “cadernos”, analisa o papel desempenhado pela Inquisição em meio às intensas disputas pelos postos de prestígio e poder no Estado colonial. Bernardo Vieira Ravasco, além de ter sido secretário do Estado e ter se tornado alvo de investigações por parte da Inquisição, teve o seu nome envolvido em episódios relacionados a uma conspiração contra o próprio Governador Geral e ao assassinato do alcaide de Salvador; Bernardo Ravasco era, ainda, irmão do célebre Antônio Vieira, personagem também citado nos “cadernos do Promotor”, de intensos e conhecidos conflitos com a Inquisição de Lisboa.

Ainda numa incursão pelo século XVII e tendo como personagem central um membro do clero luso-brasileiro, “Ventura e desventuras de um mercedário sodomita em Belém do Pará pós-Filipino”, do professor Luiz Mott da Universidade Federal da Bahia, trata da vida material e do cotidiano de um convento na Amazônia portuguesa. Dentre os milhares de processos inquisitoriais que ajudam a compor o formidável acervo do Arquivo Nacional da Torre do Tombo, Luiz Mott concentra sua atenção em um, constituído contra o prelado e comendador do convento da Ordem de Nossa Senhora das Mercês (Real, Celestial e Militar Ordem de Nossa Senhora das Mercês e Redenção dos Cativos) em Belém, no ano de 1656. Denunciado por praticar o “abominável” crime de sodomia, Frei Lucas de Souza seria preso, interrogado, encaminhado para o Tribunal do Santo Ofício de Lisboa, amargaria 14 meses no cárcere e seria, finalmente, condenado a dez anos de degredo nas galés de Sua Majestade. Este processo – além de outros analisados, que envolvem acusações contra os supostos amantes de Frei Lucas de Souza – serve para o autor analisar a trajetória da Ordem de Nossa Senhora das Mercês em territórios da América portuguesa, as disputas pelos postos superiores no interior das ordens religiosas, além dos elementos que caracterizavam a vida cotidiana e os códigos de comportamento e conduta dos homens e mulheres aos quais a Igreja ambicionava orientar e vigiar.

O quinto artigo, intitulado “‘Sapatos ao mato’: o sentimento de ‘um triste homem que vem preso’ pelo Santo Ofício” é resultado de uma pesquisa desenvolvida por Suzana Maria de Sousa Santos Severs, professora da Universidade do Estado da Bahia (Uneb). Suzana Severs também se dedica a um processo particular para, a partir dele, lançar novas luzes sobre o funcionamento da Inquisição portuguesa em terras coloniais. A autora destaca a trajetória de um indivíduo destituído de qualquer notoriedade, morador da capitania de Minas Gerais, negociante e cristão novo, filho, irmão e cunhado de negociantes e cristãos novos que, acusado de criptojudaísmo, seria preso e encaminhado aos cárceres da Inquisição em Lisboa, onde permaneceria por nove meses até a definição de sua pena. Suzana Severs concentra sua atenção em um documento, escrito pelo próprio punho do denunciado, no qual este apresenta detalhes de sua viagem, sob a custódia de um Familiar do Santo Ofício, desde as Minas de Ribeira do Carmo – atual cidade mineira de Mariana –, onde morava, até o porto do Rio de Janeiro, quando seria embarcado nas galés rumo a Lisboa. O objetivo do acusado, ao redigir tal documento, era, claramente, o de denunciar os abusos, os maus-tratos e os sofrimentos de que foi vítima enquanto sob a guarda do Familiar designado para escoltá-lo até o Rio de Janeiro; para a autora, tal documento cumpre o relevante papel de resgatar os sentimentos e a subjetividade de um prisioneiro e, ao mesmo tempo, revela detalhes que conferem uma dimensão profundamente humana às ações e expectativas dos homens – agentes do Santo Ofício ou personagens a ele submetidos – que viveram em épocas e territórios controlados pela Inquisição.

O último texto que compõe este dossiê, “Movido pela loucura ou pela fé: trajetória de Alexandre Henriques”, de autoria dessa organizadora, apresenta a saga de um cristão novo, português, que chega ao Brasil no início do século XVIII com destino a Minas Gerais, com pretensões de enriquecer por meio da mineração, e retorna a Portugal como prisioneiro do Santo Ofício, dando entrada no Palácio dos Estaus em março de 1735. Antes de ser encaminhado à prisão de Lisboa, porém, Alexandre foi recolhido e permaneceu internado, considerado louco, no Hospital da Santa Casa da Misericórdia de Salvador. Os documentos inquisitoriais relativos a este personagem mostram a sua condição principal: tratava-se de um desviante, de um indivíduo que manifestava enunciados incompatíveis com a ordem afirmada pela hierarquia eclesiástica. E as hesitações das autoridades inquisitoriais face às tentativas de classificação deste indivíduo – louco ou herético? – revelam um dos traços essenciais da Inquisição: a busca pela afirmação da ordem mediante a perseguição, o banimento e a aniquilação do outro, do diferente.

O presente dossiê reúne, portanto, diferentes trabalhos relativos à presença e atuação dos agentes do Santo Ofício português, sobretudo suas ações em diversas partes da América portuguesa, em especial na Bahia. Não pretende exaurir qualquer um dos aspectos abordados ao longo dos ensaios, mas simplesmente contribuir para um melhor entendimento dessa instituição e, acima de tudo, colaborar e incentivar novas pesquisas nesta área.

Agradeço à Diretoria Executiva da Revista Politeia pela oportunidade e possibilidade de reunião desses ensaios. E agradeço, especialmente, os / as articulistas que, generosamente, concordaram em divulgar seus relevantes trabalhos de pesquisa por meio deste dossiê o qual tive a honra de coordenar.

Grayce Mayre Bonfim Souza – Professora da Universidade Estadual do Sudoeste da Bahia (Uesb) Doutora em História Social pela Universidade Federal da Bahia (Ufba) E-mail: [email protected]


SOUZA, Grayce Mayre Bonfim. Apresentação. Politeia: História e Sociedade. Vitória da Conquista , v.11, n. 1, 2011. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Sin contrincante en el frente. El poder en el México contemporáneo/Historia y Grafía/2011

Cada época encuentra en Shakespeare lo que le atribula. Por eso mismo es posible reconocer en la monstruosidad moral y física de Ricardo III la deformidad de nuestro propio tiempo político. Por sus disformidades internas y externas, este personaje le viene muy bien al pasado reciente del sistema político mexicano. Aquel que se explica por la obsesión –casi manía– del poder. La astucia, la fina simulación, la crueldad, la capacidad para conspirar, las fobias, todo ello ha sido utilizado por el sistema de partido único, sin importar cuán lejos se vaya, para no desprenderse del poder. Al igual que el usurpador conde de Gloucester, el partido hegemónico en México desplegó, desde sus inicios, un discurso y una práctica que buscaban seducir a una sociedad que apenas salía de una cruenta guerra fratricida y así persuadirle de que el suyo era el mejor camino para la reconstrucción nacional. Leia Mais

Poder e religião na Antiguidade Tardia / Dimensões / 2010

Ao longo das duas últimas décadas, tem-se observado, nos meios acadêmicos brasileiros, um notável aumento do interesse pelos estudos de Antiguidade e Idade Média, como se pode constatar por intermédio da quantidade crescente de artigos, teses e dissertações dedicados à reflexão científica de objetos atinentes às sociedades antigas e medievais, com destaque para as civilizações grega e latina, embora o foco já esteja se deslocando para outras realidades menos estudadas entre nós, como é o caso da egípcia, mesopotâmica, celta, judaica e bizantina. Dentre as razões desse “despertar”, uma das mais importantes é a atuação aguerrida de um conjunto de pesquisadores oriundos de diversas áreas, a exemplo da História, Arqueologia, Letras, Filosofia e Pedagogia, que tem levado a cabo – e com sucesso, poderíamos acrescentar – a tarefa de formar profissionais especializados em uma modalidade de História que, se não espelha a história nacional, posto que a terra brasilis nunca fez parte do Império Romano ou se organizou em termos feudais, como sugeriram, no passado, alguns autores, nem por isso deixa de ser relevante ou significativa pelo simples fato de nos permitir ter acesso a experiências milenares que, embora constituam matrizes quase arquetípicas da História do Ocidente, com a qual muitas vezes gostamos de ser identificados, são diferentes o bastante dos usos e costumes contemporâneos para nos afrontar, confrontar e desinstalar, obrigando-nos a reconhecer que, conforme propôs certa feita Paul Veyne com a sua habitual perspicácia, o estudo da História não implica, a princípio, uma operação de reconhecimento do Eu, pois se assim o fosse bastaria escrevermos a nossa própria biografia para nos apoderarmos do código que rege o presente, o passado e o futuro. Pelo contrário, a História é antes a busca por aquilo que não somos, pela diferença que torna tão interessante as investigações que tem ao mesmo tempo os homens como os seus agentes e pacientes. Leia Mais

Poder e Repressão / História Social / 2009

É atribuída ao chanceler Bismarck a conhecida declaração a respeito das leis e salsichas e da inconveniência de que o povo venha a saber como são feitas. O chanceler poderia ter acrescentado à sua comparação as instituições, cujos “ingredientes” e processos de fabricação são tão obscuros quanto os que resultam nas salsichas e cuja história é igualmente desaconselhável não apenas ao povo – que deveria respeitar e se submeter àquelas – como aos seus próprios componentes, que deveriam preferencialmente acreditar na missão e significado da causa que abraçam, coisa que freqüentemente fazem; não é por outra razão que devemos sempre desconfiar da história das instituições contada pelos nativos. E não é também por outra razão que cabe aos historiadores e aos demais cientistas sociais sabotar toda tentativa acobertadora dos discursos oficiais produzidos sobre as instituições – seja para acalmar os povos ou emular seus representantes – desvendando os processos históricos, as contingências ambientais e os desafios que agem como o fiat da montagem das instituições e respondem pelos enviesamentos determinantes produzidos na sua forma e no seu conteúdo.

E quanto a isso, ainda há muito que fazer. Comparada a outras historiografias, a história das instituições ainda é entre nós pouco freqüentada, em que pese o auspicioso crescimento de trabalhos na área, notadamente os voltados para objetos escamosos, destituídos de charme e até mesmo suspeitos, como a polícia e a justiça (estou certo que todos os que andam por essas áreas sabem o que estou dizendo e que já experimentaram o olhar de estranhamento dos ouvintes quando revelam seu tema de pesquisa).

E basta entrar numa sala de aula disposto a tratar do tema para se dar conta do quanto ainda pesa entre nós o cacoete de ver nas instituições um objeto menor, produto e instrumento da dominação, destituído de ‘gênero próprio’ e cujo estudo seria ocioso uma vez que revelaria o que já se sabe a partir do que já é supostamente sabido sobre a dominação e seus instrumentos.

No entanto, se os investigadores da área, como apontam Marcos Bretas e Francisco Linhares em textos que compõe esse dossiê, já ultrapassamos a fase de ver na polícia – e eu acrescentaria no sistema dejustiça como um todo – um mero instrumento dos grupos dominantes, sem complexidades próprias no que diz respeito à dinâmica que faz com que toda instituição se transforme em algo que é ao mesmo tempo menos e mais do que foi tencionado pelos que a propuseram e implementaram. Certamente esse número da História social: revista dos pós-graduandos em História da Unicamp é uma prova disso.

Os trabalhos dos autores acima citados, que se ocupam da análise de tentativas de proposição de um modelo de e um discurso sobre a polícia, ambas ocorridas na República Velha, são exemplares do modo como nos chamam a atenção para a necessidade de nos determos nos meandros do processo, em seus distintos momentos e em função de conjunturas diferentes, de formação da identidade profissional e corporativa, da construção de uma imagem institucional e, sobretudo, da distância entre discursos e intenções reformadoras e as condições sociais reais nas quais as instituições e as escolhas se tornam possíveis. É esse também o foco da análise de Thaís Battibugli ao apontar as complexas relações entre as instituições policiais e as disputas políticas em São Paulo no período democrático que se segue ao fim do estado novo, tomando a cultura institucional como uma variável chave no entendimento das ações e interesses num cenário de competição corporativa. Rogério Giampietro Bonfá nos mostra como o conceito de soberania nacional foi utilizado para legitimar a ação do estado na expulsão de estrangeiros e como essa construção foi conseqüência da submissão dos demais poderes ao poder executivo durante a República Velha.

Seja analisando a atuação da polícia na repressão aos africanos na Bahia pós-levante Malê, ou na repressão aos suspeitos de participação na Revolução Praieira em Pernambuco, como fazem respectivamente Luciana da Cruz Brito e Wellington Barbosa; seja ainda enfocando a formação e atuação da polícia secreta na repressão aos anarquistas em São Paulo no início da República, como o faz Claudia Baeta, os três autores apontam em seus trabalhos duas mesmas questões que me parecem centrais, e por isso mesmo não se trata de uma coincidência, mas um indicativo de por onde andam nossas percepções: o entendimento de que a ação das instituições – a polícia no caso – não é monolítica e que elas são atravessadas por pressões e contradições que produzem respostas distintas e abrem espaços de questionamento que – essa a outra questão – são percebidos e utilizados pelos diferentes atores envolvidos no conflito e na disputa dentro das instituições, campo de lutas e de possibilidades.

Entender processos específicos de conformação e atuação das instituições voltadas para o controle social continua a ser um desafio para a nossa historiografia. Desafio que os artigos que compõe esse dossiê enfrentam por diferentes ângulos e através de diversas perspectivas, todas elas apontando questões e problemas de análise instigantes e que, certamente, representam uma importante contribuição a uma história social das nossas instituições, sobretudo por apontar caminhos e possibilidades de análises de diferentes materiais empíricos. E lembremos que achar e indicar caminhos é a primeira condição para percorrê-los e encorajar outros a fazê-lo.

Por essa razão, sinto-me especialmente honrado em apresentar esse dossiê e espero que a dupla satisfação que obtive na leitura dos textos que o integram, tanto por suas qualidades quanto pelo que representam no avanço de uma área de pesquisa à qual tenho tentado somar minha contribuição, seja a mesma que os leitores venham a experimentar. E que tirem bom proveito!

Ivan de A. Vellasco – Professor Doutor. Universidade Federal de São João Del Rei.


VELLASCO, Ivan de Andrade. Apresentação. História Social. Campinas, n.16, 2009. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Violência e Poder / Projeto História / 2009

O tema da violência, sob as mais variadas formas, vem ocupando cada vez maior espaço na historiografia, tanto acadêmica quanto aquela produzida por entidades e organizações voltadas para ações sociais. Debruçam-se os especialistas em análises sobre suas variadas formas, perpassando do campo da criminalidade do Estado, para as que se evidenciam nas relações entre indivíduos ou grupos, sobre o que perscrutam em busca tanto de suas raízes, formas de ser, finalidades objetivas ou ocultas, impactos, quanto na objetivação da posição relativa que ocupam no conjunto das relações societárias.

A perplexidade com que se depara o mundo de hoje ante a aparente contradição entre o avanço do conhecimento humano (tecnologia) e a reincidente barbárie das guerras, dos genocídios e das violações de direitos dos indivíduos [1], particularmente os perpetrados pelos poderes constituídos enquanto Estados, explica o interesse pelo tema que retoma o recorrente debate sobre a relação entre violência e política. Assim a negação sistemática da determinação da natureza de classe dos processos de dominação política expressos no Estado, em prol de uma falsa ampliação da democracia, subsume nas evidências acima apontadas, conforme se observa em artigos apresentados neste número da Projeto História, que analisam tanto as novas formas de pobreza e de iniqüidade, quanto questionam os preceitos da mundialização, a violência dos interesses privados na agressão ao meio ambiente, os limites dos mecanismos de representação democrática e das resolução negociadas e pacíficas dos conflitos, impeditivos da real emancipação dos povos em países subordinados.

No interior das polêmicas historiográficas contemporâneas, observa-se a recorrência tanto aos clássicos que argumentaram sobre a violência enquanto meio necessário à ação política, quanto aos que enfatizam sua condição de inerência à condição humana, com a ressalva que naturalizar a violência resulta no império da anti-política institucional, ou seja, o fim de uma racionalidade que ordenaria a polis [2], o que pode ser referido ao politicismo no uso da razão, conforme já analisado por Hegel.

Para outros, no entanto, a condição de inerência da violência está dada, não na condição humana, mas nas formas objetivas postas na ordenação social ao longo da história, decorrente das condições que têm configurado as relações societárias, particularmente pelo aprofundamento e pela mundialização paulatina do sócio-metabolismo do capital, regido pela apropriação privada impeditivas da planificação do gênero humano, uma vez que se reproduz sob o trabalho alienado. Assim o sentido inexorável da violência, posto nas abstrações primeiras, é substituído pela percepção do caráter histórico, particular a cada contexto e / ou momento em que essa se manifesta, em que pese, aí sim, a aparente identidade do fenômeno. Pode-se tomar, por exemplo, neste sentido, a relação entre norma e punição que se manifesta desde os primórdios das civilizações. Embora sua ordenação seja reconhecida desde a antiguidade, em códices como o de Hamurabi, ou plasmado em um Alcorão, ou no Antigo Testamento, será apenas no bojo da revolução industrial do século XVIII, da emergência do estado Moderno como um subproduto do capitalismo que surge o que se denomina de ciência penal, ou seja, a criminologia, constituída pela política criminal, pelo direito penal, penitenciário, pela psiquiatria forense, pela psicologia judiciária, pela medicina legal, criminalística, com seus respectivos fundamentos epistemológicos e “características de cientificidade”. Como fundamentos esta “ciência” tem o determinismo lombrosiano que fixa o estereotipo delinqüente pela estrutura biológica, apenas minimizada neste mesmo século pela incorporação, nos Estados Unidos, de aspectos do tipo sociológico [3]. Uma criminalização estereotipada que se expressa também em outras institucionalidades “científicas”, como leprosários ou manicômios, por exemplo, tratada com maestria em textos deste número da revista.

Tal normatização criminalística fora precedida pelas reflexões de um Maquiavel, Hobbes ou Weber, apenas para citar os mais reconhecidos, que trataram da violência do ponto de vista da política do dominador, da opressão, no sentido de justificá-la, ou como meio de permanência do poder, ou como necessária à ordem vigente, em que pesem as distinções entre os autores citados. Ao que contrapõe Marx, na radicalidade, quando analisa as relações entre o Estado e a sociedade à luz das evidências constitutivas das relações societárias no capitalismo, as quais nos permitem demonstrar como tal violência é um dos mecanismos que põe em movimento a força política das classes dominantes em defesa, não da humanidade, apesar dos discursos e das leis humanitárias, mas da apropriação privada [4] e de seus interesses mesquinhos, egoísticos e particularistas.

A barbárie das grandes guerras e particularmente da segunda demonstrará para os autores, a necessária “distinção entre a violência repressiva exercida pela dominação e a progressiva violência por liberdade e defesa de direitos”, o que será explorado por autores como Merleau-Ponty, Beauvoir, Fanon e Sartre. [5]

A terceira revolução industrial e a introdução da microeletrônica no processo de produção de mercadorias têm levado a uma verdadeira devastação no mercado de trabalho internacional. Cerca de 1,5 bilhões de pessoas em todo o mundo tornaram-se dispensáveis ao processo produtivo e a tendência é que o desemprego aumente ainda mais nas próximas décadas. Este é um processo irreversível que está mudando o panorama do mundo e atinge não apenas pessoas, mas também países, aprofundando a diferença internacional entre países ricos e pobres e promovendo exclusão em continentes inteiros, como a África, por exemplo. Com isto, levas de marginalizados arriscam-se todos os dias nas fronteiras da Europa e da América do Norte, para tentar entrar no “paraíso” do capitalismo do Primeiro Mundo. E de modo geral, em todas as grandes cidades do mundo mais pessoas empobrecem e vêm engrossar o bloco dos sem moradia e sem trabalho, das pessoas com empregos precários informais e às vezes considerados ilegais, e por isso sujeitos à repressão policial.[6]

Paralelamente, no quadro no neoliberalismo, observamos a diminuição do gasto público em políticas sociais abrangentes e universais. Ao contrário, são propostas e implementadas as chamadas “políticas focalizadas”, projetos que só atingem as comunidades mais miseráveis ou pedaços dela, aparecendo como uma vitrine da boa índole dos governos, o brasileiro, inclusive. Em nosso país, como em muitos outros lugares, o Estado Social vem diminuindo, porém cresce, como complemento de toda essa política, o Estado Penal.[7] Para os marginalizados e excluídos que não se mantém na estrita ordem, o Estado reserva a construção de cada vez mais prisões e a implementação de penas cada vez mais rígidas para os crimes contra o patrimônio dos ricos.

Tanto o aumento da criminalidade e da violência nela contida, como a resposta do Estado Penal são o contraponto dessa situação criada pela mundialização [8] do capital com sua razão manipulatória. Há cada vez menos emprego no mundo e cada vez mais gente marginalizada. Há cada vez menos dinheiro para o Estado investir em políticas que reduziriam as desigualdades sociais, e cada vez mais dinheiro para construir prisões ou aumentar os efetivos policiais. A crise sem precedentes do sistema do capital a partir de setembro de 2008, no coração do sócio-metabolismo, aprofunda as determinações da crise estrutural que lhe é inerente.

A violência que se exerce na esfera pública – a da criminalidade e a do aparelho repressivo do Estado – está, portanto inserida neste contexto. No entanto, se no Brasil ela tem aparecido como subitamente explosiva, há todo um substrato histórico, assentado sobre a estrutura de classes sociais presente nas formações capitalistas, que já indica a possibilidade de tal explosividade. Ela apenas ganhou, sob os efeitos desagregadores das políticas neoliberais, atualidade e com a desagregação das forças sociais do leste europeu, prolongou a utilidade histórica do capital.

Denominada violência institucional tais ações ilegais são praticadas por agentes do Estado, lotados em órgãos públicos que compõem os sistemas de segurança, mas que se destacam por sua função repressora nas diferentes instâncias da federação brasileira. Referem-se tanto às redes de segurança voltadas para a repressão política, quanto as voltadas para as que, instituídas para o controle das contravenções legais que integram o campo da criminologia, cometem, no exercício destas funções, ilegalidades. Só esta afirmação já nos remete a múltiplas considerações, particularmente ante as ponderações de analistas clássicos que discutem a natureza do Estado no capitalismo e a violência, conforme tratado em vários dos textos presentes neste número.

Nos períodos em que vigora a autocracia burguesa institucionalizada, travestida da democracia política, dois fenômenos se manifestam: de um lado, o não reconhecimento do aprisionamento por razões políticas, sendo toda ação deste teor enquadrada como crime comum. Em contrapartida, a lógica de ação vigente nos períodos ditatoriais não se altera, expressando-se no quotidiano das delegacias, nas tramitações e resultados processuais, nas práticas de tortura, nos assassinatos praticados por agentes policiais civis ou militares, apenas por suspeição de possíveis contravenções, ou de pessoas nos cárceres, portanto, sob custódia do Estado, nas denominadas “chacinas” e na impunidade de toda ordem.

Embora levadas a cabo por agentes do Estado, tanto militares quanto civis, não são resultado de iniciativas individuais, mas expressam um complexo integrado por idéias, padrões de comportamento, relações inter-humanas com respaldo de equipamentos materiais e denotam uma dada forma de ser do Estado, afirmativas que se respaldam nas evidências inerentes às informações contidas no imenso acervo documental existente tanto em arquivos públicos reconhecidos como históricos, como nos arquivos de delegacias, nos fóruns da justiça e em inúmeros outros órgãos que guardam a memória das ações dos Departamentos de Segurança Pública nos mais diferentes países, particularmente os latino americanos. Assim, de responsáveis pela segurança da nação, tais órgãos se transformam em sistemas de repressão, cumprindo a função social de coagir, cooptar e proceder à coerção utilizando-se para tanto das mais variadas estratégias na manutenção da autocracia burguesa.

Evidências que já vêm sendo apontadas pela produção acadêmica e congêneres, embora ainda pouco pelos historiadores, particularmente no concernente aos períodos não ditatoriais. Assim, em um primeiro momento, observa-se que a ênfase dos estudos recaía na análise da repressão e das arbitrariedades do Estado nos períodos ditatoriais, quando a função de segurança nacional incorpora a da repressão política. Mais recentemente vêm se destacando a emergência de uma produção intelectual voltada para analisar a continuidade da institucionalização destes órgãos e de suas práticas repressivas em períodos não ditatoriais, isto é, denuncia-se a permanência de investidas do Estado que confrontam a vigência dos direitos humanos e a ordem constitucional. [9]

O preceito identificado é o de que a segurança nacional significa estar vigilante e atacar preventivamente, não apenas iniciativas que se configuram, para a ordem vigente, como inimigos externos, mas também aqueles que são indicados como inimigos internos o que abrange uma enorme gama de pessoas e situações.

Tal perspectiva encontra respaldo na historiografia que analisa a posição dos militares na sociedade, assim como a dos policiais civis e militares em tempos de democracias, e que concluem que estes atuam com autonomia em relação ao governo e em relação aos diferentes segmentos da sociedade.[10]

Quanto às evidências da articulação dos militares com determinados segmentos da sociedade civil, alguns autores consideram que se trata de um acordo entre classes, já que os militares comporiam uma classe à parte.[11]

Uma crítica radical a tais posturas demonstra como em sociedades cujo desenvolvimento das forças produtivas capitalistas tem suas origens na particularidade da organização colonial e do trabalho escravo é hiper-tardio, a fragilidade da burguesia tornou-a incapaz de proceder à necessária revolução burguesa, rompendo com a dominação de classe oligárquica, com o apoio, mesmo que momentâneo, dos segmentos populares. Não por acaso observa-se neste volume a incidência de reflexões sobre ditaduras e institucionalidades autocráticas, assim como sobre a banalização da violência por agentes do Estado.

Expressão, conforme alguns dos autores, de formas particulares da autocracia burguesa que se constituíram-se em dominações exercidas de modo indireto pelo conjunto da burguesia, pelas armas, subjugando, castrando ou atrelando os poderes legislativo e judiciário. Esta estrutura de poder montada sob um executivo absolutizado, forte, ditatorial, foram capturadas por Marx e Engels em suas análises históricas do poder imperial de Napoleão III e de Bismarck no período guilhermino, na segunda metade do século dezenove. Em suas reflexões ontológicas, Marx apontava para esse executivo forte que atua no sentido de desmanchar as formas democráticas, pelas quais as classes sociais podem se contrapor com seus interesses antagônicos.

Está claro que é preciso acima de tudo diferenciar as circunstâncias e especificidades históricas do bonapartismo clássico com relação aos bonapartismos brasileiro e latinoamericanos, formas particulares identificadas às ditaduras militares. A figura de um aventureiro e oportunista no poder como ocorre no segundo império francês, ou a presença marcante de um estadista do porte de Bismarck, certamente, não encontram paralelo em nossa realidade. Há que atentar que não se trata de uma colagem histórica, mero recurso analógico de empréstimo de figuras. Trata-se de, nas palavras de Marx, compreender a lógica específica de um objeto específico.

Na história brasileira, a entificação do capital não se verificou por um amplo processo democrático de massas. A via colonial desconheceu processos instauradores que conformaram um regime democrático-burguês consolidado. Ao contrário, na particularidade brasileira, nasce uma burguesia cuja potência auto-reprodutiva é extremamente limitada, não possuindo uma dinâmica própria que pudesse efetivamente representar os interesses das demais categorias sociais. É graças a essa determinação histórica, à sua incompletude de classe do capital, que se constitui o capital atrófico, com suas características particularista e exclusivista:

Desprovido de energia econômica e por isso mesmo incapaz de promover a malha societária que aglutine organicamente seus habitantes, pela mediação articulada das classes e segmentos, o quadro brasileiro da dominação proprietária é completado cruel e coerentemente pelo exercício autocrático do poder político. Pelo caráter, dinâmica e perspectiva do capital atrófico e de sua (des)ordem social e política, a reiteração da excludência entre evolução nacional e progresso social é, sua única lógica, bem como, em verdade, há muito de eufemismo no que concerne à assim chamada evolução nacional.[12]

Notas

1. BRICEÑO-LÉON, Roberto (2002) La nueva violencia urbana en América Latina, Dossiê Sociologias, nº 8, Porto Alegre jul. / dez. http: / / www.scielo.br / scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1517- 45222002000200003&lng=pt&nrm=iso

2. FRAZER, Elizabeth and HUTCHINGS, Kimberly. On politics and Violence: Arendt against Fanon. Contemporary Political Theory. Feature Article: Political Theory Revisited, 7, Doi:10.1057 / palgrave. cpt.9300328, 2008, pp. 90-108.

3. MARTINO, Paolo di. Criminologia. Analisi interdisciplinare dellla complessità del crimine. Studi Superiori. Universitá e Specializzazioni. Prefazione di Pier Luigi Vigna. Napoli, Edizioni Giuridiche Simne, 2009.

4. MARX, Karl. A burguesia e a contra-revolução (1848), As lutas de classe em França de 1848 a 1850 (1850) e O Dezoito Brumário de Luís Bonaparte (1852).

5. FRAZER and HUTCHINGS, op. cit..

6. “Según la CEPAL, el desempleo en la región pasó de 5,7% en 1990 a 9,5% en 1999, pero lo que llama la atención no es tan sólo el incremento de los desocupados, sino la particularidad de los nuevos trabajos, pues de cada diez empleos que se crearon en la región entre 1990 y 1997, siete (6,9 exactamente) se originaron en el sector informal (CEPAL, 1999). Es decir, ocurre una doble exclusión laboral, pues hay menos empleos y aquellos que surgen tienen un carácter tan precario como su condición de informalidad lo sugiere.” BRICEÑO-LÉON, R., op. cit., p. 7.

7. BATISTA, Nilo (2003). “Todo crime é político”, entrevista à revista Caros Amigos, nº 77, agosto.

8. Publicação do Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), da Argentina caracteriza esta situação da seguinte maneira: “Así, la velocidad con que se marcan algunos rasgos del “Estado policial” contrasta com la pereza con que se recobran ciertas notas del “Estado social”. CELS. Políticas de seguridad ciudadana y justicia social. Buenos Aires, Siglo XXI, 2004, p. 7.

9. CARDIA, Nancy. Transições democráticas: continuidades e rupturas; autoritarismo e democracia: desafios para a consolidação democrática, in: PINHEIRO, Paulo Sergio (et ali) Continuidade autoritária e construção da democracia. Relatório final da pesquisa. Fapes / CNPq / Fundação Ford USP: NEVE, 1999, pp. 11 a 37.

10. FERNANDES, Heloisa. Os militares como categoria social. São Paulo, Global, 1978. OLIVEIRA, Eliezer Rizzo de. As forças armadas: política e ideologia no Brasil. Petrópolis, Vozes, 1987. PEREIRA, Maurício B. Estado Novo: a constituição das bases do partido militar e do projeto Brasil Potência. Premissas. Caderno do Núcleo de Estudos Estratégicos da Unicamp. v. 1997, pg. 15-16. STEPAN, Alfred. Ao militares na política. Rio de janeiro: Arte Nova, 1975. FICO, Carlos et ali. Ditadura e democracia na America Latina. Balanço Historiográfico e perspectivas. Rio de Janeiro: FGV, 2008.

11. PIERANTI, Octavio Penna, CARDOSO, Fabio dos Santos, SILVA, Luiz Henrique Rodrigues da. (2007). Reflexões acerca da política de segurança nacional: alternativas em face das mudanças no Estado. RAP Rio de Janeiro 41(1): 29-48, Jan. / Fev., pp. 30 a 48.

12. CHASIN, J. A sucessão na crise e a crise da esquerda. Revista Ensaio. São Paulo, Ensaio, nº. 17 / 18, 1989, p. 49.

Antonio Rago Filho

Vera Lucia Vieira

Editores Científicos


VIEIRA, Vera Lúcia; FILHO RAGO, Antonio. Apresentação. Projeto História, São Paulo, v. 38, 2009. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

 

Cultura e Poder | Em Tempo de Histórias | 2008

A Revista Em Tempo de Histórias apresenta em sua 13ª edição um dossiê cujos termos, cultura e poder, foram substancialmente ressignificados na segunda metade do século XX, ampliando o alcance dos usos possíveis e das perspectivas acerca das realidades históricas. A partir disso, pode-se questionar o que é cultura e/ ou poder? Ou, melhor, quais relações não são culturais ou permeadas de poder? A fim de estabelecer um norteador que perpasse artigos tão distintos entre si, é possível compreender a relação entre cultura e poder, nesta edição, enquanto construções humanas marcadas pela dinamicidade e tentativas mútuas de influência, controle e também pelos mecanismos de resistência e subterfúgios culturais. Conscientes do caráter polissêmico dos termos, não foi objetivo do dossiê adotar noções fixas e definitivas dos mesmos, mas, acima de tudo, apresentar interpretações historicamente constituídas em que as relações entre poder e cultura estivessem imbricadas. Leia Mais

Cultura e Poder / Em Tempos de História / 2008

Apresentação

A Revista Em Tempo de Histórias apresenta em sua 13ª edição um dossiê cujos termos, cultura e poder, foram substancialmente ressignificados na segunda metade do século XX, ampliando o alcance dos usos possíveis e das perspectivas acerca das realidades históricas. A partir disso, pode-se questionar o que é cultura e/ ou poder? Ou, melhor, quais relações não são culturais ou permeadas de poder? A fim de estabelecer um norteador que perpasse artigos tão distintos entre si, é possível compreender a relação entre cultura e poder, nesta edição, enquanto construções humanas marcadas pela dinamicidade e tentativas mútuas de influência, controle e também pelos mecanismos de resistência e subterfúgios culturais.

Conscientes do caráter polissêmico dos termos, não foi objetivo do dossiê adotar noções fixas e definitivas dos mesmos, mas, acima de tudo, apresentar interpretações historicamente constituídas em que as relações entre poder e cultura estivessem imbricadas.

Fazendo uso de fontes como os Códigos de Posturas Municipais da Câmara Municipal de São Luís de 1866 e 1892 e do periódico Jornal Para Todos, João Costa Gouveia Neto destaca em Hábitos costumeiros na São Luís da segunda metade do século XIX, o descompasso entre as posturas municipais e as formas de sociabilidades que homens e mulheres constituíam nas ruas da capital do Maranhão. Também trabalhando com o século XIX, Ana Flavia Magalhães Pinto analisa dois periódicos oitocentistas de “homens de cor” em Democracia Racial em nome do Progresso da Pátria – Jornais Negros na São Paulo do Fim do Século XIX.

Os embates entre a modernidade e a tradição são avaliados em A Modernidade e o Rádio em Ribeirão Preto (1924-19370). Neste artigo, Sonia Jorge investigou a presença do rádio na cidade do interior paulista e as relações entre o projeto de modernização e as mudanças engendradas com o novo veículo de comunicação no cotidiano da população nas décadas de 1920 e 30. Trabalhando com obras literárias, teatrais, crônicas e imprensa humorística, André Rosemberg aborda as representações da polícia no Rio de Janeiro e em São Paulo no artigo Herói, vilão ou mequetrefe: a representação da polícia e do policial no Império e na Primeira República.

A realocação de ideários europeus e norte-americanos para o contexto hispanoamericano é o foco da pesquisa de Carolina da Cunha Rocha que, em Frei Servando Teresa de Mier e o exotismo às avessas – o selvagem ilustrado desbrava as terras do Velho Mundo, utiliza o conjunto documental Memorias para elucidar as contribuições do frei para construção do estado mexicano independente.

No ensejo do cinqüentenário da Revolução Cubana, Rickey L. Marques levanta questões referentes à prisão do poeta Heberto Padilla após a publicação de seu livro Fuera del Juego em O papel dos intelectuais na revolução cubana – o caso Padilla. O autor se envereda pelos caminhos trilhados por artistas e intelectuais cubanos entre 1959 e 1971.

Na seção Artigos são apresentados cinco estudos de temas livres. Uma abordagem de cultura na História Antiga é encontrada no primeiro texto. A partir de estudos arqueológicos realizados em Cartago, José Guilherme da Silva se debruça sobre as representações sociais e identidades étnicas na antiga cidade africana. Em seu trabalho Cartago: arqueologia e representações, o autor propõe duas hipóteses para a destruição daquele espaço pelos romanos.

A expansão colonial pelo Atlântico ganha foco em duas pesquisas. Em fins do século XVII a Jamaica, colônia inglesa, possuía a próspera cidade de Port Royal. Arrebatada por um terremoto em 1692, a urbe colonial foi destruída e, apenas nos últimos anos, vem recebendo maior atenção da historiografia. Luís A. Galante, no texto Port Royal, toma os inventários da época para interpretar o cotidiano e economia da cidade colonial inglesa. De outra forma, a experiência colonial portuguesa é abordada por Victor Hugo Abril, em Os modos de governar de Gomes Freire de Andrada no Rio de Janeiro, ao estudar as relações entre o governador da capitania do Rio de Janeiro, as elites locais e o governo de Lisboa, no período de 1733 à 1743.

Por meio de uma metodologia comparada, o artigo Indigenismo e Indianismo, de Poliene Bicalho, traz uma análise dos movimentos indígenas no Brasil e na Bolívia, enfatizando as particularidades e evoluções de suas relações com o Estado e a sociedade civil.

Fechando a seção, Eduardo Bay apresenta, em Os Mutantes e a Contracultura, alguns aspectos do movimento conhecido como Tropicalismo e sua relação com a contracultura, tomando por enfoque a participação do grupo musical Mutantes.

Para concluir esta edição, apresentamos a resenha de Léa Maria C. Iamashita referente à obra A Corte e o Mundo: uma história do ano em que a família real portuguesa chegou ao Brasil, Andréa Slemian e João Paulo Pimenta, publicado em 2008 pela Editora Alameda.

Boa leitura! Ricardo Marques de Mello Eric de Sales Membros do Conselho Editorial

Acessar dossiê

História e Poder  |  SÆCULUM – Revista de História  | 2007

Prezado Leitor,

Está em suas mãos o número 17, de Sæculum, a revista do Departamento de História e do Programa de Pós-Graduação em História da UFPB. Nesse número, apresentamos o dossiê História e Poder que, diante dos avanços teóricos e metodológicos da ciência por nós professada e “professorada”, ultrapassa a área da história política, tal qual haviam nos ensinado os antigos – mas não necessariamente velhos – compêndios escolares.

História e Poder implica afirmar que o animal político, aquele mesmo do paradigma aristotélico com sede de mandar na Pólis e aclamado pela Ágora, não foi ainda subsumido pelos culturalismos reinantes que insistem em proclamar a morte da política, o fim das ideologias e o apagamento da centralidade do poder. Ora, não se conhece nenhuma cultura histórica – da revolução neolítica à massificação das tevês digitais – onde o exercício do poder e a estruturação da sociedade tenham sido levados a cabo pelos cachorros ou pelos gatos. Aos homens e mulheres de nosso tempo o que nos pertencem, animais políticos e racionalizadores de cultura. Não há cultura que não seja complexamente racionalizada e politicamente orientada.

Nesse sentido, os artigos do dossiê História e Poder, de Sergio Alberto Feldman, Wellington Barbosa da Silva, Martinho Guedes dos Santos Neto, Jayme Fernandes Ribeiro, Damião de Lima e Paulo Giovani Antonino Nunes explicitam, a partir de variados pressupostos teóricos e de aportes documentais específicos, o estado da arte que relaciona a história com o próprio poder e seus derivados lancinantes como a política, o Estado, a governança, a autoridade, a dominação e as rupturas institucionais.

Mais quatro artigos compõem o número 17 de Sæculum, que enfocam a migração nordestina para a Amazônia, as ficções narrativas sobre o Nordeste no cinema e na televisão brasileiros, as memórias de uma mulher do cangaço e a nação republicana vista a partir dos romances de Nestor Duarte. São os artigos de Francivaldo Alves Nunes, Claudio Cardoso de Paiva, Gilvan de Melo Santos e Giselle Laguardia Valente, respectivamente.

Ainda compõem o dossiê duas resenhas de livros recentemente lançados pelo mercado editorial brasileiro, de autoria do cientista social André Botelho, do Programa de Sociologia e Antropologia da UFRJ, e dos historiadores Ângela de Castro Gomes e Jorge Ferreira, ambos do Programa de Pós-Graduação em História da UFF. As resenhas são assinadas por Diogo da Silva Roiz e por Regina Maria Rodrigues Behar.

Por fim, a expectativa de que a maioridade de Sæculum chega com o próximo número, esperamos que a leitura deste, não lhe seja um infortúnio, amigo leitor.


Organizadores

Equipe Editorial


Referências desta apresentação

Equipe Editorial. Editorial. SÆCULUM – Revista de História. João Pessoa, n.17, p.7, jul./ dez. 2007. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

História e Poder / Sæculum / 2007

Está em suas mãos o número 17, de Sæculum, a revista do Departamento de História e do Programa de Pós-Graduação em História da UFPB. Nesse número, apresentamos o dossiê História e Poder que, diante dos avanços teóricos e metodológicos da ciência por nós professada e “professorada”, ultrapassa a área da história política, tal qual haviam nos ensinado os antigos – mas não necessariamente velhos – compêndios escolares.

História e Poder implica afirmar que o animal político, aquele mesmo do paradigma aristotélico com sede de mandar na Pólis e aclamado pela Ágora, não foi ainda subsumido pelos culturalismos reinantes que insistem em proclamar a morte da política, o fim das ideologias e o apagamento da centralidade do poder. Ora, não se conhece nenhuma cultura histórica – da revolução neolítica à massificação das tevês digitais – onde o exercício do poder e a estruturação da sociedade tenham sido levados a cabo pelos cachorros ou pelos gatos. Aos homens e mulheres de nosso tempo o que nos pertencem, animais políticos e racionalizadores de cultura. Não há cultura que não seja complexamente racionalizada e politicamente orientada.

Nesse sentido, os artigos do dossiê História e Poder, de Sergio Alberto Feldman, Wellington Barbosa da Silva, Martinho Guedes dos Santos Neto, Jayme Fernandes Ribeiro, Damião de Lima e Paulo Giovani Antonino Nunes explicitam, a partir de variados pressupostos teóricos e de aportes documentais específicos, o estado da arte que relaciona a história com o próprio poder e seus derivados lancinantes como a política, o Estado, a governança, a autoridade, a dominação e as rupturas institucionais.

Mais quatro artigos compõem o número 17 de Sæculum, que enfocam a migração nordestina para a Amazônia, as ficções narrativas sobre o Nordeste no cinema e na televisão brasileiros, as memórias de uma mulher do cangaço e a nação republicana vista a partir dos romances de Nestor Duarte. São os artigos de Francivaldo Alves Nunes, Claudio Cardoso de Paiva, Gilvan de Melo Santos e Giselle Laguardia Valente, respectivamente.

Ainda compõem o dossiê duas resenhas de livros recentemente lançados pelo mercado editorial brasileiro, de autoria do cientista social André Botelho, do Programa de Sociologia e Antropologia da UFRJ, e dos historiadores Ângela de Castro Gomes e Jorge Ferreira, ambos do Programa de Pós-Graduação em História da UFF. As resenhas são assinadas por Diogo da Silva Roiz e por Regina Maria Rodrigues Behar.

Por fim, a expectativa de que a maioridade de Sæculum chega com o próximo número, esperamos que a leitura deste, não lhe seja um infortúnio, amigo leitor.

Os Editores.


Equipe Editorial. Editorial. Sæculum, João Pessoa, n.17, 2007. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

 

Tecnologia, Cotidiano e Poder / Projeto História / 2007

A tecnologia entendida como o conjunto das capacidades, das atividades produtivas e do conhecimento a partir dos quais o ser humano produz a história, isto é, sua existência social, encontra-se explanada nos múltiplos textos que este número da Revista Projeto História apresenta a seus leitores.

A escolha de tal temática mantém a coerência que vem norteando o pensamento da Revista, que toma a história, não enquanto uma disciplina, mas enquanto a própria ciência, resultante esta da força produtiva que expressa o complexo de potências através das quais os homens se apropriam do mundo e que resulta da dupla configuração: dos carecimentos humanos que os impulsionam e das limitações postas a cada momento às realizações de suas inerentes potencialidades de alteração da natureza, do mundo e de si próprio.

As múltiplas conotações que a tecnologia possui e que podem ser resgatadas pelo historiador em quaisquer dimensões do ser social se apresentam neste volume, cujos autores refletem de um lado sobre a produtividade humana que se traduz na tecnologia nos moldes propostos pela ontologia marxiana, adentrando nas inerentes contradições que resultam da apropriação privada desta produção social no metabolismo social do capital. Por outro lado, outros analistas problematizam sobre a percepção do conhecimento / tecnologia enquanto produto da subjetividade, perpassando, também por reflexões sobre a influência desta tecnologia no mundo artístico, particularmente como decorrente de interferência de políticas públicas voltadas para incorporar a este universo os processos industriais.

Evidencia-se assim, de um lado, como a ciência se vê convertida em parte integrante do capital e adquire uma inflexão histórica que não se fez ou se faz em nome do próprio desenvolvimento das ciências, mas como meio mais eficaz de reduzir o trabalho, a sua produtividade para além das fronteiras dadas pela figura física viva do trabalhador e que necessita reduzir o tempo de circulação. Neste contexto, os autores não fazem a crítica da tecnologia pelo prisma duma crítica moral, estética ou política, porém, ressaltam que quanto mais se universaliza a forma de ser própria da produção dos indivíduos sociais, mais expande seu raio de ação, todavia, no interior da alienação do suprimento das necessidades humanas universais que a geraram.

Em face de tal desenvolvimento tecnológico universal se evidencia mais uma vez o atraso tecnológico e industrial do Brasil, associado à subordinação e a dependência ao capital internacional, o que transparece inclusive nas iniciativas modernizadoras. São os casos aqui exemplificados das inovações na iluminação pública, nos meios de transportes urbanos no início do século XX e mesmo na missão modernizadora que as forças armadas se atribuem em seu projeto do Brasil potência.

Neste aspecto, destaca um dos analistas a importância que conferem os militares à ciência e à tecnologia como alicerces do desenvolvimento econômico e nesse sentido, afirma, as duas Guerras Mundiais foram referência para a profissionalização, modernização e treinamento dos militares brasileiros.

Uma modernização historicamente carreada por um conservadorismo expresso, inclusive pelos mais diferentes ideólogos, que se expressam atavicamente na rejeição das categorias sociais dominantes em investir em tecnologias e que nos dias atuais, se exprime na culpabilização da tecnologia pelos males do mundo moderno, particularmente os vinculados ao meio ambiente. Considera-se mesmo que esta ideologia expressa um equívoco de cunho “malthusiano” e se evidencia, inclusive, no discurso de inúmeras organizações que se colocam em defesa do equilíbrio ecológico e sustentável.

De qualquer forma, a tal estágio de desenvolvimento tecnológico chegou a humanidade que já se evidenciam, conforme outros autores, as condições de superação dos limites à realização das potencialidades humanas capazes de superar o reino da necessidade, postos em um mundo regido pelo trabalho abstrato, para o reino da liberdade, não fosse a contradição da apropriação privada desta produção coletiva. Contradição impeditiva da superação da oposição, por exemplo, entre profissão e cultura tomada esta enquanto atividade operativa social. Trata-se de tornar a ciência e o trabalho inerentes a todos os indivíduos, de impedir que a atual necessidade de aquisição dos novos códigos de comunicação não reduzam o ser humano a entes informacionais, à condição de apêndices das máquinas, protocolos e fluxos de informação, mas sim de reconhecer que o uso generalizado de máquinas programáveis informacionais gera novas formas de sociabilidade decorrentes da intercomunicação entre indivíduos através deste ciberespaço em gestação.

Do “espaço técnico” chega-se ao universo do ciberespaço, sem tangenciar a solução de problemas cruciais, apesar do fascínio pelas estatísticas, que, entre outras coisas, nos permite demonstrar como a disparidade de renda entre os países mais ricos e os mais pobres que, conforme a referência, em 1820, era da ordem de 3 para 1, em fins do século XX chega a de 80 para 1. O que demonstra que o melhor conhecimento do problema, seu melhor equacionamento e visibilidade não é condição suficiente para o encaminhamento de suas soluções.

É neste universo do primado da tecnologia que a temática sobre o mundo do trabalho ganha novos contornos, particularmente quando o pesquisador centra sua atenção no crescimento do número de mulheres como força de trabalho assalariada e a exacerbada valorização das questões emocionais o que aparece como uma nova tecnologia de gênero / poder. Refere-se o autor à ênfase que se dá neste contexto, à subjetividade das mulheres como “dóceis, emocionais, afetuosas”, ganhando aura de avanço societal a divisão maniqueísta que a educação sexista perpetra – e o movimento feminista combate. Uma tecnologia de gênero que não se constitui separada e isoladamente apenas para sedimentar o sexismo, mas é também uma tecnologia de poder, perpetuando a exploração da força de trabalho.

Observa-se ainda a ênfase em se analisar como as novas ferramentas se constituem em instrumentos vitais ao historiador, ampliando as possibilidades de preservação das evidências históricas, papel que, por exemplo, cumpre a fotografia pela possibilidade que traz de grafar a imagem e nos remeter, por exemplo, ao universo oitocentista com uma enorme riqueza de detalhes. Particularmente na área de preservação, conservação e divulgação do patrimônio histórico-cultural, abrindo-se novos campos de possibilidades de conhecimentos e também de transformação de espaços de preservação da história em verdadeiros espaços públicos. Dessa maneira, também colocam novos desafios à educação cujas políticas públicas têm se mostrado, conforme o leitor poderá apreciar nas páginas da Projeto História, incapazes de garantir a inserção deste universo, até mesmo naquelas modalidades centradas no ensino tecnológico.

Neste número trazemos uma entrevista que nos dá oportunidade de refletir sobre a relação entre especialistas da área de energia elétrica e o modelo enérgico em curso no último período ditatorial brasileiro, cujos principais projetos desenvolvidos ou, pelo menos, debatidos pela Coordenação da COPPE, tiveram papel fundamental na implantação das diretrizes do II PND do governo do autocrata Ernesto Geisel.

Este volume apresenta ainda ao leitor a tradução inédita no Brasil do renomado historiador francês que trata de tema com visibilidade cada vez maior no campo da historiografia: as relações entre o imaginário sobre o corpo e a ciência. O historiador francês Georges Vigarello, autor de Historia da beleza, resgata no texto ora apresentado, a íntima relação entre o imaginário do corpo e a experiência técnica, a partir do final do século XIX até fins do século XX. Conforme Vigarello, se até o fim do século XIX o corpo era antes de tudo uma “máquina” da qual se buscava exigir o máximo de rentabilidade com o mínimo de consumo de energia; na primeira metade do século XX se enfatiza a importância do gestual para a obtenção dos melhores índices de produtividade. A habilidade substitui a força bruta, transformando o corpo em uma máquina nervosa. Já no fim do século XX, com a digitalização incorporando a automação, novas valorações são lançadas ao corpo e as exigências visam se apropriar também da subjetividade dos trabalhadores, transformando o trabalhador em “máquina informacional”.

Desde a Renascença se impõe na vida cotidiana a concepção de um demiurgo humano que reconfigura o mundo por sua própria inventividade e prática, consciente da progressividade do domínio de uma “segunda natureza” e que propõe a humanização do mito e ao mesmo tempo a deificação do homem.

Esta noção da autêntica grandeza humana foi disposta de modo categórico por Ficino: “Quem pode negar que o homem possui quase o mesmo gênio do Autor dos Céus? E quem pode negar que o homem também poderia criar de algum modo os céus, se pudesse obter os instrumentos e o material celeste, dado que mesmo hoje ele os cria, embora com um material diferente, mas com uma ordem bastante semelhante?”.[1]

A contradição que perpassa a contemporaneidade, é que quando esses instrumentos passam a reger a vida cotidiana por inteiro, abrindo amplas possibilidades para a resolução de dilemas seculares da humanidade, do desvendamento da estrutura genômica que permite a fabricação da própria vida, dos avanços da biotecnologia, em suma da conquista sem precedentes das formas orgânicas e inorgânicas da natureza; todavia, na regência da mundialização do capital – regência das necessidades dos proprietários privados sobre as necessidades genuinamente humanas – que controla e subordina a nova cooperação social do trabalho no interior da universalização das forças produtivas materiais por meio de uma revolução tecnológica inaudita, fragmenta, mutila e nulifica milhões de vidas humanas.

No século passado, a visão trágica do mundo deu o tom hegemônico. A civilização estava prestes a ser devorada por seus próprios frutos, a ciência e a técnica, dessa maneira, o home preso a uma eterna ilusão de conquista da natureza, seria desqualificado por seu próprio engenho. A “Escola de Frankfurt”, com sua dialética da negatividade, desenvolveu a crítica ao pensamento esclarecido, cuja origem datava do Renascimento e que em sua lógica interna levaria da ultrapassagem do mito, ao domínio da natureza, e deste ao extremo negado da razão: o novo mito. A razão instrumental conduziu ao inferno nazista. Nos termos de Adorno e Horkheimer: “O mito converte-se em esclarecimento, e a natureza em mera objetividade. O preço que os homens pagam pelo aumento de seu poder é a alienação daquilo sobre o que exercem o poder. O esclarecimento comporta-se com as coisas como o ditador se comporta com os homens. Este conhece-os na medida em que pode manipulá-los. O homem da ciência conhece as coisas na medida em que pode fazê-las. É assim que seu em-si torna para-ele. Nessa metamorfose, a essência das coisas revela-se como sempre a mesma, como substrato da dominação. Esta identidade constitui a unidade da natureza”.[2]

Devemos, seguindo esse discurso, eternizar a escravização mercantil como condição humana? O preço a pagar pela conquista da natureza, portanto, não é como os renascentistas projetavam, a conquista de nossa humanidade, mas a preparação de outra forma de conquista: o estado totalitário? Como produto de relações sociais naturalizadas?

Em sua obra O modernismo reacionário, J. Herf enfrentou tal “beco sem saída”, para simplesmente buscar nas condições históricas e culturais da “via prussiana” (Lukács) a necessidade histórica de tal reacionarismo. A reconciliação alemã entre alta tecnologia e irrazão, e não a razão iluminista, é o cerne dessa ideologia tão bem sintetizada por Thomas Mann: “O aspecto verdadeiramente característico e perigoso do nacional-socialismo era a mescla que fazia de robusta modernidade com uma postura positiva rumo ao progresso associadas a sonhos do passado: um romantismo altamente tecnológico”.[3] Ou, nas palavras de Herf: “Essa tradição consistia numa coleção coerente e significativa de metáforas, palavras familiares e expressões emotivas que tinham o efeito de converter a tecnologia, de componente de uma Zivilisation estranha, ocidental, em parte orgânica da kultur alemã. Combinavam reação política com avanço tecnológico. Onde os conservadores alemães haviam falado de tecnologia ou cultura, os modernistas reacionários ensinaram a direita alemã a falar de tecnologia e cultura”. Eis o paradoxo do modernismo reacionário, base do ideário nazista: “incorporava a tecnologia moderna ao sistema cultural do nacional-socialismo alemão moderno, sem lhe diminuir os aspectos românticos e anti-racionais”.[4]

Walter Benjamin soube compreender essa processualidade histórica ao denunciar a “estetização da política” e a glorificação da “tecnologia da guerra”, todavia, sem remeter a uma condição humana inexorável, uma visão trágica do mundo. Assim como fez o músico Karlheinz Stockhausen ao plasmar as Torres Gêmeas em chamas e sonorizar com suas palavras que “jamais vira obra-de-arte mais bela”, no trágico 11 de setembro de 2001, repetiu o irracionalismo dos futuristas que entoaram a expressão “a guerra é bela”! Ao enaltecer a barbárie, atos desumanos, o uso tecnológico das armas que pulverizam vidas humanas, a guerra que revolve por inteiro a vida cotidiana, essa “estetização da política” enaltece o poder imperialista, a subjugação dos trabalhadores e trabalhadoras pelo sistema do capital. Walter Benjamin é claro e impiedoso: “Em seus traços mais cruéis, a guerra imperialista é determinada pela discrepância entre os poderosos meios de produção e sua utilização insuficiente no processo produtivo, ou seja, pelo desemprego e pela falta de mercados. Essa guerra é uma revolta da técnica, que cobra em ‘material humano’ o que lhe foi negado pela sociedade. Em vez de usinas energéticas, ela mobiliza energias humanas, sob a forma de exércitos. Em vez do tráfego aéreo, ela regulamenta o tráfego de fuzis, e na guerra dos gases encontrou uma forma nova de liquidar a aura. ‘Fiat ars, pereat mundus’, diz o fascismo e espera que a guerra proporcione a satisfação artística de uma percepção sensível modificada pela técnica, como faz Marinetti”.[5]

Trata-se de reverter essa dimensão de crueldade na vida cotidiana. “As massas têm o direito de exigir mudanças das relações de propriedade; o fascismo permite que elas se exprimam, conservando, ao mesmo tempo, essas relações”[6]. Há saída no horizonte para além da visão trágica do mundo, da perspectiva da lógica onímoda do trabalho, para a humanidade!

Numa síntese característica de sua pena, Marx frisou que “O homem é o que faz e como faz”: “Tal como os indivíduos exteriorizam sua vida, assim são eles. O que eles são coincide, pois, com sua produção, tanto com o que produzem como também com o modo como produzem. O que os indivíduos são, portanto, depende das condições materiais de sua produção.”[8]

Em outra passagem exemplar, adensando suas reflexões ontológicas sobre o modo como produzem, Marx escreveu: “As forças produtivas são, portanto, o resultado da energia aplicada dos homens, mas essa mesma energia é limitada pelas circunstâncias em, que os homens se encontram, pelas forças produtivas já obtidas, pela forma social preexistente, que eles não criam e que é produto da geração precedente. Devido ao simples fato de que toda nova geração encontra as forças de produção já obtidas pela geração anterior e que lhe servem de matéria-prima para uma nova produção, surge um encadeamento na história dos homens, surge a história da humanidade, que é tanto mais história da humanidade quanto mais crescem as forças produtivas dos homens e, por conseguinte, as suas relações sociais.” E disto decorre que para os indivíduos autoproducentes, mesmo sem o saber, “a história social dos homens nada mais é que a história do seu desenvolvimento individual, tenham ou não consciência disso. Suas relações materiais são a base de todas as suas relações. Essas relações materiais não são mais do que as formas necessárias em que se realiza a sua atividade material e individual”.[9]

No atual estágio do sistema metabólico do capital, com a mundialização do capital, o desenvolvimento das forças produtivas se põe em aguda contradição com as relações sociais de produção (relações de propriedade na esfera jurídica): “Ou seja, a capacidade humana alcançada para a produção de seu mundo próprio é superior e mais potente do que a organização social que os homens permanecem obrigados a tolerar, contra a qual se debatem. As relações sociais, a partir das quais aquela capacidade foi produzida, não são capazes de conter e tirar proveito de sua realização, enquanto tais para se conservarem ferem de morte a própria humanidade, tornam letal a sua maior realização: a) aniquila parte da própria humanidade, dos produtores da realização; b) aniquila a autoprodução da individualidade, acentua a alienação (do produto, do trabalho, do gênero); c) agora a dispensa do próprio trabalho (alienado).”[10]

No mundo contemporâneo, as nebulosas do neopositivismo, do irracionalismo e das filosofias que irradiam a idéia da “impossibilidade do conhecimento” substituído pelas “imputações hermenêuticas”, e que anunciam o “fim do trabalho”, da “alienação” e, em conseqüência disso, afirmam a impossibilidade da emancipação humana geral. Assim, junto à necessidade da lógica expansiva do capital de modelar indivíduos conformistas, que apodrecem debaixo da própria pele, estas posições ilusórias confluem no banimento da revolução social.

Com as novas maneiras de viver e sentir da mundialização, nos termos chasinianos, se configura a grandeza e a miséria do homem contemporâneo. Isto porque a humanidade foi capaz de criar as bases materiais da liberdade humana, mas se acha impossibilitado de se autodeterminar no processo de individuação social. “Donde a humanidade futura, se futuro houver, será posto pela possibilidade emergente das perspectivas da síntese do saber – a fusão entre o melhor e mais avançado do saber científico-tecnológico e o mais agudo e universal do saber humanista, ou seja, da aglutinação natural entre o saber do mundo e o saber de si. Hoje, o homem já está se tornando o demiurgo da natureza, falta se converter no demiurgo de si mesmo.” [11]

Notas

1. FICINO apud HELLER, Agnes. O Homem do Renascimento. Tradução Conceição Jardim e Eduardo Nogueira. Lisboa: Presença, 1982, pp. 67-68.

2. ADORNO, Theodor W. & HORKHEIMER, Max. Dialética do Esclarecimento. Tradução Guido Antonio de Almeida. Rio de Janeiro: Jorge Zahar Editor, 1985, p. 24.

3. MANN apud HERF, Jeffrey. O modernismo reacionário. Tradução Claudio Frederico Ramos. São Paulo: Ensaio, 1993, p. 14.

4. HERF, J. O modernismo reacionário. In: Op. cit., p. 14.

5. BENJAMIN, Walter. “A obra de arte na era de sua reprodutibilidade técnica. Primeira versão”. In: Walter Benjamin: obras escolhidas. Magia e Técnica, Arte e Política.Vol.1. Tradução Sergio Paulo Rouanet. São Paulo: Brasiliense, 1985, p. 196.

6. Idem, ib., p. 195.

[Nota 7 ausente no original].

8. MARX, K. & Engels, F. A Ideologia Alemã. Tradução Rubens Enderle, Nélio Schneider, Luciano C. Martorano. São Paulo: Boitempo, 2007, p. 87.

9. MARX, K. “Carta a P. V. Annenkow”. In: Marx: História. Coleção grandes cientistas sociais n.º 36. Tradução Flávio R. Kothe. São Paulo: Ática, 1983, pp. 432-433.

10. CHASIN, J. “Ad Hominem – rota e prospectiva de um projeto marxista”. In: A determinação ontonegativa da politicidade. Santo André / SP: Estudos e Edições Ad Hominem, 2000, p. 73.

11. Idem. Ibidem, pp.72-73.

Antonio Rago Filho

Vera Lucia Vieira

Os Editores


FILHO RAGO, Antonio; VIEIRA, Vera Lúcia. Apresentação. Projeto História, São Paulo, v. 34, 2007. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

 

Estado e Poder / Tempos históricos / 2007

Seguimos vivendo Tempos Históricos. Impossível não perceber em nosso cotidiano a degradação das condições sociais de existência. A aparência é de desesperança: muita corrupção, muita impunidade, muita desigualdade. Aparência que certamente é parte do real, mas que é difundida como instrumento de reforço do conformismo e da apatia, como espécie de atestado de que nada pode ser transformado e de que não existe sujeito social capaz de intervir construtivamente na realidade e enfrentar os mecanismos e instrumentos de dominação.

Historicamente determinados, tais instrumentos e mecanismos precisam ser historicamente compreendidos. De fato, a realidade é sombria: as formas de dominação e exploração imperialistas permanecem avassaladoras, seja sob a intervenção opressora do capital financeiro transnacionalizado, seja sob a violência explícita e direta perpetuada pelos Estados Unidos contra o povo iraquiano (já sem argumentos ou mediações), contra o povo afegão (sob a capa da Otan) e contra o povo haitiano (com a participação cúmplice do Brasil e outros países latino-americanos) O massacre midiático contra qualquer alternativa ao pensamento único segue indelével: a demonização de Hugo Chaves aparece como eixo articulador de campanhas midiáticas em prol da construção da aparência de um mundo em que não há e não pode haver espaço para construções alternativas ou mesmo pensamento divergente. Ao mesmo tempo a crescente repressão estatal e criminalização dos movimentos sociais em países como México, Peru e Colômbia é simplesmente omitida e tais países são apresentados como exemplos de “democracia”.

Há um discurso que denota uma aparente mudança no comportamento imperialista. Em nome de uma suposta consciência ecológica, a nova mina de ouro são os biocombustíveis, energia supostamente “limpa” e eternamente “renovável”, capaz de alimentar a utopia da perpetuação dos atuais níveis de consumo. A simples proposição do debate em torno da segurança alimentar, ameaçada pela febre dos biocombustíveis, é desqualificada de imediato sob um argumento falsamente “ecológico” por parte dos mesmos que conduziram o planeta às portas da hecatombe. Mais uma vez o papel dos países periféricos é assentado: reestruturar sua economia para abastecer o império que consome cada vez mais, reforçando sua entendidas por eles como lugar desses conflitos e de construção dos embates históricos concretos. Não se trata também de história que proponha a entificação do Estado como algo externo à sociedade, um ser todo-poderoso que a todos impõe sua dominação. O Estado de formas distintas aparece nessas análises como um organizador da dominação de classe, e a partir daí as relações sociais são percebidas e problematizadas, inclusive na resistência dos sujeitos a ela.

Os demais artigos seguem trazendo elementos para a compreensão dos tempos atuais. Tratam de temáticas vinculadas à questão da terra em Senhores de terras e de gentes: Os poderosos senhores das armas na capitania no Ceará (século XVII), de José Eudes Arrais Barroso Gomes e a questão do trabalho em Vivências de metalúrgicos durante o processo de reestruturação produtiva em São José dos Campos, de Mônica Xavier de Medeiros. A revista traz ainda três resenhas, duas delas integrando o Dossiê Estado e Poder.

Conselho Editorial da Revista Tempos Históricos


Conselho editorial. Apresentação. Tempos Históricos, Paraná, v.10, 1º semestre de 2007. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

 

Religião, poder, civilização e etnia na cidade colonial / Urbana / 2006

Durante muito tempo, a cidade colonial foi vista pela historiografia como espaço da desordem, do desleixo e da anomia. Para muitos também a cidade era uma exceção no espaço da América portuguesa, eminentemente rural, ou dominada pela natureza selvagem do continente. A partir da década de 1980, todo um debate se constituiu em torno da ordem ou desordem dos núcleos urbanos portugueses na América, com a contribuição de historiadores, geógrafos, arquitetos, antropólogos etc. Trabalhos importantes demonstraram como estas imagens, carregadas de preconceitos em alguns casos, não podiam ser estendidas a todas as cidades portuguesas de ultramar, sobretudo a partir do século XVIII, com o governo pombalino. A reconstrução de Lisboa após o terremoto de 1755, a construção de novas cidades planejadas no reino, como Vila Nova de Santo Antônio, ou no Brasil, como na Amazônia ou no Mato Grosso, por exemplo, demonstram como normas de construção ordenadas e preocupações com simetria, higiene, localização dos sítios urbanos não eram desconhecidas nem desprezadas pelos lusitanos.

Como o objetivo da Revista Urbana é tematizar a cidade nos diversos campos do conhecimento, sobretudo na História, escolhemos justamente a cidade colonial como tema de nosso primeiro número. Com o dossiê Religião, civilidade e etnia na cidade colonial, mais do que limitar a temática das contribuições, pretendemos justamente demonstrar a multiplicidade das pesquisas atuais com relação a esta cidade, que refletem exatamente a multiplicidade de registros e experiências presentes numa cidade construída em contexto colonial, na qual conviviam diversas etnias, com diferentes formas de vida e civilização, estatutos jurídicos e sociais próprios, homens livres e escravos, além dos libertos, uma administração dividida entre poderes laicos e religiosos, que por vezes trabalham juntos, por outras passam por importantes conflitos. Sem esquecer de que estas cidades são, muitas vezes, instrumentos de conquista nas quais determinados povos e homens deveriam ser dominados e inseridos na cultura da Metrópole mas também das elites locais que efetivamente administravam-nas. Nesse sentido, tanto a religião como a civilidade, tão importante sobretudo para os administradores ilustrados do século XVIII, são entendidas aqui como instrumentos de enquadramento e controle destas populações de índios, africanos, mestiços e livres pobres.

Nestas cidades, a aparente desordem, que tanto chamou a atenção quer dos governadores portugueses, quer dos viajantes ou da historiografia, indica a presença destas formas de dominação e controle e, também, das resistências a elas. Portanto, com este dossiê, pretendemos ir um pouco além do debate ordem / desordem, buscando estas formas de ordenamento jurídico, social, espacial etc., que não têm relação ainda com uma racionalidade urbanística criada apenas no século XIX.


TORRÃO FILHO, Amilcar. Apresentação. Urbana. Campinas, v.1, n.1, 2006. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

História: Saúde e Poder / História Unisinos / 2006

História: Saúde e Poder constitui o dossiê deste número da revista História Unisinos.

Instigante e bastante atual entre os historiadores, a temática possibilitou que fossem reunidas, nessa publicação, importantes contribuições de especialistas que se dedicam ao seu estudo, seja sob a ótica das doenças, das terapêuticas ou das políticas e práticas sociais a ela relacionadas.

O artigo Misericórdias da Santa Casa: um estudo de caso das práticas médicas nas Minas Gerais oitocentistas, de Maria Leônia Chaves de Resende, analisa o papel exercido pela Santa Casa da Misericórdia de São João Del-Rei na prática da medicina, durante a primeira metade do século XIX, tendo, como base, a terapêutica aplicada no tratamento dos pacientes na região da Comarca do Rio das Mortes (MG). Em Dos cuidados e das curas: a negociação das liberdades e as práticas de saúde entre libertos, senhores e escravos, Nikelen Acosta Witter expõe sua percepção de que as experiências da enfermidade e da cura constituem espaço de relevante valor histórico para a observação das tensões, conflitos e negociações entre senhores e libertos no Rio Grande do Sul do século XIX. O artigo Algumas considerações sobre história, saúde e homeopatia, de Beatriz Weber, aponta para os efeitos da organização médica implantada nas décadas de 1930 e 1940 no Brasil, a qual definiu como inexistentes ou pouco expressivas as práticas médicas concorrentes, como por exemplo, a homeopatia. Dilma Cabral, em Lepra, morféia ou elefantíase-dos-gregos: a singularização de uma doença na primeira metade do século XIX desvenda o movimento de incorporação da lepra no quadro nosológico e na literatura médico-científica nacional, identificando na sua endemicidade nas áreas coloniais, a razão para a inquietação e para o debate que provocou entre autoridades e médicos nas décadas finais do século XIX. Em Labirintos ao redor da cidade: as vilas operárias em Pelotas (RS) 1890-1930, Lorena Almeida Gil propõe uma análise do projeto de implantação de vilas operárias em Pelotas, valendo-se de jornais da época e de documentos oficiais da Intendência, com destaque para as opiniões emitidas pelo escrevente municipal Alberto Coelho da Cunha. O artigo de Adrián Celentano, Psiquiatria, psicologia y política de izquierdas em Argentina del siglo XX: la historia intelectual de Gregorio Bermann, aborda o desenvolvimento da produção científica no campo da psicologia e da psiquiatria argentinas, a partir das intervenções de um intelectual da esquerda socialista, Gregório Bermann. O artigo Experiências de vida, experiências de loucura: algumas histórias sobre mulheres internas no Hospício São Pedro, Porto Alegre, 1884-1923, de Yonissa Marmitt Wadi, analisa dados sobre a população de internos do Hospício São Pedro de Porto Alegre, com ênfase na presença das mulheres e suas trajetórias no manicômio, visando compreender como os atributos físicos e culturais e as experiências de vida dessas mulheres internadas foram conjugadas na construção de sua experiência de loucura. Em Nas entrelinhas da história: sensibilidade e exclusão em narrativas da loucura, Nádia Maria Weber Santos explora e discute, a partir de três obras literárias que versam sobre loucura e internação em hospício, as narrativas que expressam as sensibilidades dos internados sobre a doença, sobre o meio que os abriga e sobre o mundo em que vivem.

Compõe este número da revista História Unisinos, também, a tradução de uma versão escrita do diálogo travado entre Pierre Bourdieu e Roger Chartier, ocorrido nos dias 3 e 4 de fevereiro de 1988. O referido debate foi difundido pela rádio France Culture no programa A voix nue, consagrado a Pierre Bourdieu.

Na seção Notas de Pesquisa, Viviane Borges Trindade apresenta resultados parciais de sua pesquisa através do artigo A loucura herda um espaço deixado pela lepra: fragmentos de história oral com os pacientes-moradores do Hospital Colônia Itapuã. Nele, a pesquisadora, valendo-se de relatos orais como fonte principal, relata os conflitos havidos entre os moradores do Hospital Colônia Itapuã, portadores do Mal de Hansen, e os pacientes provenientes do Hospital Psiquiátrico São Pedro, após a transferência desses para aquela instituição, em 1972.

A seção Resenhas conta com as colaborações de Sílvia Maria Fávero Arend, de Dora Isabel Paiva da Costa e Maria Cristina Bohn Martins.

Comissão editorial


Comissão Editorial. Apresentação. História Unisinos, São Leopoldo, v.10, n.1., janeiro / abril, 2006. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Poder e Administração na América Portuguesa / Revista Eletrônica de História do Brasil / 2005

Este número da nossa série temática traz estudos referentes ao tema: Poder e Administração na América Portuguesa. Trata-se de um assunto que tem merecido grande destaque nos estudos sobre América colonial nos últimos anos e tem contado com um profícuo diálogo com a historiografia portuguesa recente. As relações entre a América portuguesa e Portugal tem sido re-avaliadas dentro de novas abordagens que destacam intrincadas redes de poder dentro do espaço imperial Luso-brasileiro e que nos apontam para as diversas formas de conflito, negociação, privilégios e mercês. A partir destas novas abordagens, destacamos os trabalhos que enfatizam a organização do poder administrativo na América portuguesa inserida dentro de uma política imperial mais ampla.

Assim, podemos ver neste número questões sobre as esferas do poder a da administração no âmbito do Estado como a organização do poder judiciário local e periférico, as formas e condições da governabilidade, o ordenamento militar, a elaboração de testamentos como forma de transmissão de poder e riquezas, a estrutura administrativa e o provimentos de cargos. Bem como observar as formas constituídas de poder dentro da sociedade colonial como a inserção de irmandades de cativos e forros. Todos esses elementos abordados nos artigos que aqui apresentamos colocam-nos em contato com as mais recentes discussões historiográficas sobre as importantes esferas de poder, suas formas de representação e seus mecanismos de reprodução. Podemos observar que as formas do ordenamento jurídico do estado e da sociedade colonial, como as aqui apresentadas, convergem para a sua compreensão dentro dos estatutos e ordenamentos jurídicos dos estados e sociedades de Antigo Regime. Outro aspecto importante a se observar é a concentração de estudos relativos à Minas Gerais que, embora não tenham sido o nosso propósito, nos permite acompanhar as diversas faces do poder constituído em um mesmo território.

Por fim, acompanhando a mesma temática, apresentamos o resultado dos trabalhos monográficos realizados por duas jovens pesquisadoras e que nos fazem atestar a qualidade das investigações que se tem produzido no âmbito do bacharelado em História em nosso país.

Cláudia Maria das Graças Chaves

Carla Maria Carvalho de Almeida


ALMEIDA, Carla Maria Carvalho de; CHAVES, Cláudia Maria das Graças. Apresentação. Revista Eletrônica de História do Brasil. Juiz de Fora, v.7, n.2, jul./dez., 2005. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

 

 

 

Poder: Tramas e Tensões / Revista Brasileira de História / 2005

O meu passado não é mais meu companheiro Eu desconfio do meu passado.
Mário de Andrade

Se, em seu tempo, o perspicaz Mário encontrou razões para estranhar o passado, que se dirá de nós, historiadores neste limiar do século XXI? Dir-se-á que, além do passado, também estranhamos o nosso futuro. Dir-se-á que nos tornamos ainda mais instáveis! Entretanto, seguimos pensando, e produzindo, em meio a perplexidades cada vez maiores. Que a mesma luz do poeta / historiador clareie as precárias certezas em que nos pautamos!

Caminhando assim em consonância com os limites do seu tempo, a RBH completa uma trajetória de cinqüenta números. Cabe destacar sua importância sedimentada na área e suas contribuições para a produção historiográfica.

Tendo como marco a edição regularizada dos anos 90 para cá, as questões do poder — justamente as que nos permitem enfrentar o passado como companheiro — ocuparam cerca de 25 por cento dos dossiês anteriores. Com a presente edição voltamos mais uma vez os olhos para esse tema, com o dossiê “Poder: Tramas e Tensões”.

Diante das contemporâneas dúvidas e desconfianças que envolvem a todos no que diz respeito às questões do poder, da política, do fazer política e da ética, enfrentamos os desafios do presente publicando trabalhos que procuram desvendar tramas de poder no passado. Entretanto, os artigos aqui apresentados não são fruto da descrença no presente, pois se localizam num quadro de preocupações recentes, desvendando segredos encobertos por evidências inexploradas, fundamentados em extensa pesquisa, levando à frente o desafio de clarear imagens do passado e suas permanências na contemporaneidade.

Por tudo isso, os artigos do presente dossiê percorrem necessariamente caminhos variados. Partindo de eventos mais recentes e caminhando em direção ao passado mais remoto, publicamos os seguintes trabalhos: o artigo de Angelo Segrillo dedica-se a refletir sobre as contradições e dilemas do movimento comunista na Rússia atual; Adriano Luiz Duarte revisita o quebra-quebra de ônibus e bondes ocorrido na cidade de São Paulo em agosto de 1947, para entender a relação entre demandas populares e o fornecimento regular do serviço de transportes; a política como espetáculo da Ação Integralista Brasileira é o assunto de Rogério Souza Silva; Ricardo de Aguiar Pacheco, refletindo sobre a conjuntura política de Porto Alegre na década de 1920, estuda o processo de modernização das relações sociais; Aldrin A. S. Castellucci relaciona a primeira greve geral na Bahia às tramas de poder construídas entre a organização sindical e a cisão interoligárquica; Ivan de Andrade Vellasco discute aspectos da construção do Estado Imperial e os conflitos cotidianos, focalizando o sistema de justiça particularmente na comarca do Rio das Mortes; Juarez Donizete Ambires procura entender a atuação missionária e administrativa do jesuíta flamengo Jacob Roland na América Portuguesa; e, ainda dentro do dossiê, o artigo de Ricardo de Oliveira adota como foco a cultura política do Antigo Regime, revelando a trama das esferas públicas e privadas.

Outros três artigos versando sobre temáticas diversas são também publicados neste número. Luiz Roncari trata da formação de Machado de Assis como escritor, o seu modo muito próprio de se relacionar com o leitor e os controles do Estado Imperial; Klaas Woortmann examina a noção de selvagem no pensamento medieval e sua relação com o sentido de história; e Fábio Franzini salienta um dos aspectos menos conhecidos da história do futebol no Brasil: a inserção da mulher num universo quase exclusivamente masculino.

Além de artigos, a RBH oferece interessantes resenhas aos seus leitores: Vitor Izecksohn apresenta o livro Fear & memory in the Brazilian army & society; Francisco Silva Noelli indica sua leitura de Relatos do Descobrimento do Brasilas primeiras reportagens, e Cláudia Maria Ribeiro Viscardi analisa a obra O Brasil Republicano.

Conselho Editorial


Conselho editorial. Apresentação. Revista Brasileira de História, São Paulo, v.25, n.50, jul. / dez., 2005. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

Sociedades Indígenas: política e poder / História Unisinos / 2005

A revista História UNISINOS apresenta-se, a partir deste número, com formato e diagramação novos, bem como com um comitê científico que agrega e amplia os anteriores conselhos consultivo e editorial. Dentro desse processo de atualização, História UNISINOS revê também a numeração de seus fascículos, buscando ampliar possibilidades de indexação nacional e internacional e atender aos critérios vigentes. Assim, os fascículos editados ao longo de cada ano civil, a partir de 2005, serão numerados de forma seqüencial dentro de cada volume. Todas essas mudanças, que buscam qualificar o periódico, não o alteram no que diz respeito aos seus objetivos e características fundamentais. Ele continua a ser um canal de divulgação e intercâmbio da produção historiográfica e de áreas afins, vinculado ao Programa de Pós-Graduação em História da UNISINOS, cuja área de concentração é Estudos Históricos Latino-Americanos.

A bem de evidenciar os vínculos que o Programa mantêm com intelectuais que pesquisam sobre temas relativos às suas linhas de pesquisa, a revista História UNISINOS apresenta, nesse número, o Dossiê Sociedades indígenas: política e poder. Além de dar destaque à linha Populações Indígenas e Missões Jesuíticas, os artigos aqui publicados visam a contribuir para uma melhor compreensão da complexidade que envolve as relações estabelecidas por estas sociedades com o Estado (metropolitano ou nacional) e com as instituições político-administrativas e eclesiásticas a ele ligadas.

Bartomeu Melià, pesquisador do Centro de Estudios Paraguayos Antonio Guasch, de Assunção, Paraguai, é o autor do primeiro artigo. Nele, propõe uma “lectura excéntrica” dos escritos guaranis – com destaque para os produzidos no século XVIII – como fontes documentais que, ao permitirem que suas vozes se expressem, possibilitam – além de uma releitura da história paraguaia – uma nova história indígena.

O artigo de autoria de Mercedes Avellaneda, investigadora do Instituto de Antropologia da Universidade de Buenos Aires, aborda a organização de uma sociedade de caráter militar nas reduções jesuíticas do Paraguai no século XVII, ressaltando que a participação ativa de um exército guarani acabou por reforçar a liderança dos caciques e garantiu a obtenção de reconhecimento pelas autoridades coloniais.

No terceiro artigo do dossiê, Carlos Paz, pesquisador do Conselho Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), de Buenos Aires, analisa o que denominou de “conflictividad indígena” entre grupos Abipones na segunda metade do século XVIII, inserindo-a no processo de conformação e de consolidação de chefaturas, com destaque para a Missão de São Jerônimo del Rey.

Luís Fernando da Silva Laroque, doutorando do Programa de Pós-Graduação em História da Universidade do Vale do Rio dos Sinos, ressalta, no seu artigo, o papel desempenhado pelas lideranças Kaingang no sul do Brasil, destacando, através de uma análise de falas por elas proferidas, a alteração de sua condição de coadjuvantes para a de protagonistas, a partir da segunda metade do século XX.

Jean Baptista, docente da Universidade de Caxias do Sul / RS, valendo-se da análise do discurso missionário jesuítico do século XVII, discute, no último artigo do dossiê, a centralidade ocupada pelo domínio da natureza – e, em especial, da manipulação da ameaça de tigres / jaguares – para a atribuição de poder e de liderança disputada tanto pelos indígenas quanto pelos missionários nas reduções da Província Jesuítica do Paraguai.

Relacionado, ainda, com o tema desenvolvido no dossiê, mas se constituindo numa análise de documento inédito, razão pela qual aparece na seção Notas de Pesquisa, Beatriz Vasconcelos Franzen, professora do nosso Programa de Pós-Graduação, realiza uma análise da Carta Ânua de 1735 / 43 da Província Jesuítica do Paraguai. Nela, identifica os temas principais abordados pelo jesuíta Pedro Lozano, cronista da província na época, tais como a forma como operavam as missões populares e os exercícios espirituais, bem como a religiosidade feminina e as principais festividades desenvolvidas.

Numa seção especial – Despedida –, os professores do Programa de Pós-Graduação em História da UNISINOS fazem uma homenagem póstuma ao professor Marcos Tramontini, que, até a data de seu falecimento – 1º de dezembro de 2004 – atuou com extrema dedicação e competência como docente do Programa e como editor da revista História UNISINOS. Para fazer jus à contribuição do referido colega ao mundo acadêmico e à instituição, os professores focalizaram, no texto, a sua trajetória profissional, destacando, também, a sua produção historiográfica, através da análise das suas principais obras publicadas e pesquisas realizadas.

Comissão Editorial

Comissão Editorial. Apresentação. História Unisinos, São Leopoldo, v.9, n.1, janeiro / abril, 2005. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

 

Cultura, Trabalho e Poder / Esboços / 2005

No último ano e meio a Esboços — revista do programa de pós-graduação em história da Universidade Federal de Santa Catarina, vem passando por uma lenta e contínua mudança no seu projeto editorial, mudança que se refletiu, também, na sua apresentação gráfica. Desde o número 11, com o dossiê Cidade e memória, no primeiro semestre de 2004, nosso objetivo tem sido o de ampliar o elenco de colaboradores da revista, estendendo-o a de todas as áreas das humanidades — história, sociologia, antropologia, filosofia, literatura, política, etc. — das mais amplas vertentes teórico-metodológicas e, principalmente, a pesquisadores de fora do estado de Santa Catarina e de fora do país. Acreditamos que uma revista acadêmica de qualidade se faz, simultaneamente, com pluralidade temática e diversidade de contribuições.

Neste período a revista manteve a sua periodicidade, ampliou sensivelmente seu leque de colaboradores, estabeleceu um novo patamar de qualidade editorial e realizou uma mais apurada seleção científica dos textos publicados. Esse esforço se refletiu na nova avaliação feita pelo Qualis da Coordenação de Aperfeiçoamento de Pessoal de Nível Superior (CAPES), referente a 2004. Hoje somos uma revista B, nacional. Se por um lado, estamos satisfeitos com essa melhor avaliação — afinal a revista tem sido produzida, muitas vezes, superando obstáculos kafkianos — por outro, esse é apenas um primeiro passo para que tenhamos uma revista que, de fato, ocupe um lugar expressivo na produção acadêmica na área de história.

Continuamos caminhando.

Neste número, apresenta-se o dossiê: Trabalho, cultura e poder, resultado do encontro regional de história ocorrido em setembro de 2004. A conferência de abertura do encontro — proferida pela professora Mirta Lobato, da Universidade de Buenos Aires — abre o número, seguida por um conjunto de artigos de pesquisadores de várias regiões do Brasil e do Uruguai, todos calorosamente discutidos na ocasião. Apresenta-se também a tradução de texto inédito em língua portuguesa de Carlo Ginzburg Conversare con Orion, publicado originalmente em Quaderni Storici, em dezembro de 2001. Completam esse número cinco artigos que abrangem as regiões sul, sudeste e norte, além de duas resenhas.

Os editores

Acessar publicação original desta apresentação

Acessar dossiê

[DR]

Cultura e Poder: O golpe de 1964 – 40 anos depois (I) | Projeto História | 2004

RC Destaque post 2 12 Golpe de 1964

Transcorridos quarenta anos do golpe militar de 1964, vários eventos significativos aconteceram nas universidades, no Brasil e nos Estados Unidos, nos centros culturais, privados e públicos, contando com a participação de muitos pesquisadores. Artigos foram publicados em jornais e revistas da grande imprensa. O público leitor em geral e acadêmico em particular teve a seu alcance biografias, narrativas de experiências pessoais, livros analisando o golpe e o significado histórico e político do governo militar. Todos esses eventos marcaram, em 2004, os quarenta anos da instauração do regime militar em nosso país. Na ocasião, várias linhas de pesquisa, várias interpretações do governo de João Goulart e do governo militar foram dadas a conhecer ao público.

Uma das posições que mais se difundiu foi a de que aqueles acontecimentos trágicos, em especial toda a atuação dos dez anos de governos, de Vargas a Jango, eram negadores da democracia. Como uma diátese, o grosso dessa interpretação contaminou todo o corpo do pensamento acadêmico brasileiro, em especial o paulista. Leia Mais

Cultura e Poder: O golpe de 1964- 40 anos depois (II) / Projeto História / 2004

Cultura – Poder: O golpe de 1964- 40 anos depois (II) / Projeto História / 2004

Neste tomo 2 da Revista Projeto História, que ora se apresenta, com a justa homenagem ao cientista político e historiador René Armand Dreifuss, autor de obra seminal intitulada 1964: a conquista do estado, desenvolvemos o III Encontro de Estudos de Realidade Nacional, que o Programa de Estudos Pós-Graduados em História estimulou e organizou em fins de março e princípios de abril de 2004. As contribuições desenvolvidas no Encontro mais aquelas recebidas configuram esta edição temática.

A Revista Projeto História reúne expressivos artigos que sobrevoam assuntos variegados e aqui pontualmente apresentados. Recebe atenção a reflexão acerca das lutas sociais no campo brasileiro que incitaram os grandes proprietários rurais a se mobilizarem para o complô contra João Goulart, o presidente democraticamente eleito. Campos de disputas, também no historiográfico, destacam-se a história das Ligas Camponesas de Francisco Julião, a atuação dos comunistas na mobilização dos lavradores rurais, a atuação dos camponeses no Centro-Sul. A rica história das lutas sociais na região da Alta Mogiana, Noroeste de São Paulo, no pré-64. No interior desse vasto painel, destacam-se a resistência armada no sul do Pará, em 1972, e as concepções militaristas de nossa esquerda comunista. Traçam-se as formas de atuação e de organização específicas na articulação das lutas no campo e na cidade. No seguimento dos fracionamentos no V Congresso do PCB, em 1960, a formação da dissidência já comportava uma duplicidade de concepções, seja na preparação, organização e desencadeamento da resistência armada, seja nas organizações legais. No plano cultural, estudos analisam a literatura de cordel, o “folheto epitáfio” com a isotimia e a assimilação do articulador do golpe, o morto pranteado que aparece como “vulto” nacional, general Castello Branco, no seu leito de morte. Interrogam-se as funções das representações políticas nos folhetos populares. O conspirador visto como o salvador das “garras do anticristo”. Os poetas populares justificam ideologicamente os atos autoritários do presidente como promotores de bem comum à nação.

Na esfera artística, examinam-se peças teatrais, como Calabar, de Chico Buarque e Ruy Guerra, que atuaram na crítica, refletindo sobre as invasões holandesas, para servir de crítica às formas de dominação reinantes. As experiências estéticas de Glauber Rocha são revisitadas num texto instigante que explora o “cinema-verdade” do documentário, todavia, recheado de estratégias de agressão e do grotesco alegórico. Detém-se nas conexões entre Maranhão 66 e a obra-prima Terra em Transe (1967), percebendo a articulação entre história, política e ficção.

Este número da Projeto História também congrega inúmeras pesquisas de nosso mestrado e doutorado, as que estão em vias de se completar ou aquelas já defendidas em nosso programa, abrigando contribuições de outras instituições e de fora do nosso estado. Podemos sumariar, para não nos alongarmos em demasia, algumas delas, como a questão do terrorismo oficial e da rede de estruturas e equipamentos da repressão; a questão da anistia da perspectiva dos jogos de afetos, dos direitos humanos e das associações da sociedade civil que com sua luta criativa souberam penetrar no coração do regime. O papel da Igreja católica, abrigo e eficácia na denúncia do arbítrio e da barbárie, dos massacres transformados em “banalizações do mal”. No plano da cultura, importantes temas se apresentam, com destaque para resistência cultural, no plano artístico. Questão complexa e de difícil tratamento, mas vital para a compreensão das ditaduras latino-americanas, alinham-se pesquisas sobre a Operación Condor.

Reafirmando as críticas inscritas no tomo 1: por esta engrenagem monstruosa e seus resultados, é legítimo se perguntar sobre a responsabilidade da guerra suja. Os crimes cometidos são, independentemente dos espaços nacionais onde foram praticados, crimes de lesa humanidade. Assim como ocorreu com as Mães da Praça de Maio, em Buenos Aires, que mantêm a memória sempre viva, não para repor perdas do passado, mas porque representam a continuidade da luta pela “memória do futuro”; em nosso país, as responsabilidades pelos desaparecidos, crimes, seqüestros, esquartejamentos, torturas ficaram novamente impunes. A impunidade é a nossa marca registrada. Reconhece-se que houve abusos e atos arbitrários; no entanto, extinta a máquina, com ela desapareceram os agentes da repressão, e com eles, o esquecimento e o silêncio de seus atos, mandantes e inspiradores. O cinismo dominante afirma que nossa ditadura foi “branda”. Há que rebater, no entanto, graças a coragem das famílias, do grupo “Tortura Nunca Mais”, de historiadores e combatentes, que continuam a pesquisar, a denunciar e a refazer as contas acerca do número de mortos e desaparecidos. Há que acrescentar, aos 386 até aqui constatados, aproximadamente mais de um milhar de trabalhadores do campo exterminados.

As conseqüências dos atos bárbaros e arbitrários se misturaram à violência caseira do cotidiano: a prática cotidiana da tortura – comum nas cadeias brasileiras – torna-se, com os esquadrões da morte, com os aparelhos do Estado, uma prática institucionalizada. Um tipo de prática de extorsão, de ascensão social rápida, de enriquecimento ilícito nos meios policiais, de prostituição e jogatinas à luz do dia, vão se juntar à prática suja e indigna dos empresários no financiamento da repressão oficial.

A divulgação recente de várias fotos montadas e falsificadas, do jornalista Vladimir Herzog – numa delas, nu e em posição desesperada e humilhante, e noutra, com uma mulher ao lado –, só comprovam como os órgãos de repressão se valeram de todos os meios para intimidar, amordaçar, amedrontar, punir, eliminar.

Uma “Nota” afrontosa do Centro de Comunicação Social do Exército, publicada na Folha de S. Paulo, dia 19 de outubro de 2004, tentava justificar os seus “métodos” na luta contra a “subversão”. Nela se faz a apologia dos atos criminosos e, invertendo os próprios fatos, responsabiliza a oposição por se fechar ao diálogo. A facção durista sustenta que “as medidas tomadas pelas Forças Legais foram uma legítima resposta à violência dos que recusaram o diálogo, optaram pelo radicalismo e pela ilegalidade e tomaram a iniciativa de pegar em armas e desencadear ações criminosas”. Ao revés do esperado, não houve responsabilizações; pior, o posicionamento contrário de José Viegas Filho, o ministro da Defesa, custou-lhe caro, sendo destituído pelo governo dito de esquerda e popular, que atendeu às reivindicações dos chefes militares. A partir de então, a pressão pela abertura dos arquivos da ditadura foi realimentada ainda que o general Francisco Roberto de Albuquerque tenha salientado que o Exército não possuía mais nenhum documento sobre a guerrilha do Araguaia. A ABIN (Agência Brasileira de Inteligência), de sua parte, diz ter aproximadamente 4 milhões de documentos da ditadura militar.

No Chile, a 10 de novembro, o presidente Ricardo Lagos divulgava relatório com mais de 35 mil testemunhos de vítimas de tortura sob a ditadura de Augusto Pinochet (1973-90). “Quantos países se atreveram a olhar com profundidade sua própria história? Quantos países se atreveram a chegar ao fundo do que ocorreu? O Chile se atreve”, declarou o presidente chileno. Ao contrário da atitude regressiva e covarde do governo brasileiro, o comandante-em-chefe do Exército, general Juan Emilio Cheyre, reconheceu a monstruosidade praticada pelas Forças Armadas de seu país no arbítrio e desumanidade dos atos cometidos. Como escreveu o jornalista Jânio de Freitas, a 19 de dezembro, à página A 13, de 19 de dezembro de 2004, “A participação de militares brasileiros na Operação Condor está razoavelmente conhecida. Mas as Forças Armadas brasileiras deram contribuição importante ao golpe de estado no Uruguai e tiveram participações comprometedoras no golpe de Pinochet. […] As razões para a recusa à abertura de arquivos são muito maiores do que a solidariedade por espírito de corporação.”

Não custa repetir a rigorosa síntese acerca dos momentos significativos da ditadura militar, que o historiador Nelson Werneck Sodré fez, à época dos trinta anos do golpe, e, com isso, nós fechamos essa apresentação: “O movimento vitorioso em abril de 1964 foi uma ditadura anunciada, longamente anunciada, amadurecida ao longo dos anos da guerra fria. Estabelecida, desenvolveu-se em três etapas: a inicial, até o AI-5; a intermediária, do AI-5 à chamada distensão; o final, da distensão à derrocada. Note-se: a ditadura não foi deposta, daria lugar a profundas modificações na estrutura do regime. Tendo sido extinta pelos seus próprios gestores, pela impossibilidade em continuá-la como desejavam, transferiu à fase seguinte, à chamada distensão, todos os seus problemas, todas as suas mazelas, à carga de suas características de atraso. […] Não, por acaso, tornou normal e usual o que o nazi-fascismo estabelecera de mais torpe, com o exílio, o banimento, a prisão, a tortura, a privação dos direitos elementares, a insegurança do indivíduo, a destruição cultural e, para culminar, o assassínio estabelecido como processo comum e o seqüestro e desaparecimento dos adversários como norma costumeira. A ditadura foi o crime erigido em lei. Muitas das suas torpezas foram herdadas pelo que veio depois e por isso continuamos a nos debater com os mesmo problemas de trinta anos atrás. Isso prova que só o emprego da força da violência, sob todas as suas formas, pode impedir a sociedade brasileira de alcançar a vitória daquelas reformas estruturais de que o nosso povo tanto necessita. E merece”[1]. 40 anos depois, a tragédia brasileira parece continuar…

Nota

1. SODRÉ. Nelson Werneck. “1964: A Ditadura Anunciada”. In: Golpe de 64. Porto Alegre: Universidade Estadual de Porto Alegre, 1994, p. 10.

Antonio Pedro Tota

Antonio Rago Filho

Editores científicos

Dezembro de 2004


TOTA, Antonio Pedro; FILHO RAGO, Antonio. Apresentação. Projeto História, São Paulo, v.29, n.2, 2004.  Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê

 

Intelectuais e poder / História – Questões & Debates / 1996

O dossiê “Intelectuais e poder” definido para este n. 25 da revista História: Questões & Debates, foi resultado de um curso de extensão promovido pela APAH – Associação Paranaense de História, e pelo PGHIS – Cursos de Pós-Graduação em História, da Universidade Federal do Paraná. O seminário contou com a presença de Jorge Colli (Unicamp), apresentando “A pintura, a política e o poder”, de Paulo Eduardo Arantes (USP), com a palestra “Partido Intelectual Brasileiro”, de Maria Helena Capelato (USP), que nos falou sobre “A atuação dos intelectuais no Varguismo e Peronismo”, de Plínio Smith (UFPR), com o tema “Continuar e conservar. Montaigne e o poder” e ainda de Owaldo Monteul Filho (UFRJ) que abordou a “Ilustração Portuguesa e o poder”.

Para publicação nessa edição, felizmente pudemos contar com o artigo de Capelato, que apresenta uma análise comparativa da atuação e do perfil dos intelectuais — a relação entre autoritarismo político e liberdade intelectual — nos governos Vargas (Brasil) e Peron (Argentina), nos idos de 30 / 40. Também recebemos o artigo do Plínio Smith, que nos apresentou uma leitura sobre a participação de Michel de Montaigne junto ao poder, na França da segunda metade do século XVI, sobre o seu pensamento político e o sentido de seu suposto conservadorismo. Adicionamos aos dois artigos o da professora Clara Alicia Jalif de Bertranou, da Universidade de Mendoza, Argentina. Discorrendo sobre a produção intelectual latinoamericana nos anos 90, Bertranou discute, à luz da crise dos modelos tradicionais da modernidade, as perspectivas do desenvolvimento regional.

Enfim, perpassando o campo da história intelectual, o que está em discussão é tanto a produção intelectual quanto a forma como o pensamento serve para refletir ou legitimar determinada estrutura de poder. Foi com base na temática “Intelectuais e poder” que pensamos ilustrar a capa. A diversidade temporal dos artigos nos impedia de termos uma única imagem. Optamos por uma imagem que, na história da relação entre o intelectual e o poder, transformouse em um símbolo: o manifesto político e intelectual de Émile Zola, J’Accuse (1898), elaborado no conturbado caso Dreyfus. Com esse manifesto nascia o “intelectual”, conceituado como “um ser combativo que acredita em causas”. Sem dúvida, a ausência de um artigo sobre o romancista e a polêmica que seu manifesto provocou no regime francês representa um hiato em nosso dossiê. Mas ficaram faltando tantos outros: Voltaire, Victor Hugo, Sartre… Resolvemos homenagear a todos com o paradigmático J’Accuse, de Zola.

Fora do dossiê, sem que existisse a intenção, os artigos do bloco seguinte acabou constituindo também uma unidade temática: “imagens e imaginário na história”. Foi muito bem-vindo. A abordagem reflete em parte as discussões que professores e alunos das linhas de pesquisa da Pós-Graduação em História da UFPR vêm realizando. Ana Paula, com as imagens do corpo feminino na medicina; Anibal Costa, com o imaginário de missionários e feiticeiros nas missões jesuíticas paraguaias; Johnni Langer, com o imaginário do mito arqueológico da Esfinge Atlante; Marcos Araújo, com a obra do jesuíta João Daniel na experiência amazônica do século XVIII. À parte desse conjunto, Maria Luiza debate, pelo viés demográfico e etnográfico, como foram recriadas as sociabilidades de um grupo imigrante. Sua ênfase é história da família imigrante no Paraná. O artigo de Rafael Rosa poderia estar no dossiê sobre os intelectuais. Mais do que uma análise sobre o congresso estudantil de Ibiúna (1968), o que problematiza é o pensamento de esquerda no Brasil, sua visão sobre o papel dos estudantes e da universidade no processo de desenvolvimento do país.

No seu conjunto, os artigos e resenhas apresentados demonstram não só a produtividade científica dos Cursos de Pós-Graduação em História da Universidade Federal do Paraná, na sua interface com outras instituições, como também a maturidade que a revista História: Questões & Debates adquiriu no cenário da produção historiográfica nacional. Os temas e os recortes teóricos apresentados revelam a atualidade da revista.

Luiz Carlos Ribeiro – Doutor (DEHIS / UFPR)


RIBEIRO, Luiz Carlos. Apresentação. História – Questões & Debates. Curitiba, v.25, n.2, jul./dez., 1996. Acessar publicação original [DR]

Acessar dossiê